Mi esposa de puta por una fantasía

Mi esposa y yó hacia un tiempo estábamos haciendo realidad una fantasía mía de verla teniendo sexo con otros machos.
Me dió trabajo convencerla pero después de mucha insistencia de mi parte aceptó hacerlo con extraños que conocíamos en bares.
 Las condiciones que me puso fué que ellos pensaran que estaban con una prostituta, y que solo sería sexo de una noche, sin ataduras.
Me pareció bien y así fué como comenzamos a ir de caza a bares, ella siempre bien bonita vestida como una puta, nos sentábamos en la barra y cuando alguien se le acercaba a ofrecerle un trago yo me movía al final de la barra a observarlos .
Luego la veía cuando se retiraba con el macho al área de los baños. Allí tenían sexo rápido, le chupaban las tetas, la ponian a mamar, o le daban por la concha o el culo. El tipo se venía y todo volvía a la normalidad.
Mi esposa me buscaba y nos íbamos para casa donde me decía con detalles todo lo que le habían echo. La parte que más me gustaba era cuando me dejaba mamarle la concha con la leche del extraño adentro. Cada vez me hacia mas adicto a ese momento, y salíamos a cazar nuevamente.
Una noche en que estábamos en esa faena se acerca a mi esposa un tipo bien vestido y confundiendola con una puta le dice que la necesita para una fiesta con sus amigos.
 Mi esposa le dijo que hablara con su marido y lo llevó conmigo. El tipo pensó que yo era su chulo y me preguntó cuanto le costaba usar mi puta por toda la noche.
Me explicó que serian él y varios amigos. Yo miré a mi esposa ver si estaba bién que fueran más de uno y toda la noche los que la cojieran y me dijo que sí, pero que yo estuviera cerca para cuidarla en caso que lo necesitara. 
Así que le dije al tipo que no le costaría nada si yo podía acompañarla. Le estuvo raro la oferta pero aceptó. Y así nos fuimos con él a una suite de hotel.
En el ascensor el tipo delante mio le apretó las nalgas a mi esposa mientras la besaba en ĺa boca. Viendo como le agarraba el culo se me paró la verga y él se dió cuenta porque le dijo a mi mujer, parece que a tu marido le excita ver que te toquen, mira como tiene dura la verga. 
Ella se echó a reír, y le contestó, sí , mi marido es un cornudo cabrón que disfruta viendome coger con otros machos.
Pues hoy se va a curar bien porque te vamos a dar verga por todos lados. Te vamos son mucha gente
le dijo mi mujer, tú y quien más?
Ya veras, cuando lleguemos
Saliendo del ascensor llegamos a la suite del tipo.
El abrió la puerta y entramos, mi esposa colgada de su brazo y yo detrás.
La habitación era enorme, tenia una barra con licores, un sofá, butacas y un tv de 70 pulgadas empotrado a la pared. Al fondo se podía ver una cama super grande mirando a una amplia terraza dividida por una puerta de cristal.
En la terraza pude ver varios hombres bien vestidos con trago en manos. Tan pronto nos vieron vinieron hacia nosotros, todos admiraron a mi mujer, uno de ellos exclamó, tenias razón cuando nos dijiste que está es la puta más bella que nos vamos a coger.
Todos los demás asintieron riendo. La cara de mi mujer era de felicidad. Tenía ante sí cinco hombres, todos guapos con ganas de cogerla por todos lados y a su marido a su lado mirando como la usarían como toda una puta. 
Yo por mi parte no podía creer tener tanta suerte, estaba a punto de ver como esos hombres se darían placer cogiendo a mi esposa, todos a la vez, uno detrás del otro. Ya me imaginaba su concha cubierta de leche. De seguro que también le darian por el culo y que la pondrían a mamar. Era mi fantasía lograda con creces.
Me ofrecieron sentarme en una butaca cómoda frente al televisor de 70 pulgadas, y pronto entendí de qué se trataba cuando ví a uno de los hombres con una cámara enfocando a mi esposa.
La cámara estaba conectada al tv y yo podía ver clramente en la pantalla a mi mujer. 
La fiesta comenzó ellos desnudando a mi esposa. Uno la besaba en la boca, otros dos cada uno le chupaba una teta, el anfitrión le metia los dedos en la concha mientras el de la cámara se movia de lado a lado grabando cada detalle de lo que estaba pasando.
Yo tenia la verga a mil, comencé a hacerme una paja viendo la cara de placer de mi mujer en la tv. Luego se turnearon para ponerle en la boca sus vergas a mi esposa.
A cada uno se los mamó haciéndolos venirse en su boca. En verdad mi mujer actuó como toda una puta de profesión. Los hizo venir con su boca y se trago su leche, cuando terminó de mamar tenia toda su cara cubierta de semen. Luego él que estaba grabando le entregó la cámara a otro y se acercó a mi mujer , la subió a la cama le abrió las piernas y comenzó a mamarle la concha.
Los demás le hicieron rueda, en la tv pude ver un closeup de la vagina de mi esposa siendo deborada por ese hombre, le pasaba su lengua de abajo hacia arriba y le chupaba el clitoris con fuerza, escuche la voz de mi mujer gritando de placer en medio de un orgazmo y me sentí dichoso al ver lo mucho que estaba gozando ella con esa lengua en su vagina.
El tipo dejó de mamar al ver que ella terminó su orgazmo, y agarrándose la verga se la introdujo completa en su coño. Mi mujer pegó un alarido de placer al sentir la estocada,. El hombre no tardo mucho en venirse. Se la echó toda adentro. Y se fué, otro tomó su lugar, como la vagina estaba inundada de semen, su verga entró como pedro por su casa.
Debió sentir rica esa concha encharcada pues por la cara del tipo mientras se lo metía se notaba claramente que estaba gozando.
Ese también se vino dentro de ella. Luego vino otro e hizo lo mismo, pero después de darle varias estocadas en su coño, la viró boca abajo y la puso con el culo para arriba. Le abrió las nalgas a mi mujer, y sacando semén de su vagina con los dedos, se lo pasó a la entrada del culo. Ya con el culo mojado de semen comenzó a empujarle la verga poco a poco. Mi mujer comenzó a gritar que se la metiera toda en el culo. Viendo el tamaño de la verga de ese hombre, me dió miedo que le hiciera daño a mi esposa ya que su culo siempre fué estrecho, pero lo aguantó muy bien, primero le metió la cabeza, y como ella pedía más se la clavó completa, ahí si que gritó duro mi mujer, sacala, sacala, le pedía a gritos, pero él se la empujaba más.
Se la sacó después que se vino dentro de ella. Le dejó el culo ardiendo. Otro hombre con una verga más pequeña que el otro también la quiso cojer por el culo, mi esposa trató de impedirlo, pero los demás le sujetaron los brazos, y el tipo logró metersela de un solo golpe. 
Ya yo estaba dispuesto a intervenir para socorrerla, pero me dí cuenta por su cara que esta vez estaba disfrutando esa verga en su culo. Luego entre todos la cogieron, uno por el culo, otro por la concha, otro por la boca, y a los otros dos les sacó la leche con las manos.
 Al final de la noche mi mujer quedó extenuada sin fuerzas en mis brazos. 
Así toda cubierta de leche por todos lados me la llevé a mi casa. El olor a semen en su cara y en su boca me excitaba completamente.
Le pedí permiso para mamarle la concha así con todo ese semen dentro y me dijo que hiciera lo que yo quisiera, menos metersela por el culo, porque todavía le ardía mucho. Entonces me dí un banquete, le mamé la concha succionado todo lo que salia de ella. No se lo metí por el culo, pero sí le pasé mi lengua y a ella le gustó. Para los dos fué una noche inolvidable, y para mi sorpresa, encontré en el bolsillo de mi chaqueta un sobre con mucho dinero y una nota que decía. Gracias cornudo, por prestarnos a tu mujer, sabemos que no es ninguna puta, pero esta noche se ganó con creces hasta el último centavo.



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