Mi historia de amor con mi Madre 9

Hola

Gracias por seguir leyendo nuestras experincias.






Al día siguiente de aquella vez en año nuevo, mi madre y yo teníamos una conversación pendiente, en la tarde cuando regrese del trabajo, comimos y nos quedamos platicando.

Yo: mami, gracias por lo de ayer estuvo muy rico, te amo.

Madre: no hijo gracias a ti, que te das el tiempo para pasar un rato conmigo.

Yo: claro que sí mami como no voy a querer estar contigo, si eres tan sexy.

Madre: tranquilo si ya estoy algo vieja.

Yo: para nada estás muy bien no eres ninguna vieja, estás mejor que algunas jovencitas.

Madre: si, solo lo dices porque quieres algo.

Yo: si, si quiero algo y es algo que se me a metido a la cabeza y no puedo sacarlo.

Madre: acaso es que quiere hacerle un hijo a tu madre.

Yo: si y te lo dije ayer y no es juego.

Madre: hay hijo, ayer nos dejamos llevar, yo también lo desee ayer, ¿pero estás consiente de lo que dices y de las consecuencias?

Yo: si, se cuáles pueden ser la consecuencia y estoy dispuesto a afrontarlas si tu también quieres.

Madre: hijo estás loco y tu madre también no sé porque, pero desde ayer que volví a sentir tu semen dentro de mi, me empezó a hacer ilusión el ser madre de nuevo.

Yo: entonces quieres que lo sigamos intentando, si no es que ayer ya pego jeje.

Madre: estoy loca por decirte esto, pero si llegara a pasar tendríamos que engañar aún más a tu padre, porque tendríamos que decir que es de tu padre, incluso tendría que intentar tener sexo con el más seguido.

Yo: bueno por mi no hay problema, sabes que no molestas que tengan relaciones, siempre he sido consiente que son marido y mujer, solo me sentiría mal por engañarlo diciéndole que va a tener un hijo cuando no lo es.

Madre: creo que estamos pensando mucho las cosas, te propongo que por el momento solo disfrutemos el momento.

Yo: tienes razón no sabemos si puede pasar, es mejor disfrutar lo mas que podamos y haber que pasa.

Así empezamos a tener relaciones sin protección, pero la idea de que podía embarazar a mi madre me excitaba muchísimo, aunque fuera poco probable.







Aunque para mi madre era algo que no le preocupaba, para mí se volvió una obsesión, incluso busque algunos “tips” para mejorar la probabilidad de embarazarla.

Un día regrese muy cansado del trabajo, así como llegué me di un baño y me quedé dormido en mi cama, pero como a las 2 a.m., me desperté para ir al baño, ya era muy tarde y todo estaba oscuro pero podía escuchar un leve ronquido de mi madre, así que me dirigí a su cuarto y entre en el sin encender las luces, solo un poco de luz de la calle iluminaba el cuarto, pude distinguir que mi madre tenía unas de esas tipo gafas de gel para reducir las bolsas de lo ojos y una pijama tipo vestido que le cubría arriba de las rodillas pero podía ver bien su calzón.




Al verla hay tan tranquila durmiendo me comenzó a excitar, así que me acosté lentamente detrás de ella, de cucharita, no despertó, comencé a acariciar sus piernas, no hubo reacción, saqué mi pene y comencé rozarlo sobre sus nalgas, tampoco uno reacción,

Metí mi mano por el escote, comencé a apretar su seno, apretaba su pezón fue hay cuando note su reacción, ella paro un poco las nalgas como buscando mi pene, puso su mano sobre la mía y seguía apretando su seno.

Comencé a besarla en el cuello y toda la espada, ella tomo mi pene con una mano y lo movió hacia su vagina, yo me movía para rozar mi pene con su vagina por encima del calzón, hasta que no aguante más, y me puse entre sus piernas le quite el calzón, se la fui metiendo lentamente, comenzaron los besos lentos pero apasionados de igual forma me movía lento, muy muy lento me enfoque las en los besos y las caricias, estaba muy excitado y no quería terminar rápido.

Cómo a los 5 minutos que estuvimos lento mi madre empezó a disfrutarlo más y más.

Madre: aaa mmmm aaaa más papito más ….

Entonces mi madre me pedía con sus palabras y su cuerpo que me moviera más rápido, levanté sus piernas con mis brazos y comencé a moverme más rápido.

Madre: aaaaa si aaaa que rico aaa mi vida así sique… aaaa ya casi … mmm

Aceleré aún más el ritmo solo se escuchaba el plaf.. plaf..plaf. generado por el choque de nuestros cuerpos.

Madre: aaaa aaaa mmmm si mi vida si mmmmm aaaa

Sentí un espasmo seguido de varios disparos de semen que terminaron en la vagina de mi madre, ambos llegamos al orgasmo en ese momento.

Descansamos unos minutos, pero como seguir excitado y me pene duro, le pedí a mi madre que se acostara boca abajo, coloque una almohada debajo de su vientre para que su culo quedará más paradito, y así más se la volví a meter está vez rápido desde el inicio.

Madre: aaa aaaa mmmm despacio me matas aaaa… mmmm que rico.. aaa aaa aaa

Seguí bombeando rápidamente otra vez se escuchaba el cacheteo de mi vientre chocando contra sus nalgas plaf .. plaf ..plaf una y otra vez solo unos minutos bastaron para que mi madre volviera a llegar al orgasmo y solo uno minuto después también termine nuevamente dentro de mi madre, quedamos recostados en esa posición unos segundos, para después quedarnos dormidos abrazados.

Recuerdo esta ocasión en específico porque un mes después mi madre tuvo un retraso en su periodo, paso una semana de la fecha en que debía de haber llegado, mi madre solía ser muy regular en su periodo y el enterarme me hizo sentir muy emocionado.

Madre: hijo, estoy algo preocupada.

Hijo: por qué madre.

Madre: lo que pasa es que mi periodo debió llegar hace una semana y yo soy muy regular.

Hijo: entonces significa que puedes estar embarazada.

Madre: bueno es una posibilidad.

Hijo: puedo comprar una prueba y salimos de la duda.

Madre: no creo que es mejor esperar unos días igual y me baja.

Al otro día era tanta mi emoción que no hice caso de los comentarios de mi madre y pase a comprar una prueba casera, llegando convencí a mi madre que se la hiciera, pero el resultado no me agrado ya que fue negativo, incluso me sentí algo desilusionado.






Pero no quise aceptar la realidad, sabía que las pruebas caseras no son tan confiables, así que una semana después convencí a mi madre que se hiciera una prueba de sangre, pero el resultado volvió a ser negativo, pasaron unos días y mi madre seguía sin tener su periodo, así que fuimos con un doctor, quien recomendó hacer un ultrasonido, resultó que mi madre tenía unos quistes en el útero.
Mi madre se asustó en ese momento, pero el médico le indico que no había ningún peligro y era algo normal, le recetó algo para provocar su periodo y al otro día pudo menstruar.






Fue solo una falsa alarma, pero me sentí triste, hay comprendí que realmente quería dejar a mi madre embarazada y no importaban los riesgos.

Así pasaron 5 meses en los que seguíamos teniendo relaciones sin protección, cada mes esperaba que no llegara su periodo, pero seguía llegando sin falta, incluso me empecé a cuestionar y se lo exprese a mi madre.






Hijo: oye ma, no crees que pueda haber algo mal en mi, he empezado a pensar que podría ser estéril.

Madre: hay hijo, no lo creo, ya te lo había dicho, es más probable que sea mi edad que por algo tuyo.

Hijo: no lo sé, ya llevamos varios meses sin usar protección y no pasa nada.

Madre: bueno, no sé cuál es tu obsesión, ¿en verdad quieres embarazarme?

Hijo: pues la verdad si me da mucha ilusión.

Madre: no sé que me da de verte así, sinceramente no me importo hacerlo sin protección por qué estaba segura que tarde o temprano llegaría.

Hijo: lo sé y no me importan las consecuencias estoy dispuesto a seguir intentándolo.

Madre: mira no dejes que eso cambie nuestra relación, si no pasa ni modo tendremos que seguir así y no tiene caso preocuparse por eso, preocúpate si pasa porque hay si tendríamos que ver cómo le hacemos.

Hijo: bueno tienes razón intentaré no preocuparme por eso.






Después de esa plática con mi madre, comencé a enfocarme más en mi madre en disfrutar solamente esos momentos en que estábamos juntos en la cama, he incluso las relaciones se volvieron más placenteras.

Un día estábamos abrazados después de tener una de nuestras muestras de afecto, mi madre me acariciaba clara señal se que quería un round más, es eso comenzó a acariciar mi pene el cual reaccionó y se puso duro, ella comenzó a apretarlo, bajo a mis testículos, los acariciaba, pero de repente los apretó, no fue muy fuerte, pero sentí un dolor muy intenso gritando al momento, los hombres saben el dolor de una patada en esa zona, pues sentí que había sido cómo 10 veces mas ese dolor. Me moleste mucho con mi madre, pero después me tranquilice, cómo consecuencia se fue todo mi deseo sexual.






El dolor seguía siendo muy fuerte incluso al otro día, así durante una semana, aunque el dolor fue disminuyendo, de repente seguía sintiendo unos piquetes con el mismo dolor.

Mi madre me recomendó que visitáramos al doctor, ya que podía ser algo más grave, pero por desidia no quise ir, aunque si me preocupaba, porque todos esos días todo mi deseo sexual desapareció incluso cuando mi madre se me acercaba de forma cariñoso me recordaba el dolor y no me daban ganas de nada. Cómo a las 3 semana el dolor desapareció completamente y poco a poco mi deseo regreso.

Después de esas 3 semanas me encontré con algo que no esperaba, pues no considere que durante esas semanas mi madre tampoco había tenido que reprimir su deseo algo que no estaba acostumbrada dese hace mucho tiempo.

Esa noche mi madre se preparó como nunca llevaba una lenceria nueva con medias negras, liguero, tanga y Bra en conjunto, se veía muy muy sexy, está ves ella tomo todo ala iniciativa, me sentó en la cama y directamente me comenzó a chupar el pene de arriba abajo, lamía mis testículos, subía hasta la punta lo hacía tan rico que sentía que terminaría en ese momento.






Entonces le pedí que se acostara encima de mi para hacer un 69, ella siguió chupando mi pene mientras yo lamía sus labios vaginales, su clítoris y metía un dedo dentro de su vagina, de repente dejo de lamer.

Madre: aaaa aaaa aaa no mi vida todavía no, quiero sentirte.

Estaba a punto de tener un orgasmo, pero se detuvo, se colocó encima de mi, hice su tanga a un lado y ella misma se metí mi pene en la vagina, comenzó a cabalgar cómo poseída.

Madre: aaaa aaaa aaa si mi vida me vengo si si aaaaaaaaa

Solo bastaron unas cuantas embestidas para que tuviera un orgasmo, pero yo todavía no, así que la abrace y seguí moviéndome.

Madre: aa a no mi vida para estoy muy sensible aaaaa siento mucho aaaa ya mi amor aaaa aaaa aaaa.
No pude decir nada todo mi ser estaba concentrado en seguir dándole lo más duro posible, sentía como sus jugos resbalaban sobre mis testículos de lo excitada que estaba. Unos minutos después sentí como una gran cantidad de semen se derramaba en el útero de mi madre era una cantidad que no había visto antes y como no si era la cantidad acumulada de 3 semanas sin ningún contacto físico.

Nos quedamos un minuto recobrando el aliento, pero mi pene no disminuía en su dureza, así que puse a mi madre en 4 y seguí dándole duro.

Madre: aaaaaa ya mi vida no más ….. aaaa me matas aaaa aaa me rindo tus ganas mmmmm ya sácala aaaa mmm no puedo más aaaaaa me voy a…… mmmmm

Hijo: ¿vas a qué mami?

Madre: creo que me voy a ….. mmmm orinar ….. mmmm

Hijo: hazlo, no te contengas

Madre: mmmm no aaaa aaaa es enserio aaaa aaaa para mmmmm

Entonces mi madre sintió que se orinaba, que en realidad fue la primera vez que tenía un orgasmo tan fuerte que tuvo un squirt, al mismo tiempo me volvía a venir en mi madre y creo que esa vez más que la primera, incluso seguía sintiendo los espasmos en mi pene, aunque ya no salía semen.

Fue una noche épica dónde dejamos salir todo el deseo reprimido. Lo que no nos imaginamos es que, al mes y medio, mi madre no llegaba el periodo de mi madre, está vez lo tome despreocupadamente supuse que era como la vez anterior, así que no nos preocupamos dejamos pasar otros 15 días, pero tampoco llegó entonces si supimos que había algo no estaba bien, compré una prueba de embarazo casera la más barata que encontré no quería hacerme ilusiones.

Mi madre estaba un poco nerviosa como que no quería hacer la prueba y de los nervios salió una prueba invalida, compre otra y está vez salió positivo, tampoco quisimos alarmarnos así que decidimos hacer una prueba de sangre la cual dio positivo de 3 a 4 semanas de embarazo, no sé si fue el apretón de huevos, tal vez si había algo mal en mi y con eso me lo acomodo o la abstinencia o todo junto que hizo que está vez si se consumara.

Al principio ambos no lo asimilamos, mi madre era la más preocupada y creo que en mi caso nunca me puse a pensar en los riesgos que podía tener ese embarazo tanto para mi madre como para el bebé, si podía tener alguna deformidad o algún retraso, y lo irresponsable que era de mi parte querer traer al mundo a un niño con un futuro incierto, solo me sentía feliz, por supuesto nervioso, emocionado y sobre todo seguro de afrontar lo que viniera. Pero mi madre estaba muy pensativa.

Hijo: gracias mami, estoy muy feliz, pero porque están tan callada.

Madre: perdón hijo no sé que pensar, no me lo esperaba, no es que no estuviera consiente de las consecuencias, pero lo veía como algo casi imposible que no me imaginaba que pudiera pasar.

Hijo: entonces ma, no lo quieres, quieres abortarlo, porque lo que decidas yo te apoyaré, pero quiero que sepas que yo si quiero que lo tengas, se que es una locura, pero te apoyaré en todo y me haré responsable, además estás segura que no puede ser de mi padre.

Madre: hay hijo con tu padre solo lo he hecho una vez en todo el mes, si es de alguien debe ser tuyo si cogemos como conejos.

Hijo: si es cierto, pero no puedes estar 100% segura.

Madre: pero si un 95% que es tuyo, de nuestro amor, y no piense mal en ningún momento he dicho que quiera abortar, nunca lo haría.

Hijo: entonces ambos estamos de acuerdo en seguir adelante.

Madre: si de eso no tengo duda solo que es algo difícil de asimilar, pero algo si tiene que quedar claro tendremos que decir que es de tu padre no puede ser de otra forma.

Hijo: si ma, lo sé estoy consiente de eso, sería muy hipócrita a estas alturas si me negara por hacerle algo así a mi padre, no tengo derecho a sentirme mal por el después de todo lo que hemos hecho.

Madre: entonces está decidió y dios quiera que esté niño nazca perfectamente sano.

Hijo: asi será.

Nos abrazamos y sellamos el pacto con un beso, el fin de semana llegó mi padre y mi madre le dio la noticia, el también reaccionó feliz y como todo hombre orgulloso de haber embarazado a su esposa, aunque era muy seguro que no fuera así.

A partir de hay muchas cosas cambiaron en nuestras vidas, primero mi padre dejo su trabajo y regreso a vivir a la casa, mi madre empezó los primeros meses con muchos malestares así que debía estar en absoluto reposo, también por mi parte por primera vez me llegó el cargo de conciencia por todos estos años que habíamos estado engañando a mi padre, cogiéndome a mi propia madre y dejándola embarazada, hasta donde había llegado, además de lo que había hecho me cuestionaba que pasa si ese niño nace con alguna deformidad cómo podría ser su vida o si en el peor de los casos no llegara a sobrevivir, el golpe tan duro para mi madre.

Aunque afortunadamente durante todos los ultrasonidos que le realizaron a mi madre no detectaron ningún problema con el bebé su desarrollo era normal y nos enteramos que era una niña.
Cómo la 6 mes mi madre ya tenía una panza bastante grande, en este tiempo no había ningún acercamiento entre mi madre y yo, en una parte por mi padre que estaba en casa y por otra, intentábamos resistirnos a nuestros deseos ya que habíamos acordado no seguir engañando a mi padre.

Una noche, mi madre ya se encontraba en el 8vo mes, ya estaba dormido cuando sentí húmero en mi pene, cómo estaba en el 5to sueño en primera instancia pensé que me estaba orinando, pero era mi madre estaba entre mis piernas dándome una mamada, estaba tan dormido que no podía tener una erección, pero mi madre siguió hasta que logro despertarme por completo y tener mi pene duro como una roca. Enseguida se montó en mi.

Hijo: pero ma, estás segura.

Madre: sshhhh hijo no digas nada, lo necesito no puedo aguantar.

Entonces metió mi pene en su vagina y comenzó a cabalgarme lento para no hacer ruido, mientras que no dejábamos de besarnos para no dejar salir ningún gemido, tocaba sus senos los apretaba, empezó a salir leche, chupe sus pezones como un niño y volvía probar la leche materna de mi madre, era algo dulce.

A los pocos minutos terminé dentro de ella, pero mi madre no estaba satisfecha aún, siguió moviéndose unos minutos más sin importarle el ruido de la cama cada vez más fuerte sentía como su panza caía sobre, sentía un poco de miedo al pensar que podíamos hacerle daño a la bebé, entonces mi madre terminó y sin hacer más ruido volvió a la cama con mi padre.

Gracias a eso la culpa que había sentido en esos meses desapareció y comprendí que era cierto que lo que habíamos hecho estaba mal por engañar a mi padre, pero ambos lo hicimos conscientemente, por voluntad propia y sobre todo porque existe un amor de madre e hijo, pero también como mujer y hombre.

Aunque creo esa noche mi madre se excedió, lo hizo muy fuerte para estar embarazada y a la noche siguiente empezó con los dolores de parto hasta que en la madrugada no soporto más y tuvimos que ir al hospital y después de unas 5 horas nos avisaron que había nacido una niña, aunque prematura tuvo calificación 9/10 porque se tardó un poco en respirar, pero sana, peso y midió lo mínimo para un bebé normal.

A 3 días las dieron de alta, la primera vez que cargue a esa niña pensé que era algo tan delicado que se me podría caer, pero a la vez me sentí fuerte y supe que haría todo lo posible para que esa niña estuviera bien.