A mi madre se la follan en el pueblo (4)

La noche de aquel domingo de Agosto pienso que cambió mi vida. Cómo recordaréis, estábamos de veraneo en el pueblo y eran las fiestas de allí. Aún sigo pensando que aquel día no debí salir de casa, pero menos permitir que lo hicieran mis padres...

Esa noche conocí mejor a Sergio. Ver su habitación supuso para mí la confirmación de que era un auténtico degenerado como más tarde me confirmó. Ya en el baile lo demostró en parte, coqueteando con el mayor de los descaros con mi madre, hasta conseguir arrinconar a la pobre tras el escenario, como os conté en la tercera parte de mi relato. Si no llega a ser porque actué con rapidez se la hubiese follado allí mismo el muy cabrón. Pero todo aquel esfuerzo no sirvió de nada... Aprovechando uno de mis descuidos, su amigo consiguió su objetivo e hizo suya a mi madre en el cuarto de Sergio. Aún me parece estar viéndole allí encima de ella, hundiéndose en su sexo al tiempo que se mofaba de mi pobre padre, que desconocía lo que allí ocurría mientras él rememoraba sus años jóvenes con aquel futbolín...

Pero lo peor estaba aún por venir. Su amigo acababa de tomar el relevo de Sergio en aquella partida con mi padre, habiendo soltado antes algún chascarrillo sobre lo que acababa de ocurrir arriba... No sé si fue eso u otra cosa, pero lo cierto es que tras eso Sergio decidió buscar lo mismo... y es en ese punto donde retomo lo ocurrido, donde empiezo a recordar las escenas más duras que me tocó presenciar aquella fatídica noche.

Cuando vi a Sergio salir por aquella puerta no supe que hacer. Tenía claro que se dirigía arriba, camino de su cuarto, donde le esperaba mi madre. Aquel quizás fuera un buen momento para avisar a papá de lo que estaba ocurriendo desde que llegamos al pueblo pero, de nuevo, no me atreví a hacerlo. Ese fue mi primer error de la noche. Tras dudar unos instantes, las risas y los comentarios de sus dos amigos, junto al futbolín, me sacaron de mi abstracción mental:

Menuda ración de rabo que le espera hoy a esta...

"Pa" empezar no ha estado mal la que le acabo de dar yo, jajaja...

Aquello era inaudito. Tras mirar a papá, que seguía jugando como un crío, les dejo allí y salgo como un autómata hacia la escalera. Aquel fue mi segundo error y sin duda, el peor de todos. Cuando me doy cuenta, ya estoy en los últimos peldaños de la misma. Termino la ascensión notando como el corazón me late a mil por hora. Sé sin duda lo que voy a ver en ese horrible cuarto y lo que es peor, no albergo esperanza alguna de poder evitarlo...

Deambulo por aquel alargado pasillo y pocos metros antes de llegar a aquella habitación, que tiene la puerta entreabierta, oigo la voz de Sergio.

Hoy es el día gatita. Hoy es el día que tanto hemos esperado...

No puedo evitarlo y me asomo por la entornada puerta. Veo como Sergio se quita la camiseta y tras ella, sus vaqueros. Al muy cabrón le falta tiempo para ponerse encima de mi madre y comienza a lamerle el cuello para bajar hasta sus pechos, los cuales empieza a devorar a conciencia. Luego, sube hasta los labios de mi madre y comienza a meter su asquerosa lengua en su boca, hasta ver como desaparece en ella. Mientras, sus manos juguetean con los pezones erectos de mi mamá, tiran de ellos, los pellizcan, se mueven en círculos a su alrededor, para después abandonarlos y bajar hasta su sexo y desaparecer dos de sus dedos en él. Un gemido se escapa de la boca de mamá a la que oigo decir:

Pero Sergio, ¿quieres más?

Ya sabes que sí, princesa. Sabes que no me canso y menos contigo. Nunca te he montado con Joaquín tan cerca y no sabes como me pone... Deja que te lo demuestre.

Parece repetirse la escena de la primera vez en el coche. Sergio se incorpora delante de ella y bajándose los boxer nos muestra ese enorme pistón que se alza impaciente en busca de hembra, y la hembra es mi madre. Sergio me ve allí, y dirigiéndose a mi madre, que abre los ojos como platos, le dice:

Va a ser como la primera vez cariño - al tiempo que se pone sobre ella y me mira sonriendo como aquella noche - Quiero que la disfrutes de nuevo. Va a ser hoy princesa, con tu marido y tu hijo aquí.... hoy vas a dejar de tener este chochín...

Sergio dice esto mirándome y sonriendo al tiempo que saca e introduce de nuevo dos de sus dedos en el sexo de mi madre.

Hoy te abriré por completo...MMMMM, que mojadito que está. ¿Tienes ganas eh, princesa?

Me encanta como lo haces.... - ¿Como podía mi madre decir eso?-

Lo sé..

Oigo decir al muy capullo mientras comienza a presionar en mi madre.... Es hacer esto y ver las piernas de ella enrollarse alrededor de la cintura de él, hasta descansar en sus nalgas. Con sus brazos rodea su musculado cuerpo, para a continuación empiezar a clavar sus uñas en su espalda, a medida que él comienza a entrar en ella...

Así, así , gatita... ábrete bien para mí... - dice el muy cabrón a mi madre mientras clava su mirada en mí- Te estás convirtiendo en toda una experta, ¿eh?

Aaahhhh, así... - responde mi madre, sin duda bastante más consciente que en el polvo anterior-

Sí, ya sé que te gusta... tranquila que es toda para ti, - dice sonriéndome el muy capullo - Sigues con él cerradito, aunque entra mejor que las primeras veces....te voy a hacer una auténtica devoradora de XXL mi amor. Deja que entre un poco más en ti... Así...

Aahhhh

Ya sé que te gusta... el que parece no enterarse es Joaquín, ¿verdad? Tendría que saber de tus necesidades, a ver si te atiende un poco mejor. Mmmmm, ya estoy casi dentro, cariño....

MMMmm, siiií - Mi madre ahí comienza a gemir-

¿Te gusta, eh? - Repite Sergio sonriendo....- Lo supe desde el primer día....

¿El qué? Pregunta mi madre....

Que eras una viciosilla.... lo supe desde el primer día. Fue verte bajar de ese "buga", con tu marido y tu hijo ahí al lado, y saberlo. Saber que este chochín y estas tetazas serían para mí... que disfrutarías bien de mi verga.... y que te iba a espabilar. Se te veía a falta de rabo y mira por donde ,fuiste a dar con el más grande para quedarte bien a gusto, ¿eh? ¿o no disfrutas de mi rabo?- Pregunto mirándome a mí como queriendo que yo me enterara bien...

Aahhh, síiii. Jamás había disfrutado tanto...

Lo sé cariño

Decía Sergio al tiempo que se la desenfunda y se pone de rodillas dejando a mi madre entre sus piernas, para comenzar a masajear aquella polla, que él trata como a un trofeo, con los pechos de mamá. Sergio agarra a continuación sus tetas con cada una de sus manos. Enseguida veo como comienza a desaparecer aquel pedazo de polla entre las peras de mamá, para volver a asomar un amoratado y descomunal capullo, y parte del tronco, por la parte superior de su canalillo, hasta lograr rozar los labios de mi madre. Repite esta operación un par de veces y es a la tercera cuando mamá abre su boca con intención de comenzar a lamerlo, pero Sergio desciende de nuevo diciendo:

Pero que golosona eres, ¿eh? - Mirándome y sonriendo-

Vuelve a repetir la operación pero ahora sí deja a mi madre comenzar a degustar aquella fruta... Es ahora cuando compruebo que mamá sabe muy bien lo que está haciendo, no como antes... Ahora es plenamente consciente de lo que ocurre y hasta diría que lo desea...

Mmmmmm, joder como la mamas... Parece mentira que una tía casadita como tú la chupe así. MMMMM, que maravilla - dice sonriéndome de nuevo -

Sergio continúa con su impresionante cubana en las bufas de mi madre y de vez en cuando se detiene, para dejarme contemplar como la ávida boca de mamá busca su vergota y comienza a succionar de ella. Al cabo de unos segundos repite la operación comentando:

Uffff, con pocas tetas puedo hacer esto, Ana. Y las tuyas son increíbles. Perfectas para mi polla. Unas tetas enormes para una polla enorme, como tiene que ser... ¿A que te gusta el jueguecito?. Seguro que Joaquín no te hace estas cosas...

No, nunca....

Yo lo sabía yo, que ese no sabía disfrutar de una jamona como tú. Ni de tus tetazas ni de tu chochito - dice metiendo ahora tres dedos en el sexo de mamá y siguiendo con la cubana.....- Qué desperdicio... con la caña que yo te daría... ya te dije que conmigo ibas a estar pariendo cada nueve meses, Ana. Que a mí no me gustan los hijos únicos - dijo el cabrón clavando su mirada en mí- Están todos "agilipollaos", sin separarse de las faldas de su mami.... - decía incorporándose de nuevo y mostrando otra vez el monstruo que tenía entre las piernas-

Acto seguido, da la vuelta a mamá en el colchón y le hace poner a 4 patas. Se sitúa detrás de ella apuntando directamente a su coñito. En menos de un segundo presiona y le enfunda casi la mitad, unos diez o doce centímetros. Tiene que tapar con una de sus manos la boca de mamá para que sus gemidos no se oigan entre el griterío que viene de abajo. El muy capullo comienza un vaivén cadencioso en ella, mientras con su mano tapa la boca de mi madre y con la otra manosea sus tetas, como queriendo estrujárselas. El muy cabrón no aparta su mirada de la mía. Con cada uno de sus rítmicos movimientos se introduce más y más en el coñito de mamá y veo como la sonrisa de su cara aumenta por momentos. De pronto le oigo:

Si Joaquín no puede, me tienes que dejar a mí. Os puedo ayudar a ti y a Mario....Yo lo haría por vosotros...

¿El qué? - Pregunta mamá entre gemidos, aprovechando que Sergio libera su boca un instante-

Preñarte de nuevo cariño. Lo haría por vosotros. ¿No te gustaría tener otro "baby", ahora que Mario ya está grandecito...? A él le vendría bien, "pa" que se espabile un poco y no esté tan pendiente de ti... - Dice el muy capullo bombeando ahora con todas sus ganas y metiendo por completo sus 23cm en mamá- Yo hago unos niños preciosos y a Joaquín le dices que es suyo y ya está. Te haría la barriga aquí en el pueblo antes de que os fuerais.... A Mario seguro que le encantaría tener un hermanito.... - dice volviéndose hacía mí, buscando mi mirada y sonriendo nuevamente... - Uffff, y no dejo de imaginar estas ubres repletitas de leche mi amor - le oigo decir según magrea las peras de mamá- Yo mismo iría a diario hasta pucela para ordeñártelas bien. Te iba a sacar la leche a mordiscos hasta dejártelas sin gota cariño. Aaahhh, Me va a reventar la polla de cómo se me pone imaginándolo todo. ¿Me dejarás, cariño? ¿No quieres tener otro niño?

Yo siempre quise, pero Joaquín no quiere más...

Pues dile que han fallado esas pastillas que tomas y ya está... Una vez que te vea embarazada verás que ilusión le hace...

No puedo hacer eso.... Ahhhh, me encanta como lo haces... me haces disfrutar como nadie...

Lo sé cariño. Yo sé lo que tú necesitas. Te gusta así, ¿eh?. Bien profundo...

Me encanta... Me debo estar volviendo loca pero jamás he sentido algo así...

Uffff, lo que daría por que subiesen Joaquín o Mario y nos vieran así. Tú encantada de recibir polla y a mí dándote mi vergón con gusto, intentando preñar a su mujer y a su mamaita....

Debo de tener la cara desencajada por todo lo que oigo... Me parece surrealista todo, lo ocurrido anteriormente y lo que mis ojos ven en este momento. ¿Cómo se puede ser así de cabrón? ¿Cómo se puede follar a la madre de un chico casi de su edad, a la mujer del amigo de su padre, a la esposa de un cliente? Y por si fuera poco querer dejarla en estado.... Pero eso no lo puedo consentir, haré lo imposible por tratar de evitarlo.

Es ahora, cuando me doy cuenta de que debí contárselo todo a mi padre desde el primer día. Fui un estúpido al pensar que podría controlar la situación y ahora veo que soy incapaz de hacerlo. Si no actúo rápido, el macarra ese es capaz de salirse con la suya y acabar preñando a mi madre. Me da palo y no sé cómo lo voy a hacer, pero creo que ha llegado el momento de decirle toda la verdad. Seguro que él sabrá lo que hacer. Salgo de allí, dejando a ese cabrón montando bien duro a mi madre a "lo perrito". Hasta que no estoy a mitad de la escalera no dejo de escuchar los intensos jadeos de mamá, pero hasta que no llego abajo los gruñidos que emite Sergio no dejan de ser perceptibles. Jamás pensé que diría esto pero creo que si no se lo digo a mi padre, acabará convirtiendo a mamá en una puta a su servicio y al de sus amigos.

Al entrar en la cochera veo a papá ahí, tan ingenuo como de costumbre, jugando con su amigo de la infancia mientras el hijo de este está arriba con mi madre... También juega con él el de la camisa, el amigo de Medina que acaba de follársela arriba. Veo a éste como mira a mi padre, con una sonrisa burlona como queriendo decírselo todo, decirle que a hecho suya a su mujer, que ha disfrutado de ella y que le ha dado el placer que él por lo visto no le da. También sigue allí el de la camiseta, que entre gritos anima a mi padre en su juego mientras sonríe a su amigo al tiempo que se lleva la mano al paquete haciendo gestos obscenos, aludiendo a lo que ocurre arriba...

Debo impedir esta situación dantesca en la que mi padre es el centro de todas las burlas y mi madre el claro objetivo de ellos. Me dirijo con cara desencajada hasta donde está papá. Al principio parece no enterarse de nada, pero después me mira y me dice que tengo mala cara, que si me pasa algo... Remata su frase diciendo que si me encuentro mal me vaya para casa a dormir, como ha hecho mamá.... No soporto más esa ingenuidad, lo debe saber todo...

Es en el momento de intentar esbozar la primera palabra cuando el de la camiseta pone su mano en mi hombro y dice:

Al chaval no le pasa nada, sólo está cansado, Joaquín. ¿Verdad Mario? Anda chavalote, vamos "pa" dentro a tomar un poco de agua y verás como te encuentras mucho mejor

Según dice esto, noto como me empuja por el hombro y me conduce raudo al interior de la casa de nuevo. Es allí, en el hall, cuando con cara de auténtico salido, me dice que si pienso fastidiarlo todo, que o me porto bien o me da dos hostias, pero que yo no le voy a joder el polvo de esta noche.

Ya no sé qué hacer. Antes de que me quiera dar cuenta me lleva en volandas de nuevo para arriba por la escalera. Según subimos me dice que mi madre está cojonuda y que se la va a follar bien duro por puta y calientapollas, que sólo hay que verla con esos escotes y como se mueve, para darse cuenta que le va la marcha. que mi padre es un pringado que no le da caña, que la tiene a falta de rabo, pasando hambre y que por eso ella busca lo que busca... me dice: "se lo va a pasar en grande chaval. esta noche no la olvida, con tres buenas estacas para ella.... "

Me temo lo peor. Avanzamos por el pasillo de nuevo hacia la habitación de Sergio a la vez que me susurra:

- Y pórtate bien, ¿eh? Vamos a ver que tal va Sergio, porque después voy yo. Y no te preocupes por ella que se lo está pasando de puta madre por lo que me ha dicho mi primo. Así que calladito y todos contentos. Incluso te puedes hacer unas pajillas viéndolo "to". Uffff, cómo va la cosa.... Menudo zorrón es tu mamá, chico. No esperaba ver a la señorona recibiendo verga a 4 patas. Sií que le va la marcha, sí señor.... jeje

Es entonces cuando oigo de nuevo las palabras de Sergio, que llegan claras hasta donde estamos los dos:

Ahora cariño, ahora vamos a comenzar con las clases de parto sin dolor.... Ya verás como a partir de hoy dilatarás mejor. Es el momento de que este chochín de cría madure de una vez, "pa" que consigas parir bien... Vamos allá, hay que intentar agrandarlo....

Es oír esto y ver como comienza unos rítmicos movimientos circulares con su cadera, al tiempo que se interna más en ella, para acto seguido desenfundar casi por completo. De nuevo repite la operación.... Sus palabras martillean mi mente.

Ummmm, cariño. ¡Qué chochito tienes! ¡cómo me oprime la polla! me va a costar trabajo abrírtelo más... Es increíble lo cerradita que te conservas... y eso me da más morbo, abrir bien a una casada jamona como tú... MMMMmmmmm

Aahhhhh, no puedo más... Me matas de placer - dice mi madre entre auténticos gemidos-

Tú disfruta, que yo me encargo del resto. ¿Ves?, cada vez entra mejor...

Aaahhhhhh, me corrroooo - ¿Pero como mi madre podía decir eso?-

Disfruta mi amor, relájate así, puedo notar como relajas tus músculos y cada vez entra mejor... Mmmmmmmmm, hasta el fondo.... ¿ves que fácil ha sido? Ufffff, ya me tienes de nuevo visitando con mi pollón este útero tan rico.... Que gustazo me da, cómo te siento, mi amor..... y ahora vamos a agrandarlo más aún....

Acto seguido veo que comienza con unas embestidas cíclicas y brutales. Puedo verle salir casi por completo para a continuación hundir su pistón hasta chocar con su vientre en las nalgas de mamá. Pienso que la va a reventar de cómo empuja, que sentir esa mole entrar y salir en ella estará siendo para mi madre una auténtica tortura... Pero de repente sus gemidos me dejan estupefacto....

Aahhhh, me corro de nuevo.... Me matas de placer....

Menudo zorrón - me dice el de la camiseta al oído- ¿ves como disfruta la muy puta? Ganas tengo de calzármela...

Sergio tiene que tapar la boca de mamá con una de sus manos para evitar que se oigan sus gritos de gozo. Miro de nuevo a Sergio que nos ve y sonriendo no aparta sus ojos de los míos...

Sí, goza cariño.... Antes de venir al pueblo necesitabas un buen rabo, ¿eh? Dios como entra ahora....en mi vida la he clavado así... disfruta de ella... córrete, córrete más....

Aaaahhh... Siiii ...aaaahhh

Las caderas de Sergio no cesan, adelante y atrás, adelante de nuevo, movimientos en círculo una vez que está dentro y hasta que la saca, para luego empujar de nuevo hasta hundirse por completo y todo sin parar.... El coño de mi madre se ha hecho perfectamente a la enorme polla de Sergio y a cada embestida se oye como un chapoteo producto de los flujos que mi madre está soltado a chorro.

Al cabo de un buen rato para, desenfunda su pollón, y retrocede un poco para admirar su obra dándome a mí la espalda. Al poco se vuelve sonriendo y con un dedo nos indica que miremos. Me quedo atónito. Delante de mí tengo el sexo de mi madre abierto como si estuviese recibiendo una polla en él, pero estando vacío. Me asusto al ver aquello. Aquel bastardo ha reventado a mi madre y para colmo nos mira sonriendo, orgulloso de su hazaña. Acto seguido se tumba boca arriba sobre el colchón y le dice a mi madre:

Vamos cariño...Ahora te toca cabalgar. Quiero ver como botan estas tetazas mientras Joaquín está ahí abajo, sin "coscarse" de "na".... vamos cariño, enfúndatela. Verás como entra ahora....

Completamente atónito puedo presenciar como mi madre, de espaldas a mí, se pone sobre Sergio. Él presuroso lleva sus manos a las caderas de ella para comenzar a guiarla en el descenso. Puedo ver como mi madre comienza a bajar buscando ese tremendo falo que presuroso comienza a desaparecer en ella.

Mmmmm, baja cariño, baja del todo. Ufff, pero que rica estás...

MMmmmmm, gime mi madre

¿Te gusta eh? Así, así, hasta abajo. Ufffff, ya está. La tienes toda dentro. Ahora sí que entra bien, ¿eh? Te la has enfundado tu solita mi amor. Hasta la mismísima base. Acabas de devorarme la XXl con tu chochín en apenas un instante. Y ahora a cabalgar....quiero ver como se mueven estos melones

Sergio lleva sus manos a las tetas de mamá intentado abarcarlas desde abajo con sus manos, pero le es casi imposible debido a los botes de mi madre, que no deja de gemir... Está fuera de sí. Parece querer encadenar un orgasmo tras otro con sus agitados movimientos.... Sergio ríe, al tiempo que comienza a masajear las nalgas de mamá.... Le dice:

- Si te viera Joaquín así, disfrutando de una buena polla, intentando exprimirla con tu chochete vicioso.... Pobre infeliz. Aunque también se lo está pasando en grande ahí abajo con los chicos.... pero seguro que no tanto como tú, ¿eh? Lo cachondo que me pone verte así de puta con ellos dos tan cerca.... Si supieran el vicio que tienes...

Sergio tapa de nuevo la boca de mi madre para volver a apaciguar sus gemidos. Es evidente que se corre de nuevo.... mientras, él aprovecha para comenzar a trastearle el ojete

De nuevo su amigo, el de la camiseta, me vuelve a susurrar:

¿Te lo pasas bien, chavalote?, mira que esta escena no es apta "pa" menores.... Mira, mira como le prepara la entrada trasera a tu mami... Esa va a ser para mí... Me encanta dar por culo a una tía y seguro que con tu papá no hace esas cosas, jeje..

No contesto, pero él sigue...

¿Qué te parece como van tu madre y mi amigo?. Diles que acaben pronto que si no, no me dará tiempo a mí....jajaja. Y el de abajo está impaciente también por subir y repetir...Tu mami es puro vicio, chavalote.... Joder como se mueve. Parece que con la polla de Sergio se ha espabilao por completo, ¿eh?... Si tu padre subiera y la viese... Lo mismo aprendía algo el muy infeliz.. Joder como se corre la muy cabrona una y otra vez...

De pronto me da un empujón y me dice:

Anda quédate aquí y sin hacer tonterías, ¿eh?, que yo no aguanto más y voy a ayudar a tu madre con el problemilla que tiene, chaval. Tranquilo, que no tardaremos mucho...

Veo como entra y se dirige a ellos, comenzando a despelotarse. Desde atrás agarra a mi madre por sus tetas e inclinándose hacia ella le dice al oído: "Estas tetorras son increíbles". Mi madre inclina su cabeza hacia arriba y él aprovecha para morrearla a conciencia. Tras esto él continúa magreándola las tetas desde atrás al tiempo que le quita el sostén que aún tenía puesto, aunque recogido bajo sus senos. Lo zarandea un poco al aire, mirándome y riendo, y me lo lanza a la cara para continuar con el sobeteo de tetas a mi madre.

¿Te gusta mi amiguito, eh? - pregunta Sergio a mi madre-

Enseguida le veo con los boxers a la altura de las rodillas y ofreciendo su estaca a mi madre. Ella comienza a chupar mientras él no para de repetir:

Joder, joder,... qué cosa más buena... No hay nada mejor que hacerlo con una casada. Estas sí que saben.... Uffff...., así, así,... tienes ganas de rabo, ¿eh, preciosa..?

Mientras, el pollón de Sergio continúa apareciendo y desapareciendo en el

chocho de mamá a la vez que introduce no uno, sino dos dedos en su culete.

Ufff, Ana, eres divina. ¿Te apetece hacerlo con los dos..? - le pregunta Sergio-

¿Por qué me haces esto, Sergio? Sacas lo peor de mí -responde mamá-

Lo sé y me encanta... dime, ¿te apetece probar dos rabos a la vez?

No sé si podré...

El otro día ya viste que sí, princesa. Y ya sabes que el placer será el doble, tontita. Piensa en lo bien que se lo están pasando tu marido y tu hijo ahí abajo. No vas a ser tu menos, ¿no? Y a mi amigo no hay cosa que más le guste que un buen culo...

Y si es de una casada mejor que mejor - oigo decir al otro nervioso, poniéndose tras ella y apuntando hacia el ojete de mamá-. Ya me han dicho que te lo estrenaron el otro día.... Verás como hoy te lo pasas mejor aún. Ufff, qué apretadito. Si no me entra...

Aaagggghhh

Deja que empuje...

Me haces daño...aagghh...

Ya estoy dentro cariño, ahora a gozar. ¿Lo ves?, ya voy por la mitad. ¿Qué tal?

Aaahh, debo estar loca pero... me gusta...

Ya lo sabía yo - dice volviéndose y mirando a ver si yo estaba allí aun -. Qué culo más divino. Aaaggghh, hasta los huevos, joder que gustazo. Desde que te vi antes en la plaza que llevaba pensando en esto. En dar por el culo a la mamá de Mario...

Los dos comienzan un movimiento al unísono en ella...

Cómo os siento, no lo puedo creer... me corro, me muero de placer...

Goza, goza....- dice el de la camiseta-

El jaleo de abajo es increíble. Deben haber llegado más amigos de Sergio porque se oyen muchísimas voces. De nuevo sobresale la de mi padre:

Dispara chaval, dispara. Encájala en el fondo, dispara

¿Lo oyes? - Dice Sergio-

Lo oigo. Y eso hago. Contesta el otro- Hasta el mismísimo fondo se la encajo, ¿y tú?

Lo mismo, tocando fondo, jeje. Da gusto ver que el marido le da permiso a uno y que le anima a ello...jajaja. Anda, coje un condón cabronazo, que te estás follando a una señora y no a una cría del pueblo.

No entiendo porqué Sergio dice eso ahora, pero se lo agradezco y ojalá él hiciera lo mismo. El de la camiseta, desenfundando a mi madre, se levanta y coje un preservativo de la caja que tiene Sergio sobre la mesilla de noche. Según se lo coloca me hace señas con la mano levantando el pulgar, como dándome a entender que se lo pasa de miedo con mamá... Vuelve a ponerse tras ella y comienza a apuntar a su culete. ¿Cómo puede disfrutar mi madre con esa aberración?

¿Qué me dice la "señora"? ¿Le gusta como le doy por el culo? - Pregunta a mi madre mirándome a mí, el de la margarita en la espalda-

Síi,,, ¿Pero cómo me hacéis estas cosas?. Me debo estar volviendo loca...

No lo puedo creer. Va a continuar con su labor, ya que echa para adelante a mi madre contra el torso de Sergio, cuando éste le agarra la polla y le dice:

- Por ahí no, amigo... Tienes que ayudarme aquí "adelante" a solucionar un problemilla... Necesito que cambies de canal....

¿Qué insinúa, dios? No lo puedo creer...... La voz de Sergio tranquiliza a mi madre que, inquieta, intenta negarse, tras darse cuenta de lo que pretenden...

Tranquila mi amor, que ya estás lista. Verás como puedes.... confía en mí y relájate.... Ha llegado el momento que tanto esperábamos los dos. Si no puedes, no pasa nada. Lo intentamos y si vemos que no, pues lo dejamos. Pero se que te va a gustar... Vas a gozar el doble y sólo así dejarás de tener ese chochín con el que viniste... ¿no lo deseas? Tú confía en mí. ¿Te imaginas dos pollas en él? Va a ser la hostia y menudo morbazo con tu marido y tu hijo ahí abajo... Te lo vas a pasar de puta madre y por fin tendrás el chochazo que mereces. Deja que mi amigo lo intente y tranquila que se ha puesto una goma y él no te puede preñar...

No sé... - oigo decir mi madre, que parece que se lo piensa- No le puedo hacer eso a Joaquín. He dejado que todo llegue demasiado lejos....

El de la margarita hace caso omiso a las palabras de mi madre y a las de Sergio, y comienza a empujar para no dar lugar a poder perder la ocasión. Aquel cerdo pugna por entrar también en el chocho de mamá.... No cesa en su intento de penetrar a mi madre por su ya ocupado sexo.. Le oigo decir:

Estáte quietecita guapa, que vas a ver que bien te voy a dejar. Te voy a reventar enterita...

Mi madre debe sentir un dolor horroroso, supongo yo. De pronto, veo como su sexo cede y toda la cabezota de aquel miembro se abre paso por él. El alarido de mi madre es espectacular. Pienso que mi padre desde abajo lo habrá oído y que acto seguido se presentará aquí arriba, pero me equivoco. Con el algarabío que hay formado abajo, nadie parece enterarse de nada de lo que aquí ocurre, de que ese cabrón acaba de desgarrar a mamá:

¡Joder, qué conejo tiene...! No me lo puedo creer... Le está entrando a la muy puta… - dice orgulloso de su azaña con cara de auténtico vicio-

El salido ese, le tapa la boca a mi madre y su agudo grito queda ahogado bajo su mano. No tarda en volverse buscando mi mirada para decirme a continuación:

Estoy entrando, estoy entrando. Va a poder con las dos... Mmmm, joder nena, cómo te vamos a dar de sí este chochín...

Sergio apartando la mano de su amigo, besa mientras a mi madre, intentando evitar con ello que la oigan desde abajo y que aquello sea más llevadero para ella. Entre beso y beso le dice:

Aguanta mi amor, aguanta. Ya ha "pasao" lo peor. Verás como enseguida comienza a gustarte.... Confía en mí...

Joder, que ya estoy dentro tío, que ya estoy dentro - repite sin cesar su amiguito...- Esta pava es increíble.... Se la acabo de enfundar enterita yo también, se la he metido hasta los huevos....

Así, así, hay que abrírselo bien… - le oigo decir a Sergio mientras consuela a mi madre- Relájate y verás como gozas. A partir de ahora vas a querer rabo todos los días mi amor. Vas a tener el chochete listo y con ganas de guerra a todas horas. Verás cómo lo vas a pasar de ahora en adelante...

Hoy la "señora" se va a ir "pa" casa con el coño reventado, jeje

Dice el de la camiseta mirándome y riendo al tiempo que empieza junto a Sergio un cadencioso vaivén en mi madre, mientras tira de su collar de perlas, como si fuera un jinete cabalgando...Sergio libera a mi madre de sus besos, dejando que poco a poco comience a gemir. No puedo creer que esa tortura comience a gustarla. En ese momento soy consciente de la realidad. Ya no hay vuelta a atrás y aquellos cabrones tienen lo que querían. Acaban de reventar a mi madre y ella comienza a disfrutarlo...

Esto es la hostia.... en mi vida he hecho algo así.... qué coño tío, qué coño tiene... ¿tu marido sabe que haces estas cosas, zorrona? - pregunta el de la camiseta a mi madre, que cada vez parece sentirse más cómoda con la nueva situación-

Él no sabe nada. Ni siquiera yo me creía capaz de esto. No puedo más... Sois unos cabrones, ¿por qué me hacéis esto? No debería estar aquí y menos con vosotros...- dice ya entre gemidos mi madre -

¿Oyes lo que dice, Sergio? Pero si te está encantado, mami. O acaso no te lo estás pasando de puta madre con nosotros. Lo que chorrea este chochete me dice que sí...

Mentiría si os dijera que no...

Anda que no te va la marcha, ¿eh?. Solo tenía que ver como te arrimabas en el baile. Pues si buscabas rabos los has encontrado y los mejores de la comarca, ¿verdad Sergio?

Ya te digo. Dinos si te gusta Ana, dínoslo. Si no lo dejamos. No te queremos obligar a nada. Lo único que queremos es que lo pases bien... y que disfrutes

Ya sabes que lo hago, so cínico... no sé que tienes, pero desde aquel día en el coche que me vuelves loca...

Sí lo sabes, Ana. Tengo justo lo que necesitabas y lo que andabas buscando buscando. Una polla enorme y ganas de follarte a todas horas. ¿Acaso me equivoco?. - Pregunta Sergio riendo-

Que cabronazo eres. Si Joaquín se entera de lo que estáis haciendo conmigo os mata a los dos

Tú no pienses en eso y disfruta, que esta noche no la vas a olvidar, Ana. Vas a ver que bien te vamos a dejar... Hoy te vas a ir por fin con tu chochito vicioso abierto por completo. ¿No lo deseabas, mi amor?

Ya lo sabes que no. No deseaba que pasase nada de esto... Me estáis volviendo loca, cabrones... Me vais a matar del gusto que siento...

Mi madre emplea un lenguaje nada propio en ella. Sin duda se encuentra en una situación no buscada y que le ha desbordado. Una situación que se le ha ido por completo de las manos y que a estas alturas la ha convertido en un muñeco a merced de ellos. Cosa que se ve que le invade de rabia por dentro., de ahí su lenguaje inusual. Parece llena de rabia en las respuestas que emite entre gemido y gemido

Sabía que te iba a gustar y por eso quería que lo probaras... Con lo jamona que estás contigo tengo ganas de todo, pero de preñarte lo que más... -dice Sergio-

Eso en la vida,- responde mi madre llena de rabia al tiempo que se empieza a correr por enésima vez...-

Venga zorra, córrete un poquito más que te estoy follando como mereces - le dice babeando sobre ella el de la camiseta - estás riquísima y vas a desear que nunca acabe de follarte cabrona.

Puedo ver como el coño de mi madre se ha hecho ya perfectamente a las dos enormes pollas que tiene dentro. A cada embestida de ellos se oye con más claridad el chapoteo producto de los flujos que suelta por él...

Eres la viciosa que imaginé el primer día al verte... - dice Sergio -

Anda calla y disfruta, putona... que te vamos a dejar el coño tan abierto que no se te va a cerrar en un mes…" Qué gozada - dice el otro volviéndose y mirándome, disfrutando de la situación - Cómo te siento, tío. ¿Notas como contrae los músculos del chochete, tío? Parece que nos quisiera succionar la polla con él, ¿eh? Menudo conejo... en la vida probé algo igual

Acaba pronto - le dice Sergio -, que pronto la tendremos que llevar pa casa.

Déjame que se lo acabe de reventar. ¿No ves como le gusta?

En ese instante puedo oír como mi madre comienza a gemir de nuevo... Sergio aparta su mano de la boca de mamá y veo como sus gemidos se convierten en gritos de auténtico placer. No puedo creerlo pero mi madre se corre nuevamente, con aquellos dos macarras dentro de ella.

Ahora sí Ana, ahora sí que estás bien abierta (dice Sergio). Han hecho falta dos buenas pollas pero hemos conseguido abrir ese coño de quinceañera que tenías. Ahora ya estás lista para disfrutar a tope de él. ¿A que te gusta sentir dos pollas dentro? Cuando lo use Joaquín, no lo va a reconocer. Ahora tienes el coño que mereces y vas a sentir la necesidad de usarlo a diario. A que disfrutas, ¿eh?. Esto es follar y no lo que te da en casa el cornudo ese. Si tú quisieses iríamos a Valladolid a diario a follarte así, hasta que te dejásemos preñada...

Debo de estar loca pero sí, me encanta...Voy a correrme de nuevo...ahhhh

Yo tampoco puedo más - añadió el de la camiseta -. Me corro tío, es el coño más cojonudo que he probado en mi vida, ahhhhh..... la cantidad de leche que estoy echando....

Pues yo todavía aguanto un poco...Te aseguro que este coño ya no es el del principio, pero a mí me gustan más así, bien abiertos y tragones y siempre con ganas de más y más leche dentro. Chochos que disfrutan sólo con grandes pollas y no con las de casa, a las que apenas sienten cuando las tienen dentro. Para haber estado con tan pocos tíos follas de puta madre, Ana. Lo que estás aprendiendo, putita y lo que te vamos a enseñar aún hasta que te vayas...

¡Qué corrida, tío! ¡Qué corrida! Aaaaaahhhhh, aaahhhhhh.... -dice el de la camiseta-

Aaaahhhh, cabrooooón. Sácalaaaa, sácalaaaa... Siento tu lecheeeee..... -oigo decir a mi madre sin entender nada de lo que ocurre-

Qué corrida... Qué corrida... como en la vida- dice el amigo desmontando a mamá- He "reventao" el condón de lo que he echado el condón. Te he "echao" dentro la leche de una semana - dice dando un cachete en las nalgas de mamá-

Eres un cabrón, eres un cabrón... No to como me hierve dentro. - dice mamá entre gemidos-

Ahora sí. Ahora creo que ya me viene a mí. Voy a descargártela toda dentro, como a ti te gusta, mi amor.... Me voy a correr ya... - dice Sergio-

Llénamelo, llénamelo.... - oigo atónito decir a mamá-

Aaaahhhh.....Toma, tomaaa, tomaaaa... Aaaaaahhhhh.... Siente su calor....

Me matas, me matas, cabrónnnn

Al oír eso decido bajar. Comprendo que he perdido a mi madre, que le puede la lujuria... Llego al garaje y entro en él sin ver lo que allí pasa. Me siento en el sofá intentando asimilarlo todo. No sé el tiempo que transcurre. Pueden ser segundos, minutos, quizás horas.... Es cuando noto que alguien me zarandea de los hombros cuando vuelvo a la realidad. Allí sigue mi padre jugando ahora únicamente con el de Sergio. Es el chico de la camiseta el que está delante de mí. Oigo que me dice:

"Despierta chavalote, que estos ya han acabao" - haciendo alusión a Sergio y a su primo, el de la camisa, que por lo visto volvió a subir...-

No quiero ni imaginar lo que allí seguiría pasando, cuando vuelvo a oír su voz:

Vigila a tu padre mientras yo voy a por el coche. Procura que no se mueva de aquí...

¿Qué pasa? - le respondo intentando entender algo-

Vamos a llevar a tu madre a casa. Después de "la follada", apenas puede andar. Pero no te preocupes, que ha gozado como una perra...

Serás cabrón....

No lo sabes tú bien... Calla y vigila si no quieres que te lo demuestre...

¿Qué habrían hecho aquellos cabrones con mi pobre madre tras bajar de arriba? Permanecí allí quieto hasta que oí acercarse al coche. Cuando llegó pude oír las voces de Sergio y del otro mientras la bajaban por las escaleras. Fue al reconocer el ruido de la puerta de la casa cuando me levanté y llegué hasta la entrada. Desde allí seguí todo el proceso. Vi como Sergio y los dos primitos metían a mi madre en el asiento de atrás de un Seat León. Los muy cabrones reían mientras la decían que no se preocupase, que mañana dejaría de estar "escocida"... Ella no les contestaba pero lo que veía en su mirada lejos de parecer odio, me parecía auténtica lascivia... No comprendía nada de lo que había pasado. Sergio se montó atrás con ella mientras los otros lo hicieron delante. Bajaron las ventanillas y antes de arrancar pude oír a Sergio como decía a mi madre que se alegrara, que ahora sí tenía un auténtico "CHOCHAZO" con el que parir bien... Los otros reían y antes de que se fueran aun pude oir al de la camiseta decir que lo de esa noche "ni con una puta"....

Volví para dentro. El padre de Sergio le preguntaba al mío si sabía lo que "hacían los chicos ahí fuera, que tenían mucho jaleo". El mío le respondía: "déjales que se diviertan, que son jóvenes, jaja. No hay nada de malo en ello...". De nuevo comprobé hasta donde llegaba el grado de ingenuidad de mi pobre padre....

Ahí termina lo sucedido aquella noche. Cuando llegamos a casa mi padre y yo, mi madre ya estaba acostada y el Seat León amarillo se alejaba calle arriba... Ni que decir tiene que yo me encontraba fatal. En lo único que podía pensar era en que sólo faltaban dos días para volver a casa. Dos días que todavía para mi desgracia podían dar mucho de sí, tanto como el de mi madre