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La humillación de la familia de mi novia (III)

Este relato es la continuación de La humillación de la familia de mi novia (I) y (II), que se pueden leer acá: 
http://www.poringa.net/posts/relatos/4535150/La-humillacion-de-la-familia-de-mi-novia-I.html
http://www.poringa.net/posts/relatos/4535160/La-humillacion-de-la-familita-de-mi-novia-II.html


Capítulo III - Educando a Nati y a Jose


-Bueno, mañana a la mañana vuelvo. Tenemos que hablar de nuestra cuñadita...
-De verdad te querés coger a esa trola? -dijo con un dejo de celos-
-Nos la vamos a coger los dos, y tu sobrinita va a ser nuestra mucamita jaja.
-Jajaja. Sos hermoso, pendejo.



Nati, la hermana mayor de mi mujer, había cumplido hacía un mes los 42, pese a a haber tenido dos hijas de joven se mantenía muy bien. Ella y Jose (la menor de sus hijas) eran las figuritas que me faltaban para terminar de cumplir mi fantasía.


A la mañana siguiente pasé por la casa de Flavia antes de irme a la oficina. Le hice la cola para sacarme las ganas, y cuando terminé fui hasta el cajón de su ropa interior, le elegí la ropa interior más horrible que tenía, y le dije:
-Hoy nos vamos a divertir a la noche...
-Qué tenés en mente bonito?
-Te vas a poner esto, vas a llamar al pelotudo de Fran, lo vas a calentar y cuando te quiera cojer lo frenás en seco. Le pedís que se ponga en 4 y le vas a romper el culo con la cinturonga que te voy a mandar en un rato. Cuando terminás, le sacás una foto con la cola abierta y sonriendole a la cámara....
-Jaja sos un zarpado!!
-Callate y escuchá, trolita. Después de esa foto, lo echás. No quiero que te toque un pelo hoy, está claro? Ahora sos mía. Pero antes de echarlo, le robás el teléfono sin que se de cuenta. Cuando se va me avisás.

-Para qué?
-Qué carajo te importa! Obedecé o no te cojo más putita jaja.
-Sos un forro. Pero está bien, lo voy a hacer.

-Así me gusta. Ahora arrodillate y chupame la pija que me tengo que ir a laburar....




Me fui a la oficina, le compré la cinturonga a Fla y se la mandé a domicilio, y me dispuse a trabajar. Un par de horas más tarde me suena el celular y era un mensajito de ella con la foto del culo roto de mi cuñado.


-Así me gusta, putita obediente como debe ser! Tenés su teléfono?
-Sí! Ahora me vas a decir para qué lo querías?
-En un rato te veo y te cuento, Fla.



Un rato más tarde estaba entrando a su casa, la besé, le pedí el teléfono de Fran y fui directo al chat con Nati. Haciéndome pasar por él escribí:


"Nati, necesito que me ayudes"
"Obvio Fran! Qué pasó?"
"No te puedo contar por acá, nos podemos juntar en la quinta en un rato?"
"Dale, me preocupás! Puedo estar por ahí en dos horas"

"Ok, te veo ahí, no digas nada a nadie, porfa"


Le dije a Flavia que preparara una valija para unos días, que nos iríamos a la casa de fin de semana que la familia de mi novia tiene en Pilar. Ella, que ya se estaba haciendo una idea de por dónde venía la mano, preparó todo curiosa y cuando estuvo lista nos subimos al auto y salimos para allá.


Al llegar entramos y nos acomodamos en la habitación principal, la hice quedarse en ropita interior y mientras empezaba a acariciarla le pedí que me contara cómo le había ido con su ex marido.


Me dijo que se divirtió mucho cuando le vio la cara al sacar la cinturonga, que al principio dudó, pero que se terminó dejando, y que creía que hasta alguno de los últimos gemidos fueron de placer más que de dolor. Nos reímos fuerte, y le dije "ahora nos vamos a coger a Nati, y vos la vas a tener que educar. Hoy no me puedo quedar a dormir acá, por eso te vas a quedar vos a pasar la noche con ella".


Entre que terminamos de acomodar todo escuchamos el auto de mi cuñada entrando a la quinta, la esperé en el living y cuando entró me miró asombrada:


-Qué hacés vos acá Tincho! Y Fran?- me dijo mientras me saludaba con un beso en la mejilla.
-Le contaste a alguien que venías?
-No, Fran me pidió que no le diga nada a nadie.
-Fran no va a venir, el mensaje te lo mandé yo Nati.
-No entiendo...
-Ahora vas a entender- le respondí mientras la tomaba de la cintura...

-Pará, qué hacés boludo? Qué le pasó a Fran?
-Además de nacer boludo no le pasó nada, quedate tranquila! -dije mientras volvía a poner la mano en su cintura y la bajaba acariciándole el culo.
-No me toques pendejo, ya mismo le voy a contar a mi hermana que te zarpaste.


Cuando dijo eso la agarré de los pelos y le pegué dos puñetazos en el estómago que la dejaron sin aire. Cuando se agachó para recuperar el aire, la arrastré de los pelos hasta el cuarto donde estaba Fla. Al verla su cara de desconcierto fue mayor!


-Fla, qué pasa? qué está pasando?
-Shhh... callate y disfrutá, no lo hagas enojar a Tin que ya viste cómo se pone... Ahora te vamos a coger, sabés?
-Qué decís, boluda? Son unos enfermos!
-Alguna vez fuiste la putita de dos enfermos? Siempre hay una primera vez para todo... -le dijo Fla mientras le sacaba el abrigo.


Natalia se estaba reponiendo y quiso irse, cuando le di un cachetazo bien fuerte y le dije: 
-Vos no entendés. Ahora sos nuestra puta -Sólo eso bastó para que se largara a llorar a mares.
-Mostrale a Flavia lo que hay debajo de toda esa ropita cuñadita...
Se quedó quieta llorando, y le volví a pegar.


-Basta, pará, por favor!!


Por respuesta tuvo otro cachetazo, seguido por la pregunta: "Ahora vas a hacer caso?"


-Sí...
-Ahora empezamos a entendernos! Flavia, sacale la ropita a Nati bonita.


Fla le sacó la ropa, dejandola en tanga y corpiño. Ahí notamos que estaba en sus días. "Mejor..." pensé, para mis adentros.


Con Nati en ropa interior delante nuestro, me paré, y la besé. Ella no paraba de llorar. Me saqué la ropa y la puse de rodillas, obligándola a chuparme la pija. Mientras lo hacía, le hice un gesto a Flavia para que ella también se sacara la ropa y se uniera. Ella se desvistió y se acercó a besarme.


Cuando tuve bien parada la pija, agarré de los pelos a mi cuñada y la puse en cuatro en la cama. Le bajé la bombacha y la toallita y le dije:


-Hoy no tuviste suerte putita... de tantos días que tenías para indisponerte, justo hoy... y bueno, te voy a tener que coger ese culito hermoso que tenés -le dije mientras le acariciaba el ano con mi pija y el terror se apoderaba de ella.
-No, por favor, pará, no me hagas nada!!
-Tarde trola, a ver si gritás como Fla cuando se lo cogí la primera vez.. jaja -le dije mirando cómplice a Flavia mientras se la enterraba sin contemplación-.

-PARA!! SACALA MARTIN!! SACALA!!
-Te duele, trola? Gritá más fuerte, total estamos en el medio de la nada!! -y continué con mis violentas embestidas hasta acabarle en la cola.


Una vez que terminé, la dejé llorando en la cama, y le dije a Fla: "Ya conocés el procedimiento, no? jaja". Flavia entendió todo, y se la llevó de los pelos a la ducha, yo la seguí de atrás divertido, para ver cómo le abría la canilla de agua fría, mi cuñada se duchaba llorando, y cuando salía le negaba la toalla.


Una vez que la trajo nuevamente al dormitorio, le dije:
-Nati, ahora sos nuestra putita, sabés? Hoy dormís acá, así que dame tu celu que le vamos a avisar a tu marido...


Le mandé mensaje a su marido, diciendole que había tenido que ir a la quinta a apagar la alarma que no paraba de sonar, y que como era tarde y no quería manejar cansada mejor se quedaba a dormir ahí,q ue mañana iba. Me quedé con su teléfono, y la dejamos encerrada en el dormitorio.


Cogimos con Flavia, y le dije "bonita, me tengo que ir, mañana vengo a la mañana. Que no salga de ahí y que no coma ni tome nada en toda la noche, ok?" "Dale hermoso, mañana nos vemos",


Me llevé el teléfono de mis cuñada y volví a casa. Al otro día, al levantarme, avisé en la oficina que trabajaría desde casa, y me fui a la quinta....


Continuará...

7 comentarios - La humillación de la familia de mi novia (III)

forehead95 +2
Ufff!!! Cómo me calientan este tipo de relatos, me dejan se seco de tanto pajearme mientras los leo. Sigue con la historia, no puedo esperar para saber cómo sigue.
humber63
Muy bueno espero leer mas