su hermana terminó con un novio que ella tenía y andaba un poco triste, así que le dije a mi esposa “oye por qué no invitamos a tu hermana para que se distraiga a dar una vuelta”. Ella me miró y dijo “ya se tus intenciones, pero no es ahora el momento creo yo así que no”. yo le dije “ni al caso de verdad solo es para que se distraiga” así que le dijimos, ella dijo que sí.
Salimos, compramos unas cervezas y como fue pasando la noche nos las fuimos tomando, así que ya entrada la noche yo empecé a agarrarle las nalgas y las chichis a mi esposa delante de su hermana. Ella dijo “mm si quieren me voy” yo contesté “al contrario” y ella dijo “ehi míralo eh” le dijo a su hermana o sea a mi esposa. Mi esposa se rio y lo que contesto no lo esperaba, pero le dijo “no te preocupes si quieres te lo presto un ratito para que se te quite la tristeza por el menso de tu ex”. Ella no se rio ni nada, pero se miró que no le pareció mala idea así que como para zafarse dijo “voy al baño”, así que yo dije “hay que rentar un cuarto de hotel para andar a gusto y que no nos vayan a parar por andar tomando” mi esposa dijo “si mejor” y mi cuñada dijo “si por mí está bien”.
Mi esposa me miró como diciéndome ya se te hizo mendigo con una cara de caliente que todavía me para el pito cuando recuerdo esa mirada. Mi cuñada siguió tomando, así que cuando llegamos al hotel ella se dejó ir al baño, nosotros nos quedamos en la salita del cuarto. Me saqué el pito y le dije en voz baja “mámamela así cuando salga que nos mire a ver qué pasa”, y si mi esposa me empezó a lamer y a pasarse la cabecita de mi pene por sus labios hasta metérsela toda hasta los huevos, la verdad yo estaba excitadísimo de saber que pasaría cuando ella saliera, pero estaba entre mareado, dormido y borracho, algo así, lo cual hacía que sintiera más rico.
Cuando mi cuñada salió, dijo “que están haciendo cochinos…” yo le dije “yo… nada yo solo estoy sentado”. “Yo con hambre y ustedes comiendo carne”, comentó. Mi esposa le dijo “¿quieres?”. Para esto los tres estábamos ya algo tomados la verdad. Mi cuñada dijo “no luego me vas a querer pegar”, así que mi esposa dijo “okei me voy a bañar y al baño… ustedes mientras entren en confianza para cuando salga okei”. Cuando se levantó fue por su hermana y la tomó de la mano, la puso delante mío y le dijo “te lo encargo” se rio y se metió al baño.
Ella se sentó al lado mío, así que yo quise besarla, al principio no quiso así que saqué mi pene y le dije “no le vas a hacer caso a tu hermana” tomé su cabeza, pensé que ella no lo haría, pero mi sorpresa fue que empezó a mamármelo, la verdad lo mama tan rico o seria que estaba muy caliente como nosotros. Se la metía despacito toda en su boca y la saboreaba tan bien, después la levanté del cabello, la empecé a besar mientras ella me masturbaba con su mano, así que como quería salir de dudas le bajé la blusa y empecé a besar el pecho hasta llegar a sus chichis las cuales estaban durísimas, eran unas chichotas, pero el pezón es muy pequeño el de ella y sabuesito, así que estuve mamándolas por un muy buen rato.
Ella me quitó y siguió mamándome, cuando miré de frente, mi esposa estaba mirándome y me puso un pulgar arriba. Ella vino hacia nosotros y dijo “que están haciendo cochinos” su hermana paró de mamármela y se puso seria, mi esposa nos tomó de la mano y dijo “me voy a bañar así que mientras pueden ir haciendo lo que quieran en la cama” y nos llevó a los dos a la cama del cuarto, me acosté se acostó su hermana, ella me desabrochó y quitó mi pantalón y me dio un beso en la cabeza del pene y en los huevitos y le dijo a su hermana “no te lo acabes me dejas un poquito eh…” ella llamó por su nombre a mi esposa le dijo “pinche Karla te pasas”.
Así que se fue y yo comencé a desnudarla, a besarla y agarrarle la panocha la cual estaba mojadisima, así que empecé a mamarle la panochita la cual sabía muy muy rica con algo de sudor pero muy rica, le metía los deditos los sacaba y los ponía en su boca, ella los mamaba como si fuera mi pene, me metí entre sus piernas tomé mi pene y lo restregué en panochita mientras la habría junte sus piernas, le lamí la panochita nuevamente y bajé mi lengua poquito pasando una vez por su culito y ella pegó un brinquito y un ligero pujido como llanto, así que le volví a lamer el culo, pero con más ganas, como si me lo fuera a comer. Tomé mi pene otra vez, he hice lo mimos, le sobé el culito sin metérsela y la panochita también, ella se miraba como estaba de caliente así que le abrí nuevamente las piernas, la abracé y empecé a metérsela despacito, nuevamente ella soltó un llanto o algo parecido, le dije “que tienes” ella me dijo “nada, es que se siente bien rico tu síguele” así que seguí metiéndosela, agarré sus nalgas y se la quería meter con todo y huevos hasta que de repente sentí en mi espalda un beso, lo cual me emocionó, ya que era mi esposa que me tomó por la espalda mientras me cogía a su hermana.
Seguí en la misma posición metiéndosela a mi cuñada mientras besaba a mi esposa. Después se la saqué y sin decir nada, tomé a mi esposa del pelo y la puse a que le lamiera la panocha a su hermana se miró como se excitaron las dos sobre todo por los gemidos de su hermana. Así que yo aproveché para lamerle el culito a mi esposa, me puse detrás, tomé mi pene y se lo deje ir hasta adentro a mi esposa mientras le seguía lamiendo la panochita a su hermana, le di así un ratito hasta que le dije a mi mujer “oye yo soy el que se la quería coger o tu déjame un poquito” se rieron las dos, me recosté y su hermana se subió en mi… que rico sentía cada que cambiamos de posición cuando entraba mi verga en la panochita de mi cuñadita, así que cuando se sentó, sentí como se la metía poquito a poquito, así que tomé sus nalgas y la restregué en mi con toda mi verga adentro mientras besaba sus tetas buenísimas.
Después me puse de pie y le pedí que me la mamaran entre las dos así que empezaron una tipo pelea por meterse mi pene en su boca mientras compartían lengüetadas entre ellas y tuve que pedir que pararan porque un segundo más y hubiera terminado peor, no quería terminar aun, así que recosté a mi cuñada, me acomodé para mamarle su panochita otra vez y le dije a mi esposa “pon tu panocha en su cara” y así lo hizo mientras yo me comía a su hermana literal, me la estaba comiendo… mi cuñada se comía a mi esposa. Así estuve mamando y comiéndome esa panochita tan rica por un buen rato hasta que empezó a gritar, gemir y terminar en mi boca ya que ella me aventaba con sus manos y yo más unida mi lengua en su rajadita, después la lamí despacito hasta que ella dijo “ya... yaa…” le dejamos descansar así que mi esposa se subió en mi cuñada, puso su cara en mí y me empezó a besar y acariciar el pecho mientras mi esposa terminaba encima de mí.
Yo creo se excitó viendo a su hermana besándome, así que yo también terminé dentro de mi esposa besando a mi cuñada… Así dormimos los tres hasta la mañana, de ahí nos fuimos a comer más bien desayunar como si nada… y la verdad los tres quedamos súper vaciados.
Salimos, compramos unas cervezas y como fue pasando la noche nos las fuimos tomando, así que ya entrada la noche yo empecé a agarrarle las nalgas y las chichis a mi esposa delante de su hermana. Ella dijo “mm si quieren me voy” yo contesté “al contrario” y ella dijo “ehi míralo eh” le dijo a su hermana o sea a mi esposa. Mi esposa se rio y lo que contesto no lo esperaba, pero le dijo “no te preocupes si quieres te lo presto un ratito para que se te quite la tristeza por el menso de tu ex”. Ella no se rio ni nada, pero se miró que no le pareció mala idea así que como para zafarse dijo “voy al baño”, así que yo dije “hay que rentar un cuarto de hotel para andar a gusto y que no nos vayan a parar por andar tomando” mi esposa dijo “si mejor” y mi cuñada dijo “si por mí está bien”.
Mi esposa me miró como diciéndome ya se te hizo mendigo con una cara de caliente que todavía me para el pito cuando recuerdo esa mirada. Mi cuñada siguió tomando, así que cuando llegamos al hotel ella se dejó ir al baño, nosotros nos quedamos en la salita del cuarto. Me saqué el pito y le dije en voz baja “mámamela así cuando salga que nos mire a ver qué pasa”, y si mi esposa me empezó a lamer y a pasarse la cabecita de mi pene por sus labios hasta metérsela toda hasta los huevos, la verdad yo estaba excitadísimo de saber que pasaría cuando ella saliera, pero estaba entre mareado, dormido y borracho, algo así, lo cual hacía que sintiera más rico.
Cuando mi cuñada salió, dijo “que están haciendo cochinos…” yo le dije “yo… nada yo solo estoy sentado”. “Yo con hambre y ustedes comiendo carne”, comentó. Mi esposa le dijo “¿quieres?”. Para esto los tres estábamos ya algo tomados la verdad. Mi cuñada dijo “no luego me vas a querer pegar”, así que mi esposa dijo “okei me voy a bañar y al baño… ustedes mientras entren en confianza para cuando salga okei”. Cuando se levantó fue por su hermana y la tomó de la mano, la puso delante mío y le dijo “te lo encargo” se rio y se metió al baño.
Ella se sentó al lado mío, así que yo quise besarla, al principio no quiso así que saqué mi pene y le dije “no le vas a hacer caso a tu hermana” tomé su cabeza, pensé que ella no lo haría, pero mi sorpresa fue que empezó a mamármelo, la verdad lo mama tan rico o seria que estaba muy caliente como nosotros. Se la metía despacito toda en su boca y la saboreaba tan bien, después la levanté del cabello, la empecé a besar mientras ella me masturbaba con su mano, así que como quería salir de dudas le bajé la blusa y empecé a besar el pecho hasta llegar a sus chichis las cuales estaban durísimas, eran unas chichotas, pero el pezón es muy pequeño el de ella y sabuesito, así que estuve mamándolas por un muy buen rato.
Ella me quitó y siguió mamándome, cuando miré de frente, mi esposa estaba mirándome y me puso un pulgar arriba. Ella vino hacia nosotros y dijo “que están haciendo cochinos” su hermana paró de mamármela y se puso seria, mi esposa nos tomó de la mano y dijo “me voy a bañar así que mientras pueden ir haciendo lo que quieran en la cama” y nos llevó a los dos a la cama del cuarto, me acosté se acostó su hermana, ella me desabrochó y quitó mi pantalón y me dio un beso en la cabeza del pene y en los huevitos y le dijo a su hermana “no te lo acabes me dejas un poquito eh…” ella llamó por su nombre a mi esposa le dijo “pinche Karla te pasas”.
Así que se fue y yo comencé a desnudarla, a besarla y agarrarle la panocha la cual estaba mojadisima, así que empecé a mamarle la panochita la cual sabía muy muy rica con algo de sudor pero muy rica, le metía los deditos los sacaba y los ponía en su boca, ella los mamaba como si fuera mi pene, me metí entre sus piernas tomé mi pene y lo restregué en panochita mientras la habría junte sus piernas, le lamí la panochita nuevamente y bajé mi lengua poquito pasando una vez por su culito y ella pegó un brinquito y un ligero pujido como llanto, así que le volví a lamer el culo, pero con más ganas, como si me lo fuera a comer. Tomé mi pene otra vez, he hice lo mimos, le sobé el culito sin metérsela y la panochita también, ella se miraba como estaba de caliente así que le abrí nuevamente las piernas, la abracé y empecé a metérsela despacito, nuevamente ella soltó un llanto o algo parecido, le dije “que tienes” ella me dijo “nada, es que se siente bien rico tu síguele” así que seguí metiéndosela, agarré sus nalgas y se la quería meter con todo y huevos hasta que de repente sentí en mi espalda un beso, lo cual me emocionó, ya que era mi esposa que me tomó por la espalda mientras me cogía a su hermana.
Seguí en la misma posición metiéndosela a mi cuñada mientras besaba a mi esposa. Después se la saqué y sin decir nada, tomé a mi esposa del pelo y la puse a que le lamiera la panocha a su hermana se miró como se excitaron las dos sobre todo por los gemidos de su hermana. Así que yo aproveché para lamerle el culito a mi esposa, me puse detrás, tomé mi pene y se lo deje ir hasta adentro a mi esposa mientras le seguía lamiendo la panochita a su hermana, le di así un ratito hasta que le dije a mi mujer “oye yo soy el que se la quería coger o tu déjame un poquito” se rieron las dos, me recosté y su hermana se subió en mi… que rico sentía cada que cambiamos de posición cuando entraba mi verga en la panochita de mi cuñadita, así que cuando se sentó, sentí como se la metía poquito a poquito, así que tomé sus nalgas y la restregué en mi con toda mi verga adentro mientras besaba sus tetas buenísimas.
Después me puse de pie y le pedí que me la mamaran entre las dos así que empezaron una tipo pelea por meterse mi pene en su boca mientras compartían lengüetadas entre ellas y tuve que pedir que pararan porque un segundo más y hubiera terminado peor, no quería terminar aun, así que recosté a mi cuñada, me acomodé para mamarle su panochita otra vez y le dije a mi esposa “pon tu panocha en su cara” y así lo hizo mientras yo me comía a su hermana literal, me la estaba comiendo… mi cuñada se comía a mi esposa. Así estuve mamando y comiéndome esa panochita tan rica por un buen rato hasta que empezó a gritar, gemir y terminar en mi boca ya que ella me aventaba con sus manos y yo más unida mi lengua en su rajadita, después la lamí despacito hasta que ella dijo “ya... yaa…” le dejamos descansar así que mi esposa se subió en mi cuñada, puso su cara en mí y me empezó a besar y acariciar el pecho mientras mi esposa terminaba encima de mí.
Yo creo se excitó viendo a su hermana besándome, así que yo también terminé dentro de mi esposa besando a mi cuñada… Así dormimos los tres hasta la mañana, de ahí nos fuimos a comer más bien desayunar como si nada… y la verdad los tres quedamos súper vaciados.
2 comentarios - trio con mi cuñada y mi esposa