Buenas noches a todos, les vuelvo a traer un relato producto de la fantasía de una usuaria con la que estuve hablando. Les pido disculpas por la demora, no es fácil encontrar alguna mujer a la que le guste que relaten sus deseos, pero por suerte hoy tenemos material.
Lamentablemente la pag no me deja subir fotos pero cuando pueda en los comentarios les voy a estar dejando alguna. Sin más vueltas, les dejo mi humilde aporte.
Era Sábado cerca del medio día como los fines de semana anteriores, comenzaste con tu rutina, te habias propuesto recorrer todos los senderos de la montaña que estaba cerca de tu ciudad.
Sólo te faltaba el último, el que debías transitar ese dia, era un sendero que se adentraba mucho en la montaña y pocos se animaban a recorrer pero estabas decidida a lograrlo.
Llegaste lo más cerca que pudiste con tu auto y el resto del camino hasta el punto de partida lo hiciste a pie, llevabas ropa cómoda, shorts y musculosa deportiva que convinaban con tus zapatillas para correr,pusiste tu botella de agua en un bolsito y comenzaste a trotar.
Los primeros kilómetros los hiciste sin problemas, era evidente tu estado físico privilegiado y la resistencia que tenias al esfuerzo que realizabas, si bien tus grandes pechos te molestaban un poco al rebotar tanto, ya algo te habías acostumbrado. A medida que subias la montaña el cansancio comenzó a notarse, razón por la cual decidiste parar a beber agua y revisar el GPS del teléfono, te sorprendiste mucho al ver que te faltaba más de la mitad del camino pero aun así, no ibas a ceder en aquel desafío...
Varios km después te quedaste sin agua y el sol comenzaba a picar sobre tu piel.
Continuaste casi sin ánimos por varios minutos más ,tus pies ya estaban pesados y caminabas con desgano cuando comenzaste a ver lunares negros, sentiste un frío recorrer tu cuerpo, y no nada pudiste hacer para evitar caer desmayada al suelo.
Pasaron unos segundos y comenzaste a recobrar el sentido, unas voces graves de hombre te estaban haciendo despertar, sentiste una mano en tu nuca que levantaba tu cabeza y un líquido comenzaba a fluir por tu boca hasta tu garganta,era agua! Justo lo que necesitabas para refrescarte bajo aquel sol abrazador, tus ojos se fueron abriendo, y casi comenzaste a hablar para agradecer la ayuda a aquella persona cuando sentiste un par de manos sobre tus pechos.
"Debo estar mareada aún" pensaste, pero no, aquellas manos comenzaron a apretar y jugar con tus pechos sobre la musculoza.
Finalmente abriste los ojos y pudiste ver a la persona que te estaba dando de beber, era un hombre canoso y junto a él un otro Calvo que estaba entretenido no manoseando y jugando con tus pechos.
" que hacen!" le dijiste a aquel hombre.
"tranquila que te estamos ayudando" te contesto el otro.
"no me toquen! Déjenme" volviste a decirles.
" cálmate nena, solo somos dos viejos que te ayudaron y solo quieren una pequeña atención de tu parte" te volvió a contestar el hombre con la botella de agua en la mano.
Luego de escucharlo, los miraste fijamente, realmente eran dos hombres mayores, tendrían entre 50 y 60 años, si bien era evidente su vejez no podrias precisar su edad con facilidad ya que el color oscuro de su tez ocultaba perfectamente su edad.
Este análisis pronto fue interrumpido por una sensación nueva en tus pechos, al levantar la cabeza un poco y ver la cara del otro anciano pegarse a tu pecho, no sólo te había manoseado sino que ahora había levantado tu ropa y comenzaba a chupar tus pesones como un bebé hambriento. Mientras tomaba un pecho fuerte con su mano, al otro lo engullia con su boca y succionaba tan fuerte que te estremecía el cuerpo.
Obviamente trataste de correrlo con las manos pero anciano canoso que antes te había dado de beber agua, te había sujetado de las muñecas y te empujó para que apoyes tu espalda en el duro suelo, aquel último hombre se acercó e intento besarte, al principio sin éxito hasta que tuviste que abrir la boca producto de una nueva sensación, el viejo calvo había abandonado tus pechos y luego de bajarte el short hundió su cara en tu entrepierna.
Comenzó a oler tu sexo y pasar la lengua por tu vagina, de forma casi delicada por momentos,pero en otros como un desesperado ,metía la lengua en tu interior y la sacaba para repasar por fuera tus labios vaginales. Estabas completamente confundida, te estaban abusando,estando en tus veintes la diferencia de edad edad era notoria pero eso no evitaba que estén haciendo lo que quisieran con tu cuerpo, y la verdad era que si no tuvieras la lengua de ese hombre canoso dentro de tu boca seguramente estarías gimiendo.
Apretabas la cabeza del Calvo con tus muzlos transpirados y cansados, aquel anciano te estaba dando sexo oral como nunca te habían hecho, claramente al ser un anciano tenía muchísima experiencia.
Pronto dejaste de resistirte, por lo cual el canoso dejó de besarte y aprovecho para tomar un pecho en su mano y comenzar a mamarlo como un becerro.
Estabas en una nube de placer, cuando involuntariamente tu mano se deslizo por la entrepierna del canoso y sintió un bulto, uno que no cabía en tu mano, podía ser que aquel señor hacia honor a la creencia popular de que los hombres negros tenían un pene enorme.
Asi que comenzaste a acariciar aquello que tenias en la mano, mientras el viejo te miraba con cara de sorpresa y placer.
Ya habías caído en sus garras, tomaste la parte alta de su pantalón y la bajaste dejando salir un pene negro enorme, seguramente el más grande que habías visto, lo tomaste en la palma de tu mano y lo dirijiste a tu boca, era imposible que entre toda pero comenzaste a chuparla cabeza y una pequeña parte del tronco, hasta que sin aviso alguno, una electricidad te recorrió entera, estabas teniendo un orgasmo increíble con la verga del canoso en la boca y la terrible lamida de vagina que te estaba dando el Calvo, quien no paraba de sorver de los Jugos que salían de tu vagina, tuviste varios espasmos que te hicieron arquear el cuerpo pero en ningún momento soltaste la enorme verga que estabas mamando.
" te dije que teníamos que venir por acá" le dijo el Calvo a su compañero.
" esta te la voy a deber por siempre" contesto el canoso con gesto de agradecimiento.
En ese momento llevaste tu mano a la vagina y abriéndola con tus dedos le dijiste al canoso " ahora quiero probar esa verga con estos labios"
"y vos viejo vení acá que te voy a devolver la chupada que me diste" ordenaste al Calvo.
Ellos entusiasmados acataron tus ordenes, el canoso se coloco entre tus piernas y poso su enorme verga en la entrada de tu vagina, la cual por suerte se encontraba más que lubricada para recibir semejante miembro.
Así fue que de un empujón te penetro, llenando todo tu interior y tocando con la cabeza del pene el fondo de tus entrañas, era evidente que parte de su tronco iba a quedar fuera pero con lo que tenias adentro era más que suficiente para volverte loca de placer, tenias los ojos casi en blanco al sentir como esta larga y gruesa verga te estaba cogiendo, era increíble con la vitalidad y energía con la que se movía el anciano aquel, y ni que decir de la tremenda herramienta que portaba, te encontrabas gimiendo como una posesa cuando algo te golpeó en los labios, volviste en sí y miraste a tu costado, era el viejo Calvo quien te había golpeado con algo en la cara que cuando prestaste atención notaste que era su pene.
Increíblemente era más grande que el de su amigo. Ya no cabía duda, esos dos ancianos negros no solo hacian honor al mito popular sino que tenían las vergas más grandes que habías visto en tu vida, tal como ese viejo se había prendido de tus pechos lo hiciste vos de su verga, hiciste un esfuerzo enorme pero lograste meterla en tu boca, la saboreabas con más ganas que el agua que te habían dado en un principio... Querías exprimirla hasta la última gota, ya no te importaba el dolor de espalda por estar acostada en el piso mientras te daban una cogida monumental, ni el dolor de cuello por estar mamando ese fabuloso pedazo de carne. Todo era placer y más placer, sentías el glande de aquel hombre golpear la campana de tu garganta y el pene del otro empujando en tus entrañas como un animal, hasta que nuevamente, otro fantástico orgasmo llego, espasmos y cosquilleos recorrieron tu cuerpo de la cabeza hasta los pies, temblaste y te retorsiste por algunos minutos, quedaste exhausta y casi inconciente de placer. Con la poca fuerza que te quedaba lograste arrodillarte y abriendo la boca le pediste a esos viejos que acabarán en tu boca, algo a lo que ellos no se negaron en absoluto, puesto que no dudaron en pararse al frente tuyo y con sus dos manos comenzaron a masturbar esos enormes penes, pocas jaladas hicieron falta para que con grandes chorros llenarán tu boca, bañaran tu cara y pechos.
Y por su quedaba algún resto de semen tomaste sus miembros con tus manos y los explimiste sacando cada gota de sus glandes y depositandolo en tu palma para luego engullir la leche como habías hecho antes.
Aquellos dos ancianos se vistieron primero y siguieron camino hacia arriba de la montaña, abrazados y festejando el increíble momento que habían vivido, en cambio vos por tu parte emprendiste el camino de vuelta, caminando como podías luego de la experiencia sexual agotadora que pasaste,pero de algo estabas segura.
Que lamentablemente no habías podido terminar el recorrido que tenías planeado, así que volverías el otro fin de semana, por el mismo sendero, y si tenias suerte te volverías a cruzar con aquellos viejos.
Lamentablemente la pag no me deja subir fotos pero cuando pueda en los comentarios les voy a estar dejando alguna. Sin más vueltas, les dejo mi humilde aporte.
Era Sábado cerca del medio día como los fines de semana anteriores, comenzaste con tu rutina, te habias propuesto recorrer todos los senderos de la montaña que estaba cerca de tu ciudad.
Sólo te faltaba el último, el que debías transitar ese dia, era un sendero que se adentraba mucho en la montaña y pocos se animaban a recorrer pero estabas decidida a lograrlo.
Llegaste lo más cerca que pudiste con tu auto y el resto del camino hasta el punto de partida lo hiciste a pie, llevabas ropa cómoda, shorts y musculosa deportiva que convinaban con tus zapatillas para correr,pusiste tu botella de agua en un bolsito y comenzaste a trotar.
Los primeros kilómetros los hiciste sin problemas, era evidente tu estado físico privilegiado y la resistencia que tenias al esfuerzo que realizabas, si bien tus grandes pechos te molestaban un poco al rebotar tanto, ya algo te habías acostumbrado. A medida que subias la montaña el cansancio comenzó a notarse, razón por la cual decidiste parar a beber agua y revisar el GPS del teléfono, te sorprendiste mucho al ver que te faltaba más de la mitad del camino pero aun así, no ibas a ceder en aquel desafío...
Varios km después te quedaste sin agua y el sol comenzaba a picar sobre tu piel.
Continuaste casi sin ánimos por varios minutos más ,tus pies ya estaban pesados y caminabas con desgano cuando comenzaste a ver lunares negros, sentiste un frío recorrer tu cuerpo, y no nada pudiste hacer para evitar caer desmayada al suelo.
Pasaron unos segundos y comenzaste a recobrar el sentido, unas voces graves de hombre te estaban haciendo despertar, sentiste una mano en tu nuca que levantaba tu cabeza y un líquido comenzaba a fluir por tu boca hasta tu garganta,era agua! Justo lo que necesitabas para refrescarte bajo aquel sol abrazador, tus ojos se fueron abriendo, y casi comenzaste a hablar para agradecer la ayuda a aquella persona cuando sentiste un par de manos sobre tus pechos.
"Debo estar mareada aún" pensaste, pero no, aquellas manos comenzaron a apretar y jugar con tus pechos sobre la musculoza.
Finalmente abriste los ojos y pudiste ver a la persona que te estaba dando de beber, era un hombre canoso y junto a él un otro Calvo que estaba entretenido no manoseando y jugando con tus pechos.
" que hacen!" le dijiste a aquel hombre.
"tranquila que te estamos ayudando" te contesto el otro.
"no me toquen! Déjenme" volviste a decirles.
" cálmate nena, solo somos dos viejos que te ayudaron y solo quieren una pequeña atención de tu parte" te volvió a contestar el hombre con la botella de agua en la mano.
Luego de escucharlo, los miraste fijamente, realmente eran dos hombres mayores, tendrían entre 50 y 60 años, si bien era evidente su vejez no podrias precisar su edad con facilidad ya que el color oscuro de su tez ocultaba perfectamente su edad.
Este análisis pronto fue interrumpido por una sensación nueva en tus pechos, al levantar la cabeza un poco y ver la cara del otro anciano pegarse a tu pecho, no sólo te había manoseado sino que ahora había levantado tu ropa y comenzaba a chupar tus pesones como un bebé hambriento. Mientras tomaba un pecho fuerte con su mano, al otro lo engullia con su boca y succionaba tan fuerte que te estremecía el cuerpo.
Obviamente trataste de correrlo con las manos pero anciano canoso que antes te había dado de beber agua, te había sujetado de las muñecas y te empujó para que apoyes tu espalda en el duro suelo, aquel último hombre se acercó e intento besarte, al principio sin éxito hasta que tuviste que abrir la boca producto de una nueva sensación, el viejo calvo había abandonado tus pechos y luego de bajarte el short hundió su cara en tu entrepierna.
Comenzó a oler tu sexo y pasar la lengua por tu vagina, de forma casi delicada por momentos,pero en otros como un desesperado ,metía la lengua en tu interior y la sacaba para repasar por fuera tus labios vaginales. Estabas completamente confundida, te estaban abusando,estando en tus veintes la diferencia de edad edad era notoria pero eso no evitaba que estén haciendo lo que quisieran con tu cuerpo, y la verdad era que si no tuvieras la lengua de ese hombre canoso dentro de tu boca seguramente estarías gimiendo.
Apretabas la cabeza del Calvo con tus muzlos transpirados y cansados, aquel anciano te estaba dando sexo oral como nunca te habían hecho, claramente al ser un anciano tenía muchísima experiencia.
Pronto dejaste de resistirte, por lo cual el canoso dejó de besarte y aprovecho para tomar un pecho en su mano y comenzar a mamarlo como un becerro.
Estabas en una nube de placer, cuando involuntariamente tu mano se deslizo por la entrepierna del canoso y sintió un bulto, uno que no cabía en tu mano, podía ser que aquel señor hacia honor a la creencia popular de que los hombres negros tenían un pene enorme.
Asi que comenzaste a acariciar aquello que tenias en la mano, mientras el viejo te miraba con cara de sorpresa y placer.
Ya habías caído en sus garras, tomaste la parte alta de su pantalón y la bajaste dejando salir un pene negro enorme, seguramente el más grande que habías visto, lo tomaste en la palma de tu mano y lo dirijiste a tu boca, era imposible que entre toda pero comenzaste a chuparla cabeza y una pequeña parte del tronco, hasta que sin aviso alguno, una electricidad te recorrió entera, estabas teniendo un orgasmo increíble con la verga del canoso en la boca y la terrible lamida de vagina que te estaba dando el Calvo, quien no paraba de sorver de los Jugos que salían de tu vagina, tuviste varios espasmos que te hicieron arquear el cuerpo pero en ningún momento soltaste la enorme verga que estabas mamando.
" te dije que teníamos que venir por acá" le dijo el Calvo a su compañero.
" esta te la voy a deber por siempre" contesto el canoso con gesto de agradecimiento.
En ese momento llevaste tu mano a la vagina y abriéndola con tus dedos le dijiste al canoso " ahora quiero probar esa verga con estos labios"
"y vos viejo vení acá que te voy a devolver la chupada que me diste" ordenaste al Calvo.
Ellos entusiasmados acataron tus ordenes, el canoso se coloco entre tus piernas y poso su enorme verga en la entrada de tu vagina, la cual por suerte se encontraba más que lubricada para recibir semejante miembro.
Así fue que de un empujón te penetro, llenando todo tu interior y tocando con la cabeza del pene el fondo de tus entrañas, era evidente que parte de su tronco iba a quedar fuera pero con lo que tenias adentro era más que suficiente para volverte loca de placer, tenias los ojos casi en blanco al sentir como esta larga y gruesa verga te estaba cogiendo, era increíble con la vitalidad y energía con la que se movía el anciano aquel, y ni que decir de la tremenda herramienta que portaba, te encontrabas gimiendo como una posesa cuando algo te golpeó en los labios, volviste en sí y miraste a tu costado, era el viejo Calvo quien te había golpeado con algo en la cara que cuando prestaste atención notaste que era su pene.
Increíblemente era más grande que el de su amigo. Ya no cabía duda, esos dos ancianos negros no solo hacian honor al mito popular sino que tenían las vergas más grandes que habías visto en tu vida, tal como ese viejo se había prendido de tus pechos lo hiciste vos de su verga, hiciste un esfuerzo enorme pero lograste meterla en tu boca, la saboreabas con más ganas que el agua que te habían dado en un principio... Querías exprimirla hasta la última gota, ya no te importaba el dolor de espalda por estar acostada en el piso mientras te daban una cogida monumental, ni el dolor de cuello por estar mamando ese fabuloso pedazo de carne. Todo era placer y más placer, sentías el glande de aquel hombre golpear la campana de tu garganta y el pene del otro empujando en tus entrañas como un animal, hasta que nuevamente, otro fantástico orgasmo llego, espasmos y cosquilleos recorrieron tu cuerpo de la cabeza hasta los pies, temblaste y te retorsiste por algunos minutos, quedaste exhausta y casi inconciente de placer. Con la poca fuerza que te quedaba lograste arrodillarte y abriendo la boca le pediste a esos viejos que acabarán en tu boca, algo a lo que ellos no se negaron en absoluto, puesto que no dudaron en pararse al frente tuyo y con sus dos manos comenzaron a masturbar esos enormes penes, pocas jaladas hicieron falta para que con grandes chorros llenarán tu boca, bañaran tu cara y pechos.
Y por su quedaba algún resto de semen tomaste sus miembros con tus manos y los explimiste sacando cada gota de sus glandes y depositandolo en tu palma para luego engullir la leche como habías hecho antes.
Aquellos dos ancianos se vistieron primero y siguieron camino hacia arriba de la montaña, abrazados y festejando el increíble momento que habían vivido, en cambio vos por tu parte emprendiste el camino de vuelta, caminando como podías luego de la experiencia sexual agotadora que pasaste,pero de algo estabas segura.
Que lamentablemente no habías podido terminar el recorrido que tenías planeado, así que volverías el otro fin de semana, por el mismo sendero, y si tenias suerte te volverías a cruzar con aquellos viejos.
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