Mi Madre Insatisfecha (cap 1)

Mi historia es algo extraña y muy satisfactorio si la leen de principio a fin, sé que será muy larga porque relatare desde los inicios hasta el final de todo pero lo dividiré en varios capítulos para que sea más digerible para todos y sobre todo les diré como es que yo logre llevarme a la cama a mi MADRE, quizás a ustedes les sirva como experiencia, ya que daré tips conforme avanza la historia y tal vez les funcione como a mí, espero les ayude en algo y suerte con el proceso (Esta historia es 100% real, iré agregando fotografías si se me es posible, las fotografías que vean son de ella al final de nuestro proceso es por ello el cambio, lean todos los capítulos sé que al final me darán las gracias de rodillas, mucha suerte banda). Mi nombre es Rodrigo, soy originario de un pueblo a orillas de la ciudad de Colima en México, mi familia está conformada por 4 personas, mi hermano mayor, mi padre quien fue burócrata muchos años y ahora ya está jubilado con 65 años de edad y mi madre Susana de 45 años de edad y claro yo. No les voy a mentir diciendo que mi madre esta buenísima que tiene un culazo de ensueño o cosas así como en relatos ficticios, más bien es una señora muy pasable, ella mide 1.45 cm de estatura, es muy bajita, es de piel morena clara, delgada con unas ligeras llantitas, unos buenos pechos copan B, y sus nalgas son medianas, respingadas que se notan mucho cuando usa mallones o un pantalón muy pegado, pero no es una nalgona en realidad, se puede decir que está muy cogible para alguien de su edad, ella siempre ha sido una persona muy hogareña, ama de casa, criada a la vieja escuela, alguien que no toca temas de sexo o así por temor al pudor, es muy estricta incluso muy enojona, y jamás se prestaría a cosas mal intencionadas, además y esto es algo importante, ella nació en un pueblo muy chico haciéndola hasta cierto punto algo cerrada de mente, a todo esto súmenle que se viste muy cubierta, no usa faldas cortas y las pocas que usaba eran muy largas y solo dentro de la casa, nunca fuera, nunca ha usado escotes, en ese tiempo solo tenía un mallon, licra o calza como le llamen ustedes y ese lo usaba raras veces, en pocas palabras nunca vistió nada sexy al contario, era una señora como decenas que uno vería a diario en los mercados, las tiendas, el super o las calles, sin embargo con todo eso logre doblegarla. La relación con mi madre siempre fue muy buena, siendo yo el hermano menor nunca le cause problemas de ningún tipo a diferencia de mi hermano mayor quien se casó a temprana edad y se fue a vivir con su esposa. La primera mujer que me provocó deseos de lujuria fue mi propia madre, de niño no salía mucho a jugar y me la pasaba en casa, como es normal la entrada a mi adolescencia me despertó las hormonas y mi madre era lo más cercano y sexy que tenía. Lo que despertó en mi esa morbosidad recuerdo bien que fue una noche mientras veíamos televisión, ella estaba sentada en un sillón yo estaba sentado en el piso, cuando volteé hacia mi madre pude ver como ella tenía abierta las piernas y pude ver sus calzones, en esa ocasión tenía unos calzones amarillos, en ese tiempo yo tenía unos 12 o 13 años quizás, algo paso en mi esa noche que empecé a verla de una manera distinta, deje de verla como mi madre para verla como una mujer, como una hembra, esa fue la primera experiencia que tuve con ropa interior femenina y el inicio de la obsesión por mi madre. Cada noche esperaba a que nos sentáramos a ver televisión para ver cómo se abría de piernas y poder verle sus calzones, la verdad en aquel tiempo solo tenía 3 calzones más o menos decentes, dos rojos con encaje en las orillas y un amarillo medio traslucido en el frente arriba de su chocho, todos los demás eran grandes, blancos sin costuras o encaje, les repito ella era alguien muy criada a la antigua. Otra cosa que me hizo ver a mi madre más como una mujer fue una ocasión cuando un amigo mío fue a la casa y estábamos viendo televisión en la sala, ese día mi mamá lavo ropa, cuando se secó la metió y la puso en el sillón de la sala, de repente mi papá estaba buscando el control pero no lo encontrábamos así que buscamos debajo de la ropa, mientras la movía salieron las bragas de mi mamá, en específico aquellas amarillas medio traslucidas de en frente, vi como mi amigo se le quedo viendo con una cara de lujuria, conozco a su madre y en comparación a la mía, la mía está muchísimo más buena, eso me molesto, pero claro que no le dije nada, sin embargo vi que en la casa tenía algo muy rico, tenía a una mujer sexy más que la de mis amigos, eso me hizo despertar sensaciones calientes más fuertes. Los días pasaron y mi calentura era más y más, así fue como poco a poco empecé a espiar a mi madre mientras se bañaba, nuestro baño estaba dividió, es decir dónde estaba el retrete y donde uno se baña, en medio había una pared, pero en la parte de arriba tenía una ventana más o menos grande que conectaba ambos lados, me las llegué a ingeniar para poner un espejo apuntando a donde se bañan, así cuando mi mamá se bañaba yo iba al otro baño y veía como se lavaba su concha, podía ver como se tallaba sus pechos y como se pasaba sus dedos por su puchita, ella estaba muy peluda y era entendible creo que jamás se rasuraba o algo así, el verla bañar me excitaba mucho e incluso a pesar de mi corta edad sentía como mi verga tenía sus primeras erecciones gracias a mi madre, pero a pesar de haberla visto muchas veces jamás vi que ella se masturbara o algo así, era muy pulcra, solo veía como se deslizaba sus dedos alrededor de los labios de su vagina para asearse o como se presionaba los pezones de sus pechos para tratar de limpiarlos, llegue a ver como después de tocarse los pechos sus pezones se ponían duros tanto que parecían dos canicas cafés bien paradas. En ese tiempo mi papá aun trabajaba y estaba en el sector burocrático, el cada dos meses se iba a juntas de sindicato siendo que en casa nada más me quedara con mi madre y mi hermano, cuando eso sucedía yo me iba a dormir con mi mamá y mi hermano en la misma cama por cosas de seguridad, una ocasión que paso esto precisamente yo tuve la revelación que me dejo MARCADO y reforzo mi obsesión con mi madre, una noche cuando estábamos en la misma cama yo fingía que dormía siendo así que descubrí que mi mamá se dormía tarde, en esa ocasión ella saco de sus cajones varias de sus bragas, las más bonitas que tenía, aquellas dos rojas y la amarilla, se desnudó frente al espejo se las puso y las modelaba (esto es 100% real se los juro), ella se pasaba su mano por encima de su calzón sobando su vagina y su culo, se tocaba sus pechos con los brassieres más sexys que tenía, trataba de combinar su lencería con lo que tenía, se veía al espejo de un lado y del otro modelando, caminaba por el cuarto de manera provocadora e incluso como que intentaba parecer sexy o algo así, se movía contoneando su cadera, sacando el culo o sus pechos la delataban, ver a mi madre esa noche fue toda una fantasía, un sueño, algo que nunca en toda mi vida me imaginaria, (ustedes ven a sus madres y no se imaginan las cosas que ocultan o que hacen a escondidas, es por eso que nunca den por perdido nada créanme por favor), mientras ella se cambia de ropa podía ver como tenía su chochito todo peludo y sabroso, desde ese momento algo me decía que mi madre era más de lo que aparentaba, entendí que ella se sentía sexy pero nunca lo expresaba, era algo de esperarse ya que es de un pueblo y pienso que le daba pena ser más abierta, demostrar esa sensualidad que sentía, dónde vivíamos las mujeres eran más abiertas de mente, mientras que ella creció muy a la vieja escuela y más siendo que se casó muy chica con mi papá, a los 19 años para después mudarnos de lugar. Debido a esa escena fue como poco a poco fui excitándome más y más hasta que descubrí las pajas, mi madre fue de las primeras si no es que la primera mujer a la que le dediqué una chaqueta, esa sensación de lujuria fue creciendo hasta el punto de ir al cajón de ropa interior de mi madre cuando no estaba, sacar varias, olerlas y ponerme una en la verga para masturbarme, ponía la cabeza de mi verga justo donde iba su coño y me la jalaba, pero antes de venirme me la quitaba y todo lo tiraba al piso porque tenía miedo de dejarla manchada de semen y que ella se embarazara, en ese tiempo tenía esa incrédula idea que así se podía embarazar una mujer, compréndanme les hablo del 2003, 2004 y yo con menos de 12 años. Así fue como empecé a masturbarme con sus bragas, sus bragas no eran algo muy sexy o pequeño, pero eran suficiente como para masturbarme como loco, con el tiempo poco a poco la calentura fue rebasándome, después ya no me quitaba sus calzones cuando me venía, al contrario me las enrollaba más para que toda mi carga de semen quedara manchada en ellas, luego ya con la culpa las limpiaba con papel y las metía hasta el fondo de su cajón, ya después ni eso, me masturbaba les dejaba el semen fresco y así las regresaba a su cajón sin limpiarlas si quiera, es más las dejaba hasta en frente para que fuera las que se pusiera con mi leche fresca, y aun que aún tenía ese pensamiento que así se podía embarazar lo hacía buscando eso, mientras olía una de sus bragas y me la jalaba con otra repetía “embarázate mamá, embarázate, déjame embarazarte por favor, ten un hijo mío mamá, preñate con mi leche”(spoiler lean todo el relato algo interesante pasa al final de todo), me excitaba saber que se las pondría y mi semen rosaría con su concha todo el día, sus fluidos y los míos conviviendo en su braga me hacía ponerme duro de solo imaginarlos. En ese tiempo me hice tantas pajas en ellas que muchas de sus bragas tenían manchas que no se podían quitar de tanta leche que les echaba, mis corridas eran tan abundantes que era imposibles de ocultar, cuando las bragas ya estaba muy pero muy mequeadas las metía en el cesto de ropa sucia para que no se diera cuenta, había ocasiones que me llegaba a hacer 5 o 6 pajas al día y todas con sus calzones, mi récor fue hacerme 8 chaquetas en una sola de sus bragas, recuerdo que fue una verde limón de tela suabe que hacía sentir a mi verga como si fuera el coño de mi madre, a esa la deje tan repleta de leche por todos lados que parecía que la había metido en agua de tan mojada que quedó de mi esperma eso sin contar ese olor a semen que tantos se conoce, incluso su cajón de ropa interior cuando lo habría no olía, sino que apestaba a leche de su propio hijo, todas las bragas de mi mamá fueron llenadas de mecos cientos de veces, las que eran de color negro, café y gris tenían manchas blancas que no se podían quitar, las blancas tenía manchas amarillentas de tanta leche que chuparon. ((Hago una pausa para preguntarles algo y ver si su madre es viable para ser cogida por ustedes, vayan al cajón de su ropa interior y vean que tipo de ropa usa, eso habla mucho de las mujeres, si son calzones de abuelita, si son calzones regulares, si usa bragas sexys con encaje y figuras, o en el mejor de los casos si usa tangas y cacheteros, mientras más sexy es lo que use más fácil es poder cogertela, pero tranquilo si no usa eso les diré como poder llevarlas a la cama por su propia voluntad)).  Eso fue mi desahogo toda mi adolescencia, desde los 12 o 13 hasta mis 18 años. Recuerdo que una vez mi mamá compro 3 bragas nuevas, 1 negra y dos blancas, eran calzones no grandes pero nada chicos, eran regulares, coquetones se podría decir, bueno cuando recién los compro los estrene, me los puse en la verga y me la jale como loco, lo que no sabía era que los había comprado para regalarlos, se los dio a una quinceañera en su fiesta, pero no regalo los 3 solo las dos blancas por que la negra tenía manchas blancas de semen que no se quitaron ni lavándolas, así que se tuvo que quedarse con esa negra, esa braga aun sobrevive hasta hoy día por cierto. Afortunada y desafortunadamente cumpliendo 18 años me fui a estudiar a otro estado ya que en colima la educación es muy mala, pero aun así en cada vacación que iba a ver a mis padres terminaba masturbándome con la ropa interior de mi madre, incluso estando en otro estado solo esperaba a regresar para poder llenar de leche esas prendas, mi madre siempre fue algo ingenua ya que repito era de un pueblo muy chico,  dudo que supiera lo que pasaba con sus bragas, creo que ni tenía idea que lo que tenía su ropa era esperma de su hijo ((Aquí les dejo el primer tips, 1.- Estudien a su madre, como es en carácter, si es de mente cerrada o abierta, vean sus puntos fuertes y sobre todo los más vulnerables, donde ella flaquea para entrar por esa parte, si tiene problemas en casa, si se ve necesitada de algo, no necesariamente de sexo pero si de atención, de cumplidos o de alguien que la escuche, las mujeres en general muchas veces prefieren a alguien que les preste un momento de atención en lugar de un perro que este detrás, sus madres siguen siendo mujeres con necesidades nunca lo olviden)). Así pasaron 4 años y terminé mi carrera, cada que iba era lo mismo, masturbarme como loco con su ropa y regresarla, a pesar de terminar de estudiar me quedé a vivir en ese estado al que me fui, en ese tiempo tuve mis novias con las que cogía, pero mi madre seguía siendo mi tentación y obsesión, bueno en realidad su ropa interior, esa obsesión o fetiche que adquirí era lo que me excitaba de ella, por más que cogía con mis novias sentía que algo me faltaba. La cuestión es que en unos dos años más o menos, mi madre no cambio su ropa interior, anteriormente cada 3 o 4 meses que iba a verla tenía algo nuevo, si bien seguían sin ser tangas, cacheteros, hilos o algo pequeño, si algo con poco de encaje o más juvenil, aburrido de correrme en lo mismo empecé a perder interés, me había corrido tantas veces en cada una de ellas que ya no me causaba morbo o lujuria. Semanas después mientras paseaba por un centro comercial de mi ciudad vi lencería erótica en un aparador, imaginaba a mi madre usándola y vistiendo sexy, eso me llevo a idear un plan, el cual era comprar ropa interior a mi madre, ropa sexy y algo atrevida para que se las pusiera, la cuestión era como dársela sin que ella pensara que soy un pervertido o que se molestara, pero eso fue más fácil de lo que pensé, compre 5 bragas 3 medianas no tangas pero con encaje, algo traslucidas y sexys y dos tipo bikini en conjunto con brasier, así también compre ropa interior para hombre, en un mes más seria navidad y ahí ejecutaría mi plan. HASTA AQUÍ QUEDA LA PRIMERA PARTE DE LA HISTORIA, BUSQUEN LAS DEMÁS PARTES MAS ADELANTE QUE SEGUIRE DETALLANDO COMO PASO TODO Y DANDO MAS CONSEJOS, SI TIENEN PREGUNTAS DÉJENLAS A VER SI PUEDO RESPONDERLAS.