Fetiche con mujeres dormidas (La madre de mi ex)

Muy bien, continuemos con las historias.
Actualmente tengo 30 años, me junté a los 20 con quien fuera la mamá de mi hijo. Y quien fuera mi suegra, no estaba del todo mal, pues ella tuvo a su hija a los 20. O sea que aún rondaba los 40 años, y su cuerpo no estaba descuidado, pues de vez en cuando hacía un poco de ejercicio, y me llamó mucho la atención desde la primera vez que me quedé quedé dormir en su casa, pues me sorprendió que sin pena alguna se paseara por la casa con una bata que dejaba ver algo de sus piernas, y más fue creciendo mi morbo por ella cuando mi mujer me contaba cosas íntimas de su mamá, pues fue ella misma quien me dijo que su mamá usaba batas más sensules e incluso usaba baby-doll. Del papá de mi mujer no supe mucho, pues él las abandono por otra mujer cuando su hija estaba pequeña, y mi suegra no se había juntado otra vez, si tenía novios. Pero nada serio ni formal con nadie, pero si llego a tener otro hijo.
De vez en cuando solíamos ir a cada de mi suegra, a veces a dormir. Y ella siempre se la pasaba en la casa con una bata larga, que llegaba al suelo. Pero debajo no usaba prenda interior alguna, supongo yo que ella así era, ya esta a acostumbrada a vestir así en la casa, y conmigo se sentía con tal confianza paga hacerlo, en muchas ocasiones al entrar a tomar un baño, ella dejaba toda su ropa ahí mismo, lo cual yo aprovechaba para buscar su rop interior y masturbarme para terminar llenandolos de mi semen.
Mi mujer entre todas las cosas que me contaba de su mamá, llegó a decirme que gustaba tomarse fotos y grabar videos masturbandose, y se las enviaba a alguien, también que se depilada completamente la vagina, y que Le gustaba beber, que en varias ocasiones llegaba tomada a la casa, y eran justo los días que no íbamos a verla. Honestamente siempre quise una oportunidad de tomar su celular en un descuido. Pero tristemente perdió su celular antes de poder tenerlo en mis manos.
En este entonces yo trabajaba en un super, y cuándo era temporada de inventario tenía que quedarme velar, así que un día ya que habían cerrado la tienda y el último cliente se había ido, me dijeron que me regresara a mi casa, pues lo más pesado ya había pasado y no necesitaban más apoyo, pero al ser muy tarde no quería ir hasta donde vivíamos pues si estaba algo retirado, por fortuna mi suegra vivía a unos minutos de donde trabajaba, así que fui a su casa esperando encontrarla despierta, y no le avise a mi mujer que había salido ni le mande mensaje, solo fui a casa de mi suegra, al llegar estuve tocando la puerta sin respuesta alguna, así que me fui para el cuarto de mi suegra para ver si podía mirar por la ventana, y si, la vi acostada en su cama dormida, pero no se levantaba cuando golpeaba el cristal de su ventana, lo que se me hizo raro, ya que ella es de sueño ligero. Pensé en irme al ver que no se levantaba, cuando recordé que mi cuñado había dejado sus llaves en la casa, y yo las tome para regresarselas cuando lo viera.
Así que fui a la puerta principal, la abrí y entré a la casa, a pesar de haber visto a mi suegra muchas veces dormida, en esta ocasión me daba un gran morbo, pues al entrar no vi a mi cuñado por ningún lado de la casa quizás se había quedado en cada de sus tios, y mi suegra seguía dormida. Abrí la puerta de su cuarto y entré muy sigilosamente por si despertaba, ya que no quería asustarla, pero cuando al fin estuve frente a ella, le hablé en voz baja y le tocaba el hombro para moverla levemente. Fue ahí cuando me di cuenta que estaba totalmente ebria. Mi pene se puso rápidamente duro, y empecé manosearla poco a poco, recordé lo que me había dicho mi mujer sobre sus otras batas y su baby-doll, así que me puse a buscarlo entre su ropa, pero sin hacer tanto ruido, hasta que encontré algo.


Fui muy cuidadoso al ponerselo pues pensé que despertaría. Pero no lo hizo, seguía profundamente dormida.
Así que poco a poco fui acariciando su cuerpo, quería ir despacio para disfrutarlo mejor, ya que había fantaseado con ello durante mucho tiempo.












Se movía levemente pero no despertaba, y ya no podía aguantar más a clavarle mi pene en la vagina, de tantas cosas que me contaba mi mujer sobre su mamá, supe que era una mujer muy fogoso y golosa a la hora del sexo.
Así que después de acariciar si entrepierna y sus pechos le abrí las piernas y me acomode entre ellas, para poder cumplir una de mis fantasías.



Lentamente se la fui metiendo, quería disfrutar al máximo cada segundo de ver como mi pene era succionado por la vagina de la mamá de mi mujer. No quería ir tan rápido ya que con lo exitado que estaba podría venirme rápido y quería que eso durará más, pues la noche era larga.
Mientras se la metía y sacaba, aprovechaba a lamer su cuello y sus pechos, también pasba mi lengua en sus labios. El or a alcohol era muy notorio. Aún así seguía disfrutando la calides y humedad de su vagina.


Ella empezó a gemir, pero tampoco despertaba. Yo estaba empezando a sudar así me me levante para encender el ventilador, cuando regrese con ella, la encontré boca abajo. Mostrándome sus nalgas.


Le di un par de nalgadas, y volví a darle la vuelta , pues quería seguir viendo la cara de mi suegra mientras la hacía mía.



Para haber tenido dos hijos y demasiadas aventuras, aún estaba un poco apretada, le di la vuelta para tenerla de costado, y así poder seguir dándole, poco a poco fui acelerando mis embestidas y ella gemia con más fuerza e iba alzando su voz


Estaba a punto se venirme y esta vez ya no pude contenerme, termine sobre mi suegra. Ella seguía sin despertar, sus gemidos y su respiración fueron calmando poco a poco y empezó a roncar otra vez, así que le cambié de ropa y salí del cuarto para quedarme en una hamaca del patio, y así no pensara mal. Pero antes de acomodar todo, le tomé una última foto.


Ya le había escurrido un poco de mi semen entre sus labios. Quería seguir, pero de tantas noches en vela en el super mi cuerpo no aguanto más el cansancio. Así que en mi mente estaba planeando que haría la próxima vez que tuviera una oportunidad así con mi suegra... pero las cosas nunca salen como uno las planea, ya que al poco tiempo tuve una discusión con mi mujer y terminamos separandonos. Así que la idea de volver a abusar de mi suegra borracha, se desvaneció por completo.
Pero al final, no todo estuvo tan mal para mi, ya que regrese a casa de mis papás. Y fue ahí donde dio lugar otra gran historia con mi mamá 😎 pero esa historia será para después.
Si quieren saberla. Ya saben que hacer. Dejen puntos y seguiré publicando más.