Mi primera experiencia sexual.

Hace años cuando tenía 16, mis papás acogieron a una hija de una amiga de mi madre, se llamaba Maira y tenía 22 para ese entonces, yo en esos momentos me mataba a pajas diariamente pero el día que ella llegó fue raro. Se había instalado en el tercer piso de mi casa y cuando fui a saludarla además de percatarme que era muy voluptuosa además de algo gordita, no me vía realmente como una figura sexual porque me salido con normalidad pese a que tenía un polo muy delgado sin brasier que se transparentaba al completo sus tetas grandes y rojitas.
Maira:Hola que tal como estas, me llamo maira seré tu compañera mientras tus papás están de viaje por trabajo espero nos llevemos bien
Yo:Hola que tal me parece bien, mis padres no estarán toda la semana que viene, entonces supongo que tú me cuidaras
Maira:Si será una gran semana para nosotros(Posterior a eso me dió un abrazo muy fuerte pero como era más grande que yo acabe teniendo sus tetas en la cara)
Esa fue la primera noche y gracias a eso acabe pajeandome toda una noche completa. Al día siguiente cuando mis padres ya se habían ido tuve una conversación más seria con Maira dónde básicamente hablamos sobre que íbamos a hacer cada día y las reglas principales. Entonces cuando ella se fue al mercado a hacer sus compras yo entre a su cuarto y encontré sus tangas usadas. Ante lo que comencé a olerlas y pajearme de forma muy satisfactorio por el olor que desprendían. Estaban muy sucias y eso lo hizo más estimulante aún.Durante esa primera semana seguía pajeandome con sus tangas usadas y ella ni enterada(O eso pensaba), entonces también pudimos conocernos mejor y eso lleva a qué nos hiciéramos buenos amigos durante muchas semanas que mis padres no estaban presentes. Un día para mí mala suerte ella volvió muy rápido y me encontró con su tanga oliendo. Ella primero me grito y luego me hagaro de la oreja(Esperaba un gran castigo) pero comenzó a pajearme con sus pies de formas muy exitantes, me decía que ahora ella iba a castigarme de formas inigualables. entonces comenzó todo. Cuando me vine en sus piernas, ella se bajó el pantalón, y me puso su ano sucio de meados en la cara diciéndome:
Maira:Chupalo
Yo:Que, estás loca?
Maira: No chupalo y lame mis meados, ese será tu castigo
Yo: de forma sumisa comencé a lamerme su ano, mientras ella gritaba y gritaba de placer, aunque no tenía el mejor sabor ella me hizo chuparlo por 2 horas y cuando estaba completamente satisfecha me hizo una propuesta muy curiosa...
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