Sube la escalera del colectivo cansado de la rutina tediosade la oficina. Paga su boleto como todo trabajador decente y se sienta en elprimer asiento libre que encuentra. A los minutos de sentado cierra los ojoscomo para repasar cada paso, cada situación que vivió en ese dia pegajoso yaburrido de Enero.
Sin darse cuenta cayó en un sueño profundo. De esos sueñosque te transportan a los lugares donde realmente querés estar. No un lugarespecífico, sino alguna situación reconfortante.
De proto ese sueño se transforma en sensación. Esecosquilleo que se siente cuando entra a tus sueños el deseo más prohibido ybuscado. Siente como sus pantalones comienzan a aparetarse y su bulto comienzaa tomar vida propia. A crecer sin buscarlo. En su sueño siente una caricia queva subiendo por sus piernas y esa caricia se deposita en su miembro. Alprincipio siente que sólo se apoya sobre él pero pronto, con el traqueteo delcolectivo, se empieza a mover. Acariciando todo el largo que su pantalón dejaentrever. Una y otra vez, suave y delicadamente siente como su glande es rozadoy le provoca pequeños espasmos de placer. De pronto siente como una mano cálidalogra traspasar los limites de su cinturón y se siente bien claro la carne fríade una mano suave contra el calor de su miembro. Mientras por su mente pasanimágenes que no puede descifrar bien pero que entiende que se relaciona con algúnamor antiguo que siempre viene a su mente para darle ese placer nocturno quesolo las diosas de la noche pueden hacer aparecer, como por arte de magia.
Ahora esa mano se siente más como una garra que intentaabrazar todo su miembro, subiendo y bajando lentamente y apretando con dulzurasu cabeza en cada movimiento.
Y un poquito más rápido, y un poquito más rápido, hasta queel placer se hace extremo y…..pum. Siente un chorro de extasis que sale desdemuy adentro y de repente se siente húmedo. Muy húmedo. Esa humedad lo despiertade golpe y se encuentra recién acabado, lleno de placer. De pronto escucha unavoz a su lado.
Permiso le dice. Cuando la mira ve a una mujer? Hombre? Ya nose acuerda, pero nota algo que le llama la atención: Le sonríe cuando lo mira yse lleva un dedo a la boca. Un dedo lleno de una sustancia blanca y viscosa,muy parecido a lo que él había derramado minutos antes de despertarse. Lleva sudedo a su boca con un placer inmenso y saborea, mientras lo mira, el néctar dequizás, su fruto.
Pasa delante de él para bajarse en la próxima parada.
El sigue absorto y extasiado por lo que acababa de pasar.
Fue producto de un sueño o la inspiracíon de aquel peculiar orgasmotranseúnte se acababa de bajar de su colectivo imaginario?
Sin darse cuenta cayó en un sueño profundo. De esos sueñosque te transportan a los lugares donde realmente querés estar. No un lugarespecífico, sino alguna situación reconfortante.
De proto ese sueño se transforma en sensación. Esecosquilleo que se siente cuando entra a tus sueños el deseo más prohibido ybuscado. Siente como sus pantalones comienzan a aparetarse y su bulto comienzaa tomar vida propia. A crecer sin buscarlo. En su sueño siente una caricia queva subiendo por sus piernas y esa caricia se deposita en su miembro. Alprincipio siente que sólo se apoya sobre él pero pronto, con el traqueteo delcolectivo, se empieza a mover. Acariciando todo el largo que su pantalón dejaentrever. Una y otra vez, suave y delicadamente siente como su glande es rozadoy le provoca pequeños espasmos de placer. De pronto siente como una mano cálidalogra traspasar los limites de su cinturón y se siente bien claro la carne fríade una mano suave contra el calor de su miembro. Mientras por su mente pasanimágenes que no puede descifrar bien pero que entiende que se relaciona con algúnamor antiguo que siempre viene a su mente para darle ese placer nocturno quesolo las diosas de la noche pueden hacer aparecer, como por arte de magia.
Ahora esa mano se siente más como una garra que intentaabrazar todo su miembro, subiendo y bajando lentamente y apretando con dulzurasu cabeza en cada movimiento.
Y un poquito más rápido, y un poquito más rápido, hasta queel placer se hace extremo y…..pum. Siente un chorro de extasis que sale desdemuy adentro y de repente se siente húmedo. Muy húmedo. Esa humedad lo despiertade golpe y se encuentra recién acabado, lleno de placer. De pronto escucha unavoz a su lado.
Permiso le dice. Cuando la mira ve a una mujer? Hombre? Ya nose acuerda, pero nota algo que le llama la atención: Le sonríe cuando lo mira yse lleva un dedo a la boca. Un dedo lleno de una sustancia blanca y viscosa,muy parecido a lo que él había derramado minutos antes de despertarse. Lleva sudedo a su boca con un placer inmenso y saborea, mientras lo mira, el néctar dequizás, su fruto.
Pasa delante de él para bajarse en la próxima parada.
El sigue absorto y extasiado por lo que acababa de pasar.
Fue producto de un sueño o la inspiracíon de aquel peculiar orgasmotranseúnte se acababa de bajar de su colectivo imaginario?
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