Tía Viuda | Capitulo 2

Cuidados y tía | Capitulo 2


La ceremonia finalizo, finalmente llego el pastor a rezar y seguir protocolos de la religión de ellos, yo sinceramente no sigo ninguna religión pero mi familia es muy creyente. Los días de quedarnos con mi tía y mis primas acababan pues todos teníamos que regresar a nuestras actividades, yo trabajo en una agencia de publicidad y mis jefes me dieron pocos días para ir al funeral así que con mucha tristeza de no poder estar con mi tía me tenia que despedir, me despedí de mi prima Abigail que era la mas grande

-Abi, se que esto es mucho lo que te voy a pedir pero cuida a tu hermana menor, y a tu mama yo tratare de cuidarlas también, las amo mucho y amo también a tu mama así que pronto las visitare mientras tanto ya me tengo que ir
Mientras un pequeño solloceo mi prima me contesta
-Gracias por venir primo, te quiero mucho,  prometo cuidarlas seré fuerte por ellas.
-Dani, eres una hermosa niña, se que serás muy fuerte te pareces mucho a tu mami, me cuidas a tu hermana y a tu madre.
-Si lo prometo, pero por favor vuelve lo mas pronto posible se que te vamos a necesitar
-Lo prometo Dani
Me despedí dándoles un beso en su frente, ahora venia la parte mas complicada de todas, era despídeme de mi tía, tantos sentimientos encontrados en un lugar y momento poco oportunos no sabia como hacerlo además de la sentimiento que acababa de admitir no sabia como mirarla, pero sin mucho que pensar ella esta detrás de mi, sin poder reaccionar solo la mire.
-Gracias por venir sobrino, me ayudaste mucho con todo esto, mis hijas, la situación y también por estar conmigo.
Así como la mirada del funeral ahora tenia los ojos mas tranquilos pero sin despegar la mirada del uno del otro ella me da un beso en la mejilla igual de lento como yo se lo di.
-Prometo visitarte lo mas pronto posible. No puedo dejarte sola Lucia y mis mas sinceras condolencias con todo lo que haz pasado 
-Cuídate hermoso gracias por estar conmigo.
-Es lo menos que puedo hacer por ti, espero hacer algo mas.
-Solo ven cuando tengas tiempo me gustaría no estar tan sola esos días.

Después del funeral, los días se convirtieron en una especie de nebulosa para mí. Mi tía Lucía estaba sumida en su dolor, y yo, sin saber muy bien cómo manejar mis propios sentimientos encontrados, me preocupaba el de cuidar a Abigail y Daniela, quienes todavía no comprendían del todo la magnitud de su pérdida.

Pasaron semanas de tristeza y luto, pero a medida que el tiempo avanzaba, mi tía comenzó a mostrar signos de recuperación se que es poco pero es entendible que no sea tan rápido pues perdió a una persona que representaba un pilar en su vida. Aun así, había algo diferente en ella durante el tiempo que estuve con ahí con ella, una fragilidad que no había notado antes. Su sonrisa que me dio antes de despedirse que podía iluminar una habitación entera, estaba tenue. Me preocupaba verla tan vulnerable. Pero a la vez me gustaba, saber que esa mujer tan hermosa estaba sola y que tal vez podría ser yo quien pueda consolar a alguien así, para mi seria un honor acompañarla con todo su duelo, estoy seguro que si alguien objetivo viera esto haría lo mismo o pensaría lo mismo, una mujer tan hermosa y sexi, cualquiera desearía estar con ella y aprovechar esta situación y se que debo apurarme a ayudarla porque sino alguien mas lo hará, y yo quiero estar ahí cuidado de sus hijas y de esa mujer tan hermosa que es mi tía.