Mi novio se había ido de cena de empresa y me quede solita en casa sin ningún plan, aburrida, me puse una de esas películas románticas que no suelo ver porque a mi novio le aburren, así que aproveche.
como hacía calor me quite los pantalones que llevaba y también las braguitas y me puse un short el cual solo los gastaba para estar por casa, pues no sabia en que estaba pensando cuando me los compre era tan ajustado que me daba verguenza, llevarlos en publico. Me quite la camiseta, el sujetador y me puse una camiseta de tirantes super largos que suelo ponerme con otra camiseta debajo para hacer pilates.
Después de ver la peli me puse bastante cachonda y me toque un poquito, me empece a calentar y mientras me tocaba me puse a ver porno en el portátil, me parece increíble como chicas tan pequeñas como yo se follaban sementales con pollas tan enormes por todos sus agujeros, en cierto modo me daba morbo sentirme en sus carnes.
Ya eran las tres de la mañana y por lo que intuía mi novio iba a apurar su salida con sus compañeros de trabajo, así que decidí acostarme hasta quedarme dormida, no se que hora seria pero escuche el ruido de la puerta y salí adormilada por el ruido. Mi novio estaba que no se aguantaba en pie y vino con un hombre que no conocía, el cual seria compañero del trabajo y debió ofrecerse a traerlo a casa, le eche una mano y entre los dos lo acostamos en la cama. Acto seguido el muy cabronazo se puso a roncar sin ni siquiera mediar palabra, el chico y yo nos echamos a reír, me dijo que de camino había vomitado un par de veces y seguramente ya no lo hiciese mas, yo le dije que me habían desvelado, Antuan se presento y me dijo que no era su intención molestarla, el caso es que ya no tenia sueño y me ofrecí a tomar algo antes de que se marcharse y charlar, a lo que me contesto no se si descarado o inocente…
- Si te apetece tomar algo conmigo, a lo que le seguí el hilo y le dije que tenia hambre aunque era mentira.
Salimos de la habitación, yo primero y el detrás, andando hacia la cocina me di cuenta a través de un espejo como me miraba de arriba a abajo.
Ya eran las cinco de la mañana y mi novio estaba totalmente pasado y era mas posible que se despertase medio inconsciente para volver a vomitar y volver a dormirse, que por el ruido de una banda de música sonando en la mismísima habitación, a Antuan se le notaba también un poco pedo y era muy gracioso, me hacia gracia el tono en el que me hablaba con lo grande que se veía y bueno... que era mas guapo , mas alto y se notaba que hacía bastante deporte. Mientras hablábamos en la cocina yo no paraba de moverme, me gustaba ver como me seguía con la vista, resultaba super morboso, fui a la nevera a buscar en el congelador pan, sabiendo que si habría la panera tenia mas de media barra que me sobro de la cena, el caso es que quería agacharme para resaltar mis nalgas, estaba juguetona y quería ver cuanto le ponía. Al volverme a poner de pie se me quedo atrapada la tela entre mis nalgas, me sentía muy ajustada y fui tan golfa que ni me lo volví a acomodar.
Ya ni me miraba a la cara mientras le habla, era como un toro preparado para embestirme y eso me puso tan cachonda que mi pezones se endurecieron haciendo acto de presencia a través de la camiseta, entonces nos miramos a los ojos y sin apartar la mirada me sentí su presa, en ese justo momento me di cuenta de que esto había sido un error y consciente de que ya no había escapatoria, desinhibido por el alcohol y lo cachondo que lo había puesto, se abalanzo sobre mi envalentonado por mi descaro. Me queje de que no estaba bien, mi novio estaba aquí y que podía pillarnos, esa ultima excusa me delato hasta a mí misma haciéndome consciente de que deseaba, que siguiese, ya estaba cachonda y todo este pitote que provoco el bobo de mi novio lo iba a pagar caro.
Antuan Empezó a besarme el cuello mientras con sus manos me desgarro el short y en menos de un minuto me dejo desnuda. Ya no había tiempo que perder y le metí la mano en el bóxer y la sorpresa fue mayúscula, mi mano no estaba acostumbrada a algo así y empecé a pajearlo con ganas, mientras nos besábamos. El me masajeaba las nalgas con sus grandes manos, me llevo para el salón que estaba al lado del dormitorio desde donde se podía escuchar con claridad como roncaba el ingenuo de mi novio, no recuerdo jamas una sensación tan grande de excitación y miedo.
Me puso a 4 en el sofá y siguió manoseando y lamiéndome el culo, me cogio de las caderas y estiro de las nalgas hacia afuera con fuerza, dejándome bien abierta todo coñito y mi culo. Empezó a chuparme toda, lo hacia tan rudo y excitante que se me hizo imposible negarme, Era difícil no gemir estando la puerta del dormitorio entre abierta y escuchando a mi novio, al rato me arrodilló para que le chupara la pija, me acomodo el pelo hacia atrás y me mantenía el pelo cogido. Tenia una pija enorme y me encantaba chuparsela, tenia un glande rosado como un fresón y gozaba como llenaba mi boca y me imaginaba lo prieta que se iba a mover dentro de mí. Con el vaivén intentaba meterla un poco mas adentro, hasta el punto de que llegaba ya a mi garganta, lo miraba ya con los ojos vidriosos después de unas cuantas arcadas y cuando quise darme cuenta entre un empujón sobre mi cabeza y otro de su cadera hacia mi, me la trague hasta sobrepasar la garganta, el muy cerdo dejo así unos segundo asfixiándome, sentí como este cabrón me había desflorado la garganta. Lo raro es que lejos de ofenderme de tal abuso me había puesto mas cachonda su rudeza. Lo empuje y me puse de pie, me limpie las lagrimas y el exceso de saliva que emanaba de mi boca, lo senté en el sillón y seguí chupándosela, ahora ya bajo mi control, fui forzando a mi ritmo hasta volver a conseguir tragármela otra vez, me encantaba hacérselo, sentir como me llegaba tan adentro.
Al poco tiempo me subí encima suyo y me agache sobre su pija chorreosa de mi saliva y poco a poco con dolor y paciencia conseguí sentirla toda dentro mía y sentir como me llenaba, empecé a cabalgar, quería gemir en alto para liberar la excitación exacerbada que me producía y que me imponía tremendo calibre y aunque seguramente mi novio ni se enteraría hice el esfuerzo por contener mis alaridos, entonces él me agarro de mis caderas sintiendo su dominio y apretando con fuerza me hacia cabalgar más y mas duro, el ruido de nuestras caderas golpearse era espectacular, cuando sentía que bajaba el ritmo me avisaba dándome fuertes palmadas en mi culo como si fuese una yegua ya era imposible contenerme y comencé a gemir.
Después de tenerme así durante un buen rato, mis piernas ya me flaqueaban y sin sacarme la polla de dentro se levantó conmigo encima y ensartada jalándome de las caderas comenzó a follarme en el aire, era increíble como me lo hacia, era demasiado para mi, pero no podía hacer nada, parecía una muñeca hinchable entre sus brazos, luego me echo a un lado del sofá me puso en 4 mirando hacia la habitación, se acerco para abrir la puerta del todo y que pudiese ver como mi novio dormía, vino hacia mi, agacho su cabeza entre mis nalgas y comenzó chuparme el anillo del culo hasta enterrar su lengua, un escalofríos recorría mi cuerpo, no podía moverme, sabia lo que quería hacer, la adrenalina me tenia tope. No sé porque pero no podía negarme, todo era tan vicioso e inmoral que me sentía desbordada, me iba a desfloraba el culo un desconocido delante de mi novio durmiendo. Me había convertido en la puta de Antuan y así fue como arrimó la cabeza de su enorme pija y me empujaba muy despacio, mientras me masaje el clítoris, recuerdo lo mucho que me costo hasta que sentí que su glande ya estaba dentro mía y me dijo al oido, de aquí no vamos a movernos hasta que me corra dentro de tu coño y de tu culo. voy a dejarte el culo bien abierto para tu novio, lo que me dijo me excito tanto que me cogi de las nalgas para facilitarle la profanación y un placer envenenado de lujuria e intenso dolor me invadió hasta conseguir enterrarme toda su verga, en mi vida se había abierto tanto mi ano sentía como si se fuese a desgarrar y me preocupe porque no se volviese a cerrar del todo otra vez, pero despacio, despacio, fue sacando y metiendo hasta que sintió como mi culo se acomodaba a su polla y quedaba abierto y empezó a darme mas y mas fuerte. Ya me daba todo igual, me encantaba sentirme así. Comencé a gemir adolorida, estaba desbordada, me daba igual todo, lo único que quería es que no parase ese infernal placer, me encantaba como me empotra, sentía como volcaba toda su fuerza sobre mí. Era un placer desmedido la manera en que me rellenaba mi apretado culo en cada embestida, sentía como al sacarla me dejaba el culto totalmente abierto para volver a enterrármela hasta el fondo y arder de placer.
Bañados por nuestros sudor y cuando ya no podía mas le suplique que me diese un respiro, pues me estaba matando a pollazos, pero a cada negativa que le suplicaba se sobrexcitaba mas al verme como me sometía y me cogió con una mano del pelo tirando hacia el y con la otra forzaba mi espalda para arquearme mas y seguir empotrando su ariete, cuando paro en seco, me giro tumbándome boca arriba en el sofá boca arriba frente a el, me cogió de los tobillos y de mis rodillas contra mis mis hombros, literalmente me había plegado, sentía como en esa posición tenia mi coño y el culo abierto a su disposición, me la metía hasta el fondo hundiendome contra el sofá, quería atravesarme, mientras me daba cada vez mas fuerte, nos miramos a los ojos fijamente y comenzó embestirme como un salvaje aplastándome contra el sofá, me hizo venir una vez mas, tuve un órgano tan fuerte que casi pierdo el conocimiento, acto seguido el vino dentro mío, sintiendo como borbotones de esperma caliente me inundaban por dentro.
Nos comimos la boca durante un buen rato, luego me levante abrir las ventanas para airear el hedor a sexo que habíamos dejado y me sentí tan adolorida como satisfecha mientras notaba cómo chorreaba su semen entre mis piernas.
me fui a lavarme y él se puso la ropa. Lo acompañé hasta la puerta y despedirnos y me dijo…
- déjale a tu novio hacerte el culo, o de verdad que voy rompértelo la próxima vez que te lo coja.
Sentí un escalofrío tan grande, que casi me vuelvo a correr, este cabrón había dado por sentado que íbamos a vernos y que yo lo estaba deseando.
Así fue como después de cerrar la puerta, me volví a desnudar y le quite la ropa a mi novio, se la chupe mientras dormía hasta que su inconsciente se la empalmo y me la metí dentro de mi abierto culo, para cuando se despertase el muy tonto pensara que me había follado el culo.
Acostada con las polla de mi novio dentro de mi culo no tarde en dormirme...
como hacía calor me quite los pantalones que llevaba y también las braguitas y me puse un short el cual solo los gastaba para estar por casa, pues no sabia en que estaba pensando cuando me los compre era tan ajustado que me daba verguenza, llevarlos en publico. Me quite la camiseta, el sujetador y me puse una camiseta de tirantes super largos que suelo ponerme con otra camiseta debajo para hacer pilates.
Después de ver la peli me puse bastante cachonda y me toque un poquito, me empece a calentar y mientras me tocaba me puse a ver porno en el portátil, me parece increíble como chicas tan pequeñas como yo se follaban sementales con pollas tan enormes por todos sus agujeros, en cierto modo me daba morbo sentirme en sus carnes.
Ya eran las tres de la mañana y por lo que intuía mi novio iba a apurar su salida con sus compañeros de trabajo, así que decidí acostarme hasta quedarme dormida, no se que hora seria pero escuche el ruido de la puerta y salí adormilada por el ruido. Mi novio estaba que no se aguantaba en pie y vino con un hombre que no conocía, el cual seria compañero del trabajo y debió ofrecerse a traerlo a casa, le eche una mano y entre los dos lo acostamos en la cama. Acto seguido el muy cabronazo se puso a roncar sin ni siquiera mediar palabra, el chico y yo nos echamos a reír, me dijo que de camino había vomitado un par de veces y seguramente ya no lo hiciese mas, yo le dije que me habían desvelado, Antuan se presento y me dijo que no era su intención molestarla, el caso es que ya no tenia sueño y me ofrecí a tomar algo antes de que se marcharse y charlar, a lo que me contesto no se si descarado o inocente…
- Si te apetece tomar algo conmigo, a lo que le seguí el hilo y le dije que tenia hambre aunque era mentira.
Salimos de la habitación, yo primero y el detrás, andando hacia la cocina me di cuenta a través de un espejo como me miraba de arriba a abajo.
Ya eran las cinco de la mañana y mi novio estaba totalmente pasado y era mas posible que se despertase medio inconsciente para volver a vomitar y volver a dormirse, que por el ruido de una banda de música sonando en la mismísima habitación, a Antuan se le notaba también un poco pedo y era muy gracioso, me hacia gracia el tono en el que me hablaba con lo grande que se veía y bueno... que era mas guapo , mas alto y se notaba que hacía bastante deporte. Mientras hablábamos en la cocina yo no paraba de moverme, me gustaba ver como me seguía con la vista, resultaba super morboso, fui a la nevera a buscar en el congelador pan, sabiendo que si habría la panera tenia mas de media barra que me sobro de la cena, el caso es que quería agacharme para resaltar mis nalgas, estaba juguetona y quería ver cuanto le ponía. Al volverme a poner de pie se me quedo atrapada la tela entre mis nalgas, me sentía muy ajustada y fui tan golfa que ni me lo volví a acomodar.
Ya ni me miraba a la cara mientras le habla, era como un toro preparado para embestirme y eso me puso tan cachonda que mi pezones se endurecieron haciendo acto de presencia a través de la camiseta, entonces nos miramos a los ojos y sin apartar la mirada me sentí su presa, en ese justo momento me di cuenta de que esto había sido un error y consciente de que ya no había escapatoria, desinhibido por el alcohol y lo cachondo que lo había puesto, se abalanzo sobre mi envalentonado por mi descaro. Me queje de que no estaba bien, mi novio estaba aquí y que podía pillarnos, esa ultima excusa me delato hasta a mí misma haciéndome consciente de que deseaba, que siguiese, ya estaba cachonda y todo este pitote que provoco el bobo de mi novio lo iba a pagar caro.
Antuan Empezó a besarme el cuello mientras con sus manos me desgarro el short y en menos de un minuto me dejo desnuda. Ya no había tiempo que perder y le metí la mano en el bóxer y la sorpresa fue mayúscula, mi mano no estaba acostumbrada a algo así y empecé a pajearlo con ganas, mientras nos besábamos. El me masajeaba las nalgas con sus grandes manos, me llevo para el salón que estaba al lado del dormitorio desde donde se podía escuchar con claridad como roncaba el ingenuo de mi novio, no recuerdo jamas una sensación tan grande de excitación y miedo.
Me puso a 4 en el sofá y siguió manoseando y lamiéndome el culo, me cogio de las caderas y estiro de las nalgas hacia afuera con fuerza, dejándome bien abierta todo coñito y mi culo. Empezó a chuparme toda, lo hacia tan rudo y excitante que se me hizo imposible negarme, Era difícil no gemir estando la puerta del dormitorio entre abierta y escuchando a mi novio, al rato me arrodilló para que le chupara la pija, me acomodo el pelo hacia atrás y me mantenía el pelo cogido. Tenia una pija enorme y me encantaba chuparsela, tenia un glande rosado como un fresón y gozaba como llenaba mi boca y me imaginaba lo prieta que se iba a mover dentro de mí. Con el vaivén intentaba meterla un poco mas adentro, hasta el punto de que llegaba ya a mi garganta, lo miraba ya con los ojos vidriosos después de unas cuantas arcadas y cuando quise darme cuenta entre un empujón sobre mi cabeza y otro de su cadera hacia mi, me la trague hasta sobrepasar la garganta, el muy cerdo dejo así unos segundo asfixiándome, sentí como este cabrón me había desflorado la garganta. Lo raro es que lejos de ofenderme de tal abuso me había puesto mas cachonda su rudeza. Lo empuje y me puse de pie, me limpie las lagrimas y el exceso de saliva que emanaba de mi boca, lo senté en el sillón y seguí chupándosela, ahora ya bajo mi control, fui forzando a mi ritmo hasta volver a conseguir tragármela otra vez, me encantaba hacérselo, sentir como me llegaba tan adentro.
Al poco tiempo me subí encima suyo y me agache sobre su pija chorreosa de mi saliva y poco a poco con dolor y paciencia conseguí sentirla toda dentro mía y sentir como me llenaba, empecé a cabalgar, quería gemir en alto para liberar la excitación exacerbada que me producía y que me imponía tremendo calibre y aunque seguramente mi novio ni se enteraría hice el esfuerzo por contener mis alaridos, entonces él me agarro de mis caderas sintiendo su dominio y apretando con fuerza me hacia cabalgar más y mas duro, el ruido de nuestras caderas golpearse era espectacular, cuando sentía que bajaba el ritmo me avisaba dándome fuertes palmadas en mi culo como si fuese una yegua ya era imposible contenerme y comencé a gemir.
Después de tenerme así durante un buen rato, mis piernas ya me flaqueaban y sin sacarme la polla de dentro se levantó conmigo encima y ensartada jalándome de las caderas comenzó a follarme en el aire, era increíble como me lo hacia, era demasiado para mi, pero no podía hacer nada, parecía una muñeca hinchable entre sus brazos, luego me echo a un lado del sofá me puso en 4 mirando hacia la habitación, se acerco para abrir la puerta del todo y que pudiese ver como mi novio dormía, vino hacia mi, agacho su cabeza entre mis nalgas y comenzó chuparme el anillo del culo hasta enterrar su lengua, un escalofríos recorría mi cuerpo, no podía moverme, sabia lo que quería hacer, la adrenalina me tenia tope. No sé porque pero no podía negarme, todo era tan vicioso e inmoral que me sentía desbordada, me iba a desfloraba el culo un desconocido delante de mi novio durmiendo. Me había convertido en la puta de Antuan y así fue como arrimó la cabeza de su enorme pija y me empujaba muy despacio, mientras me masaje el clítoris, recuerdo lo mucho que me costo hasta que sentí que su glande ya estaba dentro mía y me dijo al oido, de aquí no vamos a movernos hasta que me corra dentro de tu coño y de tu culo. voy a dejarte el culo bien abierto para tu novio, lo que me dijo me excito tanto que me cogi de las nalgas para facilitarle la profanación y un placer envenenado de lujuria e intenso dolor me invadió hasta conseguir enterrarme toda su verga, en mi vida se había abierto tanto mi ano sentía como si se fuese a desgarrar y me preocupe porque no se volviese a cerrar del todo otra vez, pero despacio, despacio, fue sacando y metiendo hasta que sintió como mi culo se acomodaba a su polla y quedaba abierto y empezó a darme mas y mas fuerte. Ya me daba todo igual, me encantaba sentirme así. Comencé a gemir adolorida, estaba desbordada, me daba igual todo, lo único que quería es que no parase ese infernal placer, me encantaba como me empotra, sentía como volcaba toda su fuerza sobre mí. Era un placer desmedido la manera en que me rellenaba mi apretado culo en cada embestida, sentía como al sacarla me dejaba el culto totalmente abierto para volver a enterrármela hasta el fondo y arder de placer.
Bañados por nuestros sudor y cuando ya no podía mas le suplique que me diese un respiro, pues me estaba matando a pollazos, pero a cada negativa que le suplicaba se sobrexcitaba mas al verme como me sometía y me cogió con una mano del pelo tirando hacia el y con la otra forzaba mi espalda para arquearme mas y seguir empotrando su ariete, cuando paro en seco, me giro tumbándome boca arriba en el sofá boca arriba frente a el, me cogió de los tobillos y de mis rodillas contra mis mis hombros, literalmente me había plegado, sentía como en esa posición tenia mi coño y el culo abierto a su disposición, me la metía hasta el fondo hundiendome contra el sofá, quería atravesarme, mientras me daba cada vez mas fuerte, nos miramos a los ojos fijamente y comenzó embestirme como un salvaje aplastándome contra el sofá, me hizo venir una vez mas, tuve un órgano tan fuerte que casi pierdo el conocimiento, acto seguido el vino dentro mío, sintiendo como borbotones de esperma caliente me inundaban por dentro.
Nos comimos la boca durante un buen rato, luego me levante abrir las ventanas para airear el hedor a sexo que habíamos dejado y me sentí tan adolorida como satisfecha mientras notaba cómo chorreaba su semen entre mis piernas.
me fui a lavarme y él se puso la ropa. Lo acompañé hasta la puerta y despedirnos y me dijo…
- déjale a tu novio hacerte el culo, o de verdad que voy rompértelo la próxima vez que te lo coja.
Sentí un escalofrío tan grande, que casi me vuelvo a correr, este cabrón había dado por sentado que íbamos a vernos y que yo lo estaba deseando.
Así fue como después de cerrar la puerta, me volví a desnudar y le quite la ropa a mi novio, se la chupe mientras dormía hasta que su inconsciente se la empalmo y me la metí dentro de mi abierto culo, para cuando se despertase el muy tonto pensara que me había follado el culo.
Acostada con las polla de mi novio dentro de mi culo no tarde en dormirme...
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