Gabriel estaba nervioso, no era de salir mucho y la chica más linda del grupo de estudio lo había invitado a una fiesta. Habían aprobado el curso de ingreso así que querían festejar, ella se había empezado a interesar en él pocos días antes, fue de la nada, algo curioso.
Llegó el sábado, llegaron al lugar, la música y el ruido de la gente se escuchaba ya 5 cuadras antes, Gabriel (o Gabi como le empezó a llamar ella, Tania) estaba bastante agitado, no le gustaba el ruido ni la gente, entró motivado por sus compañeros y sin ellos no se hubiera sentido tan en confianza. Tania lo llevó directo a la pista de baile, él era un tronco y ella se meneaba muy sensualmente. Con el correr de los minutos Gabi empezó a dejarse llevar, le empezaron a dar alcohol y a beber sin pausa, sus no se enfocaban, giraba la cabeza para todos lados y sus tiernos rulos rubios oscuros se meneaban. El corazón le palpitaba en los oídos y la música se convirtió en un sonido grave y confuso. Hasta que, de pronto, noto un rostro fijo en él, como a unos 15 metros, se movía poco y lo miraba detenidamente. Cuando Gabi pudo enfocar bien la vista, notó al joven alto, moreno y apuesto que lo observaba. Lo miraba con deseo, con hambre, como la mirada de un león que está por cazar, tenía una remera muy ajustada a su cuerpo que de por sí era macizo, una mandíbula masculina y el pelo rapado. Gabi comenzó a ponerse nervioso de nuevo, por alguna razón que desconocía, los hombres masculinos lo intimidaban, pero mucho, no podía soportar verlos y se le aceleraba el corazón, y este lo estaba mirando fijo a él. Poco después se dio cuenta, lo conocía! Ese muchacho era Marcos, su bully de la primaria!
Gabi se fue al bar, no pudo mantenerse enfocado, estaba muy pasado de alcohol y el recuerdo amargo lo desestabilizó. -estás bien?- preguntó Tania.
G. Sisi, necesitaba un poco de aire, no se de tomar mucho... no soy de salir mucho.
T. Claro claro, tomaste mucho muy rápido, pero me asusté porque pusiste una cara de susto que me preocupó.
G. Nah.. nada, no importa.
T. Qué?
Gabi miró a su compañera y se animó a sincerarse, le contó del bully en la pista de baile y de que lo acosaba en su infancia. Específicamente, algo que hacía Marcos era agarrarlo de las bolas fuerte y lo soltaba solo si conseguía silbar. Después de que se cambió de escuela no supo más nada de él, solo que su familia estaba muy bien posicionada.
Tania le dijo que "lo mandara a la mierda", que estaba ahí para divertirse y que no se dejara intimidar, eso fue hace mucho tiempo. Gabriel agarró confianza, Tania le compró más cerveza y volvieron a la pista, en donde cuidadosamente buscaba no cruzarse con su bully. Gabriel era de cuerpo pequeño, por lo que se emborrachó rápidamente. Poco después... La cinta se borró.
La mañana siguiente, Gabriel se despertó con una línea de luz dándole a la cara. Estaba con mucha resaca, se sentía agotado y con leve dolor de cabeza, aún era joven y, aunque no era tomador, podía resistirlo, luego se percato que no estaba acostado en una cama que conociera... ni un cuarto que conociera. Luego, notó que estaba casi desnudo, solo llevaba un boxer. "Sucedió?" Se preguntó, "tuve sexo con Tania anoche? Este es su cuarto?!?" Luego, oyó como un gruñido detrás suyo, allí se dio cuenta que alguien estaba abrazado a él haciéndole cucharita, pero esa voz... No era femenina. Poco a poco se fue dando vuelta, hasta darse con la sorpresa de que estaba acostado... con MARCOS!
Su bully de la infancia, también semidesnudo, aún dormido. Gabriel se empezó a levantar lentamente, empezó a buscar y ponerse la ropa tratando de hacer el mínimo ruido posible. Cuando quiso ir a la puerta se dio cuenta "en donde mierda estoy? Cómo salgo de acá?" Agarró su celular tratando de buscar respuestas, sus ojos empezaron a ponerse llorosos cuando abrió el chat de Tania: "perdón Gabi" decía el último mensaje luego de videos, uno de ellos de Tania chupando la verga de quien, en un momento, se mostró que era Marcos. Los otros eran de él y Marcos, besándose, franeleando, quitándose la ropa y abrazándose, no lo podía creer, no recordaba absolutamente nada de todo eso. -dormiste bien?- escuchó detrás suyo. Giró y vio a Marcos ya despierto, con el pecho descubierto pudo notar un tatuaje en su pecho, como también su torax, abdominales y brazos trabajados -yo dormí genial- continuó el bully, mientras se levantaba.
G. No te acerques!
M. Qué? Ahora no me querés? (Dijo burlándose)
G. Hijo de puta, sos un hijo de puta (llorando)
M. Por qué? Por mostrarte lo que sos?
G. Me violaste... vos me violaste!
M. No, no te viole...
G. Y QUE MIERDA ES ESTO? (mostrando su celular)
M. Escuchá, no te violé, nadie te violó, solo nos dimos... amor
G. De qué mierda hablás? Estás enfermo
M. No, nunca estuve más cuerdo, estuvo mal lo que hice, manipular así a tu amiga también... pero lo valió.
G. Violarme?
M. Que no te violé, tocate el culo, te estaría re doliendo. No nos sacamos los bóxers en toda la noche... aunque ganas no faltaron.
G. Qué?
M. Tratá de recordar.
Gabi empezó a hacer esfuerzo para recordar, se esforzaba pero todo era muy confuso.
M. No vayas de atrás para adelante, trata de recordar lo último.
Gabi no quería hacerle caso, pero por miedo, sabía que podía sacar a la luz algo que lo le iba a gustar.
M. Te hice esto porque sé lo que sos.. (Gabriel lo miró) sos puto, igual que yo. (Gabriel negó con la cabeza, Marcos empezó a acercarse) no te acordás? De cómo me besabas y manoseabas anoche?
G. Alejate
M. Ayer me querías pegado a vos.
De repente, la mano de Marcos fue directo a los genitales de Gabriel, pero esta vez, no se los apretó.
M. Si estoy mintiendo entonces decime... por qué esta dura?
Gabriel estaba en shock, el trauma del pasado había vuelto, de repente tenía a Marcos besándole el cuello mientras le manoseaba la pija.
M. Te estuve observando por mucho tiempo, sé cómo te ponés con otros hombres, reconocí la razón... Porque yo soy como vos.
Marcos miraba a Gabriel a los ojos, pero él mo volteaba la cabeza, estaba temblando, -mirame- dijo el bully, Gabi, que era todo un sumiso, giró la cabeza lentamente hacia hacia el rostro del morocho musculoso y sensual que una vez fue su acosador en la primaria, pasando antes la vista por el paquete bien marcado que tenía en su entrepierna. Los dos quedaron mirándose a pocos centímetros. Luego de 30 segundos de silencio Marcos habló:
M. Alguna vez te cogiste a una chica?
G. ....no (con vergüenza)
M. ...decime (Marcos pasó de manosearlo por fuera a meter lenta y suavemente su mano dentro del boxer de un humillado Gabi, agarrándole su pija erecta firmemente)... yo te gusto?
Gabi ya no temblaba pero aún tenía lágrimas en sus ojos, Marcos empezó a pajearlo lentamente, Gabi soltó un gemidito suave a la vez que le agarró la muñeca con intención de frenarlo, pero Marcos, que era más fuerte, lo retuvo con su otra mano.
M. Siempre perdías, cada vez que te agarraba los huevos nunca pudiste silbar, y ahora... también vas a perder (Empezó a pajearlo con más ritmo) porque si decís que no, lo voy a tener que comprobar, y con este ritmo, te voy a hacer acabar, y eso ya va a confirmar que sí, que te gusto (quiso robarle un beso pero terminó en la mejilla del sumiso). Lo mismo si no contestás.
Gabi pidió por favor pero solo consiguió que su bully se mordiera los labios y volviera a subir el ritmo de sus pajas
M. Fff eso siempre me gustó de vos, que seas tan sumiso, tierno y vulnerable. Cuando crecí tuve negación y me costó aceptarlo que soy puto, pero lo acepté... Ahora te toca a vos.
Gabi empezó a sentir cosquillas, sabía lo que se venía, se vio entre la espalda y la pared, sabía que Marcos tenía razón.
G. Sí!
Marcos frenó, estaba boquiabierto, Gabi lo miró fijo, ya no tenía lágrimas.
G. Me gustás.
Luego de unos segundos, Marcos se abalanzó sobre él besándolo con mucha intensidad, agarrándole firme desde el cuello y una nalga, apoyándole toda la verga en el abdomen. Gabi ahora lo entendía, entendía por qué lo intimidaban lo hombres 💕
Marcos frenó -vení- dijo mientras tomo a Gabi y lo abalanzó sobre la cama, tenía la respiración acelerada, estaba desatado. Seguía besándolo mientras le quitaba la remera, luego el pantalón, al sumiso le estaba empezando a encantar la situación, de ver a este machote dominándolo. Le puso una mordaza en la boca y luego le ató las muñecas a los barrotes de la cama. Gabi no se lo esperaba pero subió su emoción.
M. Lo que sí tengo que avisarte algo (Marcos puso sus manos en el elástico del boxer de Gabi) yo soy activo (y sacó la prenda del sumiso con fuerza y rapidez, dejando a Gabi ahora algo... angustiado 👀)
Continuará...
Llegó el sábado, llegaron al lugar, la música y el ruido de la gente se escuchaba ya 5 cuadras antes, Gabriel (o Gabi como le empezó a llamar ella, Tania) estaba bastante agitado, no le gustaba el ruido ni la gente, entró motivado por sus compañeros y sin ellos no se hubiera sentido tan en confianza. Tania lo llevó directo a la pista de baile, él era un tronco y ella se meneaba muy sensualmente. Con el correr de los minutos Gabi empezó a dejarse llevar, le empezaron a dar alcohol y a beber sin pausa, sus no se enfocaban, giraba la cabeza para todos lados y sus tiernos rulos rubios oscuros se meneaban. El corazón le palpitaba en los oídos y la música se convirtió en un sonido grave y confuso. Hasta que, de pronto, noto un rostro fijo en él, como a unos 15 metros, se movía poco y lo miraba detenidamente. Cuando Gabi pudo enfocar bien la vista, notó al joven alto, moreno y apuesto que lo observaba. Lo miraba con deseo, con hambre, como la mirada de un león que está por cazar, tenía una remera muy ajustada a su cuerpo que de por sí era macizo, una mandíbula masculina y el pelo rapado. Gabi comenzó a ponerse nervioso de nuevo, por alguna razón que desconocía, los hombres masculinos lo intimidaban, pero mucho, no podía soportar verlos y se le aceleraba el corazón, y este lo estaba mirando fijo a él. Poco después se dio cuenta, lo conocía! Ese muchacho era Marcos, su bully de la primaria!
Gabi se fue al bar, no pudo mantenerse enfocado, estaba muy pasado de alcohol y el recuerdo amargo lo desestabilizó. -estás bien?- preguntó Tania.
G. Sisi, necesitaba un poco de aire, no se de tomar mucho... no soy de salir mucho.
T. Claro claro, tomaste mucho muy rápido, pero me asusté porque pusiste una cara de susto que me preocupó.
G. Nah.. nada, no importa.
T. Qué?
Gabi miró a su compañera y se animó a sincerarse, le contó del bully en la pista de baile y de que lo acosaba en su infancia. Específicamente, algo que hacía Marcos era agarrarlo de las bolas fuerte y lo soltaba solo si conseguía silbar. Después de que se cambió de escuela no supo más nada de él, solo que su familia estaba muy bien posicionada.
Tania le dijo que "lo mandara a la mierda", que estaba ahí para divertirse y que no se dejara intimidar, eso fue hace mucho tiempo. Gabriel agarró confianza, Tania le compró más cerveza y volvieron a la pista, en donde cuidadosamente buscaba no cruzarse con su bully. Gabriel era de cuerpo pequeño, por lo que se emborrachó rápidamente. Poco después... La cinta se borró.
La mañana siguiente, Gabriel se despertó con una línea de luz dándole a la cara. Estaba con mucha resaca, se sentía agotado y con leve dolor de cabeza, aún era joven y, aunque no era tomador, podía resistirlo, luego se percato que no estaba acostado en una cama que conociera... ni un cuarto que conociera. Luego, notó que estaba casi desnudo, solo llevaba un boxer. "Sucedió?" Se preguntó, "tuve sexo con Tania anoche? Este es su cuarto?!?" Luego, oyó como un gruñido detrás suyo, allí se dio cuenta que alguien estaba abrazado a él haciéndole cucharita, pero esa voz... No era femenina. Poco a poco se fue dando vuelta, hasta darse con la sorpresa de que estaba acostado... con MARCOS!
Su bully de la infancia, también semidesnudo, aún dormido. Gabriel se empezó a levantar lentamente, empezó a buscar y ponerse la ropa tratando de hacer el mínimo ruido posible. Cuando quiso ir a la puerta se dio cuenta "en donde mierda estoy? Cómo salgo de acá?" Agarró su celular tratando de buscar respuestas, sus ojos empezaron a ponerse llorosos cuando abrió el chat de Tania: "perdón Gabi" decía el último mensaje luego de videos, uno de ellos de Tania chupando la verga de quien, en un momento, se mostró que era Marcos. Los otros eran de él y Marcos, besándose, franeleando, quitándose la ropa y abrazándose, no lo podía creer, no recordaba absolutamente nada de todo eso. -dormiste bien?- escuchó detrás suyo. Giró y vio a Marcos ya despierto, con el pecho descubierto pudo notar un tatuaje en su pecho, como también su torax, abdominales y brazos trabajados -yo dormí genial- continuó el bully, mientras se levantaba.
G. No te acerques!
M. Qué? Ahora no me querés? (Dijo burlándose)
G. Hijo de puta, sos un hijo de puta (llorando)
M. Por qué? Por mostrarte lo que sos?
G. Me violaste... vos me violaste!
M. No, no te viole...
G. Y QUE MIERDA ES ESTO? (mostrando su celular)
M. Escuchá, no te violé, nadie te violó, solo nos dimos... amor
G. De qué mierda hablás? Estás enfermo
M. No, nunca estuve más cuerdo, estuvo mal lo que hice, manipular así a tu amiga también... pero lo valió.
G. Violarme?
M. Que no te violé, tocate el culo, te estaría re doliendo. No nos sacamos los bóxers en toda la noche... aunque ganas no faltaron.
G. Qué?
M. Tratá de recordar.
Gabi empezó a hacer esfuerzo para recordar, se esforzaba pero todo era muy confuso.
M. No vayas de atrás para adelante, trata de recordar lo último.
Gabi no quería hacerle caso, pero por miedo, sabía que podía sacar a la luz algo que lo le iba a gustar.
M. Te hice esto porque sé lo que sos.. (Gabriel lo miró) sos puto, igual que yo. (Gabriel negó con la cabeza, Marcos empezó a acercarse) no te acordás? De cómo me besabas y manoseabas anoche?
G. Alejate
M. Ayer me querías pegado a vos.
De repente, la mano de Marcos fue directo a los genitales de Gabriel, pero esta vez, no se los apretó.
M. Si estoy mintiendo entonces decime... por qué esta dura?
Gabriel estaba en shock, el trauma del pasado había vuelto, de repente tenía a Marcos besándole el cuello mientras le manoseaba la pija.
M. Te estuve observando por mucho tiempo, sé cómo te ponés con otros hombres, reconocí la razón... Porque yo soy como vos.
Marcos miraba a Gabriel a los ojos, pero él mo volteaba la cabeza, estaba temblando, -mirame- dijo el bully, Gabi, que era todo un sumiso, giró la cabeza lentamente hacia hacia el rostro del morocho musculoso y sensual que una vez fue su acosador en la primaria, pasando antes la vista por el paquete bien marcado que tenía en su entrepierna. Los dos quedaron mirándose a pocos centímetros. Luego de 30 segundos de silencio Marcos habló:
M. Alguna vez te cogiste a una chica?
G. ....no (con vergüenza)
M. ...decime (Marcos pasó de manosearlo por fuera a meter lenta y suavemente su mano dentro del boxer de un humillado Gabi, agarrándole su pija erecta firmemente)... yo te gusto?
Gabi ya no temblaba pero aún tenía lágrimas en sus ojos, Marcos empezó a pajearlo lentamente, Gabi soltó un gemidito suave a la vez que le agarró la muñeca con intención de frenarlo, pero Marcos, que era más fuerte, lo retuvo con su otra mano.
M. Siempre perdías, cada vez que te agarraba los huevos nunca pudiste silbar, y ahora... también vas a perder (Empezó a pajearlo con más ritmo) porque si decís que no, lo voy a tener que comprobar, y con este ritmo, te voy a hacer acabar, y eso ya va a confirmar que sí, que te gusto (quiso robarle un beso pero terminó en la mejilla del sumiso). Lo mismo si no contestás.
Gabi pidió por favor pero solo consiguió que su bully se mordiera los labios y volviera a subir el ritmo de sus pajas
M. Fff eso siempre me gustó de vos, que seas tan sumiso, tierno y vulnerable. Cuando crecí tuve negación y me costó aceptarlo que soy puto, pero lo acepté... Ahora te toca a vos.
Gabi empezó a sentir cosquillas, sabía lo que se venía, se vio entre la espalda y la pared, sabía que Marcos tenía razón.
G. Sí!
Marcos frenó, estaba boquiabierto, Gabi lo miró fijo, ya no tenía lágrimas.
G. Me gustás.
Luego de unos segundos, Marcos se abalanzó sobre él besándolo con mucha intensidad, agarrándole firme desde el cuello y una nalga, apoyándole toda la verga en el abdomen. Gabi ahora lo entendía, entendía por qué lo intimidaban lo hombres 💕
Marcos frenó -vení- dijo mientras tomo a Gabi y lo abalanzó sobre la cama, tenía la respiración acelerada, estaba desatado. Seguía besándolo mientras le quitaba la remera, luego el pantalón, al sumiso le estaba empezando a encantar la situación, de ver a este machote dominándolo. Le puso una mordaza en la boca y luego le ató las muñecas a los barrotes de la cama. Gabi no se lo esperaba pero subió su emoción.
M. Lo que sí tengo que avisarte algo (Marcos puso sus manos en el elástico del boxer de Gabi) yo soy activo (y sacó la prenda del sumiso con fuerza y rapidez, dejando a Gabi ahora algo... angustiado 👀)
Continuará...
2 comentarios - El sumiso y el bully (parte 1 de 4)