Transcribo la historia de una amiga.
Tengo 39 años de los cuales 18 de casada con un hombre muy bueno e íntimamente igual, además de cariñoso detallista. El ideal para cualquier mujer.
Todo empezó un día en que al gimnasio ingresó un nuevo instructor más amable y atento que los anteriores, pues dialogaba más con migo y se interesaba por cómo me iva en el trabajo, en la casa con mi familia, tanto que fue despertando en mi admiración y lo veía como un buen amigo.
Pasaron largos días y la amistad se lleno de Confianza, picardía y algo de morbo. Asta que llegó el día que despertó mi curiosidad y algunas emociones, su figura corporal me inquietaba, piernas gruesas, su espalda ancha y la fortaleza de sus músculos ya me llenavan de imaginación y fantasías, cada que él me ayudaba levantar los instrumentos, mis nervios se alteraban al sentirlo tan cerca a mí.
La ocacion inesperada llegó, el día sábado el gim cierra al medio dia y él sería el encargado por éste de cerrar el local, me escribió temprano invitándome a entrenar, se me hizo extraño pues solo asisto asta el viernes, el fin de semana paso superocupada, insistió varias veces que fuera, me animaba mucho me decía que iva a ser un entrenó especial, y al fin me anime la bonita amistad me sedujo a buscar pretexto para asistir.
Llegué entre al local salude beso en mejilla, sólo havia una pareja entrenando después de media hora la pareja salió quedamos solos, me sentía estraña pero tranquila para mi el instructor era grata compañía. Estaba levantando pesas y sentí su cercanía sobre mi espalda al ofrecerce a ayudarme a levantar, esta vez sentía su cuerpo tan pegado al mío que los nervios se empezaron a alterar tenia ganas de salir corriendo, sentía traicionar mis principios no quería caer en infidelidad a mi familia. Pasaron unos 20 minutos y se dirigió a cerrar aquel local., me mandó a estirar y me puse aún más nerviosa porqué decidió abrazarme por la espalda, alar mis brazos hacia adelante, mientras sentía un bulto duro en mis glúteos, luego me acostó boca arriba levantando mis piernas lanzandolas suave a adelanté y nuevamente sentía aquel bulto duro en los glúteos, yo estaba confundida, después desidio darme un masaje final, pero fue el comienzo de un infierno emocional, masajeaba todo mi cuerpo, en la planta de mis pies me derretian estaba tan inotisada que pasó sus manos entre mis piernas y no me daba cuenta, sus labios ya mojaba mi boca, al tiempo sus dedos rosaba mi vagina el fuego subía estaba Completamente perdida me bajó la laycra con ella mis interiores,subió la blusa y lamio suave mis peso nes, bajo por mi ombligo su lengua tocó mi clitoris me desvanecía con fuertes movimientos pues me tocaba alguien diferente a mi marido, y ese conjunto de emociones hizo que llevará mi mano a su miembro grueso y cabeza grande que jamás avía sentido, le di unos cuantos besos que aquel hermoso hombre disfrutaba y me regalaba unos temblores, cuando estaba cerca a llegar, lo saque de mi boca que casi no cabía, me acomode boca arriba y se puso encima de mi e introdujo enorme Tronco en mi vagina dilatada y bastante mojada sentía lo rico que por dentro me escarba mi vientre saltaba cada que me lo metía y lo sacaba no aguante mucho asta que sentía que mi cuerpo se derrumbaba y un orgasmo fuerte largo y rico se fundia, seguidamente este hombre me quemaba por dentro con el semen que en mi se derretida. HUff sosegados ambos lo que paso no lo creiamos, un abrazo nos vestimos....
Tengo 39 años de los cuales 18 de casada con un hombre muy bueno e íntimamente igual, además de cariñoso detallista. El ideal para cualquier mujer.
Todo empezó un día en que al gimnasio ingresó un nuevo instructor más amable y atento que los anteriores, pues dialogaba más con migo y se interesaba por cómo me iva en el trabajo, en la casa con mi familia, tanto que fue despertando en mi admiración y lo veía como un buen amigo.
Pasaron largos días y la amistad se lleno de Confianza, picardía y algo de morbo. Asta que llegó el día que despertó mi curiosidad y algunas emociones, su figura corporal me inquietaba, piernas gruesas, su espalda ancha y la fortaleza de sus músculos ya me llenavan de imaginación y fantasías, cada que él me ayudaba levantar los instrumentos, mis nervios se alteraban al sentirlo tan cerca a mí.
La ocacion inesperada llegó, el día sábado el gim cierra al medio dia y él sería el encargado por éste de cerrar el local, me escribió temprano invitándome a entrenar, se me hizo extraño pues solo asisto asta el viernes, el fin de semana paso superocupada, insistió varias veces que fuera, me animaba mucho me decía que iva a ser un entrenó especial, y al fin me anime la bonita amistad me sedujo a buscar pretexto para asistir.
Llegué entre al local salude beso en mejilla, sólo havia una pareja entrenando después de media hora la pareja salió quedamos solos, me sentía estraña pero tranquila para mi el instructor era grata compañía. Estaba levantando pesas y sentí su cercanía sobre mi espalda al ofrecerce a ayudarme a levantar, esta vez sentía su cuerpo tan pegado al mío que los nervios se empezaron a alterar tenia ganas de salir corriendo, sentía traicionar mis principios no quería caer en infidelidad a mi familia. Pasaron unos 20 minutos y se dirigió a cerrar aquel local., me mandó a estirar y me puse aún más nerviosa porqué decidió abrazarme por la espalda, alar mis brazos hacia adelante, mientras sentía un bulto duro en mis glúteos, luego me acostó boca arriba levantando mis piernas lanzandolas suave a adelanté y nuevamente sentía aquel bulto duro en los glúteos, yo estaba confundida, después desidio darme un masaje final, pero fue el comienzo de un infierno emocional, masajeaba todo mi cuerpo, en la planta de mis pies me derretian estaba tan inotisada que pasó sus manos entre mis piernas y no me daba cuenta, sus labios ya mojaba mi boca, al tiempo sus dedos rosaba mi vagina el fuego subía estaba Completamente perdida me bajó la laycra con ella mis interiores,subió la blusa y lamio suave mis peso nes, bajo por mi ombligo su lengua tocó mi clitoris me desvanecía con fuertes movimientos pues me tocaba alguien diferente a mi marido, y ese conjunto de emociones hizo que llevará mi mano a su miembro grueso y cabeza grande que jamás avía sentido, le di unos cuantos besos que aquel hermoso hombre disfrutaba y me regalaba unos temblores, cuando estaba cerca a llegar, lo saque de mi boca que casi no cabía, me acomode boca arriba y se puso encima de mi e introdujo enorme Tronco en mi vagina dilatada y bastante mojada sentía lo rico que por dentro me escarba mi vientre saltaba cada que me lo metía y lo sacaba no aguante mucho asta que sentía que mi cuerpo se derrumbaba y un orgasmo fuerte largo y rico se fundia, seguidamente este hombre me quemaba por dentro con el semen que en mi se derretida. HUff sosegados ambos lo que paso no lo creiamos, un abrazo nos vestimos....
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