No me considero un tipo fachero, pero si con buena labia y -sobre todo- muy, muy buena suerte. Hace unos meses al terminar mi ultima relación, estuve invirtiendo bastante tiempo en Tinder, Happn y cuanta red de sexo se encuentre disponible (y no, en ContactosSex aun no conocí a nadie!). Me puse el desafío de poder conocer y cogerme a cuanta mina pudiese y bueno, a veces hay que tener cuidado con lo que se pide. Suelo ser bastante organizado en mi agenda, pero se me superpusieron dos citas de Tinder.. una era Lucia, con quien ya habíamos cogido y otra una flaca con quien nos mandábamos mensajes calientes. Estaré a la altura de estar con dos minas diferentes el mismo dia? No tengo 20 años, tengo 43, pero bueno, mucha agua y a animarse! Con Lu nos encontramos a las 4 de la tarde en casa. Cogimos muy bien y ella a las 5:30 ya estaba saliendo (ella es casada, asi que a las 6 tenia que "volver del trabajo"). Me dejo el terreno listo para la cita de las 7. Ahi la conocí a Fabi: divina, super divertida y le encanta la noche y el alcohol. Para las 8 ya estábamos un poco ebrios.. a las 9 estábamos a los besos y para las 10 estábamos en casa. Yo la verdad que había quedado bastante caliente de la cogida de la tarde asi que fue un sexo divino, con energía y potenciado por el alcohol. Claramente seguimos tomando en casa, total "ya no iba a salir". Me había dicho que no se podia quedar a dormir, pero claramente se tuvo que ir llena de mi leche. Para la 1 yo ya estaba limpiando el quilombo de ropa en el piso y recibo un llamado. Carmen, una mina que hace mucho quería ver, estaba de vuelta en Santiago y por lo que podia leer, parecía estar ebria y con ganas de coger. Yo ya estaba bastante bebido y dije: "sera buena idea?". Es la misma pregunta que nos hacemos cuando alguien trae tequila.. y la respuesta nunca es "no, no lo voy a hacer". Me pegue una ducha rápida, me cambie, pedi un Uber y a las 2 de la mañana estaba llegando al bar adonde Carmen estaba esperandome. A Carmen le venia trayendo ganas hace meses, por lo que no deje pasar la oportunidad, fui a clavarle derecho los dientes y le dije si quería venir a casa, a lo que me respondió con una mordida en la boca. Camino a casa pensaba que la cama estaba toda empapada de leche de la cogida de la tarde, de sudor de la cogida de la noche y ahora, bueno, ahora iba a tener que ponerle mucha garra. No podia evitar sentirme mal porque con Carmen quería algo mas "novios", pero iba camino a ser mas bien sexo de borrachos casual y repetible que otra cosa. Como ella me gustaba, claramente la tenia super dura y en mi cabeza me aplaudía sorprendido. El tema fue que claramente la reserva de semen ya estaba baja, por lo que no podia tirarle dos gotitas miserables en la boca o las tetas, asi que fue un acabada no tan humeda sobre una tanga completamente empapada. Luego de esta aventura que podría haber terminado en papelón, tuve que pedirme un dia off en el trabajo, despertándome a las 2 de la tarde sufriendo por mi cuerpo, pero feliz por poder cogerme a Carmen y agradecido por toda mi suerte.. pero pensando que ya no estoy para estos trotes. Bueno.. no lo estoy hasta que se presenten de vuelta
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