Paula , La Profesora Timida

Soy profesora de matemáticarecién recibida tengo 22 años , mido 172 , rubia ojos verdes y debido a miprofunda timidez , en ocasiones me dejo apoyar y manosear por hombres que no sécómo , detectan mi debilidad y aprovechan para apoyar su pija descaradamente ,como si supiesen que no voy a decir nada
Las distintas situaciones sefueron produciendo en los lugares más comunes y a la vista de todos, pero clarocomo yo no reaccionaba, todo pasaba con total normalidad como por ejemplo, el primerdía de trabajo tome el subte de Chacarita a la 9 de julio venia retrasado y conmucha gente y obviamente pensé acá algo va a pasar
Como era el primer dia declases mi ropa estaba para la ocasión de verano y sencilla un vestido ampliocon cintura de lino y zapatillas blancas , la informalidad era una de lascondiciones que me propusieron en el colegio
Subí al subte y todos meparecían sospechosos jaja 
Pasaron dos estaciones y merelaje cada uno estaba en su mundo , hasta que llego la estación Medrano ,subió mucha gente , un señor muy gordo y maduro se puso a un costado mío usabalentes y tenía auriculares ,  escuchabala radio porque murmuraba cosas del gobierno y no sé qué, temas económicos
A los pocos minutos sientocomo se balancea un poco hacia mí , fui sintiendo como su mano rozaba mi culo ,como si nada , lo deje , soy demasiado tímida
El señor aprovecho ydescaradamente movió su mano hacia una de mis nalgas poniendo el vestido dentrode mi cola
Note como otro señor lo miroy se fue acercando como cómplice , casi compartiendo la charla sobre lasituación política del país , empezaron a hablar y se tapaban unos aotros  y se fueron intercambiando las manos en mi culo , las estacionepasaban , es un tramo de 45 minutos
Sin querer porque obviamenteno quería incomodarlos, mire hacia atrás y vi como uno de los viejitos letocaba la pija al otro como pajeandolo 
Logrando su objetico ya queel bulto era muy notorio para nuestro micromundo, se fueron moviendo hasta quelogro  ponerse bien detrás mío y sentí toda la magnitud de su pija en miculo mientras el otro lo empujaba suavemente como simulando una cogida publica
Yo ya estaba roja... la cosasiguió hasta la última estación se fueron intercalando posiciones, esincreíble, los mundos que se forman en los transportes públicos.
Quizás hasta imagine unapelícula de Tinto Brass lo recuerdo por que la veíamos con mi Tío Carlo en mi adolescencia,unos 16 o 17 , me hacía sentar en sus rodillas, mientras me decía que leencantaba las comedias italianas , que eran su infancia , Carlo ya era grande ,más de 60 no lo sé muy bien ahora y en esa época menos jaja
Siempre eran los sábado a latarde, yo lo iba a visitar me lo pedía mi papa, viudo de hacía mucho pobre,
Venga sobrina me decía,miremos una película.
A esa edad era mil veces mástímida que ahora , colegio católico de Ramos Mejía, muy protegida por mi papaempresario hasta iba con chofer y seguridad al colegio ( eso será para de mishistorias también) bueno no me quiero desviar
El tío me pedía que se mesentara en sus rodillas en el micro cine que tenía en el sótano de su casa enun barrio privado al oeste de buenos aires , recuerdo una escena donde unachica viajaba en un metro , quedando en el medio de dos viejitos que lamanoseaban , se ve que esa parte le gustaba mucho la repetía una y mil veces ,me decía que era arte en estado puro, yo lo único que notaba que ya no estabasobre sus rodillas, sino sobre su pija que para ser anciano ( ahora como Ud. entenderán, se algo más de la vida) bastante dura estaba y hasta diría muy grande… eranuna y mil veces que vi esa escena a Carlo le gustaba … y yo no podía decirleque no…
La próxima sigo…
Muchas gracias por losmensajes a paulalange@outlook.es
Son todos muy generososconmigo
Las historias son reales.