Si no has leído la primera parte
Mi obligación con el joven negro
Al día siguiente tenía esta sensación de mis piernas cansadas, hace mucho que no me tocaba como en esa ocasión. incluso estuve de mejor humor y le prepare algo especial a mi marido, que no lo noto y se fue a trabajar como siempre.
Después de haber ido varios días y tener una mejor relación o comunicación con Marco por fin me decidí ir más alegrada, aproveche que tenía un cita para arreglar unos papeles y me vestí un poco mas arreglada.
Ese día a pesar de mis nervios en exceso estuve provocandole Marco, me agachaba, me tocaba discretamente yo estaba muy caliente. Él Me veía yo lo sabía pero no daba el siguiente paso y constantemente me salía del cuarto para intentar relajarme.
Más tarde prepare la comida en su casa con algunas cosas que había llevado y le lleve bistec y jugo para comer. Estuvimos platicando y poco a poco la conversación se torno en otros temas, no se como paso pero empezamos a hablar de que tuvo suerte de que no le afectara la columna y yo le pregunte que si no tenía problemas para tener una erección.
- Si tengo un pequeño malestar, debe ser por las piernas, siento como algo raro pero si puedo jaja
- Menos mal sería una pena que no puedieras
- Si verdad
- Pero qué sientes?
- Bueno es como unas ansias de querer moverlas piernas , en los muslos
- jaja bueno eso es normal cuando estas caliente jaja
- Si verdad eso creo jaja
- entonces ya te has masturbado ?
En ese momento me puse colorada y sentí un calor recorrer mi cuerpo n ose donde salio eso e intente justificarme pero él respondió de inmediato
- Si algo así la pase mal porque bueno deje sucio las sabanas y bueno como verá no he podido cambiarlas jaja
- No me digas ! , deja limpio eso tus padres podrían verlo
Nos detuvimos, ambos estábamos apenados, Me levante lento y él se alzó como pudo y me dio la sabana que estaba sucia , yo la tome con normalidad, lo más que pude y salí del cuarto.
En los lavaderos me detuve y pude ver semen que había arrojado gran parte de la sabana azul se pintaba blanquecina y estaba aún húmeda. Estaba tan mal que sólo me acerque a olerla y su olor penetro en mi nariz y como un elixir o poción me calentó y solo saque la lengua para lamerlo aunque era más la excitación que el sabor.
Cuando regrese al cuarto.
- Vaya si estaba algo sucia
- Perdón señora debe ser muy incomodo, estoy muy apenado
- No te preocupes, es lo más interesante que me ha pasado hoy. Cuando sea así me avisas -- vi su cara extraña
- Quiero decir cuando hayas ensuciado algo
- Si si entendí sería raro que le dijera que quiero ....
- Masturbarte? bueno podría quizá ... no se ... a lo mejor .. Creo es hora de irme
Nos miramos y ...
- Quiero masturbarme
Su voz se quebró y fue suave pero lo suficiente para escucharla y solo me acerque ya muy caliente y empece tocarlo sobre la sabana. Sentía su hombría crecer, prominente llenando mi mano cada vez y levantándose sobre la sábana hasta que él la quito y bajo un poco su pijama y su bóxer y pude ese trozo de carne desproporcionado a lo que yo conocía.
La tome, estaba temblando, sentí la calidez y dureza en mi mano y mi primera reacción fue apretarla para sentirla tan dura, ahí me percaté de que no podía rodearla con mi mano y que mis piernas se debilitaban y mi coño empezaba a mojarse , mi corazón bombeaba tan fuerte que no podía respirar todo esto mientras la sostenía.
imagen de referencia
Quizá pueda parecer exagerado para muchos o muchas pero yo nunca había tenido una experiencia así y en mi vida siempre fui la típica ama de casa bien portada y fiel a su marido y casa. Incluso con mis novios lo mas que llegue hacer fue oral pero nunca nada extraño, incluso con mi marido solo me trague su semen un par de veces y nada más además de que su miembro no se comparaba con este
.
La tome con mi otra mano y empece a devorarla en verdad era tanta mi ansiedad que no sabía ni que hacía exactamente. Solo la sostenía, la lamía, mis manos subían y bajaban mis dedos se paseaban por su glande y acto seguido mi boca intentaba rodearlo mientras lamía y mis manos seguía arriba y abajo. Escuchaba gemidos y como su cadera intentaba empujar hacia mi boca pero era en vano pues no me cabía toda. Lo miraba pero el estaba perdido retorciendose mientras yo seguía intentando acabarmela, no se cuanto paso pero fue algo considerable porque mi boca se había cansado y mi mandíbula ya empezaba a sentirse un poco acalambrada nunca había tenido esa sensación y mis brazos también empezaban a sentirse algo agotados y sentí su gran verga como empezó a palpitar y esa fue la señal para prepararme y con mis últimas fuerzas seguí masturbandolo y grandes borbotones de leche inundaron mi boca trague con placer algunos pero el resto escurrieron de mi boca.
Termine de recibir todo y lo saboree, todavía pase algunos minutos limpiando ese palo en reposo y sólo me levante me arregle me limpie y me fuí.
Toda la noche estuve pensando en lo que hacía y tenía un recargo de consciencia pero un gran placer, me sentía llena, me sentía mujer, me sentía puta.
-------
recuerda que quieres la continuación dejes comentario !
Mi obligación con el joven negro
Al día siguiente tenía esta sensación de mis piernas cansadas, hace mucho que no me tocaba como en esa ocasión. incluso estuve de mejor humor y le prepare algo especial a mi marido, que no lo noto y se fue a trabajar como siempre.
Después de haber ido varios días y tener una mejor relación o comunicación con Marco por fin me decidí ir más alegrada, aproveche que tenía un cita para arreglar unos papeles y me vestí un poco mas arreglada.
Ese día a pesar de mis nervios en exceso estuve provocandole Marco, me agachaba, me tocaba discretamente yo estaba muy caliente. Él Me veía yo lo sabía pero no daba el siguiente paso y constantemente me salía del cuarto para intentar relajarme.
Más tarde prepare la comida en su casa con algunas cosas que había llevado y le lleve bistec y jugo para comer. Estuvimos platicando y poco a poco la conversación se torno en otros temas, no se como paso pero empezamos a hablar de que tuvo suerte de que no le afectara la columna y yo le pregunte que si no tenía problemas para tener una erección.
- Si tengo un pequeño malestar, debe ser por las piernas, siento como algo raro pero si puedo jaja
- Menos mal sería una pena que no puedieras
- Si verdad
- Pero qué sientes?
- Bueno es como unas ansias de querer moverlas piernas , en los muslos
- jaja bueno eso es normal cuando estas caliente jaja
- Si verdad eso creo jaja
- entonces ya te has masturbado ?
En ese momento me puse colorada y sentí un calor recorrer mi cuerpo n ose donde salio eso e intente justificarme pero él respondió de inmediato
- Si algo así la pase mal porque bueno deje sucio las sabanas y bueno como verá no he podido cambiarlas jaja
- No me digas ! , deja limpio eso tus padres podrían verlo
Nos detuvimos, ambos estábamos apenados, Me levante lento y él se alzó como pudo y me dio la sabana que estaba sucia , yo la tome con normalidad, lo más que pude y salí del cuarto.
En los lavaderos me detuve y pude ver semen que había arrojado gran parte de la sabana azul se pintaba blanquecina y estaba aún húmeda. Estaba tan mal que sólo me acerque a olerla y su olor penetro en mi nariz y como un elixir o poción me calentó y solo saque la lengua para lamerlo aunque era más la excitación que el sabor.
Cuando regrese al cuarto.
- Vaya si estaba algo sucia
- Perdón señora debe ser muy incomodo, estoy muy apenado
- No te preocupes, es lo más interesante que me ha pasado hoy. Cuando sea así me avisas -- vi su cara extraña
- Quiero decir cuando hayas ensuciado algo
- Si si entendí sería raro que le dijera que quiero ....
- Masturbarte? bueno podría quizá ... no se ... a lo mejor .. Creo es hora de irme
Nos miramos y ...
- Quiero masturbarme
Su voz se quebró y fue suave pero lo suficiente para escucharla y solo me acerque ya muy caliente y empece tocarlo sobre la sabana. Sentía su hombría crecer, prominente llenando mi mano cada vez y levantándose sobre la sábana hasta que él la quito y bajo un poco su pijama y su bóxer y pude ese trozo de carne desproporcionado a lo que yo conocía.
La tome, estaba temblando, sentí la calidez y dureza en mi mano y mi primera reacción fue apretarla para sentirla tan dura, ahí me percaté de que no podía rodearla con mi mano y que mis piernas se debilitaban y mi coño empezaba a mojarse , mi corazón bombeaba tan fuerte que no podía respirar todo esto mientras la sostenía.
imagen de referencia
Quizá pueda parecer exagerado para muchos o muchas pero yo nunca había tenido una experiencia así y en mi vida siempre fui la típica ama de casa bien portada y fiel a su marido y casa. Incluso con mis novios lo mas que llegue hacer fue oral pero nunca nada extraño, incluso con mi marido solo me trague su semen un par de veces y nada más además de que su miembro no se comparaba con este
.
La tome con mi otra mano y empece a devorarla en verdad era tanta mi ansiedad que no sabía ni que hacía exactamente. Solo la sostenía, la lamía, mis manos subían y bajaban mis dedos se paseaban por su glande y acto seguido mi boca intentaba rodearlo mientras lamía y mis manos seguía arriba y abajo. Escuchaba gemidos y como su cadera intentaba empujar hacia mi boca pero era en vano pues no me cabía toda. Lo miraba pero el estaba perdido retorciendose mientras yo seguía intentando acabarmela, no se cuanto paso pero fue algo considerable porque mi boca se había cansado y mi mandíbula ya empezaba a sentirse un poco acalambrada nunca había tenido esa sensación y mis brazos también empezaban a sentirse algo agotados y sentí su gran verga como empezó a palpitar y esa fue la señal para prepararme y con mis últimas fuerzas seguí masturbandolo y grandes borbotones de leche inundaron mi boca trague con placer algunos pero el resto escurrieron de mi boca.
Termine de recibir todo y lo saboree, todavía pase algunos minutos limpiando ese palo en reposo y sólo me levante me arregle me limpie y me fuí.
Toda la noche estuve pensando en lo que hacía y tenía un recargo de consciencia pero un gran placer, me sentía llena, me sentía mujer, me sentía puta.
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