Fui chófer de Uber y me coji a una pasajera madura

Un día había arrancado mi trabajo como cualquier otro y subo a una mujer madura a mi auto que se estaba yendo a trabajar como todos los días. Era una mujer rubia con un cuerpo hermoso entrenado por gimnasio y cuidado de unos 45 años más o menos. Era verano y siempre que subía al auto tenía puesta su camisa de uniforme y una pollerita cortita, ese día cuando la Vi por primera vez la tenía que llevar a su trabajo que de distancia más o menos había 40 minutos. Ella sentada atrás muy coqueta y por el espejo sin mediar palabras veía que me estaba mirando mucho y yo también la empece a mirar. Cuando se di cuenta de eso se arreglaba el pelo. Se maquillaba o hacía cosas para que la mire. Ese día como me gustó mucho esta persona no le cobre el viaje y a ella le gustó. Entonces le perdió mi número personal para que siempre la lleve. Eso hice. Al otro día cuando la fui a buscar estaba vestida igual pero más charlatána. Cómo ella iba mirando que la estaba mirando por el espejo retrovisor se desabrochó dos botones de su camisa para que se le vea el corpiño que usaba. Yo al mirarla le iba hablando y diciendo cosas. Termino su viaje y arrancamos otro día. Así pasaba toda la semana que me iba provocando y yo ya venía con la verga re dura cada vez que la tenía que ir a buscar.
Era sábado y me dijo si la podía ir a buscar que tenía que ir a un lado. Yo por supuesto que acepte y me puse mi mejor perfume y ropa para estar a su altura, limpie bien el auto, lo lave, lo perfume por dentro y lo deje en buenas condiciones para ella. La fui a buscar subió al auto y mientras íbamos hablamos la miraba por el espejo y se abrió la camisa más de lo normal y no tenía puesto corpiño. Yo mirándola se me había puerto dura la verga, después miro que me abre más las piernas y no tenía nada abajo tampoco. Antes de llegar a destino que me era raro el lugar por nunca habíamos ido hasta ahí pare mí auto y le dije que venga adelante. Eso hizo, yo tenía mí auto polarizado oscuro y nos empezamos a tocar, yo a ella y ella a mí, empece por las tetas y después por su conchita , ella me metió mano en el pantalón y me apretaba la verga y tocaba, llegando al destino era un hotel que me había traído y ahí fuiamos a la habitación y cojimos un par de horas pasandola genial. Fue la mejor pasajera de mí vida que jamas me olvido de ella y de vez en cuando cojemos. Hermosa la veterana y muy puta