Hoy quiero contar una historia muy rica que me pasó entre mi hermano y yo...
Ya era de tarde cuando mi papá y mamá salieron a cenar, yo estaba dormida y mo hermano estaba en la sala, cuando me desperté fui a buscar a mi hermano para preguntar y saber donde estaban así que cuando me dijo decidí ir a bañarme y así fue, al entrar a mi habitación me empecé a desnudar, me quité mi falda, la blusa y después el brasier y mi tanguita, ya estando desnuda me di cuenta que no había agarrado la toalla para secarse así que decidí salir de mi cuarto así esperando a que no me viera mi hermano estando en pelotas, regrese y por fin pude meterme.
Ya dentro me empecé a mojar con el agua caliente, tengo que admitir que me encanta sentir el agua caliente deslizarse desde mis tetas, pasando por mi vientre hasta llegar a la vagina, me prende mucho, el caso es que cuando me estaba enjuaguando, escuché la puerta cerrarse y me di cuenta de que era mi hermano que entró porque no le puse llave a la puerta, espere a que se fuera y cuando ya no escuche ruido continúe bañandome, cuando de pronto siento sus manos acariciandome las nalgas y las tetas de una forma de la que no puede escapar por la excitacion que me hizo sentir, a lo que el me dijo, "creíste que no te había visto, perrita?", esas palabras me hicieron mojar aún más de lo que ya estaba (me estoy mojando otra vez al escribir esto)
Después, me arrodillé para poder acariar su enorme verga, con mi boquita la empecé a chupar desde las bolas hasta la punta, de abajo hacia arriba una y otra vez hasta ponerla totalmente dura, cuando quiso, me puso de perrita, montó cual macho a su hembra y lentamente me fue penetrando hasta que logró llegar al final, después la sacó con tanta fuerza que sentía como me dejaba tan abierto el culo y después me la metió muy rico en mi húmeda vagina, sentía tan delicioso hasta que topó con el útero haciéndome gemir de tanto placer que sentía, golpeando mi entrada una y otra vez cada vez mas fuerte hasta sentir su tan caliente semen entrar en mi, llenandome y haciendo que pierda la conciencia a tal punto de quedarme dormida aún con su enorme pene dentro de mi.
Al despertar estaba en mi cama, desnuda aún pero con mi cobija, recordando tanto placer que me hizo sentir mi hermanito, mojandome, escribiendo lo que sucedió...
Espero que les haya gustado,
Ya era de tarde cuando mi papá y mamá salieron a cenar, yo estaba dormida y mo hermano estaba en la sala, cuando me desperté fui a buscar a mi hermano para preguntar y saber donde estaban así que cuando me dijo decidí ir a bañarme y así fue, al entrar a mi habitación me empecé a desnudar, me quité mi falda, la blusa y después el brasier y mi tanguita, ya estando desnuda me di cuenta que no había agarrado la toalla para secarse así que decidí salir de mi cuarto así esperando a que no me viera mi hermano estando en pelotas, regrese y por fin pude meterme.
Ya dentro me empecé a mojar con el agua caliente, tengo que admitir que me encanta sentir el agua caliente deslizarse desde mis tetas, pasando por mi vientre hasta llegar a la vagina, me prende mucho, el caso es que cuando me estaba enjuaguando, escuché la puerta cerrarse y me di cuenta de que era mi hermano que entró porque no le puse llave a la puerta, espere a que se fuera y cuando ya no escuche ruido continúe bañandome, cuando de pronto siento sus manos acariciandome las nalgas y las tetas de una forma de la que no puede escapar por la excitacion que me hizo sentir, a lo que el me dijo, "creíste que no te había visto, perrita?", esas palabras me hicieron mojar aún más de lo que ya estaba (me estoy mojando otra vez al escribir esto)
Después, me arrodillé para poder acariar su enorme verga, con mi boquita la empecé a chupar desde las bolas hasta la punta, de abajo hacia arriba una y otra vez hasta ponerla totalmente dura, cuando quiso, me puso de perrita, montó cual macho a su hembra y lentamente me fue penetrando hasta que logró llegar al final, después la sacó con tanta fuerza que sentía como me dejaba tan abierto el culo y después me la metió muy rico en mi húmeda vagina, sentía tan delicioso hasta que topó con el útero haciéndome gemir de tanto placer que sentía, golpeando mi entrada una y otra vez cada vez mas fuerte hasta sentir su tan caliente semen entrar en mi, llenandome y haciendo que pierda la conciencia a tal punto de quedarme dormida aún con su enorme pene dentro de mi.
Al despertar estaba en mi cama, desnuda aún pero con mi cobija, recordando tanto placer que me hizo sentir mi hermanito, mojandome, escribiendo lo que sucedió...
Espero que les haya gustado,
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