Esta historia trascurrió después de la primera vez mi esposo me vio teniendo relaciones sexuales con Alejandro. Que fue la primera vez que me vio teniendo relaciones sexuales con otro hombre, su fantasía continuaba acosándome cada vez que hacíamos el amor preguntándome si había tenido sexo con otros hombres. Un viernes que le llegue por la tarde a la oficina iba con ganas de que fuéramos a un bar tomarnos unos tragos. Había tenido una semana muy agitada ya que había atendido a cinco clientes de Aleida y el trabajo de la oficina me tenía a doble jornada. Entre a la oficina y lo espere unos minutos, que fueron aprovechados por su jefe para saludarme mientras David terminaba una reunión. Javier era un trigueño de 40 años más o menos, rellenito y bien gallinazo y morboso se la llevaban bien con mi esposo y me imagino que era por mi. En varias ocasiones ha estado en la casa y no desaprovecha momento para coquetearme, o de pronto agarrarme de la cintura o los hombros así mismo yo también lo abrazaba de la cintura y le acariciaba la espalda pero yo no le hago caso, hasta hubo un día que estuvimos tomándonos unos tragos en la casa habían varias personas y yo en varias ocasiones me le sentaba a su lado dejándome abrazar por el recostándome en su pecho mi espalda y hasta mis manos sus piernas acariciaba. Pero todo era algo muy casual y de confianza. Hasta nos dimos varios besos en la mejilla, sin importarme que la gente estuviera presente Aunque yo me imaginaba que algo por ahí debió de saber acerca de mí, en la otra empresa de ingenieros en donde David trabajo después de haberse graduado.
– Dianita hermosa ¿cómo estas?
Se me acerco mirándome de arriba abajo con cara de depredador buscando comerme toda, se me abalanzo dándome un fuerte y largo abrazo y un beso en la mejilla. Muy pegados y que yo correspondí abrazándolo también.
– Bien… Javi como has estado mi muñeco hermoso
Seguimos sin soltarnos el de mi cintura y yo de sus brazos fuertes los que acariciaba mientras hablábamos
– Mi amor acá trabajando fuertemente ya estamos de salida. - ¿Y tú que milagro en verte por acá? Preciosa. - Vengo por David me lo llevo antes que alguno de ustedes se me adelante, quiero tomarme unos tragos. ¿Te gustaría acompañarnos? Vamos anímate ven con nosotros yo te invito, me encantaría tenerte con nosotros muñeco hermoso.
Le di un beso en la mejilla.
- Vamos di que sí mi vida.
Mis manos acercaron su cuerpo contra el mío y volví a besarlo en la otra mejilla.
Abrazándolo acercando nuestras cinturas.
- Humm ya tenía planes, pero sería imperdonable no aceptarte una invitación, espérame término y nos vemos acá en diez minutos. – Ok te esperamos entonces.
Volvió a darme un beso entre la mejilla la comisura de la mis labios. Me soltó, le sonreí guiñándole el ojo. Y le agarre la mano acercándolo nuevamente.
– No te demores mi vida quiero que nos vayamos rápido.
Y volví a darle un beso en su mejilla quedándome por unos segundos pegada y acariciándole la nuca.
- Te espero acá mi amor divino.
Entro a la oficina. “Huff que calor me hiciste dar” Pensé. Y me imagine terminando la noche en sus brazos, los dos desnudos, haciendo el amor.
Javi salió primero, me alegre al verlo abalanzándome a abrazarlo, mis brazos rodearon su cintura y apretándolo contra mí cuerpo dándole otro beso en la mejilla le dije:
- Que rico papi tenerte hoy, ya verás que no te vas a arrepentir la vas a pasar muy rico esta noche.
En esas salió David
– Hola… papi ¿cómo estas? - Hola mami ¿me conto Javi que nos estabas esperando?
- Hay si hoy tenía ganas de tomarme un trago lo necesito así con ansias. - Jejeje cualquiera que te oiga dirá que eres una alcohólica.
Caminamos abrazada a David y de la mano con Javi.
Había varios esperando el ascensor por lo que me toco no soltar de la mano a Javi que hablando estaba con otro compañero o si no se hubiera quedado por fuera, Obviamente lo hubiéramos esperado abajo. Pero eran 33 pisos. Caminamos por la séptima hasta la av. 19 subimos media cuadra y entramos a una taberna. Que fue donde me pegue mi primera vomitada en una de sus mesas ya hace unos años. Qué pena, esa vez estaba con compañeros de la universidad. Y saque a colación el tema al entrar en ella. Nos sentamos Yo con David y Javi en frente de mí, pedimos cerveza en barril grande, una picada de carnes y media de aguardiente para echarle a las cervezas. La tomata empezó y la charla se centraba en los chismes de la oficina. Un poco de política, varios chistes. Deportes, de todo un poco. El trago se fue acabando y volvimos a pedir otra tanda de cervezas. Fui la primer en pararme al baño que quedaba detrás de nosotros y al dar vuelta vi como el Javi me miraba mi trasero al cruzar miradas le pique el ojo y le envié un beso con mi dedo. Al llegar a la mesa nuevamente. Javi se había también levantado al baño. David me invito a bailar, salimos a la pista y estuvimos 4 piezas de pura salsa. Nos regresamos pues David quería también descargar vejiga, entonces saque a Javi y preciso nos tocó una tanda de Vallenatos, y el sí ni corto ni perezoso sus brazos me agarraron apretándome contra su cuerpo, yo lo abrace colocando mis brazos a la altura de su cintura y mis manos en su espalda la que acariciaba mientras bailábamos, mi mejilla contra la suya.
—Hay dianita hermosa como me gustas mujer, para mi eres una diosa, ni te imaginas la envidia que le tengo a David. Me cae bien, muy bien el verraco. Pero lo envidio en verdad. Me encantaría ser tu amante secreto.
Me quede mirándolo y pensando y en voz alta le dije:
- “¿Y por qué no?”
Me iba a dar un beso pero lo detuve con mi dedo.
– ¡Acá no muñeco!
Voltee a mirar si David ya había salido del baño y no lo vi por ahí.
– Hoo Dianita, discúlpame pero me emocione al tenerte así tan cerca.
Me sonreí y mirándolo fijamente. - No te preocupes papacito rico, mantén la calma que el deseo es mutuo.
- Ven vamos a ese lado oscuro de la pista.
Le agarre la cabeza y lo bese en la boca por unos segundos me retire y diciéndole:
- A mí también… me encantaría ser tu amante secreta.
Volví a besarlo y mirando nuevamente no veíamos a David, volvimos a besarnos y este duro bastante sintiendo su lengua explorar mi boca nos detuvimos, se me quedo mirando con una sonrisa de oreja a oreja, seguimos bailando apretaditos y le sentí que su verga se le paraba poco a poco y lo que sentí me gusto bastante que baje mi mano a su pantalón confirmando lo que sentía, lo mire abriendo mis ojos y con un Guauu en señal de admiración.
- Ay mamita como quisiera agarrarte a besos.
Volví a mirar a ver en donde estaba David y no le veíamos, Nos reíamos con picardía y volvimos a besarnos mi mano acariciaba su verga sobre su pantalón, sus manos mi trasero, la oscuridad de la pista era cómplice nuestra. Bailamos dos piezas más en pleno toque, toque y nos fuimos para la mesa. Sentándome a su lado. David regreso a la mesa.
– ¿Dónde andabas? Le pregunte. – No fui al baño y luego salí a fumarme un cigarrillo.
Se sentó en frente de nosotros, yo estaba seca y me tome un buen sorbo de la cerveza, al igual que Javi, en un momento le agarre la mano a Javi y se la puse en mi pierna quería que me acariciara me abrí de piernas, ese día llevaba un pantalón negro, seguimos hablando y volvimos a bailar con David, el primero fue un bolero, lo que nos hiso bailarlo amacizaditos y se las solté de una para poder esa noche tener relaciones sexuales con Javi.
– ¿Mi vida sabes una cosa? - ¿Que será mami? - ya teníamos nuestros tragos en la cabeza lo que nos facilitó conversar. - Yo solo quiero que no te me vallas a molestar por lo que te voy a decir pero como tú has seguido con tu fantasía de verme hacer el amor con otro hombre, pues yo ya tengo con quien hacerte realidad tu fantasía. - ¿En verdad mami ya tienes a alguien? -
--Si bebe ya tengo al candidato perfecto. – ¿Contame y es que ya has estado haciéndole el amor? - Si mi bebe ya me he acostado con el varias veces. – ¿Y por qué no me habías contado mami? Tu sabes que me gusta saber eso ¿y se puede saber quién es, algún conocido? - Claro que lo conoces papi. Es Javi. –Javi mami, pero como se te ocurre él es mi jefe. – Si ¿Y? Para mí es un hombre más además me encanta ese tipo esta delicioso.
Y acercándomele al oído le dije.
- Además tiene una buena verga. – Pero mami pudiste buscar otro hombre Javi es mi jefe mi amigo y eso me complica la vida. – Y porque te la va a complicar, no seas bobito. – y en verdad ya lo has hecho con él. – Si ya lo hemos hecho así es que relájate porque ya lo hecho, hecho esta y me encanto.
Le mande la mano a su pantalón y su verga estaba erecta.
– Hum pero mírate podrá ser tu amigo pero te gusto saber que me acuesto con él ¿NO?
Nos besamos. Mientras lo hacíamos le decía.
– Y quiero hacerlo con él esta noche te gustaría vernos o sigo haciéndolo a escondidas que dices. – No tocaría que lo hagan, pero que él no se entere que yo, mejor dicho me tocaría esconderme mientras tanto. – Como quieras papi, ¿pero cómo le hacemos? - Sigamos tomando yo hago el que me emborracho me llevan a casa me acuestan y luego te bajas a hacer el amor con él. – Me parece perfecto papi.
Lo bese, mi cuerpo temblaba de la emoción, el disco termino y nos fuimos para la mesa. Seguimos normal, conversando por un rato, David se paro al baño y yo le dije a Javi. Ven acompáñame salimos a fumar. Al salir no sabía porque estaba mi cuerpo temblando tanto, si era el frio o la emoción de empezar lo que más tarde me iba a dar muchas satisfacciones, lo abrace y mirándolo a los ojos nos besamos por varios minutos, sus manos tocaban mi trasero.
-Mamacita quiero hacerte el amor - Yo también papito así es que ayúdame a emborrachar a David y nos vamos para la casa. – ¿Y lo hacemos en tu casa? - Si aprovechamos a que se quede dormido y los dos bajamos a la sala nos desnudamos y me coges bien rico. - Listo mamita ven entremos.
David sin que nos diéramos cuenta nos había visto cuando nos besábamos, ya con eso quedo convencido de mi mentirilla. Duramos una hora más y ya David comenzó a actuar. Entonces le serví otro trago de aguardiente nosotros no estábamos tomando trago solo cerveza y muy lento. En esa entonces el aguardiente no tenía tapa de protección, David había cambiado la botella de aguardiente, por una de agua que envaso en otra botella desocupada de aguardiente. Lo supe después en la casa. Claro nosotros pensando que estaba tomando trago y era solo agua. Salimos con el borrachito y esperamos un taxi que nos pidieron. Llego nos montamos los tres en el puesto trasero yo en medio de los dos. David al rato se hiso el dormido lo que Javi aprovecho para meter sus manos entre mi falda y besarme. Llegamos y lo subimos al cuarto acomodándolo en la cama haciéndose el pesado.
– Espérame abajo ya te alcanzo.
Javi bajo.
– Bueno papi ya bajo.
Saco la botella de aguardiente que traía en el saco se tomó un trago se la quitó y se paró a buscar un suéter para bajar por la terraza para espiarnos, me quite la chaqueta la falda, la blusa y saque un conjunto nuevo de ropa interior que David me había comprado.
– ¿Quieres que me ponga este?
Lo mire abriendo los ojos y moviendo mis cejas rápidamente.
– me parece estupendo para estrenármelo hoy. – Huy si mamita ese te queda perfecto.
Me lo coloque y me pare enfrente del closet el sostén dos pequeños triángulos que apenas me cubrían los pezones dejando ver la redondez de mis tetas sostenidos por cordones delgados al igual que el calzón el que hay que usarlo con la cuquita depilada y tiras sosteniéndolo dejando ver todo mi trasero, David se me acerco por atrás y abrazándome besándome por la nuca.
– Y ahora que más me pongo. - No… nada más baja así lo vas a volver loco cuando te vea.
– ¿Tú crees? - Definitivamente.
Me eche un poco de fragancias de fresas. Me coloque un collar de piedras rojas, medias veladas tipo liguero y unos zapatos rojos de plataforma, me mire al espejo.
– ¿Y que tal como me vez? - Estas divina, no más mira como me tienes.
Mostrándome su verga erecta.
En el closet tenía una botella de ron la saque para bajarla y dos copas.
– Bueno papi me bajo.
Nos besamos y salí al caminar mi cuerpo temblaba de la emoción había sentido su verga y me tenía con ganas de mamársela.
- Que te diviertas cosita rica.
Voltee a mirarlo y me sonreí como niña dispuesta a hacer su picardía, baje rápidamente.
Camine a la escalera deteniéndome por unos segundos, apago la luz y debió de dirigirse a la azotea para bajar por la escalera del patio.
Al llegar a la sala Javi se había desvestido, al verlo quede muy sorprendida, si más se me resbala la botella de ron que llevaba, él me miraba con esa mirada de lujuria y deseo, me le acerque y sonriéndole deje la botella con las copas en la mesa de centro y montándome arrodillada en el sillón nos besamos, le agarre la verga acariciándosela.
–- Mamacita pero que hermosa sos de solo imaginarte se me paro y ahora viéndote así se me va a reventar.
Mi lengua recorrió su pecho lamiéndolo. Seguí bajando hasta llegar a ella, con mis dos manos la acariciaba. Y mirándola por unos segundos, se la lambí desde la raíz hasta su glande.
- Guauu pero que gruesota la tienes papacito. – ¿Te gusta preciosa? ¿Te gusta mi verga? - Me encanta mi amor me encanta que cosa tan rica.
Abriendo mis ojos se lo hice saber.
– Pues es toda tuya acá te la tengo para tu deleite, has con ella lo que quieras.
Seguía lambiéndosela agarrándole la punta con mi mano. Ya para ese momento David debería estar mirándonos desde el patio, me coloque para que no perdiera detalle, de cómo le chupaba la verga a su jefe. A los minutos cambiamos de pose acostándolo boca arriba en el sofá me le coloque de frente entre sus piernas y seguí mamándole la verga metiéndomela hasta el fondo movía mi cabeza con ella adentro, me la sacaba y con la lengua volvía y recorría su tronco lentamente, dejando mi boca en su glande dándole chupaditas, tenía que abrir bien mi boca para metérmela en ella. Luego volvía y me la sacaba y recorría su tronco con mis labios dejando que David me viera hacerlo, movía mi lengua alrededor de su glande, y me la metía lo más que pudiera como vil serpiente engullendo su presa. Así estuve cerca de 30 minutos, no había afán tenía todo el tiempo del mundo para disfrutar de tan exquisito manjar.
– Javi tienes una deliciosa verga. – Mamita cuando me quieras tener mi verga está disponible para hacerte rico en tu rica cuquita.
Me le acerque montándome encima de su cuerpo besándonos apasionadamente.
– Eso me gustaría papi.
Coloque su verga entre mis piernas apretándola, moviéndome. Metí mis manos por su cintura abrazándolo, moviéndome sobre su cuerpo. Sus manos soltaron mi sostén dejando mis tetas al aire las que agarre acercándoselas a su boca para que me las chupara, sus piernas me abrazaron apretándome contra él. Los dos estábamos muy calientes excitados al máximo. Me levante y le ofrecí un trago de ron, coloque música, comencé a bailarle muy sugestivamente. Baile que dómino a la perfección, me quite el calzón botándoselo a la cara, seguí bailando moviendo mis manos por todo mi cuerpo, comencé a dedicarme acariciando mi tetas con la otra mano, me le acerque inclinándome lo hice sentar, para mamarle por unos segundos su verga. Abriendo mis piernas volteaba a mirar asía la terraza imaginándome a David viéndome disfrutar hacer lo que más me gusta. Ponerle los cachos. Me le monte encima, colocándome su verga en mi cuquita me fui deslizando por su tronco la que fue llenándome, deleitándome con su rozar de mis labios vaginales. Mis pies se apoyaban en sus piernas con las rodillas dobladas alrededor de él.
– Ha hijueputa que rico papi.
Me movía en círculo, sintiéndola toda a dentro de mí.
– Que rico mami sentirte, o si muévete así rico me vuelves loco.
Y luego empecé a saltar follándomelo sintiéndolo dentro de mí, sacándome gemidos de placer extremo, deteniéndome por momento para moverme lentamente a través de su tronco levantando mi trasero, volviendo a acelerar mis movimientos.
Mis gemidos ya subidos de tono se escuchaban por toda la casa. Lo hice rodar su cuerpo para poder colocar mis pies en el suelo y cabalgarlo mejor. Y así rápidamente un orgasmo me vino pare por unos segundos acostándome encima de él me abraso fuertemente y yo le agarraba su cabeza dándonos besos húmedos mi respiración eran fuerte mi sangre entraba y salía de mi corazón a un ritmo acelerado. Me la saque y dándome vuelta quede mamándole la verga y colocándole mi cuquita en su boca. Miraba asía la terraza y se la lambia.
- A esta verga tuya papi me mata de gusto.
Metiéndomela todo lo que podía, bajaba por su tronco con mis labios y con mi mano derecha la sostenía, bajaba a sus huevas para agarrárselas y chuparlas, cosa de 10 minutos para luego cambiar de pose, lo levante y me senté abriendo mis piernas de par en par me dedee mi cuquita.
- Vamos papi quiero tu verga otra vez en mí. – Tus deseos son órdenes puta lujuriosa.
Colocándose encima mío me penetro salvajemente, sin contemplaciones, su vega ya me tenía súper dilatada follándome de una sin parar por varios minutos llevándome a sentir sensaciones placenteras. Tenía en frente la ventana de la terraza y miraba asía ella sabiendo que mi adorado esposo estaba allá mirándonos. Escondido por las cortinas y eso me excitaba más complementando mi placer. Hay fueron casi 30 minutos de follarme Javi estaba emocionadísimo y su respiración era muy fuerte. Me vine con el adentro humedeciendo mi cuquita bárbaro. Paramos y se levantó sentándose, me le senté a su lado y bajando a mamársela por 5 minutos, luego me le senté de espaldas y me la volví a meter, me agarraba mis tetas estrujándomelas su verga entraba y salía de mi pistoneándome llevándome al éxtasis nuevamente a los diez minutos, y seguía mirando a la ventana mostrándole con mis muecas lo rico que la estaba pasando a mi esposo, quien no se debería estar perdiendo detalle.
– Me encantas papasote que rica verga tienes sigue así dame más. Ho que rico vamos esta si es una verga de verdad rica Ho me encanta, me encantas me matas de placer vamos fóllame que quiero más.
Eso hiso que Javi aumentara su accionar y por ende a los segundo ambos comenzamos a sentir que nos veníamos, los gritos de placer se escuchaban por toda la casa. Viniéndonos en un mar de líquidos en ese momento El Javi se olvidaba que David debería estar arriba durmiendo porque no le importo emitir sus alaridos al venirse dentro de mí. Me saque su verga y arrodillándomele de frente volví a mamársela con pasión como agradeciéndole lo rico que había estado.
Serví dos copas de ron y tomándomelo de una, me entro en reversa haciéndome temblar sintiéndolo fuerte.
– Hay mamacita me matas mi amor que bueno estuvo eso.
Se paró y mirando asía arriba pregunto.
- ¿Se habrá despertado con esa bulla? - ¡Nooo! Ese quedo profundo no te preocupes podemos hasta echarnos otro. – Por mí los que quieras dianita. Acá tengo esta verga para hacerte lo que tu esposo no te da. – Listo papacito me encanta eso ahorita nos echamos otro bien rico.
Me pare y fui a la cocina buscando agua con un paño adsorbente me limpie mi cuquita, serví dos vasos y me los lleve para la sala, dejándolos en la mesa de centro me monte sobre el sillón abrí mis piernas y le coloque mi cuquita en su cara la que agarro a chuparla y meterme su lengua la que recorría desde mi trasero. Por cosa de varios minutos hasta que me vine nuevamente en dos choriones que le untaron toda su cara. Nos paramos él fue al baño a descargar vejiga y limpiarse. Yo me tome otro trago y medio vasado de agua. Regreso, su verga flácida y en vaivén al caminar. Puse música, me acorde de un mariguano que tenía en la mesita de noche y fui por él, al entrar al cuarto David también entraba por la terraza y abalanzándose sobre mí me empujo sobre la cama y me besaba mis labios vaginales en una arrechura que no le había visto. Se paró y penetrándome de una me follo por 5 minutos nos besamos como locos arrechos.
– No que locura mujer estaba a mil viéndote follar, que locura. - Hay bueno si ya… déjame, párate que quiero volver con Javi papi.
Se levantó y saque el mariguano lo prendí y me baje. Dejándolo acostado. Llegue junto a Javi sentándomele a su lado. Me tome otro trago de ron terminándome el cigarro.
– Ven mi vida, subamos al cuarto de huéspedes. Nos levantamos apague las luces el equipo y nos subimos, entramos dejando la puerta abierta para sí David quería seguir viéndonos, ya debería estar haciendo frio en el jardín. Prendimos las luces y nos acostamos a besarnos acariciándole la verga que fue creciendo en mi mano, baje a mamársela nuevamente.
- Te gusta mamarla muñeca. – Me encanta papi y más siendo así gruesota rica…
Me le monte encima. Y agarrando la verga me la coloque en mi cuquita para dejarme rodar por su tronco, sintiéndolo, follando por casi 30 minutos. Cambiamos de pose me levante y saque un aceite del closet y me lo unte por el trasero hundiendo mis dedos perforando mi trasero y también se lo unte a su verga el me miraba.
– ¿Quieres que te lo meta por el trasero? - ¿Si papi y tu quieres? - Por supuesto que sí.
Me coloque adelante de él acostados de lado se la agarre, la coloque en la entrada y empezó a metérmela suavemente dejándomela adentro por unos segundos placenteros de dolor que ya no me parecen tan dolorosos sino mas bien algo exquisito de sentir ya que después viene lo mejor de todo su verga entrando y saliendo con fuerza con todo de mi trasero dilatado. Una sensación que no debía de dejar pasar. Más de 45 minutos taladrándome, follándome, rompiendo mi trasero llevándome a tres orgasmos durante su salvaje trabajo de placer. Los gritos y gemidos otra vez estaban subidos de tono, pero no nos importaba seguíamos follando con locura sin miedo a nada. Hasta cuando reventamos los dos en un éxtasis profundo, sudando como recién bañados. Yo con una felicidad inmensa no me cambiaría por nada ese momento tan placentero. Su verga se quedó dentro de mi erecta sin bajar la guardia y seguí moviéndome sintiéndola y volvimos a follar por un largo rato otro orgasmo me venía deleitándome mis sensaciones. Ya paramos y abrazándonos por unos segundos, nuestros cuerpos respiraban alterados rápidos. Nos paramos y entramos al baño a ducharnos y refrescarnos. Sin dejarnos de acariciar y besar, salimos jugueteando tocándonos y riendo como dos enamorados, otro trago doble de ron.
- Ha estoy feliz mi amor que rica verga tienes me tiene loca... – Jejejej mamacita tu tranquis que todavía tiene más cuerda…
Lo mire así con cara de interrogación le pregunte.
- ¿Qué quieres echarte otro? - Mamacita a eso vine a comerte toda la noche.
La cara mía de felicidad era evidente. Pero teníamos sed y baje por agua para tomar. Descansamos y al rato iniciamos de nuevo.
– Ven muñeco arrodíllate.
Me le metí por debajo a chuparle y meter mi lengua en su trasero el que lambí por un buen rato, ya que se lo había limpiado muy bien en la ducha. Se le fue poniendo erecta, le fui chupando sus huevas para continuar con mi lengua recorriendo su tronco, Luego me pare y sentándome en frente coloque su verga entre mis tetas y le hice una rica rusa. Por unos minutos y continúe después mamándosela por otro buen rato. Me agarro y colocándome boca arriba me abrió las piernas y me penetro de una mi cuquita. Como por 10 minutos y le dije.
– Vuélveme a meterle por mi trasero. Se la saco y me la metió sin parar pero despacio y ahí sí que nos demoramos dándome verga por él. Terminando casi a las 5 de la mañana ya llevamos 5 horas follando, Mi esposo hace rato se había dormido, pero nosotros seguíamos haciendo el amor quedándonos dormidos en el cuarto. Nos despertamos al medio día, besándonos me pare a ver dónde andaba David, lo encontré en el cuarto viendo la televisión.
– Holas buenos días papi. - Hola mami como estas. – Feliz que noche el Javi que aguante tiene amo a tu jefe. Nos reímos.
- Bueno ahora sigue acá quietecito que él se debe de estar arreglando. Nos vemos más tarde.
Le di un beso y me fui para donde Javi. Se estaba bañando y entre al baño
- David esta todavía dormido.
Hablando en voz baja.
– ¿No se habrá levantado? - No, no creo nos hubiera encontrado en la cama. Se arregló y bajamos. – Cuando nos vemos mamacita y continuamos. – Déjame yo cuadro en la ofi una tarde y nos vemos. – Ok espero tu llamada.
Nos despedimos con un fuerte abrazo y beso. Esa semana no nos pudimos ver hubo bastante trabajo en la oficina y me toco hasta tarde varios días. Toco hasta el Sábado y aprovechando que David fue hasta Tunja pudimos estar todo el día en la casa. Ya que llego a las 10 de la mañana y se fue como a las 7 antes de que David llegara pasando otra tarde de sexo y placer extraordinario, y así fueron muchas las veces que nos vimos durante un semestre hasta lo acompañe en un viaje que le toco hacer a Bucaramanga, pedí permiso en la oficina y nos fuimos cuatro días a David solo le deje avisándole del viaje una nota diciéndole que me iba a estar con Javi esos días y ya. No lo volví a ver desde un día que estando con él en un bar. Nos llegó uno de sus jefes encontrándonos bailando muy amacizados en plena faena de intercambio de salivas devorándonos nuestras lenguas, acompañado con dos amigos, su jefe sabía quién era yo pues ya había estado en reuniones sociales con David y termine yéndome con su jefe lo que no le gusto ni cinco a Javi, Pero eso es otra historia, que les contare con todos los detalles en otro relato.
– Dianita hermosa ¿cómo estas?
Se me acerco mirándome de arriba abajo con cara de depredador buscando comerme toda, se me abalanzo dándome un fuerte y largo abrazo y un beso en la mejilla. Muy pegados y que yo correspondí abrazándolo también.
– Bien… Javi como has estado mi muñeco hermoso
Seguimos sin soltarnos el de mi cintura y yo de sus brazos fuertes los que acariciaba mientras hablábamos
– Mi amor acá trabajando fuertemente ya estamos de salida. - ¿Y tú que milagro en verte por acá? Preciosa. - Vengo por David me lo llevo antes que alguno de ustedes se me adelante, quiero tomarme unos tragos. ¿Te gustaría acompañarnos? Vamos anímate ven con nosotros yo te invito, me encantaría tenerte con nosotros muñeco hermoso.
Le di un beso en la mejilla.
- Vamos di que sí mi vida.
Mis manos acercaron su cuerpo contra el mío y volví a besarlo en la otra mejilla.
Abrazándolo acercando nuestras cinturas.
- Humm ya tenía planes, pero sería imperdonable no aceptarte una invitación, espérame término y nos vemos acá en diez minutos. – Ok te esperamos entonces.
Volvió a darme un beso entre la mejilla la comisura de la mis labios. Me soltó, le sonreí guiñándole el ojo. Y le agarre la mano acercándolo nuevamente.
– No te demores mi vida quiero que nos vayamos rápido.
Y volví a darle un beso en su mejilla quedándome por unos segundos pegada y acariciándole la nuca.
- Te espero acá mi amor divino.
Entro a la oficina. “Huff que calor me hiciste dar” Pensé. Y me imagine terminando la noche en sus brazos, los dos desnudos, haciendo el amor.
Javi salió primero, me alegre al verlo abalanzándome a abrazarlo, mis brazos rodearon su cintura y apretándolo contra mí cuerpo dándole otro beso en la mejilla le dije:
- Que rico papi tenerte hoy, ya verás que no te vas a arrepentir la vas a pasar muy rico esta noche.
En esas salió David
– Hola… papi ¿cómo estas? - Hola mami ¿me conto Javi que nos estabas esperando?
- Hay si hoy tenía ganas de tomarme un trago lo necesito así con ansias. - Jejeje cualquiera que te oiga dirá que eres una alcohólica.
Caminamos abrazada a David y de la mano con Javi.
Había varios esperando el ascensor por lo que me toco no soltar de la mano a Javi que hablando estaba con otro compañero o si no se hubiera quedado por fuera, Obviamente lo hubiéramos esperado abajo. Pero eran 33 pisos. Caminamos por la séptima hasta la av. 19 subimos media cuadra y entramos a una taberna. Que fue donde me pegue mi primera vomitada en una de sus mesas ya hace unos años. Qué pena, esa vez estaba con compañeros de la universidad. Y saque a colación el tema al entrar en ella. Nos sentamos Yo con David y Javi en frente de mí, pedimos cerveza en barril grande, una picada de carnes y media de aguardiente para echarle a las cervezas. La tomata empezó y la charla se centraba en los chismes de la oficina. Un poco de política, varios chistes. Deportes, de todo un poco. El trago se fue acabando y volvimos a pedir otra tanda de cervezas. Fui la primer en pararme al baño que quedaba detrás de nosotros y al dar vuelta vi como el Javi me miraba mi trasero al cruzar miradas le pique el ojo y le envié un beso con mi dedo. Al llegar a la mesa nuevamente. Javi se había también levantado al baño. David me invito a bailar, salimos a la pista y estuvimos 4 piezas de pura salsa. Nos regresamos pues David quería también descargar vejiga, entonces saque a Javi y preciso nos tocó una tanda de Vallenatos, y el sí ni corto ni perezoso sus brazos me agarraron apretándome contra su cuerpo, yo lo abrace colocando mis brazos a la altura de su cintura y mis manos en su espalda la que acariciaba mientras bailábamos, mi mejilla contra la suya.
—Hay dianita hermosa como me gustas mujer, para mi eres una diosa, ni te imaginas la envidia que le tengo a David. Me cae bien, muy bien el verraco. Pero lo envidio en verdad. Me encantaría ser tu amante secreto.
Me quede mirándolo y pensando y en voz alta le dije:
- “¿Y por qué no?”
Me iba a dar un beso pero lo detuve con mi dedo.
– ¡Acá no muñeco!
Voltee a mirar si David ya había salido del baño y no lo vi por ahí.
– Hoo Dianita, discúlpame pero me emocione al tenerte así tan cerca.
Me sonreí y mirándolo fijamente. - No te preocupes papacito rico, mantén la calma que el deseo es mutuo.
- Ven vamos a ese lado oscuro de la pista.
Le agarre la cabeza y lo bese en la boca por unos segundos me retire y diciéndole:
- A mí también… me encantaría ser tu amante secreta.
Volví a besarlo y mirando nuevamente no veíamos a David, volvimos a besarnos y este duro bastante sintiendo su lengua explorar mi boca nos detuvimos, se me quedo mirando con una sonrisa de oreja a oreja, seguimos bailando apretaditos y le sentí que su verga se le paraba poco a poco y lo que sentí me gusto bastante que baje mi mano a su pantalón confirmando lo que sentía, lo mire abriendo mis ojos y con un Guauu en señal de admiración.
- Ay mamita como quisiera agarrarte a besos.
Volví a mirar a ver en donde estaba David y no le veíamos, Nos reíamos con picardía y volvimos a besarnos mi mano acariciaba su verga sobre su pantalón, sus manos mi trasero, la oscuridad de la pista era cómplice nuestra. Bailamos dos piezas más en pleno toque, toque y nos fuimos para la mesa. Sentándome a su lado. David regreso a la mesa.
– ¿Dónde andabas? Le pregunte. – No fui al baño y luego salí a fumarme un cigarrillo.
Se sentó en frente de nosotros, yo estaba seca y me tome un buen sorbo de la cerveza, al igual que Javi, en un momento le agarre la mano a Javi y se la puse en mi pierna quería que me acariciara me abrí de piernas, ese día llevaba un pantalón negro, seguimos hablando y volvimos a bailar con David, el primero fue un bolero, lo que nos hiso bailarlo amacizaditos y se las solté de una para poder esa noche tener relaciones sexuales con Javi.
– ¿Mi vida sabes una cosa? - ¿Que será mami? - ya teníamos nuestros tragos en la cabeza lo que nos facilitó conversar. - Yo solo quiero que no te me vallas a molestar por lo que te voy a decir pero como tú has seguido con tu fantasía de verme hacer el amor con otro hombre, pues yo ya tengo con quien hacerte realidad tu fantasía. - ¿En verdad mami ya tienes a alguien? -
--Si bebe ya tengo al candidato perfecto. – ¿Contame y es que ya has estado haciéndole el amor? - Si mi bebe ya me he acostado con el varias veces. – ¿Y por qué no me habías contado mami? Tu sabes que me gusta saber eso ¿y se puede saber quién es, algún conocido? - Claro que lo conoces papi. Es Javi. –Javi mami, pero como se te ocurre él es mi jefe. – Si ¿Y? Para mí es un hombre más además me encanta ese tipo esta delicioso.
Y acercándomele al oído le dije.
- Además tiene una buena verga. – Pero mami pudiste buscar otro hombre Javi es mi jefe mi amigo y eso me complica la vida. – Y porque te la va a complicar, no seas bobito. – y en verdad ya lo has hecho con él. – Si ya lo hemos hecho así es que relájate porque ya lo hecho, hecho esta y me encanto.
Le mande la mano a su pantalón y su verga estaba erecta.
– Hum pero mírate podrá ser tu amigo pero te gusto saber que me acuesto con él ¿NO?
Nos besamos. Mientras lo hacíamos le decía.
– Y quiero hacerlo con él esta noche te gustaría vernos o sigo haciéndolo a escondidas que dices. – No tocaría que lo hagan, pero que él no se entere que yo, mejor dicho me tocaría esconderme mientras tanto. – Como quieras papi, ¿pero cómo le hacemos? - Sigamos tomando yo hago el que me emborracho me llevan a casa me acuestan y luego te bajas a hacer el amor con él. – Me parece perfecto papi.
Lo bese, mi cuerpo temblaba de la emoción, el disco termino y nos fuimos para la mesa. Seguimos normal, conversando por un rato, David se paro al baño y yo le dije a Javi. Ven acompáñame salimos a fumar. Al salir no sabía porque estaba mi cuerpo temblando tanto, si era el frio o la emoción de empezar lo que más tarde me iba a dar muchas satisfacciones, lo abrace y mirándolo a los ojos nos besamos por varios minutos, sus manos tocaban mi trasero.
-Mamacita quiero hacerte el amor - Yo también papito así es que ayúdame a emborrachar a David y nos vamos para la casa. – ¿Y lo hacemos en tu casa? - Si aprovechamos a que se quede dormido y los dos bajamos a la sala nos desnudamos y me coges bien rico. - Listo mamita ven entremos.
David sin que nos diéramos cuenta nos había visto cuando nos besábamos, ya con eso quedo convencido de mi mentirilla. Duramos una hora más y ya David comenzó a actuar. Entonces le serví otro trago de aguardiente nosotros no estábamos tomando trago solo cerveza y muy lento. En esa entonces el aguardiente no tenía tapa de protección, David había cambiado la botella de aguardiente, por una de agua que envaso en otra botella desocupada de aguardiente. Lo supe después en la casa. Claro nosotros pensando que estaba tomando trago y era solo agua. Salimos con el borrachito y esperamos un taxi que nos pidieron. Llego nos montamos los tres en el puesto trasero yo en medio de los dos. David al rato se hiso el dormido lo que Javi aprovecho para meter sus manos entre mi falda y besarme. Llegamos y lo subimos al cuarto acomodándolo en la cama haciéndose el pesado.
– Espérame abajo ya te alcanzo.
Javi bajo.
– Bueno papi ya bajo.
Saco la botella de aguardiente que traía en el saco se tomó un trago se la quitó y se paró a buscar un suéter para bajar por la terraza para espiarnos, me quite la chaqueta la falda, la blusa y saque un conjunto nuevo de ropa interior que David me había comprado.
– ¿Quieres que me ponga este?
Lo mire abriendo los ojos y moviendo mis cejas rápidamente.
– me parece estupendo para estrenármelo hoy. – Huy si mamita ese te queda perfecto.
Me lo coloque y me pare enfrente del closet el sostén dos pequeños triángulos que apenas me cubrían los pezones dejando ver la redondez de mis tetas sostenidos por cordones delgados al igual que el calzón el que hay que usarlo con la cuquita depilada y tiras sosteniéndolo dejando ver todo mi trasero, David se me acerco por atrás y abrazándome besándome por la nuca.
– Y ahora que más me pongo. - No… nada más baja así lo vas a volver loco cuando te vea.
– ¿Tú crees? - Definitivamente.
Me eche un poco de fragancias de fresas. Me coloque un collar de piedras rojas, medias veladas tipo liguero y unos zapatos rojos de plataforma, me mire al espejo.
– ¿Y que tal como me vez? - Estas divina, no más mira como me tienes.
Mostrándome su verga erecta.
En el closet tenía una botella de ron la saque para bajarla y dos copas.
– Bueno papi me bajo.
Nos besamos y salí al caminar mi cuerpo temblaba de la emoción había sentido su verga y me tenía con ganas de mamársela.
- Que te diviertas cosita rica.
Voltee a mirarlo y me sonreí como niña dispuesta a hacer su picardía, baje rápidamente.
Camine a la escalera deteniéndome por unos segundos, apago la luz y debió de dirigirse a la azotea para bajar por la escalera del patio.
Al llegar a la sala Javi se había desvestido, al verlo quede muy sorprendida, si más se me resbala la botella de ron que llevaba, él me miraba con esa mirada de lujuria y deseo, me le acerque y sonriéndole deje la botella con las copas en la mesa de centro y montándome arrodillada en el sillón nos besamos, le agarre la verga acariciándosela.
–- Mamacita pero que hermosa sos de solo imaginarte se me paro y ahora viéndote así se me va a reventar.
Mi lengua recorrió su pecho lamiéndolo. Seguí bajando hasta llegar a ella, con mis dos manos la acariciaba. Y mirándola por unos segundos, se la lambí desde la raíz hasta su glande.
- Guauu pero que gruesota la tienes papacito. – ¿Te gusta preciosa? ¿Te gusta mi verga? - Me encanta mi amor me encanta que cosa tan rica.
Abriendo mis ojos se lo hice saber.
– Pues es toda tuya acá te la tengo para tu deleite, has con ella lo que quieras.
Seguía lambiéndosela agarrándole la punta con mi mano. Ya para ese momento David debería estar mirándonos desde el patio, me coloque para que no perdiera detalle, de cómo le chupaba la verga a su jefe. A los minutos cambiamos de pose acostándolo boca arriba en el sofá me le coloque de frente entre sus piernas y seguí mamándole la verga metiéndomela hasta el fondo movía mi cabeza con ella adentro, me la sacaba y con la lengua volvía y recorría su tronco lentamente, dejando mi boca en su glande dándole chupaditas, tenía que abrir bien mi boca para metérmela en ella. Luego volvía y me la sacaba y recorría su tronco con mis labios dejando que David me viera hacerlo, movía mi lengua alrededor de su glande, y me la metía lo más que pudiera como vil serpiente engullendo su presa. Así estuve cerca de 30 minutos, no había afán tenía todo el tiempo del mundo para disfrutar de tan exquisito manjar.
– Javi tienes una deliciosa verga. – Mamita cuando me quieras tener mi verga está disponible para hacerte rico en tu rica cuquita.
Me le acerque montándome encima de su cuerpo besándonos apasionadamente.
– Eso me gustaría papi.
Coloque su verga entre mis piernas apretándola, moviéndome. Metí mis manos por su cintura abrazándolo, moviéndome sobre su cuerpo. Sus manos soltaron mi sostén dejando mis tetas al aire las que agarre acercándoselas a su boca para que me las chupara, sus piernas me abrazaron apretándome contra él. Los dos estábamos muy calientes excitados al máximo. Me levante y le ofrecí un trago de ron, coloque música, comencé a bailarle muy sugestivamente. Baile que dómino a la perfección, me quite el calzón botándoselo a la cara, seguí bailando moviendo mis manos por todo mi cuerpo, comencé a dedicarme acariciando mi tetas con la otra mano, me le acerque inclinándome lo hice sentar, para mamarle por unos segundos su verga. Abriendo mis piernas volteaba a mirar asía la terraza imaginándome a David viéndome disfrutar hacer lo que más me gusta. Ponerle los cachos. Me le monte encima, colocándome su verga en mi cuquita me fui deslizando por su tronco la que fue llenándome, deleitándome con su rozar de mis labios vaginales. Mis pies se apoyaban en sus piernas con las rodillas dobladas alrededor de él.
– Ha hijueputa que rico papi.
Me movía en círculo, sintiéndola toda a dentro de mí.
– Que rico mami sentirte, o si muévete así rico me vuelves loco.
Y luego empecé a saltar follándomelo sintiéndolo dentro de mí, sacándome gemidos de placer extremo, deteniéndome por momento para moverme lentamente a través de su tronco levantando mi trasero, volviendo a acelerar mis movimientos.
Mis gemidos ya subidos de tono se escuchaban por toda la casa. Lo hice rodar su cuerpo para poder colocar mis pies en el suelo y cabalgarlo mejor. Y así rápidamente un orgasmo me vino pare por unos segundos acostándome encima de él me abraso fuertemente y yo le agarraba su cabeza dándonos besos húmedos mi respiración eran fuerte mi sangre entraba y salía de mi corazón a un ritmo acelerado. Me la saque y dándome vuelta quede mamándole la verga y colocándole mi cuquita en su boca. Miraba asía la terraza y se la lambia.
- A esta verga tuya papi me mata de gusto.
Metiéndomela todo lo que podía, bajaba por su tronco con mis labios y con mi mano derecha la sostenía, bajaba a sus huevas para agarrárselas y chuparlas, cosa de 10 minutos para luego cambiar de pose, lo levante y me senté abriendo mis piernas de par en par me dedee mi cuquita.
- Vamos papi quiero tu verga otra vez en mí. – Tus deseos son órdenes puta lujuriosa.
Colocándose encima mío me penetro salvajemente, sin contemplaciones, su vega ya me tenía súper dilatada follándome de una sin parar por varios minutos llevándome a sentir sensaciones placenteras. Tenía en frente la ventana de la terraza y miraba asía ella sabiendo que mi adorado esposo estaba allá mirándonos. Escondido por las cortinas y eso me excitaba más complementando mi placer. Hay fueron casi 30 minutos de follarme Javi estaba emocionadísimo y su respiración era muy fuerte. Me vine con el adentro humedeciendo mi cuquita bárbaro. Paramos y se levantó sentándose, me le senté a su lado y bajando a mamársela por 5 minutos, luego me le senté de espaldas y me la volví a meter, me agarraba mis tetas estrujándomelas su verga entraba y salía de mi pistoneándome llevándome al éxtasis nuevamente a los diez minutos, y seguía mirando a la ventana mostrándole con mis muecas lo rico que la estaba pasando a mi esposo, quien no se debería estar perdiendo detalle.
– Me encantas papasote que rica verga tienes sigue así dame más. Ho que rico vamos esta si es una verga de verdad rica Ho me encanta, me encantas me matas de placer vamos fóllame que quiero más.
Eso hiso que Javi aumentara su accionar y por ende a los segundo ambos comenzamos a sentir que nos veníamos, los gritos de placer se escuchaban por toda la casa. Viniéndonos en un mar de líquidos en ese momento El Javi se olvidaba que David debería estar arriba durmiendo porque no le importo emitir sus alaridos al venirse dentro de mí. Me saque su verga y arrodillándomele de frente volví a mamársela con pasión como agradeciéndole lo rico que había estado.
Serví dos copas de ron y tomándomelo de una, me entro en reversa haciéndome temblar sintiéndolo fuerte.
– Hay mamacita me matas mi amor que bueno estuvo eso.
Se paró y mirando asía arriba pregunto.
- ¿Se habrá despertado con esa bulla? - ¡Nooo! Ese quedo profundo no te preocupes podemos hasta echarnos otro. – Por mí los que quieras dianita. Acá tengo esta verga para hacerte lo que tu esposo no te da. – Listo papacito me encanta eso ahorita nos echamos otro bien rico.
Me pare y fui a la cocina buscando agua con un paño adsorbente me limpie mi cuquita, serví dos vasos y me los lleve para la sala, dejándolos en la mesa de centro me monte sobre el sillón abrí mis piernas y le coloque mi cuquita en su cara la que agarro a chuparla y meterme su lengua la que recorría desde mi trasero. Por cosa de varios minutos hasta que me vine nuevamente en dos choriones que le untaron toda su cara. Nos paramos él fue al baño a descargar vejiga y limpiarse. Yo me tome otro trago y medio vasado de agua. Regreso, su verga flácida y en vaivén al caminar. Puse música, me acorde de un mariguano que tenía en la mesita de noche y fui por él, al entrar al cuarto David también entraba por la terraza y abalanzándose sobre mí me empujo sobre la cama y me besaba mis labios vaginales en una arrechura que no le había visto. Se paró y penetrándome de una me follo por 5 minutos nos besamos como locos arrechos.
– No que locura mujer estaba a mil viéndote follar, que locura. - Hay bueno si ya… déjame, párate que quiero volver con Javi papi.
Se levantó y saque el mariguano lo prendí y me baje. Dejándolo acostado. Llegue junto a Javi sentándomele a su lado. Me tome otro trago de ron terminándome el cigarro.
– Ven mi vida, subamos al cuarto de huéspedes. Nos levantamos apague las luces el equipo y nos subimos, entramos dejando la puerta abierta para sí David quería seguir viéndonos, ya debería estar haciendo frio en el jardín. Prendimos las luces y nos acostamos a besarnos acariciándole la verga que fue creciendo en mi mano, baje a mamársela nuevamente.
- Te gusta mamarla muñeca. – Me encanta papi y más siendo así gruesota rica…
Me le monte encima. Y agarrando la verga me la coloque en mi cuquita para dejarme rodar por su tronco, sintiéndolo, follando por casi 30 minutos. Cambiamos de pose me levante y saque un aceite del closet y me lo unte por el trasero hundiendo mis dedos perforando mi trasero y también se lo unte a su verga el me miraba.
– ¿Quieres que te lo meta por el trasero? - ¿Si papi y tu quieres? - Por supuesto que sí.
Me coloque adelante de él acostados de lado se la agarre, la coloque en la entrada y empezó a metérmela suavemente dejándomela adentro por unos segundos placenteros de dolor que ya no me parecen tan dolorosos sino mas bien algo exquisito de sentir ya que después viene lo mejor de todo su verga entrando y saliendo con fuerza con todo de mi trasero dilatado. Una sensación que no debía de dejar pasar. Más de 45 minutos taladrándome, follándome, rompiendo mi trasero llevándome a tres orgasmos durante su salvaje trabajo de placer. Los gritos y gemidos otra vez estaban subidos de tono, pero no nos importaba seguíamos follando con locura sin miedo a nada. Hasta cuando reventamos los dos en un éxtasis profundo, sudando como recién bañados. Yo con una felicidad inmensa no me cambiaría por nada ese momento tan placentero. Su verga se quedó dentro de mi erecta sin bajar la guardia y seguí moviéndome sintiéndola y volvimos a follar por un largo rato otro orgasmo me venía deleitándome mis sensaciones. Ya paramos y abrazándonos por unos segundos, nuestros cuerpos respiraban alterados rápidos. Nos paramos y entramos al baño a ducharnos y refrescarnos. Sin dejarnos de acariciar y besar, salimos jugueteando tocándonos y riendo como dos enamorados, otro trago doble de ron.
- Ha estoy feliz mi amor que rica verga tienes me tiene loca... – Jejejej mamacita tu tranquis que todavía tiene más cuerda…
Lo mire así con cara de interrogación le pregunte.
- ¿Qué quieres echarte otro? - Mamacita a eso vine a comerte toda la noche.
La cara mía de felicidad era evidente. Pero teníamos sed y baje por agua para tomar. Descansamos y al rato iniciamos de nuevo.
– Ven muñeco arrodíllate.
Me le metí por debajo a chuparle y meter mi lengua en su trasero el que lambí por un buen rato, ya que se lo había limpiado muy bien en la ducha. Se le fue poniendo erecta, le fui chupando sus huevas para continuar con mi lengua recorriendo su tronco, Luego me pare y sentándome en frente coloque su verga entre mis tetas y le hice una rica rusa. Por unos minutos y continúe después mamándosela por otro buen rato. Me agarro y colocándome boca arriba me abrió las piernas y me penetro de una mi cuquita. Como por 10 minutos y le dije.
– Vuélveme a meterle por mi trasero. Se la saco y me la metió sin parar pero despacio y ahí sí que nos demoramos dándome verga por él. Terminando casi a las 5 de la mañana ya llevamos 5 horas follando, Mi esposo hace rato se había dormido, pero nosotros seguíamos haciendo el amor quedándonos dormidos en el cuarto. Nos despertamos al medio día, besándonos me pare a ver dónde andaba David, lo encontré en el cuarto viendo la televisión.
– Holas buenos días papi. - Hola mami como estas. – Feliz que noche el Javi que aguante tiene amo a tu jefe. Nos reímos.
- Bueno ahora sigue acá quietecito que él se debe de estar arreglando. Nos vemos más tarde.
Le di un beso y me fui para donde Javi. Se estaba bañando y entre al baño
- David esta todavía dormido.
Hablando en voz baja.
– ¿No se habrá levantado? - No, no creo nos hubiera encontrado en la cama. Se arregló y bajamos. – Cuando nos vemos mamacita y continuamos. – Déjame yo cuadro en la ofi una tarde y nos vemos. – Ok espero tu llamada.
Nos despedimos con un fuerte abrazo y beso. Esa semana no nos pudimos ver hubo bastante trabajo en la oficina y me toco hasta tarde varios días. Toco hasta el Sábado y aprovechando que David fue hasta Tunja pudimos estar todo el día en la casa. Ya que llego a las 10 de la mañana y se fue como a las 7 antes de que David llegara pasando otra tarde de sexo y placer extraordinario, y así fueron muchas las veces que nos vimos durante un semestre hasta lo acompañe en un viaje que le toco hacer a Bucaramanga, pedí permiso en la oficina y nos fuimos cuatro días a David solo le deje avisándole del viaje una nota diciéndole que me iba a estar con Javi esos días y ya. No lo volví a ver desde un día que estando con él en un bar. Nos llegó uno de sus jefes encontrándonos bailando muy amacizados en plena faena de intercambio de salivas devorándonos nuestras lenguas, acompañado con dos amigos, su jefe sabía quién era yo pues ya había estado en reuniones sociales con David y termine yéndome con su jefe lo que no le gusto ni cinco a Javi, Pero eso es otra historia, que les contare con todos los detalles en otro relato.
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