Vacaciones con Pampita

Marcelo y Esteban eran íntimos amigos de toda la vida. Rondaban los 30 años y entre ellos no había secretos ni intimidad. Compartían todo, especialmente lo sexual. Debutaron juntos en un trío con una puta, compartieron mujeres, se contaban todo, se reunían para pajearse juntos y ambos trabajaron como strippers. No eran pareja, pero si una amistad muy fuerte con el sexo de por medio.

Habían planeado unas vacaciones en Miami con la idea de descansar y cogerse a cuánta trola se cruzarán.

Ni bien llegaron al hotel, uno de los mejores de la ciudad, se fueron a la pileta. Se la pasaron mirando culos y tetas que pasaban. En un momento apareció una con un micro bikini, bien entangada y casi en bolas. Estaba sola, se sentó en una reposera a tomar sol y a sacarse fotos con el celular.

"Uy, mira que buena la trola esa que llegó recién", dijo Marcelo. "¿No es Pampita?", preguntó Esteban. Entraron al IG de ella y comprobaron que Pampita estaba en el mismo hotel que ellos.





A Pampita la tenían como una de sus famosas preferidas cuando se juntaban a pajar, así que estaban como locos al verla ahí casi en bolas. Fueron a pedirle una selfie y verla de cerca.

"Ufff, otra vez unos argentinos hincha pelotas", pensó Pampita cuando se acercaron los amigos y la saludaron. Cuando levantó la vista del celular vio a dos tipos musculosos, en sunga y bien pijudos. Pampita no tuvo drama en sacarse varias fotos.

Se quedaron charlando un rato y, ya en confianza, Pampita les contó que había ido por trabajo, que aprovecho unos días de vacaciones y que estaba sola.

Más tarde coincidieron en el gimnasio del hotel. Pampita apareció con una remera y una calza super ajustada que le marcaba todo el culo. Esteban y Marcelo volaban de la calentura y traban de disimular las pijas que cada vez estaban más al palo.



Como estaban en el mismo piso con habituaciones a poca distancia y habían pegado buena onda, volvieron juntos. Le preguntaron a Pampita si les podía recomendar algún lugar para ir a la noche porque era la primera vez en Miami. Pampita les dijo que les podían ir a un lugar de un amigo. Los hizo pasar a la habituación para darles las invitaciones que tenía guardadas.

Cuando Pampita les dio las invitaciones para entrar gratis al VIP, Marcelo y Esteban le avisaron que iban un rato a la pileta. "Esperen que vamos juntos. Vuelvan en 5 y estoy lista. Entren sin golpear". Los dos amigos volvieron con la sunga puesta, nada más. Pampita se apareció otra vez con una micro bikini.

Estaban y Marcelo ya no aguantaban la calentura. Se notaba demasiado que estaban al palo. "¿Qué pasa? ¿Les gusta mucho mi bikini?", preguntó Pampita cada vez más tentada con esas pijas. Se acercó y les empezó a manosear las pijas.



"¿Querés pija? Acá tenes dos machos bien pijudos para vos", dijo Esteban desesperado por cogersela. Pampita se arrodilló y les bajó la sunga. Las dos pijas al toque se terminaron de poner bien al palo. Pampita arrodillada empezó a chupar y a pajear. "Hace rato que no me comía unas pijas así de grande", decía.

"Ahora vas a ser nuestra puta", le decía Marcelo mientras se cogía a Pampita por la boca. "Mira como estamos por tu culpa, trola de mierda", decía Esteban. Los dos estaban bien al palo y se sentían unos machos poderosos.

Llevaron a Pampita a la cama. Le arrancaron la micro bikini y mientras Marcelo le chupaba la concha Esteban le metía la pija en la boca. Estaba bien mojada, desesperada por esas pijas. Después de un rato de chupar, Marcelo se paró y de una le metió la pija hasta el fondo. Pampita no pudo gritar porque tenía la verga de Esteban en la boca.

Marcelo le daba duro y le gritaba "sos nuestra puta". Después fue el turno de Esteban, que le empezó a dar con furia. "Rómpeme todo hijo de puta", decía Pampita, que tuvo un tremendo orgasmo.

Cambiaron de posición y la pusieron 4. Marcelo empezó a meter el dedo por el culo. "No la cola no. Tienen la pija muy grande", dijo Pampita. Los amigos se pusieron como locos. Cuando estaban cogiendo no aceptaban que la puta les dijera que no y no iban a perder la oportunidad de cumplir su mayor fantasía: romperle el culo a Pampita.

Marcelo la agarró del pelo a Pampita y sacado le dijo "mira Pamputa, estamos al palo por tu culpa y ahora sos nuestra puta, te vamos a hacer lo que queremos. Te vamos a dar por culo porque a dos machos calientes no se le dice que no, ¿entendiste?".



Mientras se la cogían, le iban abriendo el culo a Pampita con dedos y saliva. Cuando estuvo bien abierto, Marcelo le empezó a meter la pija de poco. Pampita pedía que se la sacaran, pero a Marcelo no le importaba, hasta que entró toda. Empezó a bombear despacio, pero cada vez iba más fuerte.

La intensidad era cada vez más y Pampita empezó a gozar con esa pija. Marcelo se la cogía cada vez más fuerte, Pampita en 4 gemía de placer y pedía mas. Pampita no aguantó y se tiró en la cama boca a abajo. Marcelo seguía dándole. "El culo de Pampita es mío, me pertenece", gritaba Marcelo mientras flexionaba los brazos mostrando los músculos sintiéndose un macho bien poderoso.

Llegó el turno de Estaban. La puso de nuevo en 4 y bien abierto de piernas la clavó hasta el fondo por el culo. Marcelo jugaba con la concha de Pampita, que tuvo un segundo orgasmo, más fuerte que el anterior. Esteban bombeaba fuerte y gritaba "te lo mereces por puta y por no querer entregar el culo, Pamputa".

Le hicieron una doble penetración intensa a Pampita, que con los dos pijones adentro volvió a tener un orgasmo. Se la cogieron fuerte, la insultaban y la humillaban.

Después de un rato largo en el que la gozaron como quisieron a Pampita, los amigos acabaron de manera brutal. Esteban largo toda la leche en el culo y Marcelo en la cara.

Esteban y Marcelo tenían muchas experiencias sexuales juntos, pero ninguna fue como tener a Pampita como su puta.