Al día siguiente era un domingo horrible. Lluvia y frío. Nos levantamos tarde y le propuse hacer una comida liviana en la cama con una película.
- Me encanta el plan!
Almorzamos unos sandwiches y miramos una peli mala de terror adolescente, de esas que tienen asesinos seriales y chicas tetonas. En un momento dado, cerca del final había una escena de sexo bastante sugerente.
- Ah bueno! Menos mal que se olvidaron que los pueden matar! - Dije yo para restarle erotismo al momento.
- Bueno, si a mi me preguntás creo que el peligro excita!
- Epa! Que declaración hermanita! Te pone cachonda que un asesino te persiga? Jaja
- Tonto! Solo digo que si mi vida corriera peligro yo también querría vivir un último momento agradable! Además no me digas que no calienta la escena!
- Bueno, sí. La mina está fuerte, aunque no me gustan las siliconas. Prefiero las tetas más agarrables!
- Epa hermanito! Que declaración! Jajaja
Nos distrajo un gemido de la protagonista y nos metimos en la escena otra vez. Desde el ángulo de la cámara uno podía pensar que estaban haciendo un anal. Leni pareció pensar lo mismo.
- Le está haciendo el orto?
- Leni! Como sabés esas cosas?
- No te hagas el virgo! Nunca lo hiciste?
- El qué?
- El culo nabo! Jaja
- Eso no es asunto tuyo! Vos sí?
- Tampoco es asunto tuyo... Pero digamos que mi novio sabe hacer muchas cosas!
- Así que Edu te hizo la cola! Mirá vos! Jaja
- Sí tarado! Y más de una vez!
- Aaaah bueeeeno! Con razón la tenés tan cachetuda y paradita! Jajaja
- Aaay que decís? Mi cola siempre fue linda! Jaja
Me dio un codazo cómplice, al que yo respondí agarrando y apoyando mi cara en su hombro. Nos reíamos juntos como nunca, hablando de sexo.
- Es verdad! Tenés muy linda cola... Anoche... La vi bien...
Los dos dejamos de reir.
- Gracias! Que lo digas vos es raro, pero lindo.
- Por?
- Porque me viste en bolas y no me querés coger, como hubiera pasado con otro tipo...
- Bueno! O sea... Me molesta que la cola más linda que vi en mi vida la haya disfrutado otro y yo no!
- No te entiendo... Que me querés decir?
- Que si no fueras mi hermana, yo hubiera querido lo que cualquier otro tipo...
-Aaay que degeneraaadoooo! Jajaja Mejor no te doy la espalda! Jajaja
- Bueno, yo acá siendo honesto y vos te burlás de mí! Cuanta maldad!
- Perdoname Gabito! Bueno, para que sepas, vos tenés la pija más linda que vi.
Me abrazo del cuello, haciendo que mi nariz quedara atrapada cerca de su oreja, otra vez su olor me estimuló. Respiré profundo y la abracé yo también.
- Ejem... Bueno... Ponemos otra cosa? Terminó la peli.
- Netflix?
- Mmm... Quiero algo más... Divertido! Esta peli me dejó cachonda, con ganas de más!
No se a que estaba jugando esta chica, pero no me dejé intimidar.
- Querés que ponga porno? Tengo un dvd lleno.
- Que pajero! Jaja... Dale. Poné.
- Vamos a ver...
Puse el dvd y busqué un video que tenía a una pareja casi amateur haciendo de todo.
- Que bueno que está ese chabón!
- Todo trabajado el guacho. La mina por lo menos es natural, aunque le falta gracia, le sobra entusiasmo.
- Sí. Muy petera!
Entre el video y la charla, los calores y el color en la cara de ambos empezó a aumentar. Llegó mi escena favorita, el anal profundo con las piernas de ella colgadas en los hombres de él, que empezaba lento e iba aumentando hasta el momento que el tipo la sacaba para bañar en semen a la rubia.
En el momento en que se la clavaba bien al fondo se me paró. Para disimular mi calentura le hice un chiste a mi hermana:
- No decís nada ahora? Así te lo hacían? Jaja
- Ja... No... No tan... Así!
Estaba colorada y respiraba etrecortado. Le miré las tetas de reojo y vi sus pezones duros. Ella no sacaba los ojos de la pantalla. Mi pija latía bajo las mantas.
- Estás bien hermanita?
- No... eh, sí! Tengo calor!
Tiró de las mantas de golpe.
- No pará!
Sin tiempo de dejar mi plato quedé en evidencia. Mi erección era enorme.
- Que pas... Mierda!
Miró mi bulto sobresaltada. Estiró una mano para tocar y la sacó rápido antes de hacerlo.
- Bueno, este video me... Estimula!
- Está bien. Yo también estoy... Estimulada! Jaja No te aprieta?
- Sí, pero que querés que haga?
- Sacate el boxer y tapate.
En el video habían pasado al anal intenso. Me estallaba abajo. Me tapé y me saqué el boxer rápido.
- Uuhuuh! - Dijo Elena revoleando mi ropa interior al piso.
- Y ahora cuando quiera salir al baño que me pongo?
- Aah... Nada! Andá en culito! Jajaja
- Bueno, entonces vos también sacate la parte de abajo! Así es más justo.
- Mmm... Ok. No puede ser peor que anoche no? Jaja
Adoraba su actitud desenfadada y su desvergüenza. Se sacó su shortcito y la tanga que a modo juguetón se la saqué y me la puse entre los dientes.
- Esaaa! Queremos ver la colita!
- Jajaja Sos terrible!
Nos acomodamos de nuevo y puse otro video. En este un tipo le daba mucho sexo oral a una actriz porno antes de clavarle la pija sin piedad. Los dos mirábamos sin hablar. Ella rompió el silencio.
- Cuanta intensidad! Muy actuado!
- Nunca cogiste así?
- No. Es una exageración!
- En este caso sí, pero yo cojo así cuando estoy muy caliente!
- Aaay que machote cogedor! Jajaja
El tipo se la sacaba de la concha y acaba mucho en las tetas duras de la mina.
Elena se acomodó en la cama. Su pierna desnuda rozaba la mía.
- Eso tampoco es muy real. No es una cantidad normal!
- Sí lo es cuando estuviste reteniendo... Yo suelo largar mucho.
- Ja eso habría que verlo!
- Con lo que vengo aguantando, acabaría enseguida... Pero no he tenido ni el momento ni el lugar.
Me acarició una pierna, tocándomela al pasar con la punta de sus dedos. Me recorrió en escalofrío.
- Cuidado con la mano, por favor...
- Pobre Gabito! Sos tan bueno y educado...
Me miró con cara de corderito. Su boca se entreabría. Me destapó lentamente.
- Que hacés Leni?
- Me cuidaste anoche. Yo te quiero cuidar hoy.
Me acarició el pecho y bajó la mano.
- Esto está muy duro. Te va a hacer mal...
Me tocaba suavemente. Sin apretar. Mi lado animal se sacudía en mi interior. Se mojó unos dedos en la boca y me humedeció la punta.
- Ahh... Que vas a hacer?
- Vos te vas a hacer una paja, hermanito. Para que descargues y te sientas mejor.
- Es que estoy un poco incómodo...
- Acomodate... Como querés hacer?
- Quiero decir que pajearme frente a vos...
- No te sientas incómodo! Es natural y necesaria la paja... Te puedo ayudar... Acercate!
Ella se sacó la parte de arriba. Sus tetas pequeñas eran hermosas. Me arrodillé frente a ella.
- Ok. Verla de cerca es fuerte...
Me empecé a pajear de a poco, muy cerca de su cara.
- Mmmm... Que bien huele!
Deslizó una mano a su entrepierna. Se tocaba al mismo ritmo que me hacía la paja. Con una voz tímida le pregunté:
- La puedo frotar en tu piel?
-... Ajá... Mmmm...
Se recostó. Yo me acerqué más y lubriqué con saliva el glande y empecé a mover lento la mano arriba y abajo. Me miraba la pija con expresión interesada.
- Dale... Apoyame eso...
Ver sus tetas me calentaba más de lo que estaba dispuesto a admitir. La bestia quería hacerle todo. Se la apoyé en su panza y me pajeé contra su piel. El contacto nos erizó la piel a los dos.
-Aah... Gabo... Que caliente... Uff...
Aumenté el ritmo, haciéndole notar que estaba disfrutando.
- Que... pervertido que sos! Te pajeás con tu hermana!
- Sí, me gusta el morbo, lo admito. Pero vos también te estás tocando, sos otra pervertida!
- Mmm... Sí... Hay algo excitante y divertido en esto... No me siento rara, me siento cómoda así... Quiero que te relajes, acabes y te sientas bien.
Di un paso más y acerqué mi pija a su pubis, tapado por la mano que acariciaba la zona.
- Me querés ver la concha? Te calentaría más eso?
- Siiií!
Fue poco más de un minuto de mirar nuestros sexos mutuamente, noté que me faltaba poco. Me acerqué más. Entretanto ella jugaba con su clítoris y abría sus labios.
- Que pasa Gabito? Vas a acabar?
Esto querías? Mirá como me tenés!
Asentí y apunté mi pija hacia sus tetas. Mi hermana ya se pajeaba abiertamente y gemía sin dejar de mirar mi pija. Me acerqué aún más y eyaculé con mucho placer violentamente varios chorros de semen, todos caían en sus tetas, pecho y cuello. Leni tiró su cabeza hacia atrás y sin dejar de meterse dedos con una mano, se frotó todo el semen con la otra.
- Aaaah aahh... Aaay...
Su voz y sus contorsiones me indicaban que ella también había tenido un orgasmo intenso. Le costó un momento recuperar el aliento.
- Estuvo muy bueno... Nunca me imaginé que tocarme delante de mi hermano me iba a poner así!
- Lo mismo digo! Jamás acabé tanto y tan placenteramente!
- Sos una bestia! No mentías cuando decías que largabas mucho! Me bañaste!
- Es que venía guardando... Y estaba muy excitado!
- Te calentaste conmigo?
- Sí! Estoy mal?
- Gabito... Los dos estamos mal entonces!
- Oook... Y ahora como seguimos?
- Nunca cogiste así?
- No. Es una exageración!
- En este caso sí, pero yo cojo así cuando estoy muy caliente!
- Aaay que machote cogedor! Jajaja
El tipo se la sacaba de la concha y acaba mucho en las tetas duras de la mina.
Elena se acomodó en la cama. Su pierna desnuda rozaba la mía.
- Eso tampoco es muy real. No es una cantidad normal!
- Sí lo es cuando estuviste reteniendo... Yo suelo largar mucho.
- Ja eso habría que verlo!
- Con lo que vengo aguantando, acabaría enseguida... Pero no he tenido ni el momento ni el lugar.
Me acarició una pierna, tocándomela al pasar con la punta de sus dedos. Me recorrió en escalofrío.
- Cuidado con la mano, por favor...
- Pobre Gabito! Sos tan bueno y educado...
Me miró con cara de corderito. Su boca se entreabría. Me destapó lentamente.
- Que hacés Leni?
- Me cuidaste anoche. Yo te quiero cuidar hoy.
Me acarició el pecho y bajó la mano.
- Esto está muy duro. Te va a hacer mal...
Me tocaba suavemente. Sin apretar. Mi lado animal se sacudía en mi interior. Se mojó unos dedos en la boca y me humedeció la punta.
- Ahh... Que vas a hacer?
- Vos te vas a hacer una paja, hermanito. Para que descargues y te sientas mejor.
- Es que estoy un poco incómodo...
- Acomodate... Como querés hacer?
- Quiero decir que pajearme frente a vos...
- No te sientas incómodo! Es natural y necesaria la paja... Te puedo ayudar... Acercate!
Ella se sacó la parte de arriba. Sus tetas pequeñas eran hermosas. Me arrodillé frente a ella.
- Ok. Verla de cerca es fuerte...
Me empecé a pajear de a poco, muy cerca de su cara.
- Mmmm... Que bien huele!
Deslizó una mano a su entrepierna. Se tocaba al mismo ritmo que me hacía la paja. Con una voz tímida le pregunté:
- La puedo frotar en tu piel?
-... Ajá... Mmmm...
Se recostó. Yo me acerqué más y lubriqué con saliva el glande y empecé a mover lento la mano arriba y abajo. Me miraba la pija con expresión interesada.
- Dale... Apoyame eso...
Ver sus tetas me calentaba más de lo que estaba dispuesto a admitir. La bestia quería hacerle todo. Se la apoyé en su panza y me pajeé contra su piel. El contacto nos erizó la piel a los dos.
-Aah... Gabo... Que caliente... Uff...
Aumenté el ritmo, haciéndole notar que estaba disfrutando.
- Que... pervertido que sos! Te pajeás con tu hermana!
- Sí, me gusta el morbo, lo admito. Pero vos también te estás tocando, sos otra pervertida!
- Mmm... Sí... Hay algo excitante y divertido en esto... No me siento rara, me siento cómoda así... Quiero que te relajes, acabes y te sientas bien.
Di un paso más y acerqué mi pija a su pubis, tapado por la mano que acariciaba la zona.
- Me querés ver la concha? Te calentaría más eso?
- Siiií!
Fue poco más de un minuto de mirar nuestros sexos mutuamente, noté que me faltaba poco. Me acerqué más. Entretanto ella jugaba con su clítoris y abría sus labios.
- Que pasa Gabito? Vas a acabar?
Esto querías? Mirá como me tenés!
Asentí y apunté mi pija hacia sus tetas. Mi hermana ya se pajeaba abiertamente y gemía sin dejar de mirar mi pija. Me acerqué aún más y eyaculé con mucho placer violentamente varios chorros de semen, todos caían en sus tetas, pecho y cuello. Leni tiró su cabeza hacia atrás y sin dejar de meterse dedos con una mano, se frotó todo el semen con la otra.
- Aaaah aahh... Aaay...
Su voz y sus contorsiones me indicaban que ella también había tenido un orgasmo intenso. Le costó un momento recuperar el aliento.
- Estuvo muy bueno... Nunca me imaginé que tocarme delante de mi hermano me iba a poner así!
- Lo mismo digo! Jamás acabé tanto y tan placenteramente!
- Sos una bestia! No mentías cuando decías que largabas mucho! Me bañaste!
- Es que venía guardando... Y estaba muy excitado!
- Te calentaste conmigo?
- Sí! Estoy mal?
- Gabito... Los dos estamos mal entonces!
- Oook... Y ahora como seguimos?
2 comentarios - Mi hermana y yo - Capítulo 2