Triste pero bien cogida

Eran de esos días que estaba en la universidad, salía, estudiaba, platicaba con amigos, hacia una cosa, por lo general, trataba de ser buen compañero y a veces me tocada escuchar muchas cosas de mis amigos. Y no es que me molestara, me gusta ayudar, pero hay veces que son problemas que aburren porque pueden solucionarse muy rápido si se tuviera un poco de sentido común.
Es ahí, que, en un viernes, salía de clases, todo normal hasta que me topo con una amiga, se llamaba Step; ella era flaquita, de cadera poco pronunciada, glúteos regulares, piernas firmes, senos medianos, pero con unos lindos ojos y una boca grande acompañada de labios carnosos. Una que otra vez, no habíamos cruzado, algunas veces la invite a salir, pero no aceptaba porque ella tenía novio.
Esa ocasión, la vi muy triste, ella es muy seria pero cuando este mal, se nota, me acerqué y le dije:
Leo: Hola Step ¿cómo estás?
Step: Estoy desanimada
Leo: ¿y eso?
Step: complicaciones de la vida, ya sabes
leo: ¿te puedo ayudar?
Step: no creo que puedas.
Leo: anímate, mira te invito a comer y si me quieres contar adelante.
Step: bueno…vamos
Fuimos por algo sencillo, unas gorditas y un refresco cerca de la universidad, nada ostentoso. Y nos pedimos dos cervezas.
Step: bueno, te voy a contar y me dices que sí estuvo bien
Leo: ¡Claro!
Step: Pasa que mi novio y yo tuvimos una discusión muy fuerte, el dice que no lo apoyo, pero yo estoy cansada de estar siempre a sus horarios, sé que trabaja y le hechas ganas, pero a veces me gustaría pasar más tiempo con él.
Leo: (asintiendo)
Después de comer, las cervezas dieron antojo de seguir con la conversación, pero con más alcohol, para ello, nos fuimos a un bar, medio cerca de la universidad. Tomamos mi coche y nos fuimos. En el bar, fue un poco más de lo mismo, su novio no pasaba mucho tiempo con ella, que su novio no era como de las novelas, pero a medida que el alcohol aumentaba ella iba abriéndose más y me empezó a confesar cosas como: que su novio la complace sexualmente, pero sentía también cogía con una amiga de él, que le pedía que se la mamara en publico y que le encantaba tomarle fotos explicitas de ella.
Eso a mí me empezó a calentar mucho, imaginarme que era su novio, me empezaba a parar la verga, porque la chica era linda y siempre me la imaginaba desnuda. Al poco tiempo, en el bar nos empezaron a correr, ya era tarde. Me ofrecí a llevarla (sin ninguna intención más que un beso), ella iba en su juicio, pero más valentonada, empezó a decir que seguramente su novio estaba preñando a su amiga; yo la observaba y me reía.
Empezó a llover, pero eran de esas lluvias en que no se podía ver nada, nos estacionamos cerca de su casa, puse la calefacción, y ella empezó a ruborizarse, poco a poco ella se fue desabotonando la blusa, el calor era un poco sofocante.
Me encantaba ver en medio de su blusa, se asomaban sus hermosos pechos; ella continuaba platicando y sin parar, la lluvia seguía y seguía. Fue tanto el calor, que ella estaba muy ruborizada y le dije que se vea hermosa. Ella sonrió, eso fue señal para mi para poner mi mano en su pierna, si me decía algo, no pasaba nada, retiraba mi mano y ya; pero si a ella, le gustaba, podía ir más allá.
Ella no dijo nada, y empecé a subir, fue a mitad de pierna que ella dijo: - ¿Qué haces? Y eso fue la señal de besarla, fue en ese momento, en que nos dimos besos muy apasionados, le empecé a desabotonar su blusa, ella con cada beso, decía: ¡para me estas excitando! Y yo cada vez que lo escuchaba, le acariciaba con más intensidad su vagina, se notaba la humedad de su sexo a través de la ropa.
Llegue a un momento, en que eufórico, me baje el pantalón, hice el asiento para atrás y la jale con un beso. Ella igualmente emocionada, se quitó el pantalón y su ropa interior, pero en medio del momento dijo: ¿y tu novia? Y conteste: de estar a aquí, haríamos un trio.
La jale al asiento trasero, y la empine para darle unas embestidas a lo loco, poco me importaba sinos veía alguien, o si venia la policía, lo único que estaba enfocado era en cogerla hasta que la llenara de semen.
Recuerdo su culo, redondo, con glúteos que te invitaban a nalguear con vigor y que hice en repetidas ocasiones hasta el rojo carmesí, recuerdo tener la verga hasta adentro, ella gemía cada vez que sentía mi empujar, y lo hermoso de su ano, invitándome a tocarlo. Tenia mis dos palmas en cada una de tus nalgas, las estiraba y las apretaba mientras ella solo gemía, y yo feliz de hacer mi sueño realidad de cogerme a una de las amigas de mi novia.
Después la voltee, para ver su cara y agarrar sus senos, ella solo obedecía, así que le quite su blusa, la deje completamente desnuda, la sostuve de sus antebrazos, mientras mi verga entraba en su vagina, y con cada embestida, observaba como sus senos rebotaban de arriba abajo, era toda una obra de arte observar cómo estaba en medio de sus piernas, con su vagina recibiendo mi verga, así que decidí poner todo de mí. De vez, en cuando, nos dábamos esos jugosos besos que empiezan con la lengua, riquísimos.
Ella, gemía de placer, entre cortado decía que rico, creo que lo que más le causaba placer, era sentir como mi verga salía y se introducía completamente, una y otra vez, ese placer de rellenar su útero le fascinaba. Llegue a un punto de tanto placer que no soporte más y eyacule todo en ella, solté un gemido de placer y descarga, sentía como litros y litros de mi semen desembocaban dentro de ella, yo deseaba que cada gota de mí, estuvieran dentro de ella.
Finalice, mirándola y ella me regreso el gesto, nos besamos y descanse un poco en sus brazos, sentíamos cansancio, nuestra respiración era agitada, sentía el calor de tu cuerpo. Después de un rato, ni nos acordábamos que todo eso ocurría en una calle poco transitada, pero al final y a cabo una calle.
Cuando acabamos, nos empezamos a vestir, nuestras miradas a ratos coincidían y reíamos, y nos dábamos de esos mini besos. No pudimos encontrar su ropa interior, jaja y si la tratamos de encontrar, bueno, la verdad es que ni me importaba eso.
Procedí a llevarla a su casa, mientras le pedía el ultimo favor, sabia que tal vez no iba a repetir eso, así le puse su mano en mi verga para que me la jalara un rato mientras yo iba conduciendo, se le hizo algo curioso y atrevido, así que accedió, sentía como poco a poco mi verga se puso dura otra vez.
Enfrente de su casa, me dijo: - ya! ¡Nos pueden ver! Y les conteste: ¡pues apúrate para que no nos vean! Jale su cabeza a mi verga y ella abrió su boca, mi dio como unas cuatro chupadas y un beso a mi verga y me volvió a decir: ya, después abra otra ocasión (Mientras estuvo soltera ya no hubo otra vez, pero de juntada y casada hubo más, pero eso será historia de otra ocasión).
Dos días después, en una salida con mi novia, ella encontró las bragas de su amiga Step, a lo cual, empezó a cuestionar de quien eran, en un principio, ni me pasaba en mi mente que pudieran ser de ella, el carro era de mi hermano y sin pensarlo dije que podían ser de la novia de mi hermano. Lo dije tan convencido que mi novia me creyó, y empezábamos a imaginar que habían hecho en el carro. Mi novia dejo la ropa interior debajo del asiento y seguimos con nuestras vidas.
En esa tarde, me acorde de quien pudieran ser, las tome y les tome foto, obviamente, se la envía a Step, ella me contesto de inmediato, dijo que eran las suyas, yo estaba emocionado. No me dijo nada de que se las devolviera, y antes de que me lo preguntara, le dije que mi hermano las encontró, pero las tiro. Después de eso, conversamos cosas sin sentido.