Buenas a todos. Seguimos con la historia. Para los que no leyeron la primera parte, recomiendo hacerlo para que tenga todo un poco mas de sentido.
http://www.poringa.net/posts/relatos/4542642/La-Maestra-Primera-parte.html
Todo atisbo de timidez se había disipado, me agarro la pija con su pequeña manito con sus uñas perfectamente pintadas, la tenia de la base , la agitaba de un lugar a otro, como cuando te la sacudís después de mear, su agitada respiración me calentaba mucho, mirando la escena recuerdo que mi pija se veía bastante grandota en su pequeña manito, cabe aclarar que tengo un pito normal, bastante ancho, me han dicho en otras oportunidades.
Todos mis sentidos estaban esperando el momento en que se la meta en la boca, ella sabía eso, evidentemente su intención era hacerme esperar un poco mas. Me besó el abdomen por arriba de la pelvis, la pija le rozaba el cuello, su aliento caliente contra mi piel la erizaba, quería desesperadamente que me la chupe, sentía como toda la leche se acumulaba y hacía presión. A todo esto ella no dejaba de pajearme y besarme la panza, mientras el glande resbalaba en la piel de su cuello debido a la abundancia de presemen que estaba emanando, involuntariamente mi cuerpo se movía como cogiéndole la mano desde abajo, esa secuencia, pensándolo hoy creo que duro solo un par de minutos, pero para mi fueron como siglos. Hasta que por fin, deja de pajearme, baja un poco quedando su boquita a la altura deseada me mira mientras acerca su manito super mojada a su boca y de la manera mas sensual que jamás haya imaginado lame su manito, como probando si le agradaría el menú.
A esas alturas sentía que los huevos me iban a estallar. Lo vuelve a agarrar y pasa la lengua por todo el glande, la imagen es increíble, pasa la lengua lentamente por el glande, se aleja unos leves centímetros y un hilo de flujos queda colgando de su lengua haciendo algo así como un puente flotante de fluidos. Hasta que por fin se la mete completa a la boca, su lengua calentita, que hermoso placer, que lindo se sentía estar ahí dentro. En general, me ocurre que suelen rasparme un poco con los dientes al hacerme una mamada, no fue esta la ocasión. Mientras me la chupa me dice
-mmm que rica pija
- hermosa tu boquita
- me encanta sentir que me late en la boca
- ufff que putita resulto la seño
- quiero ser tu putita, quiero que me acabes en la boca
Esas palabras desataron una multitud de espasmos en m pija, no daba mas mientras ella me seguía dando la mejor chupada de pija de mi vida, los sonidos de su hábil boca en mi sensible pija eran insoportables, en el buen sentido. Estaba en una disyuntiva, aguantar un poco mas o soltarme, me puse a repasar mentalmente todas las formaciones de la selección argentina en partidos iniciales de mundiales desde que tengo uso de razón, venía bastante bien hasta que me dice.
- quiero la lechita, acabame en la boca
No logré aguantarme mas. Mi pija en ese momento explotó, un torrente de leche salió disparado sin escalas directo a su garganta, ella no soltaba mi pija y seguía exprimiéndola, seguía saliendo leche de mi pija inundando su cavidad bucal, la leche comenzó a rebalsar, caía por la comisura de sus labios impregnando sus manos en ningún momento se sacó la pija de la boca siguió manándola hasta que ya no tenia mas nada que eyacular y entonces siguió un rato mas.
Se levantó y besando abdomen, pecho, cuello, llegó hasta darme un beso en la boca, su boca tenía aún rastros de semen, nos besamos apasionadamente compartiendo saliva y leche, me encantó. A todo esto la pija no se me había bajado ni un poquito, no podía creerlo después de semejante orgasmo aún estaba dura como una piedra, estaba escéptico, había tomado, y acabado como nunca antes en mi vida y aún así mi pija durísima. Comenzó a frotar su conchita en mi pija, se movía de adelante hacia atrás, su concha caliente, mojadísima y resbalosa se frotaba sobre mi pija, comienza a masturbarse mientras lo hacía y yo aun recuperándome de la acabada me aferré a sus tetas, los pezones los tenía durísimos, se que soy reiterativo con esto, pero esas tetas son perfectas, en tamaño, pezones, areolas, color, suavidad. Mientras se frotaba sobre mi, acariciaba su clítoris y cuando tenía la oportunidad acariciaba mi glande, esa sensación es hermosa, la pija se frota por toda la concha y cuando llega al final del camino es levemente rozada por sus habilidosos dedos, para retroceder y comenzar nuevamente el camino, me sentía en las nubes. Sin ninguna advertencia agarró mi pija de la base y la puso en la entrada de su conchita, se movió lentamente hacia adelante dejando a mi deseoso miembro babeante e impaciente. En un solo movimiento se la metió toda, hasta el fondo lanzando un gemido que me erizó la piel. Estaba cogiendo con esa mujer que era imposible para mi, que no lo hubiera imaginado ni en mis sueños. Su cuevita se sentía muy caliente, muy lubricada, no quería salir nunca mas de ahí, anhelaba quedarme así para el resto de mi existencia. Tira su cuerpo para adelante, coloca su carita al costado de la mía, me agarra del cuello, me gira, me besa, su semblante era precioso y comienza a cabalgarme me gemía mientras me besaba y no paraba de cabalgar, los ruidos que se escuchaban en la habitación de aquel hotel es algo de lo que jamás voy a poder desprenderme.
Me cabalgaba mientras me besaba, mis manos en sus nalgas, la magreaba, la masajeaba, la apretaba, como intentando confirmar la firmeza de ese culo. Agarraba sus nalgas y las abría eso le gustaba, cada vez que lo hacía soltaba un gemido y su cabalgata era mas profunda, lentamente luego de acariciar su concha desde esa posición y con mis dedos embadurnados con nuestros fluido fui acariciando su ano, lentamente introducía el índice en ese precioso culito, cuando tuve dos falanges del índice dentro del culito comenzó a gritar, a gemir,
- si si si ahhhha ahhhhh me encantaaaaaaaa
- no doy mas hermosa
- cogeme el culito, meteme el dedito
-siiiii te gusta asi?
-siiiiii cogeme cogeme cogeme
-quien es mi putita?
-yo soy tu putita
Estaba cabalgándome como si de eso dependiera el futuro de la humanidad, nuestros cuerpos transpirados mi pija palpitando dentro de ella, su culo palpitando y cubriéndome el mismo dedo índice que utilizo ahora para narrar esta historia. Hasta que ella comenzó a acabar, me besaba, nuestras lenguas se entrelazaban como una danza, su concha se puso muy muy caliente y con su acabada me mojo toda la panza, toda la cama. Quedó un rato ahí arriba mientras no dejaba de decir que le encantaba que era hermoso, la pija no dejaba de latir dentro de ella. Se la sacó de de la concha y así como estaba comenzó a pasársela por el culo, sin dejar de pajearme.
-acabame ahí
-ufffff mmmmmm uffffff
-dame la lechita en la cola
Tomo mi pija con firmeza y la coloco la entrada, hizo un poquito de presión y lentamente la fue introduciendo, había entrado calculo que menos de la mitad de la cabeza y desde el tronco comenzó a pajearme, sucedió lo inevitable y varios chorros potentes de esperma se introdujeron dentro de su esfínter anal.
Terminamos los dos con las pulsaciones a mil, transpirados. Nos besamos como dos enamorados, como si hubiésemos estado juntos toda la vida, ella se recostó en mi pecho y nos quedamos dormidos un buen rato. Hasta que el estridente sonido del teléfono nos informa que el turno se terminó. Volvimos muy tranquilos y relajados, charlamos un rato mas y ya se hacia la hora de volver. En aquellos tiempos solo se podía circular hasta las 2 am.
La dejé en su casa y me marché a la mía. Ya en casa, no quería ducharme, no quería que se esfume su olor. Le mando un mensaje
Juanjo -Ya estoy en casa
Ro -Gracias por avisar que llegaste bien.
J-Lo pase muy bien, me encantó. Quiero que se repita
R- Yo también lo pase muy bien. Claro que quiero que se repita.
J- Me encantas, la próxima, venís a casa y te preparo algo rico
R- Vos también me gustas Juanjo. Dale, este finde te parece?
J- Dale, este finde. Es una cita
J- Ro, me gustó mucho de verdad y no me refiero solo al sexo
En el momento que mande el mensaje me arrepentí, nos habíamos visto solo una vez y ya estaba flasehando amor. Que pelotudo, pensé.
R- A mi me pasó igual, me encanta tu forma de ser. Al principio me tenía vergüenza, después me solté.
J- Besos Hermosa, hasta mañana
No quería ponerme meloso
R- Besos Juanjo hasta mañana.
Y así quedamos en vernos en otra oportunidad.
Bueno gente, espero que haya sido de su agrado. Las críticas son bienvenidas, muchas gracias por leerme y hasta la próxima.
http://www.poringa.net/posts/relatos/4542642/La-Maestra-Primera-parte.html
Todo atisbo de timidez se había disipado, me agarro la pija con su pequeña manito con sus uñas perfectamente pintadas, la tenia de la base , la agitaba de un lugar a otro, como cuando te la sacudís después de mear, su agitada respiración me calentaba mucho, mirando la escena recuerdo que mi pija se veía bastante grandota en su pequeña manito, cabe aclarar que tengo un pito normal, bastante ancho, me han dicho en otras oportunidades.
Todos mis sentidos estaban esperando el momento en que se la meta en la boca, ella sabía eso, evidentemente su intención era hacerme esperar un poco mas. Me besó el abdomen por arriba de la pelvis, la pija le rozaba el cuello, su aliento caliente contra mi piel la erizaba, quería desesperadamente que me la chupe, sentía como toda la leche se acumulaba y hacía presión. A todo esto ella no dejaba de pajearme y besarme la panza, mientras el glande resbalaba en la piel de su cuello debido a la abundancia de presemen que estaba emanando, involuntariamente mi cuerpo se movía como cogiéndole la mano desde abajo, esa secuencia, pensándolo hoy creo que duro solo un par de minutos, pero para mi fueron como siglos. Hasta que por fin, deja de pajearme, baja un poco quedando su boquita a la altura deseada me mira mientras acerca su manito super mojada a su boca y de la manera mas sensual que jamás haya imaginado lame su manito, como probando si le agradaría el menú.
A esas alturas sentía que los huevos me iban a estallar. Lo vuelve a agarrar y pasa la lengua por todo el glande, la imagen es increíble, pasa la lengua lentamente por el glande, se aleja unos leves centímetros y un hilo de flujos queda colgando de su lengua haciendo algo así como un puente flotante de fluidos. Hasta que por fin se la mete completa a la boca, su lengua calentita, que hermoso placer, que lindo se sentía estar ahí dentro. En general, me ocurre que suelen rasparme un poco con los dientes al hacerme una mamada, no fue esta la ocasión. Mientras me la chupa me dice
-mmm que rica pija
- hermosa tu boquita
- me encanta sentir que me late en la boca
- ufff que putita resulto la seño
- quiero ser tu putita, quiero que me acabes en la boca
Esas palabras desataron una multitud de espasmos en m pija, no daba mas mientras ella me seguía dando la mejor chupada de pija de mi vida, los sonidos de su hábil boca en mi sensible pija eran insoportables, en el buen sentido. Estaba en una disyuntiva, aguantar un poco mas o soltarme, me puse a repasar mentalmente todas las formaciones de la selección argentina en partidos iniciales de mundiales desde que tengo uso de razón, venía bastante bien hasta que me dice.
- quiero la lechita, acabame en la boca
No logré aguantarme mas. Mi pija en ese momento explotó, un torrente de leche salió disparado sin escalas directo a su garganta, ella no soltaba mi pija y seguía exprimiéndola, seguía saliendo leche de mi pija inundando su cavidad bucal, la leche comenzó a rebalsar, caía por la comisura de sus labios impregnando sus manos en ningún momento se sacó la pija de la boca siguió manándola hasta que ya no tenia mas nada que eyacular y entonces siguió un rato mas.
Se levantó y besando abdomen, pecho, cuello, llegó hasta darme un beso en la boca, su boca tenía aún rastros de semen, nos besamos apasionadamente compartiendo saliva y leche, me encantó. A todo esto la pija no se me había bajado ni un poquito, no podía creerlo después de semejante orgasmo aún estaba dura como una piedra, estaba escéptico, había tomado, y acabado como nunca antes en mi vida y aún así mi pija durísima. Comenzó a frotar su conchita en mi pija, se movía de adelante hacia atrás, su concha caliente, mojadísima y resbalosa se frotaba sobre mi pija, comienza a masturbarse mientras lo hacía y yo aun recuperándome de la acabada me aferré a sus tetas, los pezones los tenía durísimos, se que soy reiterativo con esto, pero esas tetas son perfectas, en tamaño, pezones, areolas, color, suavidad. Mientras se frotaba sobre mi, acariciaba su clítoris y cuando tenía la oportunidad acariciaba mi glande, esa sensación es hermosa, la pija se frota por toda la concha y cuando llega al final del camino es levemente rozada por sus habilidosos dedos, para retroceder y comenzar nuevamente el camino, me sentía en las nubes. Sin ninguna advertencia agarró mi pija de la base y la puso en la entrada de su conchita, se movió lentamente hacia adelante dejando a mi deseoso miembro babeante e impaciente. En un solo movimiento se la metió toda, hasta el fondo lanzando un gemido que me erizó la piel. Estaba cogiendo con esa mujer que era imposible para mi, que no lo hubiera imaginado ni en mis sueños. Su cuevita se sentía muy caliente, muy lubricada, no quería salir nunca mas de ahí, anhelaba quedarme así para el resto de mi existencia. Tira su cuerpo para adelante, coloca su carita al costado de la mía, me agarra del cuello, me gira, me besa, su semblante era precioso y comienza a cabalgarme me gemía mientras me besaba y no paraba de cabalgar, los ruidos que se escuchaban en la habitación de aquel hotel es algo de lo que jamás voy a poder desprenderme.
Me cabalgaba mientras me besaba, mis manos en sus nalgas, la magreaba, la masajeaba, la apretaba, como intentando confirmar la firmeza de ese culo. Agarraba sus nalgas y las abría eso le gustaba, cada vez que lo hacía soltaba un gemido y su cabalgata era mas profunda, lentamente luego de acariciar su concha desde esa posición y con mis dedos embadurnados con nuestros fluido fui acariciando su ano, lentamente introducía el índice en ese precioso culito, cuando tuve dos falanges del índice dentro del culito comenzó a gritar, a gemir,
- si si si ahhhha ahhhhh me encantaaaaaaaa
- no doy mas hermosa
- cogeme el culito, meteme el dedito
-siiiii te gusta asi?
-siiiiii cogeme cogeme cogeme
-quien es mi putita?
-yo soy tu putita
Estaba cabalgándome como si de eso dependiera el futuro de la humanidad, nuestros cuerpos transpirados mi pija palpitando dentro de ella, su culo palpitando y cubriéndome el mismo dedo índice que utilizo ahora para narrar esta historia. Hasta que ella comenzó a acabar, me besaba, nuestras lenguas se entrelazaban como una danza, su concha se puso muy muy caliente y con su acabada me mojo toda la panza, toda la cama. Quedó un rato ahí arriba mientras no dejaba de decir que le encantaba que era hermoso, la pija no dejaba de latir dentro de ella. Se la sacó de de la concha y así como estaba comenzó a pasársela por el culo, sin dejar de pajearme.
-acabame ahí
-ufffff mmmmmm uffffff
-dame la lechita en la cola
Tomo mi pija con firmeza y la coloco la entrada, hizo un poquito de presión y lentamente la fue introduciendo, había entrado calculo que menos de la mitad de la cabeza y desde el tronco comenzó a pajearme, sucedió lo inevitable y varios chorros potentes de esperma se introdujeron dentro de su esfínter anal.
Terminamos los dos con las pulsaciones a mil, transpirados. Nos besamos como dos enamorados, como si hubiésemos estado juntos toda la vida, ella se recostó en mi pecho y nos quedamos dormidos un buen rato. Hasta que el estridente sonido del teléfono nos informa que el turno se terminó. Volvimos muy tranquilos y relajados, charlamos un rato mas y ya se hacia la hora de volver. En aquellos tiempos solo se podía circular hasta las 2 am.
La dejé en su casa y me marché a la mía. Ya en casa, no quería ducharme, no quería que se esfume su olor. Le mando un mensaje
Juanjo -Ya estoy en casa
Ro -Gracias por avisar que llegaste bien.
J-Lo pase muy bien, me encantó. Quiero que se repita
R- Yo también lo pase muy bien. Claro que quiero que se repita.
J- Me encantas, la próxima, venís a casa y te preparo algo rico
R- Vos también me gustas Juanjo. Dale, este finde te parece?
J- Dale, este finde. Es una cita
J- Ro, me gustó mucho de verdad y no me refiero solo al sexo
En el momento que mande el mensaje me arrepentí, nos habíamos visto solo una vez y ya estaba flasehando amor. Que pelotudo, pensé.
R- A mi me pasó igual, me encanta tu forma de ser. Al principio me tenía vergüenza, después me solté.
J- Besos Hermosa, hasta mañana
No quería ponerme meloso
R- Besos Juanjo hasta mañana.
Y así quedamos en vernos en otra oportunidad.
Bueno gente, espero que haya sido de su agrado. Las críticas son bienvenidas, muchas gracias por leerme y hasta la próxima.
4 comentarios - La Maestra. Segunda parte