Charlabamos en la renoleta con la morocha, y los negros en la plaza no paraba de silvar, así que me dijo vamos papi, salió de arriba de mi pija que ya estaba al palo y calentita, bajamos y me dijo compremos unas virras y vamos a casa,, allá encaramos su casa era a una cuadra de la mía, cuando llegamos, recién caí, su mami era la Marcela, una amiga, pero me comentó que había fallecido, entramos, me dijo que vivía con una tía, la casa linda, pasamos a su habitación, se tiró en la cama y yo arriba, nos chapamos mal, metí mano a lo loco a ese orto y las tetas, le saque el topsito quedó en tetas, se sacó la pollerita y quedó con una tanguita diminuta que le dejaba escapar un pedacito de Papo para cada costado, ese orto divino se comía la tanguita por completo, la pija mía estaba de nuevo pidiendo que la libere, me desabroché el jean, y destape la virra, ella solita vino me dió un poco y bajo, me saco la pija aburra y la hija de puta se mordía los labios, se relamio y empezó a chuparme la pija como una maestra, me desarmo con esa chupada, yo seguía con la virra, y sentí la leche pidiendo pista, le pase la virra, la levanté y la tire para la cama, la puse en 4 culito en pompa y si papaaaaa por fin mi vida te lo parto, le apoye la cabeza y esa yegua levanto la cabeza. Me miró y me dijo papi poneme la pero no me lastimes, métela despasito bebe, juro que se lo hubiera detonado ahí mismo, pero quería hacerlo bien, y seguido, le peche la cabezota, se abría ese culito pero no alcanzaba, lo saqué y se lo metí en la concha. Estaba empapada, gimió como puta divinamente, se lo saqué apoye en el orto, y peche, entro la cabezota, era un montón. Y ahí arranco a gemir y chupar virra, cogeme papi me gritaba, romperme bien el orto hijo de puta dale, peche y entraba. Ella gritaba y gemía a gritos, del Papo le empezó a caer una cascada de fluido, era increíble como chorriaba esa concha, y cagaste negra le dije, dentro bebeee, se la peche y entro poco más de la mitad, y empecé a cogerla, que placer ese orto ajustado, sentía cada vena de mi pija abrirse paso yque placer cómo genia a gritos, la agarre firme de las caderas y se la esterre hasta el tope, pego un grito impresionante, y loro como bebepero pechaba la cola para que entre toda, seguía agarrándola fuerte de las caderas y empecé a pechar con furia, sentía el tope y los alaridos de esa nena no se comparaban con nada, a los gritos gimiendo, le caían lágrimas negras de los ojos por el maquillaje, quería llenar ese orto bien de leche, se levantó, pego su espalda a mi pecho y ahí la agarre firme de las tetas, un sueño, ni bien las toque empecé a llenar ese orto de leche, lo detones, sentía los chorrazos llenando la ella genia como loca y cayó destruida sobre la cama, me apretó cómo pudo la pija, y quedó casi desvanecida, no se la sacaba por orgullo, pero no daba más, la cama era un solo charco de sus acavada .se la saqué, me miró contenta y sonriendo, me dijo papi me recupero y te la limpio. Abrió las piernas con ese Papo hermoso al aire se encendió un churro y como un perrito me palmeo la cama y me tire de cabeza, ahí quedamos fumando tirados en el charco de su acabada y dormidos.
Me desperté al otro día cuando golpearon la puerta, solo en pelotas con la verga dura y la tía perrón divino mirándome con los ojos bien grandes, pero lo dejo para otra historia, comenten que le pareció, y lo que viene me la mandé mal
Me desperté al otro día cuando golpearon la puerta, solo en pelotas con la verga dura y la tía perrón divino mirándome con los ojos bien grandes, pero lo dejo para otra historia, comenten que le pareció, y lo que viene me la mandé mal
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