🔥
Capitulo 4
Jules comenzó a montarme muy lentamente de nuevo, casi como si estuviera tratando de ser discreta al respecto... como si eso fuera posible. Sin embargo, la lentitud de su movimiento me estaba volviendo loco. Los músculos de su coño estaban apretados alrededor de mi eje y la sensación mientras se movÃa lentamente hacia arriba y hacia abajo era irreal. También ofrecÃa una vista perfecta de nuestra cogida, sus labios envueltos con fuerza alrededor de mi eje rÃgido y su clÃtoris duro y sobresaliendo de su capucha. Nuestros ojos permanecieron cerrados, tratando de evaluar la reacción del otro cuando la tÃa Sam nos atrapó.
"Parece estar bien con esto", me susurró Jules.
"SÃ, lo hace. Dudo que se hubiera desnudado si no hubiera estado de acuerdo con eso".
"Cierto... Joder, tu polla se siente bien. Quiero soltarme por completo, pero... Sé lo que dijo y todo eso, pero... es una escena jodidamente rara, ¿sabes?"
"Te escucho, pero piénsalo, hermana, podrÃa haberse quedado escondida y solo mirar. En cambio, caminó hasta aquà y luego se desnudó. Creo que en realidad está totalmente de acuerdo con eso. Y apuesto a que ella también está excitada".
Esto tuvo el efecto de hacer que Jules se relajara un poco más y comenzó a aumentar su ritmo, montando toda la longitud de mi eje con un ritmo cada vez mayor. Miré alrededor de Jules y pude ver que la tÃa Sam se habÃa alejado de la cascada y estaba nadando en nuestra dirección, sus ojos claramente en nosotros.
Toda la escena me habÃa excitado seriamente. Mi hermana caliente estaba montando mi polla y nuestra tÃa nos miraba hacerlo, ahora a menos de 10 pies de distancia. Y me di cuenta de que Jules también se estaba poniendo nerviosa, sus caderas comenzaron a girar a medida que aumentaba el ritmo, y la preocupación que era visible en su rostro solo un minuto antes habÃa sido reemplazada por una máscara de pura lujuria carnal. Y más allá de eso, era bastante obvio que realmente se estaba metiendo en mi polla. Me habÃa dicho que yo era la polla más grande que habÃa visto en su vida, lo que la convertÃa en la polla más grande que jamás habÃa follado y que estaba aprovechando al máximo.
De repente, sentà que algo se frotaba contra mis bolas. Miré alrededor de Jules y la tÃa Sam estaba justo detrás de nosotros y se habÃa estirado y estaba acariciando mis bolas mientras Jules montaba mi polla. La espalda de Jules se arqueó de repente y giró la cabeza cuando sintió que la otra mano de la tÃa Sam le recorrÃa la espalda.
"Si quieres que los deje solos, lo haré, pero no pude evitarlo. Verte tomar la enorme polla de Tom con tu pequeña constitución es probablemente la cosa más erótica que he visto en mi vida. Solo querÃa sentir tu energÃa sexual".
"No nos importa. Disfruta de nosotros todo lo que quieras", dijo Jules con voz entrecortada, hablando por los dos... "Tú también estás jodidamente caliente".
Y al momento siguiente, se estaban besando. No podÃa creer lo que estaba viendo. La tÃa Sam habÃa llevado su mano izquierda hacia arriba y alrededor del cuello de Jules y tiró de ella en un beso apasionado, sus lenguas se arremolinaron juntas. Su mano derecha se movió hacia el seno izquierdo de Jules, lo masajeó suavemente y luego hizo rodar el pezón de Jules entre el pulgar y el Ãndice.
Mientras Jules continuaba montándome y continuaban besándose, la mano de la tÃa Sam se deslizó lentamente desde el pecho de Jules hasta su estómago y más abajo, sus dedos se abrieron en forma de V mientras se deslizaban sobre el coño de Jules y alrededor de cada lado de mi polla. Dios mÃo... la tÃa Sam nos estaba sintiendo follar, sintiendo la longitud de mi polla deslizarse dentro y fuera del coño empapado de Jules. Luego levantó la mano, apoyó el dedo medio en el clÃtoris expuesto de Jules y comenzó a frotarlo, provocando un fuerte gemido y haciendo que todo su cuerpo se sacudiera.
Con respiraciones jadeantes, Jules se apartó del beso y suplicó: "Oh, sÃ... joder, joder, sÃ... juega con mi maldito clÃtoris... oh, joder, oh, joder. Fóllame, Tom... fóllame, Tom. ... deja que la tÃa Sam te vea follarme".
Las respiraciones de Jules eran jadeos rápidos y me di cuenta de que estaba a punto de explotar por completo. De hecho, yo también, cada nervio de mi pene comenzó a dispararse cuando sentà la sensación orgásmica de mi semen saliendo de mis bolas.
Jules gemÃa en voz alta... no solo gemÃa, sino que gritaba, sus gritos de placer consumidos por el bosque que la rodeaba cuando sentà que los músculos de su coño apretaban mi polla. La tÃa Sam estaba frotando furiosamente su clÃtoris con dos dedos y con otro grito, Jules y yo nos corrimos simultáneamente, mi polla disparó fuertes chorros de semen profundamente en su coño mientras ella respondÃa a su vez, empapándonos a mà y a la mano de la tÃa Sam con chorros de lÃquido caliente. mientras arqueaba la espalda y echaba la cabeza hacia atrás.
Ninguna escena porno que haya visto o verÃa se acercarÃa a este momento. Esta fue la liberación pura de la lujuria y el deseo carnales, ofrecidos por nuestros cuerpos el uno al otro. Jules no pudo soportar más y casi se tira de mi polla y cae al suelo a mi lado, su cuerpo retorciéndose de placer total, su orgasmo aún furioso. Esto ahora dejó a la tÃa Sam flotando sobre mà y tan rápido como pude procesar lo que estaba sucediendo, se inclinó y tomó mi polla en su boca, chupándome y tirando lo último de mi semen en su boca, luego lamiendo hasta dejarme limpio.
Mi mente daba vueltas mientras miraba con asombro como mi tÃa lamÃa y chupaba mi polla. Si bien ya no palpitaba, mi pene claramente no tenÃa intención de perder su erección. Era como un boxeador profesional entre rounds, aún intenso y concentrado. Creo que la tÃa Sam también lo sintió. Su técnica cambió y se volvió más erótica, chupándome con pasión y un fervor creciente.
El cuerpo de Jules finalmente se habÃa calmado y nos miraba, viendo a la tÃa Sam chuparme. Nuestros ojos se encontraron y una fina lÃnea de sonrisa pasó por sus labios mientras dejaba que su mano se deslizara entre sus propias piernas. Bueno, eso dejó bastante claro que se estaba preparando para disfrutar plenamente del espectáculo que estaba a punto de suceder.
La tÃa Sam levantó la vista y, mirándome directamente a los ojos, susurró dos palabras: "¿Puedo?"
Todo lo que pude hacer fue asentir, pero esa fue toda la aprobación que necesitaba. Se arrodilló sobre mà y, sosteniendo mi polla hacia arriba, se deslizó completamente hacia abajo sobre mà con un solo movimiento suave, dejando escapar un gemido entrecortado mientras tocaba fondo en mi regazo. No perdió el tiempo, comenzó a cabalgarme con brazadas completas y seguras, sabiendo claramente lo que querÃa. Mientras lo hacÃa, tomó mis manos y las colocó sobre sus senos, dándome permiso y guÃa.
Jules ahora estaba acostada de lado, frente a nosotros, con las piernas abiertas y dos dedos enterrados dentro. Observó cómo la tÃa Sam se inclinaba hacia adelante y colocaba sus manos a cada lado de mis hombros y metÃa sus caderas en mÃ, follándome duro, con los ojos cerrados y la respiración agitada. Gemidos guturales escaparon de sus labios y su ritmo se aceleró de nuevo. Estaba teniendo un orgasmo. Mi tÃa estaba teniendo un orgasmo mientras montaba mi polla y mi hermana miraba mientras se follaba con los dedos su propio coño.
La tensión comenzó a abandonar el cuerpo de la tÃa Sam y sus movimientos se hicieron más lentos y luego se detuvieron. Mirando a Jules, dijo: "Creo que va a durar un tiempo. ¿Por qué no lo aprovechamos al máximo y hacemos un intercambio?". Julio asintió.
"Túmbate ahÃ, cariño". Saliendo de mi polla dura como una roca, la tÃa Sam me miró y me dijo: "Ve allà y fóllate a tu hermana. Te diré cuándo volver y fóllame de nuevo. Veamos cuánto aguantas".
Y eso es exactamente lo que hice. Jules ya tenÃa las rodillas levantadas y las piernas abiertas y todavÃa estaba empapada por su primer orgasmo. Colocándome sobre ella, mecà mis caderas hacia adelante y me deslicé dentro de ella completamente, inmediatamente comencé a follarla con un ritmo suave y constante mientras ella gemÃa y mecÃa sus propias caderas.
No tomó más de 3-4 minutos antes de que ella comenzara a gemir en voz alta y sentà el calor de su semen fluyendo alrededor de mi polla, causando un ruido blando claramente audible mientras continuaba follándola. Esta vez, en lugar de perder el control y apartarme, ella continuó montando la ola, su cuerpo continuaba convulsionándose mientras los orgasmos posteriores fluÃan sobre ella. Finalmente, me di cuenta de que estaba llegando al final y reduje la velocidad y luego me detuve, su cuerpo se detuvo debajo de mÃ, sus ojos vidriosos me miraron con una tranquila serenidad.
Mientras me follaba a Jules, la tÃa Sam se arrodilló a nuestro lado mientras jugaba con su coño desnudo, sus senos descansando llenos y pesados ​​contra su pecho. "Mi turno."
Con eso, se puso a cuatro patas a nuestro lado y me miró a los ojos, dirigiéndome sin decir una palabra más. Me deslicé fuera de Jules y me movà detrás de la tÃa Sam, los labios exteriores de su coño hinchados y sus labios vaginales abiertos y listos. Agarré mi polla, coloqué la punta y empujé, queriendo darle a la tÃa Sam exactamente lo que sabÃa que querÃa. Su gruñido de placer me dijo que estaba haciendo exactamente eso.
La follé, duro. Me concentré en mi propio placer y lujuria personal, sabiendo que al hacerlo, le estarÃa dando exactamente lo que ella querÃa. Golpeé contra ella, viendo su cuerpo convulsionarse cada vez que tocaba fondo contra su trasero.
"Fóllame Tom. Fóllame a tu tÃa de la manera que sabes que quiero. Quiero sentir tu semen disparado dentro de mÃ".
Eso fue todo. Escuchar a la tÃa Sam hablarme de esa manera, junto con todo lo demás, me envió al lÃmite. Ahora era mi turno de aullar cuando me estrellé contra su coño, mi polla estalló y llenó su coño con varios chorros calientes de semen.
Mientras lo hacÃa, sentà que el propio cuerpo de la tÃa Sam comenzaba a convulsionarse y de repente sentà el ahora familiar calor y humedad de su propio orgasmo rodando sobre y alrededor de mi polla y chorreando en el suelo debajo de ella. Supongo que venÃa de familia.
Finalmente saciados, todos nos acostamos en el suelo durante unos minutos, luego nos dirigimos a la piscina para limpiarnos y refrescarnos. Nadamos individualmente, luego finalmente nos juntamos en el medio.
"Tengo una confesión que hacer", dijo la tÃa Sam. "Los he estado escuchando a todos en su habitación durante las últimas noches. Al principio, no estaba del todo seguro, pero después de escuchar un poco, era obvio lo que estaba pasando. Como pueden ver ahora, estoy bastante De mente abierta en lo que respecta al sexo, por lo que no me molestó en absoluto. De hecho, me preguntaba si todos aprovecharÃan la oportunidad de un dÃa a solas para disfrutar el uno del otro, y tenÃa curiosidad por encontrarlos. comprometida' cuando pude llegar temprano a casa".
La tÃa Sam hizo una pausa por un momento y luego continuó. “Sinceramente, no esperaba involucrarme con ninguno de los dos, pero cuando los vi juntos junto a la piscina, fue lo más erótico que pude imaginar y mi cuerpo y deseo se apoderaron. Espero que esto no haga las cosas incómodas entre todos nosotros. Nunca me perdonarÃa si lastimara a alguno de ustedes".
"¿Lastimarnos?" Jules dijo: "Me siento como la chica más afortunada y afortunada del mundo. Está bien... seguro... Admito que supuestamente es un tabú hacer lo que Tom y yo hemos estado haciendo y lo que todos acabamos de hacer. Pero yo Estoy aprendiendo sobre el sexo con personas a las que amo y en las que confÃo... y es mucho más que eso. Lo que acaba de suceder es una experiencia que la mayorÃa de la gente nunca tendrá... quiero decir total t seriamente erótica. Tom y yo pudimos tenerlo en un ambiente seguro y amoroso. ¿Nos lastimaste? Nos has dado un regalo increÃble, espero pasar tanto tiempo aquà como pueda".
"Yo también", intervine.
"Gracias Jules. Gracias Tom. Una vez que estaba pensando con claridad, tenÃa miedo de haber hecho algo terriblemente malo, pero aparentemente, ustedes dos están cortados por la misma tijera que yo. Volvamos a la casa. Yo No estoy diciendo si algo volverá a suceder... al menos involucrándome a mÃ. Pero sepan que ustedes dos pueden explorar juntos todo lo que quieran mientras estén aquÃ. Solo sepan que allá afuera, en el mundo real y en casa, necesitan ser extremadamente cuidadoso y discreto. Para muchas personas, lo que hemos hecho es incorrecto e imperdonable. Mi consejo... y viene de la experiencia... es que una vez que te vas de aquÃ, vuelves a una relación tradicional, que debe ser más fácil con Jules regresando a la universidad. Pero sé que este siempre es un santuario donde puedes venir y disfrutar de la vida como quieras".
"¿Qué pasa si queremos que nos enseñes y nos muestres todo lo que es posible?", dijo Jules. "Quiero decir, tanto Tom como yo estamos claramente de acuerdo con todo y lo que acaba de suceder fue totalmente increÃble y al menos para mÃ, quiero experimentar más".
"SÃ, estoy de acuerdo con Jules", dijo Tom. "Esto fue increÃble y quiero aprender a ser el mejor amante que pueda... y divertirme al mismo tiempo", agregó Tom con una gran sonrisa.
"Está bien, ya veremos. Pero probablemente puedas adivinar que no seré tan difÃcil de convencer, especialmente dado lo increÃbles que son ambos cuerpos, especialmente lo que cuelga entre tus piernas", dijo mirando mi polla.
Dirigiéndose a Jules, continuó. "Pero para no hacer suposiciones falsas, ¿estabas de acuerdo con lo que pasó entre nosotros? He sido bisexual desde que tengo memoria, pero no deberÃa asumir que lo que pasó fue algo más que el calor de la momento."
Jules se volvió hacia mà y luego hacia la tÃa Sam. "Experimenté un poco en la escuela secundaria con una amiga, pero cuando ella se mudó, nunca tuve otra oportunidad. Sin embargo, lo disfruté y definitivamente lo disfruté hoy, y me gustarÃa probar más, si eso está bien".
Ahora fue el turno de la tÃa Sam de morderse el labio inferior. "Creo que es seguro decir que los tres podemos hacer lo que queramos, y me encantarÃa enseñarles a ambos cualquier cosa y todo lo que pueda. Y sÃ, la idea me excita muchÃsimo. De hecho, cualquier noche que quieras , eres bienvenido a disfrutar de mi cama king conmigo".
"Eso sucederá esta noche", dije con confianza.
Con eso, la tÃa Sam agarró su ropa y todos regresamos a la colina hacia la casa. Jules y la tÃa Sam estaban tomados de la mano y mientras caminaba detrás de ellos, comencé a imaginar todas las posibilidades que se avecinaban.
Continuará...🔥
Capitulo 4
Jules comenzó a montarme muy lentamente de nuevo, casi como si estuviera tratando de ser discreta al respecto... como si eso fuera posible. Sin embargo, la lentitud de su movimiento me estaba volviendo loco. Los músculos de su coño estaban apretados alrededor de mi eje y la sensación mientras se movÃa lentamente hacia arriba y hacia abajo era irreal. También ofrecÃa una vista perfecta de nuestra cogida, sus labios envueltos con fuerza alrededor de mi eje rÃgido y su clÃtoris duro y sobresaliendo de su capucha. Nuestros ojos permanecieron cerrados, tratando de evaluar la reacción del otro cuando la tÃa Sam nos atrapó.
"Parece estar bien con esto", me susurró Jules.
"SÃ, lo hace. Dudo que se hubiera desnudado si no hubiera estado de acuerdo con eso".
"Cierto... Joder, tu polla se siente bien. Quiero soltarme por completo, pero... Sé lo que dijo y todo eso, pero... es una escena jodidamente rara, ¿sabes?"
"Te escucho, pero piénsalo, hermana, podrÃa haberse quedado escondida y solo mirar. En cambio, caminó hasta aquà y luego se desnudó. Creo que en realidad está totalmente de acuerdo con eso. Y apuesto a que ella también está excitada".
Esto tuvo el efecto de hacer que Jules se relajara un poco más y comenzó a aumentar su ritmo, montando toda la longitud de mi eje con un ritmo cada vez mayor. Miré alrededor de Jules y pude ver que la tÃa Sam se habÃa alejado de la cascada y estaba nadando en nuestra dirección, sus ojos claramente en nosotros.
Toda la escena me habÃa excitado seriamente. Mi hermana caliente estaba montando mi polla y nuestra tÃa nos miraba hacerlo, ahora a menos de 10 pies de distancia. Y me di cuenta de que Jules también se estaba poniendo nerviosa, sus caderas comenzaron a girar a medida que aumentaba el ritmo, y la preocupación que era visible en su rostro solo un minuto antes habÃa sido reemplazada por una máscara de pura lujuria carnal. Y más allá de eso, era bastante obvio que realmente se estaba metiendo en mi polla. Me habÃa dicho que yo era la polla más grande que habÃa visto en su vida, lo que la convertÃa en la polla más grande que jamás habÃa follado y que estaba aprovechando al máximo.
De repente, sentà que algo se frotaba contra mis bolas. Miré alrededor de Jules y la tÃa Sam estaba justo detrás de nosotros y se habÃa estirado y estaba acariciando mis bolas mientras Jules montaba mi polla. La espalda de Jules se arqueó de repente y giró la cabeza cuando sintió que la otra mano de la tÃa Sam le recorrÃa la espalda.
"Si quieres que los deje solos, lo haré, pero no pude evitarlo. Verte tomar la enorme polla de Tom con tu pequeña constitución es probablemente la cosa más erótica que he visto en mi vida. Solo querÃa sentir tu energÃa sexual".
"No nos importa. Disfruta de nosotros todo lo que quieras", dijo Jules con voz entrecortada, hablando por los dos... "Tú también estás jodidamente caliente".
Y al momento siguiente, se estaban besando. No podÃa creer lo que estaba viendo. La tÃa Sam habÃa llevado su mano izquierda hacia arriba y alrededor del cuello de Jules y tiró de ella en un beso apasionado, sus lenguas se arremolinaron juntas. Su mano derecha se movió hacia el seno izquierdo de Jules, lo masajeó suavemente y luego hizo rodar el pezón de Jules entre el pulgar y el Ãndice.
Mientras Jules continuaba montándome y continuaban besándose, la mano de la tÃa Sam se deslizó lentamente desde el pecho de Jules hasta su estómago y más abajo, sus dedos se abrieron en forma de V mientras se deslizaban sobre el coño de Jules y alrededor de cada lado de mi polla. Dios mÃo... la tÃa Sam nos estaba sintiendo follar, sintiendo la longitud de mi polla deslizarse dentro y fuera del coño empapado de Jules. Luego levantó la mano, apoyó el dedo medio en el clÃtoris expuesto de Jules y comenzó a frotarlo, provocando un fuerte gemido y haciendo que todo su cuerpo se sacudiera.
Con respiraciones jadeantes, Jules se apartó del beso y suplicó: "Oh, sÃ... joder, joder, sÃ... juega con mi maldito clÃtoris... oh, joder, oh, joder. Fóllame, Tom... fóllame, Tom. ... deja que la tÃa Sam te vea follarme".
Las respiraciones de Jules eran jadeos rápidos y me di cuenta de que estaba a punto de explotar por completo. De hecho, yo también, cada nervio de mi pene comenzó a dispararse cuando sentà la sensación orgásmica de mi semen saliendo de mis bolas.
Jules gemÃa en voz alta... no solo gemÃa, sino que gritaba, sus gritos de placer consumidos por el bosque que la rodeaba cuando sentà que los músculos de su coño apretaban mi polla. La tÃa Sam estaba frotando furiosamente su clÃtoris con dos dedos y con otro grito, Jules y yo nos corrimos simultáneamente, mi polla disparó fuertes chorros de semen profundamente en su coño mientras ella respondÃa a su vez, empapándonos a mà y a la mano de la tÃa Sam con chorros de lÃquido caliente. mientras arqueaba la espalda y echaba la cabeza hacia atrás.
Ninguna escena porno que haya visto o verÃa se acercarÃa a este momento. Esta fue la liberación pura de la lujuria y el deseo carnales, ofrecidos por nuestros cuerpos el uno al otro. Jules no pudo soportar más y casi se tira de mi polla y cae al suelo a mi lado, su cuerpo retorciéndose de placer total, su orgasmo aún furioso. Esto ahora dejó a la tÃa Sam flotando sobre mà y tan rápido como pude procesar lo que estaba sucediendo, se inclinó y tomó mi polla en su boca, chupándome y tirando lo último de mi semen en su boca, luego lamiendo hasta dejarme limpio.
Mi mente daba vueltas mientras miraba con asombro como mi tÃa lamÃa y chupaba mi polla. Si bien ya no palpitaba, mi pene claramente no tenÃa intención de perder su erección. Era como un boxeador profesional entre rounds, aún intenso y concentrado. Creo que la tÃa Sam también lo sintió. Su técnica cambió y se volvió más erótica, chupándome con pasión y un fervor creciente.
El cuerpo de Jules finalmente se habÃa calmado y nos miraba, viendo a la tÃa Sam chuparme. Nuestros ojos se encontraron y una fina lÃnea de sonrisa pasó por sus labios mientras dejaba que su mano se deslizara entre sus propias piernas. Bueno, eso dejó bastante claro que se estaba preparando para disfrutar plenamente del espectáculo que estaba a punto de suceder.
La tÃa Sam levantó la vista y, mirándome directamente a los ojos, susurró dos palabras: "¿Puedo?"
Todo lo que pude hacer fue asentir, pero esa fue toda la aprobación que necesitaba. Se arrodilló sobre mà y, sosteniendo mi polla hacia arriba, se deslizó completamente hacia abajo sobre mà con un solo movimiento suave, dejando escapar un gemido entrecortado mientras tocaba fondo en mi regazo. No perdió el tiempo, comenzó a cabalgarme con brazadas completas y seguras, sabiendo claramente lo que querÃa. Mientras lo hacÃa, tomó mis manos y las colocó sobre sus senos, dándome permiso y guÃa.
Jules ahora estaba acostada de lado, frente a nosotros, con las piernas abiertas y dos dedos enterrados dentro. Observó cómo la tÃa Sam se inclinaba hacia adelante y colocaba sus manos a cada lado de mis hombros y metÃa sus caderas en mÃ, follándome duro, con los ojos cerrados y la respiración agitada. Gemidos guturales escaparon de sus labios y su ritmo se aceleró de nuevo. Estaba teniendo un orgasmo. Mi tÃa estaba teniendo un orgasmo mientras montaba mi polla y mi hermana miraba mientras se follaba con los dedos su propio coño.
La tensión comenzó a abandonar el cuerpo de la tÃa Sam y sus movimientos se hicieron más lentos y luego se detuvieron. Mirando a Jules, dijo: "Creo que va a durar un tiempo. ¿Por qué no lo aprovechamos al máximo y hacemos un intercambio?". Julio asintió.
"Túmbate ahÃ, cariño". Saliendo de mi polla dura como una roca, la tÃa Sam me miró y me dijo: "Ve allà y fóllate a tu hermana. Te diré cuándo volver y fóllame de nuevo. Veamos cuánto aguantas".
Y eso es exactamente lo que hice. Jules ya tenÃa las rodillas levantadas y las piernas abiertas y todavÃa estaba empapada por su primer orgasmo. Colocándome sobre ella, mecà mis caderas hacia adelante y me deslicé dentro de ella completamente, inmediatamente comencé a follarla con un ritmo suave y constante mientras ella gemÃa y mecÃa sus propias caderas.
No tomó más de 3-4 minutos antes de que ella comenzara a gemir en voz alta y sentà el calor de su semen fluyendo alrededor de mi polla, causando un ruido blando claramente audible mientras continuaba follándola. Esta vez, en lugar de perder el control y apartarme, ella continuó montando la ola, su cuerpo continuaba convulsionándose mientras los orgasmos posteriores fluÃan sobre ella. Finalmente, me di cuenta de que estaba llegando al final y reduje la velocidad y luego me detuve, su cuerpo se detuvo debajo de mÃ, sus ojos vidriosos me miraron con una tranquila serenidad.
Mientras me follaba a Jules, la tÃa Sam se arrodilló a nuestro lado mientras jugaba con su coño desnudo, sus senos descansando llenos y pesados ​​contra su pecho. "Mi turno."
Con eso, se puso a cuatro patas a nuestro lado y me miró a los ojos, dirigiéndome sin decir una palabra más. Me deslicé fuera de Jules y me movà detrás de la tÃa Sam, los labios exteriores de su coño hinchados y sus labios vaginales abiertos y listos. Agarré mi polla, coloqué la punta y empujé, queriendo darle a la tÃa Sam exactamente lo que sabÃa que querÃa. Su gruñido de placer me dijo que estaba haciendo exactamente eso.
La follé, duro. Me concentré en mi propio placer y lujuria personal, sabiendo que al hacerlo, le estarÃa dando exactamente lo que ella querÃa. Golpeé contra ella, viendo su cuerpo convulsionarse cada vez que tocaba fondo contra su trasero.
"Fóllame Tom. Fóllame a tu tÃa de la manera que sabes que quiero. Quiero sentir tu semen disparado dentro de mÃ".
Eso fue todo. Escuchar a la tÃa Sam hablarme de esa manera, junto con todo lo demás, me envió al lÃmite. Ahora era mi turno de aullar cuando me estrellé contra su coño, mi polla estalló y llenó su coño con varios chorros calientes de semen.
Mientras lo hacÃa, sentà que el propio cuerpo de la tÃa Sam comenzaba a convulsionarse y de repente sentà el ahora familiar calor y humedad de su propio orgasmo rodando sobre y alrededor de mi polla y chorreando en el suelo debajo de ella. Supongo que venÃa de familia.
Finalmente saciados, todos nos acostamos en el suelo durante unos minutos, luego nos dirigimos a la piscina para limpiarnos y refrescarnos. Nadamos individualmente, luego finalmente nos juntamos en el medio.
"Tengo una confesión que hacer", dijo la tÃa Sam. "Los he estado escuchando a todos en su habitación durante las últimas noches. Al principio, no estaba del todo seguro, pero después de escuchar un poco, era obvio lo que estaba pasando. Como pueden ver ahora, estoy bastante De mente abierta en lo que respecta al sexo, por lo que no me molestó en absoluto. De hecho, me preguntaba si todos aprovecharÃan la oportunidad de un dÃa a solas para disfrutar el uno del otro, y tenÃa curiosidad por encontrarlos. comprometida' cuando pude llegar temprano a casa".
La tÃa Sam hizo una pausa por un momento y luego continuó. “Sinceramente, no esperaba involucrarme con ninguno de los dos, pero cuando los vi juntos junto a la piscina, fue lo más erótico que pude imaginar y mi cuerpo y deseo se apoderaron. Espero que esto no haga las cosas incómodas entre todos nosotros. Nunca me perdonarÃa si lastimara a alguno de ustedes".
"¿Lastimarnos?" Jules dijo: "Me siento como la chica más afortunada y afortunada del mundo. Está bien... seguro... Admito que supuestamente es un tabú hacer lo que Tom y yo hemos estado haciendo y lo que todos acabamos de hacer. Pero yo Estoy aprendiendo sobre el sexo con personas a las que amo y en las que confÃo... y es mucho más que eso. Lo que acaba de suceder es una experiencia que la mayorÃa de la gente nunca tendrá... quiero decir total t seriamente erótica. Tom y yo pudimos tenerlo en un ambiente seguro y amoroso. ¿Nos lastimaste? Nos has dado un regalo increÃble, espero pasar tanto tiempo aquà como pueda".
"Yo también", intervine.
"Gracias Jules. Gracias Tom. Una vez que estaba pensando con claridad, tenÃa miedo de haber hecho algo terriblemente malo, pero aparentemente, ustedes dos están cortados por la misma tijera que yo. Volvamos a la casa. Yo No estoy diciendo si algo volverá a suceder... al menos involucrándome a mÃ. Pero sepan que ustedes dos pueden explorar juntos todo lo que quieran mientras estén aquÃ. Solo sepan que allá afuera, en el mundo real y en casa, necesitan ser extremadamente cuidadoso y discreto. Para muchas personas, lo que hemos hecho es incorrecto e imperdonable. Mi consejo... y viene de la experiencia... es que una vez que te vas de aquÃ, vuelves a una relación tradicional, que debe ser más fácil con Jules regresando a la universidad. Pero sé que este siempre es un santuario donde puedes venir y disfrutar de la vida como quieras".
"¿Qué pasa si queremos que nos enseñes y nos muestres todo lo que es posible?", dijo Jules. "Quiero decir, tanto Tom como yo estamos claramente de acuerdo con todo y lo que acaba de suceder fue totalmente increÃble y al menos para mÃ, quiero experimentar más".
"SÃ, estoy de acuerdo con Jules", dijo Tom. "Esto fue increÃble y quiero aprender a ser el mejor amante que pueda... y divertirme al mismo tiempo", agregó Tom con una gran sonrisa.
"Está bien, ya veremos. Pero probablemente puedas adivinar que no seré tan difÃcil de convencer, especialmente dado lo increÃbles que son ambos cuerpos, especialmente lo que cuelga entre tus piernas", dijo mirando mi polla.
Dirigiéndose a Jules, continuó. "Pero para no hacer suposiciones falsas, ¿estabas de acuerdo con lo que pasó entre nosotros? He sido bisexual desde que tengo memoria, pero no deberÃa asumir que lo que pasó fue algo más que el calor de la momento."
Jules se volvió hacia mà y luego hacia la tÃa Sam. "Experimenté un poco en la escuela secundaria con una amiga, pero cuando ella se mudó, nunca tuve otra oportunidad. Sin embargo, lo disfruté y definitivamente lo disfruté hoy, y me gustarÃa probar más, si eso está bien".
Ahora fue el turno de la tÃa Sam de morderse el labio inferior. "Creo que es seguro decir que los tres podemos hacer lo que queramos, y me encantarÃa enseñarles a ambos cualquier cosa y todo lo que pueda. Y sÃ, la idea me excita muchÃsimo. De hecho, cualquier noche que quieras , eres bienvenido a disfrutar de mi cama king conmigo".
"Eso sucederá esta noche", dije con confianza.
Con eso, la tÃa Sam agarró su ropa y todos regresamos a la colina hacia la casa. Jules y la tÃa Sam estaban tomados de la mano y mientras caminaba detrás de ellos, comencé a imaginar todas las posibilidades que se avecinaban.
Continuará...🔥
2 comentarios - Nuestro verano con la tia Sam #4