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Mas cornudo imposible

Hola a todos. En esta oportunidad les voy a relatar otra historia que sucedió hace ya un par de años y que nunca había relatado, quizás porque no me pareció tan zarpada como otras aventuras que tuvimos con mi esposa, o quizás porque un poco mal me hacía sentir en su momento lo que paso.

Con Mica, mi esposa, llevamos una vida sexual bastante activa, sobre todo desde que incursionamos en el swinger, tríos, cuckold, etc. Como creo que comente en anteriores relatos, si bien todo empezó con ella poniéndome los cuernos, no era cuckold porque yo no había dado mi consentimiento, aunque después me calentó la idea y pasamos a los tríos, swinger, y por último al cuckold, es decir los cuernos consentidos y al que te digan lisa y llanamente "cornudo".

Quizás para algunos pueda ser peor o mas denigrante que otro se garche a tu esposa en un trio, es decir meter en la cama a otro vago, pero para mi siempre fue una especie de aventura eso, era una aventura de nosotros dos, en donde ambos disfrutábamos plenamente del acto sexual, es decir yo participaba activamente junto al otro vago y nos garchabamos a mi esposa entre los dos. En cambio si me "dolía" pensar en que era un cornudo, y ni hablar la idea de que me traten como tal.

En resumidas cuentas no me gustaba mucho el mote de cornudo, pero creo que como en muchas relaciones liberales terminó sucediendo, y no fue de una manera suave, todo lo contrario. Si bien algo veníamos hablando con mi esposa en esas épocas, y pese a las insinuaciones de ella en ese aspecto, yo mucho calce no le daba con el tema. Ella insistía en si me gustaba esa práctica, si me excitaba la idea de ser cornudo, de si me gustaría solo verla coger con otro sin participar, etc. Era obvio que en su cabeza la idea de hacerme sentir cornudo le gustaba.

Y como siempre las mujeres terminan haciendo lo que quieren, y pasó lo que tenía que pasar... o lo que ella quería que pasara. Ese pase del swinger o tríos al cuckold fue duro y fuerte como el garche que se comió mi esposa esa noche y aunque costó asimilarlo al principio creo que después me acostumbre, e incluso me terminó gustando o dando morbo en definitiva.

Pasando a la historia en concreto, un viernes a la noche decidimos con Mica ir a tomar algo a un Pub que estaba cerca de nuestro departamento de esa época. Al ser viernes la mayoría eran grupos de amigos/as, no había muchas parejas en el lugar, y el clima era bastante mas tirando a boliche que a un bar, había mucha gente parada, algunos incluso hasta bailaban un poco, y las luces del lugar estaban bastante tenues, casi a oscuras digamos.

Con Mica primero nos quedamos en la barra tomando algo hasta que conseguimos una mesa. En ese interin en que estabamos en la barra mi esposa era objeto de todo tipo de miradas, muchas lujuriosas y otras con un cierto grado de desprecio o envidia, y no era para menos. Como era un día bastante cálido Mica se había puesto un vestido blanco, muy corto y pegado al cuerpo, lo cual por razones obvias resaltaba sus atributos, sobre todo el hermoso y redondo culo que tiene.
Era tan corto que en todo momento ella tenía que acomodarselo para que no aparecieran sus nalgas en escena, es decir se lo tenía que andar bajando todo el tiempo.

Ya estando en la mesa la situación de su vestido seguía igual o peor, pero cruzandose de piernas solucionaba cualquier inconveniente que pudiera existir y en definitiva no se le veía nada mas que las piernas, que si bien eran también una delicia, no era tan llamativo.
La noche fue pasando y entre trago y trago el pub se fue "depurando" digamos. Parejas ya casi no quedaban y eran todos hombres o mujeres en sus respectivos grupos, y obvio el ambiente se volvió mas al estilo boliche, alguno que otro se animaba a encarar alguna mujer, se unían grupos, etc.

Con Mica ya no teníamos muchos temas de conversación, y básicamente nos dedicabamos a mirar un poco el panorama. A ella la notaba mas perdida, casi que mucha bola a mi no me daba, algo estaba mirando pero no podía distinguir que o a quien miraba.
En un momento ella va para los baños. Yo la fui siguiendo con la mirada, sabía que algo estaba tramando pero no sabía que. En un momento pasa por al lado de un grupo de vagos que no disimularon en lo mas mínimo y la miraron de arriba a abajo, ella mientras pasaba entre ellos acarició muy suavemente el brazo de uno y lo miró por un instante mientras seguía su camino al baño. El vago algo le dijo y ella sonrió, creo que no le contestó nada. A los pocos segundos y ante la arenga de los amigos de el, dejó la ronda y fue con dirección a los baños también.
Para esa altura yo no podía ver que paso porque había bastante gente en la zona.

Yo me quedé sentado esperando a mi esposa y prestando atención a si volvía el vago, pero nada pasaba. Al cabo de unos 10 minutos el vago vuelve con su grupo de amigos y casi inmediatamente vuelvo a ver a mi esposa viniendo hacia la mesa. Cuando se sienta la noto un poco rara, como acalorada, desencajada e incluso cuando la empecé a hablar tenía la voz un poco entrecortada, y por su puesto las miradas hacia esos vagos era muy notoria.

Yo: Que pasó? Porque demoraste tanto en el baño?
Mica: Había mucha gente (un poco cortante me lo dijo)
Yo: Si? No parece desde aca que haya tanta gente.
Mica: (me miró medio desafiante): si había mucha gente... por?
Yo: Nose, me pareció medio raro demoraras tanto.

Ella no me contestó, solo me corrió la cara y siguió mirando a los vagos. Pasó un rato y me di cuenta que ella no estaba cruzada de piernas, incluso las tenía un poquito abiertas, y obvio el vestidito ese bastante levantado. Si bien desde mi posición no llegaba a verle nada (yo la miraba desde arriba) los que estaban a un par de metros seguro podían ver algo mas que sus piernas.

Yo: che, cruzate de piernas o te van a ver tanga en todo el pub....
Mica: Quedate tranquilo que no se me debe ver la tanga.
Yo: jaaaa... seguro se te debe ver la tanga, hay varios mirando por allá.
Mica: enserio, la tanga no se me va a ver, te lo aseguro....
Yo: Aja, y porque estas tan segura?
Mica: porque no tengo tanga tonto... (y se empezó a reir)
Yo: como que no tenes tanga? Si te vi cambiarte en casa y tenías una tanga blanca...
Mica: no, no tengo.... me la dejé en el baño (me dijo con voz de calentura)
Yo: me estás hablando enserio?
(ella solo hizo que si con la cabeza)
Yo: la dejaste en el baño? Si claro....
Mica: bueno che... no, no la dejé en el baño, desde que fui al baño no la tengo mas, así sería la cosa... contento?
Yo: La verdad no.... que paso a ver... porque no tenes mas la tanga si se puede saber...
Mica: Me la pidió alguien y se la presté...

(yo para esta altura ya sabía como venía la mano, o me lo imaginaba por lo menos).

Yo: ahh mira vos... otra mina te pidio la tanga y vos se la prestaste? Así de simple?
Mica: si... bueno no tanto, no fue una mina, como le voy a prestar mi tanga a una mina, sos loco vos...
Yo: claro que boludo.... bueno decile al flaco al que le prestaste la tanga que te la devuelva, porque esa tanga te la regalé yo para un aniversario, nose si te acordas...
Mica: uhhhh, cierto.... te enojaste? Perdón amor...
Yo: si si... recupera esa tanga ya mismo.
Mica: bueno, ya vengo, en un rato traigo la tanga sana y salva...
Yo: para para para.... no te vayas para los baños, no quiero perderte de vista, ok?
Mica: y... pero....
Yo: ya se lo que pensabas hacer y no, recupera la tanga acá a la vista.

Ella quedó descolocada, seguro tenía pensado llevarse al vago al baño y garchar, o petearlo por lo menos para que le devuelva la tanga, pero yo le había marcado la cancha y eso me lo respetó.
Fue hasta el grupo de vagos, separó al pibe en cuestión y se puso a hablar con el. Primero se notaba que ella le rogaba digamos, pero después se empezaron a reir un poco entre los dos mientras seguían hablando.
La charla parecía se estaba poniendo algo mas picante porque se hablaban al oído y no se reían tanto. En un momento mi esposa quedó de espaldas a mi y yo podía ver como el vago la tenía agarrada de la cintura, suave pero agarrada y ella no decía ni hacía nada por sacar la mano de el de su cintura y seguían hablándose.
Por unos instantes no pude verlos ya que pasaba gente por al lado de ellos, y cuando retomé la visión de la situación la cosa había cambiado drásticamente. La mano del vago ya no estaba en la cintura de mi esposa sino que había bajado y ahora estaba acariciando suavemente sus nalgas. Yo quedé helado sin saber que hacer. Por instinto sentía ganas de pararme y agarrarme a trompadas con el vago, pero como buen cornudo la calentura le ganaba a mi bronca, y por ende me quedé mirando como el vago sobaba cada vez mas descaradamente el culo de mi esposa.

Por encima del hombro de mi esposa podía ver la cara del vago, que tenía su vista clavada en mi, onda desafiante y mientras manoseaba a gusto el culo de Mica se le esbozaba una sonrisa de hijo de puta en la cara.
El manoseo pareció eterno, pero no habrán sido mas que un par de minutos hasta que terminó con una nalgueada suave del flaco a mi esposa, un onda "listo ya está". Ella puso su mano como esperando recibir algo pero el vago se acercó al oído y le dijo algo.
La expresión corporal de mi esposa fue en tono de enojada, como si no estuviera de acuerdo con lo que le dijo, pero el la siguió hablando y Mica se fue relajando, hasta que ella gira su cabeza y me mira fijo, como si estuviera verificando que yo la estaba mirando. Hablo un par de cosas mas con el vago y volvió a la mesa.

Yo: Y? Que pasó? Y la tanga?
Mica: se complico, deja....
Yo: Por?!?! Enserio, la busco yo sino....
Mica: no no, para, se va a armar quilombo, dejala nomas, ya fue...
Yo: boluda, te metió mano en el orto y no te devolvió la tanga! Sos loca vos?!?!
Mica: si bueno, pero deja, son muchos vagos y te van a cagar a piñas, ya está, error mío.

(yo pensé unos segundos en eso de que eran varios y si bien tenía razón mi esposa, el orgullo podía mas y estaba a punto de ir a agarrarme a trompadas con los vagos).

Yo: bueno basta, voy y que se pudra, no me importa... (estaba a punto de pararme hasta que mica me agarró del brazo y me freno)
Mica: Paraaaaa... porque además voy a quedar como una trola que le regaló la tanga al vago, que excusa vas a meter, encima que te van a cagar a trompadas vas a quedar como un cornudo adelante de todos y yo como una trola, asique basta ya fue, dejalo así y listo.

Otra vez me dejó pensando, y tenía algo de razón, se iba a armar quilombo cuando increpara al vago, iba a aparecer un patovica, todos se iban a enterar de cual era el problema (que mi esposa era una trola y yo un cornudo) y nos iban a echar del pub, y afuera si me agarraban entre 2 o mas me desfiguraban, tenía todas las de perder.

Yo: la verdad te pasaste hoy...
Mica: bueno, tampoco es para tanto... me viste garchar con otros miles de veces, a este le regale una tanga nomas, ni siquiera me lo chapé...
Yo: no digo por regalarle la tanga, digo porque esa tanga te la regalé yo, si queres regalar las tangas que te compras vos hacelo cuando quieras, y si queres garchar con alguien garchatelo y listo (lo dije mas de enojado que a conciencia a eso último).
Mica: bueno, no te enojes así, al final vos me incitas a hacer estas cosas y después te enojas si salen mal.
Yo: que yo te incito a que?
Mica: a que metamos a otros en la cama, a eso me refiero... o me vas a decir que no te gusta?
Yo: si bueno, pero que tiene que ver (un poco desconcertado)
Mica: nada, deja, olvidate del tema....
Yo: no, enserio, explicate ahora.
Mica: nada, que mi idea era hacer un trío si se daba, pero no se dio, salió mal, nada mas...
Yo: esa era tu idea? y porque no me decis?
Mica: que te voy a decir, si vos te diste cuenta, no te hagas el boludo... o me vas a negar que te imaginabas por donde iba la cosa, o que te calentaste cuando me toco el culo? No seas caradura....
Yo: bueno, que se yo... puede ser (ahora el que estaba a la defensiva era yo, me había dado vuelta la torta).
Mica: ok, bueno, no salió, ya está dejalo ahí, paguemos y vamos a casa ya se arruinó la noche.
Yo: no para, baja un cambio... y que pasó?
Mica: que paso con que?
Yo: con lo del trio, y demás.
Mica: basta, olvidate.
Yo: dale contame, o no confias en mi?
Mica: si, pero no te voy a contar, no es de las cosas que te gustan hacer, asique basta.
Yo: Dale, contame, no me enojo, te lo prometo....

(ella no dijo nada, solo se quedó tomando lo que le quedaba del trago en silencio).

Yo: dale, me vas a contar o tengo que ir a preguntar?
Mica: Ya te dije que no, el vago no quiere hacer un trio y listo.
Yo: si claro, el vago no quiere pegarte flor de garchada... si....
Mica: yo no dije eso, dije que el vago no quiere hacer un trío.
Yo: aja, y que quiere? que te cases con el? jajajaja
Mica: ja ja... no, basta, en serio...
Yo: bueno la corto con eso... pero contame porque no te devolvió la tanga....
Mica: Porque me pidió algo que no podía cumplirle.
Yo: y que te pidió? Ir a garchar?
Mica: algo por el estilo.
Yo: que sería algo por el estilo...
Mica: uhhh que pesado que sos!!! lo que me pidió es garcharme estando vos presente, eso me pidió
Yo: y?!?! como que nunca hicimos un trío....
Mica: jajaja nooooo, un trio no, vos no participas, solo miras.
Yo: Bueno, que se yo, podemos turnarnos, capaz al vago no le gusta tener un hombre cerca, tampoco es para tanto.
Mica: Seguís sin entender... él quería que hagas el papel de cornudo, no participar.
Yo: ahhh... si, eso es otra cosa... cuckold digamos
Mica: si... por eso ya fue.

Nos quedamos callados, un poco incómodos también, y yo pedí la cuenta para irnos. Mica fue al baño, pero esta vez no pasó por adelante del grupo donde estaba este vago, sino que paso bien lejos para no cruzarlo.
Mientras yo esperaba la cuenta en la mesa se me acercó el vago, se presentó (Lorenzo se llamaba) y me dijo si podía sentarse (muy cordial) y le hice señas de que si.

Lorenzo: disculpa si hubo un mal entendido, aca te devuelvo lo que es de tu esposa.
(por abajo de la mesa me pasó la tanga de Mica disimuladamente).
Yo: gracias.
Lorenzo: espero no te hayas enojado, no soy mala gente.
Yo: todo bien, pero me parece que te pasaste de mambo con mi esposa y con no devolverle la tanga.
Lorenzo: si bueno, es que es una fantasía que tengo ese tema, y era mas un juego mas que otra cosa, por eso te vengo a devolver la tanga porque entiendo que ya fue, que no se dio y no quiero quedar como un pajero.
Yo: ok todo bien, gracias por la sinceridad.
Lorenzo: che, sin que te ofendas, lo invito a tomar algo y charlamos.
Yo: no gracias, no vamos a ir a otro lado, además ya pedimos la cuenta y nos vamos a dormir.
Lorenzo: no no, yo digo aca en el bar. Invito yo por el mal entendido.

Antes de que pudiera contestarle que no otra vez, apareció Mica y se quedó parada mirando, con cara de "enojada" y sin decir nada. Lorenzo la miró y dijo "perdón chicos, me voy, disculpen". Se levantó y se fue con su grupo de amigos, que ya eran varios menos.

Mica: que paso? Que quería?
Yo: nada, se disculpó y me devolvió tu tanga.
Mica: si? bueno, por lo menos...
Yo: no parece mal vago, me dijo que era un juego y que se yo, y pidió disculpas varias veces.
Mica: si, no parece mala persona, pero bueno. Ya pagaste?
Yo: Si ya pagué por?
Mica: preguntaba para irnos.
Yo: ahh... no queres tomar algo mas? Tu amigo nos invitó a tomar algo.
Mica: no es mi amigo... además hace un rato te querías agarrar a trompadas y ahora queres que tomemos algo con el? Decidite....
Yo: bueno che, me cayo bien que devuelva la tanga.
Mica: si bueno, pero lo que quiere es coger y que vos mires como cornudo no tomar algo con nosotros.
Yo: que sabes, capaz lo tentamos con un trio... a vos te gusta para un trío?
Mica: mira, hace lo que quieras, dame la tanga que voy al baño a ponermela, no quiero andar en bolas.

Agarró la tanga y se fue para el baño. Yo me quedé unos instantes mirando como mi esposa se iba y le hice señas a Lorenzo (que nos miraba de vez en cuando) para que se acerque a la mesa. Cuando el llegó le dije que arrime una silla, que aceptabamos tomar algo con el para olvidarnos el mal momento.
Se sentó, llamó al moso y pidió un champagne y 3 copas.
Al poco tiempo llegó Mica del baño y miró desconcertada.
Mica: que onda?
Yo: nada amor, acepté la invitación a tomar algo. O vos ya te querías ir?
Mica: me da lo mismo (ella se sentó).

Ya con el champagne en la mesa Lorenzo se disculpó varias veces mas con los dos y empezamos a hablar, primero de boludeces y después de sexo. Nose si el inventaba historias, pero contaba muchas cosas de tríos, swingers, orgías, y nos preguntaba a nosotros que onda. Parecía saber de que hablaba, aunque podía ser un mentiroso bien ilustrado.
En un momento nos dijo que una de las pocas fantasías que le quedaban por cumplir era la de ser un bull, es decir acostarse con una hotwife mientras el marido mira y es tratado como cornudo básicamente, que era algo muy difícil de conseguir y le hubiese gustado mucho hacerlo con nosotros.

El champagne se terminó y enseguida pidió otro y seguimos tomando y hablando mas que nada de sexo, fiestas, swingers. La conversación se ponía cada vez mas caliente, hasta que en un momento el me pregunta directamente
Lorenzo: A vos no te interesaría probar el cuckold?
Yo: y... no me va mucho la idea.
Lorenzo: porque no te va?
Yo: no estoy seguro de si me gustaría.
Lorenzo: pero te calienta la idea?
Yo: y... un poco si, pero nose, tengo dudas.
Lorenzo: mira, te propongo lo siguiente no te ofendas, si quieren probamos, y si en algún momento queres cortar vos o ella, cortamos y listo, se terminó la cosa.
(Mica y yo nos quedamos callados, no nos decidíamos a contestar nada, o yo no me decidía, Mica seguro aceptaba, se la notaba caliente).
Yo: nose, y si se va de mambo y no queres frenar nos vamos a tener que cagar a trompadas después jajajaja
Lorenzo: jajaja no no, tengo códigos, si alguien dice no es no y listo, eso siempre es así.
Yo: nose, vos que decís amor?
Mica: yo no tengo problemas, vos tenes que decidir.
Yo: bueno, podemos probar a ver que onda.
Lorenzo: (con una visible sonrisa) bueno, pero tene en claro algo, la fantasía se basa mas en la humillación que en el sexo, asique si no estás comodo desde el vamos con eso ni arranquemos.
Yo: ehhh, para, ni empezamos y ya me estás diciendo que no lo haga jajaja
Lorenzo: jajaja no no, te digo como es para que no haya sorpresas, como te dije tengo códigos.
Yo: bueno, ok, pero que tipo de cosas decis? supongo que homosexuales no... no me va esa onda.
Lorenzo: no no, eso no a mi tampoco, pero si de la onda de que me pidas me garche a tu esposa, o de que te insultemos, o cosas así. Te reitero, si no te va esa onda ni arranquemos, todo bien.

Los tres nos quedamos en silencio por unos segundos, hasta que el silencio se interrumpió otra vez
Yo: escuchame Lorenzo, te gustó el culo de mi esposa?
Lorenzo: si si, es hermosa (mirandola a ella)
(el no se había dado cuenta de que le había dado tácitamente el sí para la fantasía).
Yo: bueno, me gustaría que la lleves al baño y le pegues una buena manoseada.
Lorenzo: ja (con una sonrisa de oreja a oreja), dale cornudo, en un rato venimos. Vamos linda?
Yo: una cosa mas, que venga sin tanga por favor.
Lorenzo: dale cornudo, ya venimos.

Ellos se pararon y fueron casi de la mano hasta la zona de los baños. En ese momento yo los perdí de vista, pero después me dijo Mica que no pudieron entrar, había mucha gente mirando, asique se pusieron a transar y manosearse contra una pared cercana a los baños y sin que nadie los vea (según dijo ella aunque nose si nadie los habrá visto y menos con la franela que se debían estar pegando) ella se sacó la tanga y se la dio a su macho.

Al rato volvieron, Mica estaba colorada del calor, un poco desarreglada y con los labios visiblemente recien mordidos y transados. Se sentaron y Lorenzo muy descaradamente puso la tanga arriba de la mesa.
Lorenzo: acá tenes la tanga de tu esposa cornudo.
Yo: gracias. (agarré la tanga y aunque me podían ver todos la llevé a mi cara y le olí profundo). UFFFF que olor a ganas de pija tiene esto. Amor, queres que te garche Lorenzo?
Mica: (solo hizo que si con la cabeza).
Yo: bueno amigo, vamos a casa, quiero que te cojas a mi esposa.
Lorenzo: dale, pero vamos a un telo mejor cornudo.
Yo: no, quiero te la garches es la cama matrimonial.
(el lo pensó unos segundos)
Lorenzo: que cornudo de mierda, no voy a casa de desconocidos pero voy a hacer la excepción con ustedes.

Nos levantamos y nos fuimos para nuestro departamento. Eran una 6 o 7 cuadras, estaba cerca, pero se hizo largo el trayecto, porque a cada rato ellos frenaban y se ponían a apretar contra la pared, contra un árbol, autos o lo que fuera. Había momentos en que era tan fuerte el freneleo que Mica quedaba en culo prácticamente porque el vestido se le levantaba hasta la cintura. A ellos no les importaba nada y a mi tampoco. Yo iba con la pija dura de solo verlos franelear en la calle.
En un momento me acerco a ellos y meto un dedo en la vagina de mi esposa, que estaba bastante mojada para esa altura.

Yo: uhhh que mojada estas.... conmigo no se pone así sabes (dirigiéndome a Lorenzo)
Lorenzo: obvio que no cornudo, necesita un mecho de verdad.
Yo: si, tenes razón. Apuren que quiero ver como te la garchas en mi cama, quedan 2 cuadras.
Mica: para, dejame disfrutar el camino cornudo....
Lorenzo: si cornudo, dejate de joder... queres pija nena?
Mica: seeee
Lorenzo: date vuelta dale...

La apoyó contra un auto, la hizo sacar un poco de culo y dijo Lorenzo "veni cornudo, levantale el vestido y abrile el culo así le meto la verga".
Yo me acerqué a ellos, levante el vestido de mi esposa y le abrí las nalgas como ordenó el, que ya había bajado el cierre de su pantalón y sacado su pija, que en pocos segundos desapareció en la concha de mi esposa.
Los gemidos de ambos fueron bastante fuertes, era ese gemido de desahogo, de ganas de garchar contenidas. La bombeo un par de veces y se la sacó. "acomodale el vestido" me ordenó y seguimos caminando rumbo a casa. En ese trayecto creo que el 80% del tiempo Lorenzo fue con un par de dedos metidos en la vagina de mi esposa, que como podía iba caminando a su lado, y por su cara, disfrutando de ser la puta de ese pendejo.

Ni bien entramos al departamento Lorenzo pregunto cual era nuestra habitación y fuimos. El se desvistió por completo y se acostó en la cama con las piernas abiertas y le dijo a Mica "dale puta, desvestite y chupame la pija frente al cornudo".
Ella casi se arranca el vestido y se zambullo en la cama a comerle la verga a Lorenzo.
Le devoraba la pija con unas ganas que pocas veces había visto. La saboreaba, se atragantaba sola, le chupaba los huevos y hasta el culo.
El corneador de esa noche solo gemía y decía frases del estilo "que buena puta es tu mujer cornudo" "Me gusta como tu esposa me chupa la pija" "sos poco hombre para tanta hembra", entre otras que ni me acuerdo, pero todas similares, en tono humillante y dirigidas a mi.

Yo para esa altura ya estaba con la pija en la mano y re caliente mal. En un ataque de locura de cornudo le pegué un grito "llenale la boca de leche!!!" Tanto Lorenzo como Mica se empezaron a reír, y entendieron que estaba entregado a ser un cornudo mal toda la noche.

Lorenzo: no cornudo, primero me la voy a comer a tu esposa.
Yo: ok, perdón.
Lorenzo: acostate linda que te voy a comer toda esa concha divina.

Mica hizo lo ordenado, abrió las piernas y se dejó comer la concha. Lorenzo estaba desaforado en la entrepierna de Mica, se estaba deleitando con los orgasmos que le regalaba mi esposa cada tanto, y seguro con los flujos.
Después de un rato de un griterío infernal de mi esposa, Lorenzo se incorporó y me dijo "me la cojo cornudo?"
Yo le contesté un rotundo "siiiii cogetela!!!! cogete a mi esposa!!!!"
El se volvió a reir, se acostó sobre Mica y empezó a besarla mientras iba metiendo lentamente su pija en la vagina de mi esposa.
El estaba disfrutando de la humedad de Mica, pero ella quería que la garchara fuerte, que la haga gritar. Lo agarró del pelo de forma un poco violenta para separarlo de su boca y si bien no le veía la cara a ella por su voz me di cuenta que estaba sacada. Ella empezó a gritar "cogeme.. cogeme... cogeme... cogeme adelante del cornudo de mi esposo". El vago no se hizo rogar y empezó a embestir con fuerza sobre Mica, que gritaba y gemía como una desquiciada y llegó el momento que quizás mas me dolió.
Con la locura de por medio mi esposa empezó a gritar "mira cornudo como me garcha un buen macho.... vos no garchas así cornudo.... acercate y mira bien como se cogen a tu esposa cornudo"....
Yo me quedé inmóvil, pero Lorenzo giró la cabeza y mirandome me dijo "dale cornudo, vení y mirá como me garcho a tu mujer".

No me quedó otra que ponerme mas cerca y observar en primer plano como la pija del corneador estaba reventando a mi esposa, con furia, con ganas, con deseo, con morbo. Entre gemido y gemido de mi esposa podía escuchar sus risas burlonas hasta que se escucho a ella decir "llename de leche pendejo dale".
Mientras seguía el bombeo desenfrenado de Lorenzo el dijo "cornudo, toma pastillas tu mujer o vas a ser papa garrón?", yo le contesté que tomaba pastillas, a lo que el dijo "que lástima, seguro te embarazaba nena".
No demoró mucho mas y con bombeos profundos empezó a descargar sus huevos en el interior de Mica que con las piernas lo abrazaba mientras gemía de placer recibiendo chorro tras chorro de semen.

Pasado ese primer polvo, y digo primer polvo porque fueron varios, Lorenzo se tumbó sobre mi esposa a "descansar" un poco. Pasado unos minutos el se acostó al lado de Mica y fue en ese momento en que pude apreciar como el semen del macho de turno de mi esposa brotaba incesantemente y caía hasta manchar las sábanas.

Pasado un rato de descanso Lorenzo se fue al baño y quedé a solas con mi esposa. Le pregunté si le estaba gustando y sonriendo me dijo que la estaba pasando genial, y ella mirandome y dándose cuenta de que todavía tenía la pija parada me dijo "vos también la estas pasando bien por lo que veo cornudo jajaja". Yo me reí un poco e intente meterme en la cama con ella, quería garcharmela, pero me frenó enseguida diciendo "no no cornudo, esta noche soy de Lorenzo, mañana soy tuya otra vez".
Eso me marcó la cancha digamos, esa noche no iba a cogerme a mi esposa, solo iba a verla ser penetrada en reiteradas ocasiones por su amante de turno, y acepté mi papel.

Al rato Lorenzo volvió a la habitación, y esta vez traía una botella de whisky y tres vasos. Sirvió los 3, me dijo "tomá un poco y ponete cómodo porque la noche va a ser larga cornudo" y fue a meterse otra vez en la cama con mi esposa.
Mientras yo seguía sentado en una silla tomando mi vaso de whisky, ellos hicieron lo mismo pero acariciando y besándose. Ya sin bebida en sus vasos, Lorenzo agarró a mi esposa del pelo y le dijo "dale putita, chupame la pija adelante del cornudo de tu marido". No fue necesario que "guíe" o empuje la cabeza de mi esposa hacia su pija, ella sola se dejó caer al miembro de su macho, y con muchas ganas de lo empezó a lamer y chupar con ganas como había hecho antes.

El vago gemía y disfrutaba la espectacular mamada que le estaba haciendo Mica y en poco tiempo ya estaba al palo otra vez. La volvió a tomar del pelo pero esta vez para quitar la boca de mi esposa de su pene, la miró fijo, se la transó y le dijo "ponete en 4 mirando al cornudo".
En cuestión de segundos mi esposa se acomodó como ordeno su amante y esperó a que su hombre fuera a penetrarla, siempre con la mirada fija en mis ojos.
Lorenzo con mucha paciencia se acomodó atras de ella, le paso la pija un par de veces por el exterior de su concha y luego la penetró muy lentamente.

Mi esposa si bien gemía y disfrutaba con cada centímetro de verga que iba recibiendo, jamás cerró los ojos ni dejo de mirarme fijo, solo gemía y se mordía los labios en tono de disfrute, de pasión. Lorenzo fue acelerando las embestidas contra mi esposa, haciéndola sacudir por completo y escuchándose el típico ruido del choque de cuerpos, o de genitales mejor dicho. Le estaba dando duro y profundo, con ganas y disfrutando seguramente de la humedad de mi esposa.

Yo por mi parte tenía una escena increíble, por un lado veía el cuerpo de mi esposa bambolearse para adelante y para atrás al ritmo de las embestidas, mientras su cara de iba desfigurando por el placer y sus pechos se movían al ritmo del formidable garche que le estaban dando, y cuando subía un poco la mirada veía a otro tipo aferrado a las nalgas de Mica con la vista fija para no perderse detalle de como entraba y salía su miembro de la ardiente concha de mi esposa, y todo eso coronado por los sorbos que iba dándole al whisky.

Era como estar en un set de pelicula porno y en donde mi esposa era la actriz principal, y lo peor de todo era que me gustaba demasiado, estaba disfrutando de solo ver a mi esposa ser poseída por otro hombre.
En un arranque de calentura le dije a Lorenzo:
Yo: Rompele el culito.
Lorenzo: ja!!! miralo al cornudo, ahora pide cosas.
Mica: jaja, es que sabe que me gusta eso...
Lorenzo: queres que te rompa la cola amor?
Mica: siiiiii
Lorenzo: ok ok, bueno cuerno, pedime le rompa el orto a tu esposa, hacé bien el papel.
Yo: Lorenzo rompele el orto a mi esposa por favor.

El se rio un poco, le hizo abrir un poco las piernas a Mica para acomodar la altura y le empezó a chupar primero el ano y después de unos minutos a meter algún que otro dedo para dilatarla un poco. Mica por su parte seguía mirándome fijo y dando muestras de placer. Se la notaba mas concentrada en prestar atención a mis gestos que al tipo que estaba jugando con su culo. Eso me calentó aún mas, porque era obvio que ella no estaba interesada en ese vago, sino que lo que realmente quería era cumplir la fantasía conmigo, no buscaba un polvo, buscaba morbo.

Mica ya se estaba impacientando un poco y le dijo que en la mesa de luz había lubricante, que le ponga un poco y que intente penetrarla. Lorenzo hizo lo que ella ordenó, la lubrico bien, apoyó su pija en el ano de mi esposa, que seguía con la vista clavada en mi, y la penetró lento.
Por momentos Mica cerraba los ojos, era evidente estaba sintiendo el rigor de ser enculada, pero pasado un tiempo se fue acostumbrando y volvió a clavarme la mirada y a demostrarme que se calentaba porque yo la estaba mirando.

El anal duró varios minutos, en los cuales fueron cambiando de ritmo las embestidas, algunas suaves y otras violentas y profundas, incluso hubo momentos en que era mi esposa la que se movía para adelante y atrás generando la penetración.
Yo por mi parte me masturbaba muy lento cruzando miradas con mi esposa, que de vez en cuando se relamía mirando mi pija, como si tuviera ganas de chuparmela, cosa que no sucedió en la realidad, pero que si estaba pasando en nuestras mentes digamos. Era un juego morboso, perverso por momentos, pero que a decir verdad era super excitante.

Ella vio que yo no daba mas y estaba por eyacular, asique abrió la boca como si fuera a tomarse mi leche, o bien esperaba que mi semen llegara hasta su boca, pero no fue posible, estaba a un par de metros de distancia de ella y pese a mi intención de querer que llegue aunque sea un chorro no me alcanzó. Un chorro llegó hasta la cama pero quedó a los pies digamos, y la gran mayoría de semen cayo sobre el piso.
Igualmente ella cerró los ojos e hizo caras como si lo estuviera saboreando, como si le hubiese descargado toda mi leche en su boca, y a los pocos segundos tuvo un orgasmo mientras Lorenzo la seguía enculando fuerte.

Nose cuando tiempo habrá pasado, yo estaba un poco perdido después de la tremenda y rara paja que me había clavado, pero se notaba que el corneador estaba llegando al límite y con estocadas profundas empezó a descargar su leche otra vez, pero ahora en el culo de mi esposa, que agarrada de las sábanas se dejaba llenar el culo de semen.
Lorenzo una vez descargado por completo casi que se desmayo sobre la cama a disfrutar de pos polvo, con una cara de felicidad increíble y mi esposa lentamente se dejó caer digamos y quedó acostada boca abajo descansando.

Poco tiempo después me paré y fui hasta mi esposa, miré su hermoso y redondo culo descansar de semejante faena mientras iba brotando muy lentamente el semen que pocos instantes antes la había inundado.
Le abrí un poco las nalgas y aprecié mejor como escurria el semen por su dilatado orto.
Lorenzo: y cornudo? Se lo deje muy abierto?
Yo: Se lo he visto mas abierto pero igualmente parece estar bien abierto (mientras decía eso le metía algún que otro dedo en el culo a mi esposa).
Lorenzo: ehhh, enserio? Vos que decís flaca?
Mica: tiene razón el cornudo, pero igual nunca me llenaron tanto de lechita como vos.
Lorenzo: bueno, algo es algo jajaja. Si querés te sigo dando leche, tengo mucha para vos.
Mica: no no, basta por hoy, estoy muy cansada ya.
Lorenzo: uhhh bueno, no hay drama, otra vez será.

Lo dejé que descanse un rato y después lo invité a retirarse digamos. El vago saludo a Mica y a mi muy respetuosamente, dijo que la había pasado bárbaro y bla bla y se fue. Cuando volví al dormitorio Mica ya estaba dormida, totalmente desnuda y con su entrepierna llena de semen.
Al otro día me despertó Mica. Ella ya se había duchado y me había preparado el desayuno y me lo trajo a la cama.
Mientras yo desayunaba tranquilo ella empezó a petearme suavemente. Si la noche anterior había disfrutado como loco, que te hagan un pete con amor mientras desayunas no tiene precio, es increíble que te "atiendan" así.
Obviamente no dure mucho desayunando, tire todo a la mierda y Mica se montó encima mío y empezó a cabalgarme con ganas.
Estuvimos varias horas garchando como locos los dos, nose cuantos polvos nos echamos pero fueron muchos y si bien ninguno de los dos dijo nada de la noche anterior, creo que ambos estábamos muy calientes por eso.

7 comentarios - Mas cornudo imposible

leloir2010
Que exitante y morbosa la situacion. Cada ves te recibís mas de cornudo y a Mica le gusta ese papel que vos asumis cada ves con mas naturalidad. Van puntos
morbo_cuernos +4
me encantó el texto... pero como cornudo que fui, me parece riesgoso que un macho desconocido le acabe adentro la primer noche... será que nosotros hicimos todos los estudios para que finalmente tenga un macho que la coja a pelo.... pero sacando ese "detalle".... alucinante
Bartolomeo1111 +1
Buen relato, no te falta mucho para que te ordenen comer semen