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Las infidelidades de mi padre (3)

Una vez que descubrí una nueva relación extra marital de mi papá, me convencí más que nunca que debo seguirlo, sin duda, Esther y Karina, las mujeres que mi padre se las come cada vez que quiere, llegué a la concusión que ellas no serían las únicas.
Mi padre, Alejandro, como es un hombre que entrena todos los días en un gym, me inscribo al gimnasio que el acude regularmente, en eso, conoce a una señora, sería más o menos de unos 39-40 años de edad, rubia, del test de Karina su secretaria, conociendo a mi papá, ya le haya puesto el ojo, claro es, que la señora se la ve que entrena ya que tiene el cuerpo formado, toda una MILF, bueno, con el transcurso de los días, entrenábamos con normalidad hasta que de repente, se lesionó en uno de sus hombros, lo que le impidió ir por una semana entera a entrenar.
En eso, entro a su cuarto, y hallo una tarjeta personal, decía más o menos así: “Dra. Germania Alverca, Médica Deportóloga y Traumatóloga” también decía su número de casa, celular y dirección de su consultorio. Se me vino a la mente que era la “nueva amiga” que mi papá había hecho en el gym.
Pasaron las semanas, mi padre se puso bien, acudió al gym con normalidad, voy a la oficina, y resulta que mi papá, Alejandro Olmos, abogado de prestigio, tomaba el caso de una Deportóloga, entré a su oficina, justo estaba allí, me presentó ante ella:
Alejandro: Daniel, ella es Germania Alverca, una amiga que hice en el gym, voy a tomar su caso de divorcio y separación de bienes, y es Dra. Y de las buenas, por algo estoy como nuevo.
Yo: Mucho gusto Dra. En conocerla.
Germania: Igual el gusto es mío Daniel, y cierto dime Germania.
Yo: Ok, como Ud. quiera, Germania.
En lo que salí de la oficina de papá, fui derecho a la mía, al llegar, no soporté la curiosidad de escuchar la conversación, así que me puse a hacerlo, conversaban de lo más normal, cuando en eso escucho algo así:
Germania: Sabes algo Ale, cuando descubrí a mi esposo cogiendo con su amante, se me vino el mundo al piso, pero me di cuenta que Fabián (su casi ex esposo), no lo era todo, estaba destruida hasta que te conocí Alejandro, ahí sentí como otra vez estaba llena, con ganas de vivir y salir adelante por mi misma y para mis hijas, gracias Alejandro.
Me sorprendí tanto, al pensar que una mujer, toda una profesional, y hermosa, se puede decir que le estaba declarando su amor a mi padre. A lo que él le dijo:
Alejandro; Gema, mira, gracias por fijarte en mi, por tener esos sentimientos hacia mi, pero yo soy casado, así que sería imposible que tuviéramos algo, gracias una vez mas por conocerte y tenerme confianza.
Conociendo a mi padre, solo se hace el difícil, ya no escuché mas la conversa, así que me dediqué a trabajar, sería una hora después, cuando fui a su oficina, Karina, -su secretaria y amante- me dijo que no lo interrumpiera a mi padre, recordé inmediatamente que tenía las cámaras de seguridad en mi oficina, le dije gracias a Karina, fui a mi oficina, prendí la pc, y descubrí que mi padre y Germania, se estaban besando, si, besando, apasionadamente, el pillo de mi papá estaba abrazándola de manera sexy a Germania, sus manos estaban apretando las nalgotas de Germania, y ella hacía lo mismo con los glúteos de mi papá, así que desde ahora, la Dra. Germania Alverca, Médica Deportóloga y Traumatóloga, clienta de mi padre en el caso de su divorcio, se convertía en ese momento, en otra de sus amantes.
Pasaron mas o menos un par de meses, y el divorcio se hizo oficial, ambos firmaron el acta, mi padre como todo un experto en las “artimañas” consiguió que la casa, el auto, ambos de lujo, quedaran a nombre de Germania o “Gema” como la conoce su amante, mi padre, en ello, ambos se felicitaron, con un beso en la mejilla, ya que no pueden exponer su relación extra marital de papá. Fuimos al bufete los 3, al llegar, fui a mi oficina, y mi padre con Germania a la suya, encendí las cámaras, y los amantes se estaban besando, apasionadamente, logré escuchar algo así como:
Germania: Ale, mañana es fin de semana, mis hijas se van con el papá de viaje, quieres venir a festejar.
Alejandro; Claro que si mi amor, justo mi esposa y mi hijo se van de viaje a ver a mi hija, así que como voy a estar solito, voy para allá. A hacerte el amor y otras cosas.
Se besaron de nuevo y ya quedaron en ir, claro, si piensa mi padre que se salva de que lo siga, pues está muy equivocado, más que nunca voy a seguirlo y a ver como otra vez engaña a mi mamá con Germania, su cliente, doctora y en especial, su amante.
Claro está que la noche anterior, antes que parta mi madre a verla a Alejandra, mi hermana, Alejandro, mi papá como siempre, se la coge vuelta a Alfonsina, mi madre, de nuevo a puertas abiertas, ya que es la época de cambio de estación (invierno – primavera), según mamá: “Ale, la primavera me excita mucho mas, así que cógeme amor, si duro, rómpeme mi concha, mi culo, mis agujeros, todas las mañanas, me despierto mojadita, la primavera me pone así”, Alejandro dijo: “Te romperé la concha, el culo, sabes que son míos, así que toma, duro, duro, amor, en la primavera, te pegaré una buena culeada, disfrutaré mucho de los mañaneros, te amo vida”, en eso, cambiaban de pose cada vez, tenían sexo vaginal y anal, los veía como cogían, y mi padre, sinvergüenza mente disfrutaba de mi madre, así como de sus amantes. Hasta que terminaron, y se durmieron desnudos, a puerta abierta.
Llegó el sábado, papá se fue a dejarla a mi mamá al aeropuerto, no me fui yo porque “tenía una juntada con amigos del colegio”, dije eso para seguir a mi padre donde su amante, Germania o Gema, así que, sería mas o menos, las 3pm, cuando mi padre dijo que se iba donde un amigo al predio a entrenar y jugar al fútbol, lo que no sabía es que lo iba a seguir a su encuentro con Germania Alverca, su amante, se fue, lo seguí de lejos, justo se iba rumbo al norte, llegué a un barrio residencial me estacioné distante, ya que la casa de Germania es una mansión elegante, sin rejas de seguridad, justo por ahí vive un amigo, le dije que si podía dejar mi auto en su casa, accedió, y me dediqué a seguir a mi padre.
Al llegar a la casa de Germania, vi a mi padre timbrando, en ello sale su amante, toda en bikini, un cuerpazo. Le dio un beso tremendo, y le hizo pasar, en ello, entré por el patio trasero, ahí había una piscina, parrillas, y todo lo que una mansión tiene, y veo a Germania con mi papá, en la sala, sentados juntos, me acerco un poco, logro escuchar mas o menos así:
Germania: Brindo por ti mi amor, por ser el mejor abogado del país, por librarme de ese hombre que tanto mal me ha hecho, y por nosotros, por lo que vendrá de acá en adelante.
Alejandro: Gracias mi amor, por ti brindo igual, ya que pude cumplir con mi objetivo de divorciarte y dejarte a mi merced amor, por una historia que vamos a construir juntos. Te amo...
Se dieron un pico y brindaron entrelazando sus brazos, como marido y mujer, enseguida dejaron las copas en el mesón y se rindieron con un beso tórrido y apasionado, me llenaba otra vez de rabia porque Alejandro engaña a mi madre, pero medio contento, porque mi papá se va a comer semejante hembrón, bueno, seguían besándose, Germania sacó la camiseta de Alejandro, acariciando su cuerpo trabajando en el gym, bajó su calentador, estando mi padre con sus bóxer. Acarició Germania su bulto, no se resistió ella, que quitó el bóxer a mi padre, dejándolo desnudo, y diciendo:
Germania; ale, que rico pene que tienes, estoy mojadita, solo al tocarlo, lo estaré mas al comermelo y ni se diga cuando me lo claves,
Alejandro, así que te lo quieres comer enterito, que esperas, hazlo, es todo tuyo mi gema rica.
Germania: seguro que es mío...
Alejandro: claro amor, tuyo y de nadie más...
Y enseguida, Germania, la amante, se arrodilló y comenzó a mamar el miembro viril bien erecto de mi papá, primero le daba de lengüetazos, hasta que se lo metió todito en su boca, se lo chupaba con un gusto, como nunca antes lo hubiera hecho, seguía en las chupadas, aceleraba su ritmo, cuando:
Germania: este es el pene más rico que me he comido, que grande lo tienes Ale.
Alejandro: oohh si quieres y tienes ganas, me llamas y yo te lo daré para que lo comas rico oohh
Seguía en las comidas, cuando se puso de pie Germania, se quitó su sostén y la tanga, del traje de baño, quedando totalmente desnuda, nunca vi un cuerpazo desnudo, que envidia me daba ya que mi padre se va a comer ese cuerpazo, en eso, Germania se acostó en el mueble grande de su elegante sala, se abrió de piernas y dijo:
Germania: ahora vente acá Alejandro, hazme sentir hembra, cómeme todita, mi vagina es tuya, venga mi hombre, mi semental, mi macho...
Alejandro: ahí voy mi amor, mi gema hermosa, te voy a comer todita, ni tu ex esposo te la va a comer como lo voy a hacer yo...
Mi papá acercó su boca a la concha de Germania, que se le veía riquísima, Alejandro procedió a comer el sexo de Germania, lo hacía con una pasión, igual que él se lo hace a mi mamá. Él seguía en la comedera, Germania apretaba con su mano derecha la cara de mi padre en su conchita, es común esa acción en las mujeres cuando se van a venir, se estaba viniendo la doctora, cuando:
Germania: aaahhh aaahhhh siii, siiii, que rico papi, hazme acabar rico, que bien lo haces, ahora serás mi amante, cuando tenga ganas de culear, te llamo aaaahh aaaahh...
Alejandro: acaba rico mi gema, como te dije, ni tu ex te va a comer rico tu vagina como lo hago yo, eso mami, si, termina rico, gime, grita, sii...
En eso, Germania se venía con todas sus fuerzas, que su grito se debió escuchar siquiera a 2 cuadras a la redonda:
Germania: aaaaahhhh aaaahhhh siiiiiiiii.
Después de tremendo gemido, mi papá recorrió a punta de besos, el cuerpazo de su amante, concentrándose en sus grandes tetas, que Alejandro se las comía con locura, luego se besaron, así desnudos, en la sala, mi padre procedió a penetrar a Germania,
Alejandro; cosita, ahora viene lo bueno, te voy a penetrar como nunca, así que prepárate...
Germania: ale, penétrame con todo, dame duro, quiero que me cojas rico, así que dale amor...
Se besaron, y mi papá introdujo poco a poco su gran pene en la conchita húmeda y caliente de Germania, ella gemía como desesperada, primero los embates fueron lentos, pero subieron de ritmo con el grado de cachondeo de los amantes, embestida iba y venía con fuerza, Germania no gemía, GRITABA, como signo de excitación tremenda.
Germania: aaaahhh aaaahhh sii amor, sii, culeame rico, asi, si, duro, duro, no pares, aaaahhh aaaahhh.
Alejandro; toma duro mi gema, mi perra rica, mi putita hermosa, toma, sii, así, mas, mas,
En eso, Germania tiene un orgasmo, cuya señal fue que se tambaleó y de no creer, ella EYACULÓ, mojó su lujosa alfombra y mueble con sus jugos vaginales, cansados del primer round, se besaron, la doctora se puso en 4, ya que quería ser penetrada por detrás como una verdadera puta, Alejandro sin perder tiempo, colocó su verga en la cuevita de Germania, lentamente penetraba, hasta coger ritmo, y de ahí si, a penetrar se ha dicho, las embestidas era rápidas y furiosas, ambos estaban en el cielo,
Germania: aaaahhh ale, amor, es mi pose favorita, cógeme así siempre, dame duro, mas, más asiii asssi, siiii, aaaahhhh ahhhhh
Alejandro: si mi cosita, toma duro, disfruta rico de esta cogida, ahora dime amor, quien quiere cogerte rico y duro, dime...
Germania: tu ale, tu, cógeme así, y quiero que siempre me cojas, aaa ahhhh ahhhhh.
En eso, después de tanto rebulú, mi papá sintió que se venía y le dijo:
Alejandro; cosita me vengo, déjame inundarte con mi leche tu cuevita caliente y húmeda, si,
Germania; aaahh sii Alejandro, lléname con tu semen mi huequito caliente, que ya no es regado hace años, sii fecúndame así, sii, siii, aaaahhhh
Alejandro: ahí te va mi amor, toma mi leche, toma...
Germania; damela sii, siii aaahhhh
Y ambos con un solo gemido fuerte:
Ambos: aaaaaahhhh ooooohhhhh que ricoooo que es cogerrrr aaahhh ssssiiiiii.
Sudados y todo, los amantes se besaban como locos, sedientos de tanto ejercicio, se recostaron de ladito, en el mueble grande de la sala, se besaban con pasión, desnudos y sudados, se durmieron.
Sería más o menos una media hora después, ambos despiertan, así desnudos, Germania se llevó a mi papá a la segunda planta, logré ingresar al interior de su casa, caminé si hacer ruido, escuchaba gemidos, y en un cuarto grande y elegante, estaban cogiendo otra vez, Germania y Alejandro, mi padre, ahí concluí que Germania es una mujer que le gusta el sexo, y encontró a mi papá, Alejandro, a su macho consentidor y follador.
Una vez que terminaron de follar, se durmieron vuelta, salí muy despacio de su casa, fui sorprendido y excitado hacia mi auto, serían más o menos las 6 de la tarde, fui a ver a mi novia, follé con ella, así como lo hizo papá con Germania, cuando llegué a mi casa, cansado, más o menos por las medianoche, y papá no llegaba aun. Amaneció y aun no llegaba, seguramente se la habría culeado toda la tarde y noche a su clienta, Germania, él llegó por la tarde, justo para ir a ver a mi madre al aeropuerto.
En sí, descubrí a otra amante de mi padre, su clienta, y si piensan que aquí termina, pues no, porque con el tiempo, voy descubriendo más cosas de Alejandro. Mi querido, gran, ejemplar y digno padre.

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