Este es mi primer relato y se trata de hechos reales; espero sea de su agrado.
Por cuestiones obvias los nombres fueron cambiados.
Mí nombre es Damián y en el momento del suceso relatado yo tenía 28 años y ,como lo hago desde mis 15 años, me dedico a trabajar como cuentapropista haciendo trabajos de pintor, plomero, electricista y muchas otras reparaciones.
En ésta ocasión me encontraba pintando tanto el frente de rejas como toda la fachada y aberturas de la casa de un matrimonio del oeste del conurbano bonaerense; el hombre se llama Walter, 46 años baja estatura (1,50 mts), cabello castaño ojos verdes y unos 80 kilos que se hacían notables en su abdomen y cuello. Walter es chófer de camión para una importante empresa láctea argentina. Debido a su trabajo Walter pasaba muchos días fuera de su casa, en las rutas de Córdoba, Santa Fé y varias provincias más.
Andrea era la señora de la casa y a sus 45 años tenía un cuerpito menudo (no más de 55 kilos), 1,47 mts de estatura, pequeñas tetas al igual que su cola pero esto no la hacía menos atractiva. Siempre me atrajeron mucho las morochas y aún más si eran bajitas, de ojos oscuros y una linda boca que sabe encantar con su dulce voz a los hombres.
El matrimonio tiene dos hijos, Aron de 8 años, estudiante de primaria y Roxi de 22 años quien pasaba mucho tiempo en su escuela secundaria y una asociación civil solidaria para niños especiales. Así es que por lo general Andrea y yo estábamos al menos mitad del día solos en la casa.
Por mí parte me considero un hombre agradable de cuerpo relativamente atlético, 1,83 de estatura, 75 kilos, cabello muy corto castaño claro, ojos verdes y tés blanca... Se podría decir que no debería tener ningún problema a la hora de relacionarme con mujeres, salvo por mi timidez y mí autoestima media.
Llevaba más de 20 días trabajando en casa de Walter y Andrea, tiempo en el que compartía muchas charlas amenas con ella, mates, risas y en muchas ocasiones nuestras conversaciones se volvían algo serías y profundas sobre su soledad debido a la ocupación de su marido, la rutina típica de una ama de casa, mí falta de pareja debido a mi carácter poco atrevido, por así decirlo.
Pasar tanto tiempo con una mujer que era de mí gusto, en su casa, con falta de sexo y en más de una ocasión ver en su baño las tangas recién usadas, colgadas en los grifos de la ducha estaba calando en mí mente y me hacía fantasear con tenerla desnuda para mí y recorrer ese cuerpo con mis manos, mí boca y hacerla gozar con el más salvaje sexo clandestino... pero supuse que eso jamás pasaría entre la señora, madre, esposa, bien educada y yo, un trabajador humilde, que se encontraba ante ella con ropa sucia, transpirado y en su servicio.
Vaya sorpresa la mía cuando una tarde de Domingo me encontraba acostado en mí cama cuando sonó mi celular indicando un mensaje de Andrea.
AND: _Hola Damián, cómo estás?
DAM: _Hola Andrea, bien, acá en casa sin mucho para hacer. Pasó algo??
AND: _No, nada; solo que estoy sola porque mis hijos se encuentran en casa de sus primos, Walter viajando como siempre y se me ocurrió charlar con alguien.
DAM: _A bien, yo estoy acostado y aburrido.
AND: _que mal, con 28 años, soltero y estás en casa aburrido??
DAM: _JAJAJA y bue... es lo que me toca por ahora...
AND: _Porque querés!!! Con lo lindo que sos y 28 añitos... Dale!!!!
DAM: _JE... Te parezco lindo???
AND: _ No me parece, sos lindo Damián!! Creétela un poco!!! Yo te re doy jajajajaa
DAM: _UFFF... Pero de verdad estarías conmigo o me lo decís en chiste?? No quiero desubicarme con vos, perdón...
AND: _Y... podríamos probar; a vos te gustó un poco??
Dam: _uuuyyy no lo puedo creer; siiii, siempre te miro y me encantas!!! Pero para mi sos la señora de la casa, la esposa de Walter, nunca pensé que podría pasar algo.
AND _Aaaa así que me miras??? Y que te gusta de mí?
DAM: _Mmmm me gusta tu boca, te miro toda, cuando usas calzas, tu colita, tu cinturita, toda!!!
AND: _mmmmm mirá vos el pintor... Queres venir??? tenés ganas!!!!
DAM: _Siii, me encantaría, me muero... En serio Andrea!!!
AND: _Bueno, dale vení, te espero. Tranqui, no tengas miedo tonto!!! Que te gustaría que tenga puesto???
DAM: _ Ayyyy el vestidito negro suelto y la tanguita turquesa.... ufff Andrea, me encanta!!!
AND: _Aaaaa me conoces las tanguitas guachito!!! Bueno dale que ya me estoy mojando!!!!
No lo podía creer!!!! Salí de mi casa de inmediato y a los 20 minutos me encontraba en su puerta tocando timbre, ella abrió presionando el portero eléctrico y me esperó en la cocina de espaldas y fingiendo limpiar la mesada; al verme entrar apenas giró su cabeza y teniéndome detrás suyo me tomó por la nuca y me besó en la boca al tiempo que se ponía en puntas de pié para posar su cola en mi verga que ya se encontraba dura.
Al sentir sus pequeñas nalgas rosar mi pija, dirijo mis manos (que ya se encontraban sobre su vientre) a su entrepiernas y alcanzo con mis dedos su apretado pubis cubierto por esa fina tela de la lencería que tantas veces vi colgada en el baño.
Con desesperación giré su cuerpo y tomándola por sus caderas la levanté hasta mí cintura dónde se abrazó con sus piernas con fuerza haciéndome sentir toda su vulva en mi tiesa poronga que estaba a punto de reventar mis pantalones. Sin dejar de saborear su boca, devorando su lengua como si se tratara de un sabroso manjar, la llevé a la mesada dónde la senté sobre el borde y me lance a quitar su bombachita de un solo tirón; al ver esa conchita totalmente abierta y empapada, mis ojos se clavaron en los suyos y me dedique a devorar cada milímetro de sus labios vaginales, cada gota de flujo caliente y agridulce despedido por su palpitante concha ardiente!! Mis manos apretaban sus muslos, subían a sus tetas por debajo del vestido que dos segundos después arrojaría al suelo ella misma con una mano, ya que la otra presionaba mi cabeza tratando de hundir más aún mi lengua en su argolla.
AND: _ aaaauuuuu me vas a hacer acabarrrr aaaaaammmm!!!!
DAM: _ sssssiimmm dámela... Acabame en la boca!!!
Acto seguido, su cuerpo se retorcía, sus manos apretaban mí cabeza, su espalda se arqueaba y esa señora hermosa, menuda pero ardiente como la hembra más voluptuosa, derramó todo su embriagante elixir dentro de mí boca!!!
Sentía que estaba en el mejor de mis sueños calientes, me costaba creer que esa señora de 45 años tan delicada a la vista de todos estaba desnuda, sentada en la mesada de su cocina con su concha en mí boca y acabando como si no hubiera sido cogida por meses!!!!
Cuando sentí ceder sus contorsiones evidenciado el fin de su orgasmo pero no el de su deseo salvaje, me dispuse a incorporarme frente a ella quien rápidamente desabrochó mi pantalón y arrancó de su prisión a mi verga inflamada y dura para meterla de un solo movimiento en su enrojecida y babeante vagina; sentir en la cabeza de mi pija cada pliego de esa deliciosa concha caliente me llevó a la locura absoluta y empecé a bombear como si no hubiera un mañana!!! ella no pudo contener sus gemidos de puta y juntos disfrutamos del sexo más salvaje y desenfrenado que tuve al menos hasta ese día. Sus dedos se clavaban en mis muslos en plan de hundir mi verga lo más posible aunque la punta de mi pija chocaba en su útero en cada avance haciendo que luego de unos 20 minutos de estocadas mi semen llenará esa ardiente y estrecha cavidad que una vez más estallaba de placer derramando sus fluidos en todo mi miembro, bajando a mis testículos.
Nuestros alientos se mezclaban, nuestras miradas buscaban en el otro lo cordura perdida pero ya no la encontraríamos nunca más o al menos no por completo ya que este solo sería el primero de varios encuentros explosivos.
Hasta la próxima!!!
Por cuestiones obvias los nombres fueron cambiados.
Mí nombre es Damián y en el momento del suceso relatado yo tenía 28 años y ,como lo hago desde mis 15 años, me dedico a trabajar como cuentapropista haciendo trabajos de pintor, plomero, electricista y muchas otras reparaciones.
En ésta ocasión me encontraba pintando tanto el frente de rejas como toda la fachada y aberturas de la casa de un matrimonio del oeste del conurbano bonaerense; el hombre se llama Walter, 46 años baja estatura (1,50 mts), cabello castaño ojos verdes y unos 80 kilos que se hacían notables en su abdomen y cuello. Walter es chófer de camión para una importante empresa láctea argentina. Debido a su trabajo Walter pasaba muchos días fuera de su casa, en las rutas de Córdoba, Santa Fé y varias provincias más.
Andrea era la señora de la casa y a sus 45 años tenía un cuerpito menudo (no más de 55 kilos), 1,47 mts de estatura, pequeñas tetas al igual que su cola pero esto no la hacía menos atractiva. Siempre me atrajeron mucho las morochas y aún más si eran bajitas, de ojos oscuros y una linda boca que sabe encantar con su dulce voz a los hombres.
El matrimonio tiene dos hijos, Aron de 8 años, estudiante de primaria y Roxi de 22 años quien pasaba mucho tiempo en su escuela secundaria y una asociación civil solidaria para niños especiales. Así es que por lo general Andrea y yo estábamos al menos mitad del día solos en la casa.
Por mí parte me considero un hombre agradable de cuerpo relativamente atlético, 1,83 de estatura, 75 kilos, cabello muy corto castaño claro, ojos verdes y tés blanca... Se podría decir que no debería tener ningún problema a la hora de relacionarme con mujeres, salvo por mi timidez y mí autoestima media.
Llevaba más de 20 días trabajando en casa de Walter y Andrea, tiempo en el que compartía muchas charlas amenas con ella, mates, risas y en muchas ocasiones nuestras conversaciones se volvían algo serías y profundas sobre su soledad debido a la ocupación de su marido, la rutina típica de una ama de casa, mí falta de pareja debido a mi carácter poco atrevido, por así decirlo.
Pasar tanto tiempo con una mujer que era de mí gusto, en su casa, con falta de sexo y en más de una ocasión ver en su baño las tangas recién usadas, colgadas en los grifos de la ducha estaba calando en mí mente y me hacía fantasear con tenerla desnuda para mí y recorrer ese cuerpo con mis manos, mí boca y hacerla gozar con el más salvaje sexo clandestino... pero supuse que eso jamás pasaría entre la señora, madre, esposa, bien educada y yo, un trabajador humilde, que se encontraba ante ella con ropa sucia, transpirado y en su servicio.
Vaya sorpresa la mía cuando una tarde de Domingo me encontraba acostado en mí cama cuando sonó mi celular indicando un mensaje de Andrea.
AND: _Hola Damián, cómo estás?
DAM: _Hola Andrea, bien, acá en casa sin mucho para hacer. Pasó algo??
AND: _No, nada; solo que estoy sola porque mis hijos se encuentran en casa de sus primos, Walter viajando como siempre y se me ocurrió charlar con alguien.
DAM: _A bien, yo estoy acostado y aburrido.
AND: _que mal, con 28 años, soltero y estás en casa aburrido??
DAM: _JAJAJA y bue... es lo que me toca por ahora...
AND: _Porque querés!!! Con lo lindo que sos y 28 añitos... Dale!!!!
DAM: _JE... Te parezco lindo???
AND: _ No me parece, sos lindo Damián!! Creétela un poco!!! Yo te re doy jajajajaa
DAM: _UFFF... Pero de verdad estarías conmigo o me lo decís en chiste?? No quiero desubicarme con vos, perdón...
AND: _Y... podríamos probar; a vos te gustó un poco??
Dam: _uuuyyy no lo puedo creer; siiii, siempre te miro y me encantas!!! Pero para mi sos la señora de la casa, la esposa de Walter, nunca pensé que podría pasar algo.
AND _Aaaa así que me miras??? Y que te gusta de mí?
DAM: _Mmmm me gusta tu boca, te miro toda, cuando usas calzas, tu colita, tu cinturita, toda!!!
AND: _mmmmm mirá vos el pintor... Queres venir??? tenés ganas!!!!
DAM: _Siii, me encantaría, me muero... En serio Andrea!!!
AND: _Bueno, dale vení, te espero. Tranqui, no tengas miedo tonto!!! Que te gustaría que tenga puesto???
DAM: _ Ayyyy el vestidito negro suelto y la tanguita turquesa.... ufff Andrea, me encanta!!!
AND: _Aaaaa me conoces las tanguitas guachito!!! Bueno dale que ya me estoy mojando!!!!
No lo podía creer!!!! Salí de mi casa de inmediato y a los 20 minutos me encontraba en su puerta tocando timbre, ella abrió presionando el portero eléctrico y me esperó en la cocina de espaldas y fingiendo limpiar la mesada; al verme entrar apenas giró su cabeza y teniéndome detrás suyo me tomó por la nuca y me besó en la boca al tiempo que se ponía en puntas de pié para posar su cola en mi verga que ya se encontraba dura.
Al sentir sus pequeñas nalgas rosar mi pija, dirijo mis manos (que ya se encontraban sobre su vientre) a su entrepiernas y alcanzo con mis dedos su apretado pubis cubierto por esa fina tela de la lencería que tantas veces vi colgada en el baño.
Con desesperación giré su cuerpo y tomándola por sus caderas la levanté hasta mí cintura dónde se abrazó con sus piernas con fuerza haciéndome sentir toda su vulva en mi tiesa poronga que estaba a punto de reventar mis pantalones. Sin dejar de saborear su boca, devorando su lengua como si se tratara de un sabroso manjar, la llevé a la mesada dónde la senté sobre el borde y me lance a quitar su bombachita de un solo tirón; al ver esa conchita totalmente abierta y empapada, mis ojos se clavaron en los suyos y me dedique a devorar cada milímetro de sus labios vaginales, cada gota de flujo caliente y agridulce despedido por su palpitante concha ardiente!! Mis manos apretaban sus muslos, subían a sus tetas por debajo del vestido que dos segundos después arrojaría al suelo ella misma con una mano, ya que la otra presionaba mi cabeza tratando de hundir más aún mi lengua en su argolla.
AND: _ aaaauuuuu me vas a hacer acabarrrr aaaaaammmm!!!!
DAM: _ sssssiimmm dámela... Acabame en la boca!!!
Acto seguido, su cuerpo se retorcía, sus manos apretaban mí cabeza, su espalda se arqueaba y esa señora hermosa, menuda pero ardiente como la hembra más voluptuosa, derramó todo su embriagante elixir dentro de mí boca!!!
Sentía que estaba en el mejor de mis sueños calientes, me costaba creer que esa señora de 45 años tan delicada a la vista de todos estaba desnuda, sentada en la mesada de su cocina con su concha en mí boca y acabando como si no hubiera sido cogida por meses!!!!
Cuando sentí ceder sus contorsiones evidenciado el fin de su orgasmo pero no el de su deseo salvaje, me dispuse a incorporarme frente a ella quien rápidamente desabrochó mi pantalón y arrancó de su prisión a mi verga inflamada y dura para meterla de un solo movimiento en su enrojecida y babeante vagina; sentir en la cabeza de mi pija cada pliego de esa deliciosa concha caliente me llevó a la locura absoluta y empecé a bombear como si no hubiera un mañana!!! ella no pudo contener sus gemidos de puta y juntos disfrutamos del sexo más salvaje y desenfrenado que tuve al menos hasta ese día. Sus dedos se clavaban en mis muslos en plan de hundir mi verga lo más posible aunque la punta de mi pija chocaba en su útero en cada avance haciendo que luego de unos 20 minutos de estocadas mi semen llenará esa ardiente y estrecha cavidad que una vez más estallaba de placer derramando sus fluidos en todo mi miembro, bajando a mis testículos.
Nuestros alientos se mezclaban, nuestras miradas buscaban en el otro lo cordura perdida pero ya no la encontraríamos nunca más o al menos no por completo ya que este solo sería el primero de varios encuentros explosivos.
Hasta la próxima!!!
6 comentarios - La señora del camionero.