A los 27 años de edad, Andrea tenía una especialización y una maestría en su carrera. Pero su meta desde que inicio la universidad era la de obtener un doctorado. Para esa época el mejor doctorado lo impartían en la capital del país. Así que Andrea aplico para la solicitud de admisión y quedo seleccionada. Los estudios incluían una beca por parte de la universidad, que no era suficiente para mantenerse, así que decidí ayudarla en alcanzar sus sueños. Mi familia tiene un piso en una buena zona en la capital, de tres habitaciones con tres baños y que está completamente amoblado. Lo usamos para hospedarnos al tener que ir a la capital cuando tenemos que hacer alguna gestión. Así que lo general, siempre esta vacío. Después de hablarlo con mis hermanos, acordamos que Andrea ocuparía permanentemente una habitación, y las otras estaría libres, por si algún familiar tenia la necesidad de ir hasta la capital.
Acorde con Andrea, para que se dedicara complemente al doctorado que yo la ayudaría económicamente (además de no pagar un alquiler). Todo esto para que pudiera terminar su doctorado de menos de tres años. Acordamos que yo la estaría visitando en la capital o que ella vendría hasta nuestra ciudad, para así poder mantener nuestra relación. Pero fueron más las veces que yo viaje a la capital, porque allí teníamos más libertad para estar juntos.
En vista de la ausencia de Andrea, , comencé a pasar más tiempo con Natalia y a medida que pasaban los días, comenzamos a dedicar más tiempo a conocernos. Como “familia” íbamos al cine y luego a tomar un helado o cervezas. Salíamos a cenar o íbamos a una disco o un bar. Y ya no solo era sexo, comenzamos a compartir como si fuésemos novios. Empecé a darme cuenta de que era una chica bastante agradable. Se quedaba unas cuantas noches a la semana en mi casa, y mientras yo estaba trabajando en mi estudio, ella salía en pijama para darme un beso de buenas noches, o se sentaba en mi regazo y me besaba en la mejilla y luego se iba a acostar.
Natalia tenía un amigo gay que trabajaba en el hospital. Ella le conto nuestra situación y le pidió que fuese su “novio”. Ella necesitaba una tapadera para quedarse conmigo sin causar complicaciones y reclamos en su casa por parte de sus familiares. Su “novio” la apoyo, así que cada vez que quería quedarse, que eran varios días a la semana, le decía a su familia que estaba en casa de su “novio” a quien algún día les presentaría.
Y así, poco a poco se fue haciendo un ritual que Natalia vivía conmigo en casa a escondidas de sus padres. Cada fin de semana salíamos de marcha, o al teatro o al cine. La diferencia entre Natalia y Andrea con las películas que me gustan es total. Andrea es una mujer “Tierra Tierra”, a ella solo le gustan películas como por ejemplo: El Padrino, La Lista de Schindler, La Vida es Bella, El Silencio de los Inocentes, Rescatando al Soldado Ryan, Parásitos o Forrest Gump, por poner algunos ejemplos. No le gustan películas como: 2001 Una odisea espacial, Star Wars, Blade Runner, Alien, Avatar. Nada de Marvel o DC Comics. Yo le he rogado cientos de veces que vea conmigo Batman: El Caballero de La Noche. Ni loca jajajaja. Así que ese tipo de películas, que le gustan a mis hijos debo verlas con Natalia, a ella si le gustan. Les cuento esto para que vean una diferencia entre Andrea y Natalia.
Volviendo a la historia, era casi que muy normal que Natalia se paseara por la casa en sus braguitas con una camiseta como top. De hecho, compartir con ella hizo que comenzara a enamorarme un poco de ella. Ella tiene los senos más pequeños que Andrea, pero igual me excitaba verla en hilos dentales, con una camiseta y sus pezones sobresaliendo.
Ciertamente se estaba convirtiendo en una excelente compañía, que poco a poco fue sustituyendo a Andrea. Y la picara de Natalia me pedía siempre que le prometiera con el meñique que no se lo diría a Andrea que ella estaba pasando casi todo el tiempo conmigo. Esa era una promesa que ciertamente estaba dispuesto a cumplir. Una chica caminando por mi casa en hilos dentales. ¿Cómo decir que no?
Con el paso del tiempo, también comenzó a usar pantalones cortos de algodón ajustados que mostraban su bonito trasero y sus hermosas piernas. Ella sabe que las piernas de una mujer son mi debilidad y mi fetiche. Muchas veces, cuando salíamos y ella caminaba frente a mí, aprovechaba para mirar su trasero y sus piernas. Recuerdo que una mañana que Andrea estaba en la ciudad, fuimos a un restaurante a desayunar, cuando Natalia se excusó para ir al baño. Andrea me atrapó mirando mientras Natalia se alejaba y me preguntaba "¿Por qué miras a Natalia así?". Me pillaron con las manos en la masa y me estancaron, sin saber cómo responder. Me salvó la camarera que nos traía la comida. Natalia regresó pronto y se cambió de tema. En la casa, a menudo la veía acostada en el sofá, con sus ajustados pantalones cortos de algodón que mostraban la parte inferior de su trasero colgando. ¡Joder, eso me volvió loco!
La mayoría de las chicas guapas son populares y Natalia no es una excepción. Supongo que tener una casa con piscina también ayuda. A medida que se acercaba el verano, preguntó si podía invitar a sus amigas del hospital. Lo discutimos y decidimos que podrían venir, pero sin hacer una fiesta salvaje y que me limpiaran la casa. La mayoría de las veces solo sería ella con otras cuatro chicas. Se quedarían tumbados para broncearse y no se molestarían en saltar a la piscina. Un fin de semana que Andrea no estaba, me asomé por la ventana y me di cuenta de que una de sus amigas llevaba un bikini con un micro tanga y con un culo precioso y las cuerdas de su top desabrochadas para evitar las marcas de bronceado. Inconscientemente comencé a frotar mi verga, deseando poder ver más. Hacia tiempo que no veía a Andrea con sus micro bikinis, así que ver aquella chica me excito muchísimo. Después de unos minutos, se me ocurrió una excusa y decidí mirar más de cerca. Me sorprendió cuando salí por la puerta y me di cuenta de que era Natalia la que tenía el bonito culo en un micro bikini boca abajo con las cuerdas de la parte superior desabrochadas. Normalmente los bikinis de Natalia eran más conservadores, así que era la primera vez que la miraba en algo tan pequeño, y que era habitual en Andrea.
Esa noche cenamos con sus amigas con algo de vino de mesa, muy buen vino y estuvimos platicando de todo un poco. Termino la cena y fuimos a la sala nos sentamos con un poco mas de vino y empezamos a charlar nuevamente y vimos la película Casino Royale, que Andrea detesta pero que le gusta a Natalia. Terminamos la botella de vino y sus amigas decidieron marchase porque se sentían muy cansadas.
Después que sus amigas se fueron, Natalia y yo nos besamos con pasión. Desde la tarde tenía ganas de ella. Le dije que me había excitado verla con un microbikini. Ella se rio y me dijo que tenía una sorpresa y fue hasta la habitación a cambiarse. Cuando regreso venia vestida totalmente diferente sensual y muy cachonda. Tenía puesta una ropa interior de color negro con medias negras. Se me acerco y me dijo que esas medias las había comprado pensando en mi y que ahora se sentía muy bien de usarlas para mí, el cachondeo no se dejo esperar, mis manos la acariciaban desde sus tobillos hasta sus pechos, sentía sus pechos firmes y sus muslos calientes sobre mí. La desnude solo dejándola con ese hermoso par de medias y unos ligueros para estas alturas yo ya estaba también desnudo. El simple hecho de tocar sus piernas me provocaba unos espasmos en mi pene, la coloque en su cama y comencé a besar sus manos suaves y perfumadas proseguí con sus muñecas y sus hombros, su piel se ponía de gallina cada vez que soplaba su nuca por mi parte el rozar de sus muslos con esas medias me desquiciaba totalmente. Empecé a bajar hacia sus pechos y note que sus pezones ya estaban bastante erectos, los roce con mi lengua, fue entonces cuando logre arrancarle un quejido de placer. De ahí en adelante no paro de expresarse en ningún momento, seguí con su ombligo notando el olor característico del sexo de una mujer, para lograr un poco de mas excitación seguí con sus muslos brincando su sexo cuando empecé a besar sus piernas. Mi pene casi reventaba sus media y el olor tan especial aumentaban mi placer.
Tarde cerca de media hora besando sus pies, tobillos, piernas, y luego, cuando la mire a los ojos y supe que quería un poco de placer de mi parte, separe sus piernas y ahí estaba frente a mi esa joya ya con fluidos. No me negué y empecé a besar sus labios mayores, separe un poco y encontré su clítoris deseoso de ser mamado, lo lamí de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha mientras ella no paraba de gemir para terminar con esta parte clave mi lengua en su vagina provocándole un verdadero orgasmo. De su vulva brotaba néctar que no dude en probar y degustar hasta el final de su clímax. Ahora mi turno. Ella se arrodillo frente a mí y me empezó a chupar el glande dando vueltas dentro de su boca y jugueteando con mis huevos. Pasado unos minutos de placer, la recosté y le comente que ahora si teníamos que terminar. Separe de nuevo sus piernas y coloque una almohada debajo de su espalda baja, tenía una gran vista. Y pase mi glande por todas partes y después la penetre lentamente sin ningún problema, ensayamos algunas posiciones como el perrito, el misionero y también la puse a cabalgar un rato. Ella tuvo otros dos orgasmos pero yo seguía sin llegar al clímax, fue entonces que la coloque boca arriba y la volví a penetrar. Y esta vez Natalia comprendió que debía darme placer. Yo comencé a meterlo y sacarlo lentamente, esa es la manera de coger a Natalia. Y dejar que la vagina de ella haga el resto. Y cuando Natalia ha tenido varios orgasmos, su cangrejera aumenta, y comienza a apretar mi verga. Aprieta y suelta. Es una vagina que muerde tu verga. Ese apretar suavecito, es lo más rico que podrás experimentar con una mujer. Recuerdo siempre a un amigo decir: "Mujer con cangrejera no se deja". Y es verdad. Estar dentro de Natalia es lo más rico que he sentido en mi vida. Duramos un buen rato antes de venirme, los chorros de leche llenaron una vez más su vagina y mis quejidos la habitación.
En otra ocasión, hacia el final del verano, entró en la casa y me pidió un favor con su dulce y sexy voz de niña, pidiéndome que no saliera al patio trasero. Pregunté qué estaba pasando. Explicó que el verano estaba llegando a su fin y que sus amigas querían broncearse sin sostenes. Le prometí no ir al patio trasero durante la próxima hora. Esa promesa también fue seguida por un largo beso que se estaba convirtiendo en la norma. La idea de saber que su pequeño pecho estaba a la vista me hizo querer mirar por la ventana. Una vez más me encontré corriéndome en mi mano mientras asomaba por la ventana. Cinco chicas en topless en la piscina de tu casa.
Durante esos meses llegue a pensar que mi vida era perfecta, con Natalia mostrándome su delicioso culo y yo follándome a Andrea, soñando que era Natalia la que estaba debajo de mí, encima de mí y frente a mí. Eran los labios de Natalia los que estaban chupando mi verga y el coño de Natalia con el que estaba haciendo el amor con mi boca. Andrea ciertamente no tenía quejas ni sospechaba lo que estaba pasando. A la postre, Natalia seria el costo a pagar por dejarme solo en una ciudad durante casi tres años, y en manos de una hermosa mujer, como era su hermana Natalia.
Un día, Andrea me llamo que no vendría en todo un mes. Estaba muy complicada con su doctorado. Preguntó si yo estaría bien. Le aseguré que la apoyaba y que no tenía por qué preocuparse. Sin embargo, lo único en lo que podía pensar era en Natalia caminando por la casa medio desnuda con sus nuevas y sexys bragas que gritaban: Ven a cogerme. Para entonces, había llevado a Natalia al Centro Comercial Maremagnum con el pretexto de comprar zapatos. Mientras estaba allí, me explicó que también necesitaba comprar ropa interior nueva. Cuando entramos a una tienda de Victoria's Secret, no estaba seguro de qué pensar. Ella me pidió que escogiera su ropa interior. Debo confesar que fui feliz escogiendo las prendas y entregárselos a Natalia para probárselos. Mientras la cajera nos llamaba, su comentario fue "Estoy seguro de que a tu novio le encantarán estos" mientras me miraba. Natalia le respondió con picardía: “No es mi novio, es mi esposo”
Cuando terminamos, nos detuvimos en el patio de comidas para comer algo. No pude evitarlo y le pregunté: "¿Crees que a tu novio le van a encantar?". Ella respondió con una sonrisa en su rostro “Ella pensó que eras mi novio. Viste la cara que puso cuando le dije que eras mi esposo jajaja. Tendrás que decirme si te gustan ". Estaba estupefacto y no estaba seguro de cómo responder. En los días siguientes descubrí que me gustaba su nueva ropa interior. Esta niña estaba jugando con fuego y me iba a quemar.
Para el sábado, le pregunté a Natalia si estaba dispuesta a salir a cenar esa noche. Anteriormente había mencionado haber hecho planes con sus amigos el sábado. Le recordé que para el sábado tendríamos un aniversario. Teníamos un año viviendo juntos. Me preguntó qué tenía en mente y le dije que estaría bien si nos vistiéramos y fuéramos a un buen restaurante. Hay un restaurante que tiene una disco justo al lado que tanto le gusta a ella. No podíamos dejar que nuestro primer “aniversario” pasase bajo de la mesa.
El sábado por la mañana, entré en la sala de estar con mi nueva teléfono móvil. Había llegado el viernes y estaba emocionado de jugar con él. Natalia ya estaba acostada, jugando con su tableta en camisola y un nuevo par de bragas que le compré en el centro comercial. Muy poco material ¡Joder!
Empecé a apuntar la cámara del teléfono por la casa, familiarizándome con el enfoque y las funciones de la cámara. En un momento, apunté a Natalia con la cámara y le pedí que sonriera, ella volvió la cabeza y le sacó la lengua. Ambos nos echamos a reír. Seguí tomando fotos en la sala de estar, pero no pude evitarlo. Pensé que estaba siendo astuto tomando fotos rápidas de su dulce trasero cuando estaba tan concentrada en su tableta. Comencé a notar que esta pequeña niña en el sofá estaba comenzando a abrir un poco las piernas, exponiendo cada vez más su dulce coño. En poco tiempo, descaradamente estaba tomando fotos con ella sin decir nada.
Los dos nos sorprendimos cuando sonó mi teléfono. Mi corazón comenzó a latir a un millón de latidos por minuto y rápidamente cerró las piernas de Natalia que solo se reía pícaramente.
Andrea estaba llamando para ver cómo estaba. Después de asegurarle que todo estaba bien por nuestra parte, hablamos un poco sobre sus estudios y luego colgamos.
Después de eso, fui a mi cuarto para observar las fotos de Natalia. Las fotos del joven culo y el coño de Natalia me excitaban enormemente. Al hacer zoom en la imagen, podría jurar que sus bragas estaban mojadas en la entrepierna. No obstante, evité estar en la misma habitación con ella el resto del día. Simplemente no podía confiar en mí mismo y quería dejar el plato fuerte para la noche. Hice algunos recados, arreglé el cabezal de la ducha que goteaba, hice otras pequeñas reparaciones en la casa. Antes de darme cuenta, eran las 6 de la tarde y nuestro plan era salir a las 8 de la noche con reserva para las 9. Natalia anunció que se iría a su habitación para prepararse.
Unos minutos después de las 8 pm, entró en la sala de estar donde había estado esperando al menos media hora. Si mi vida fuera una caricatura, sería el lobo al que se le cae la mandíbula al suelo, se le sale la lengua y se golpea la cabeza con un mazo. ¡Se veía tan sexy! ¡Y yo hervía de lo caliente! Era como si acabara de bajar del escenario en un concurso de belleza durante el evento del vestido de noche. Ella preguntó "¿Cómo me veo?" Mientras se giraba lentamente. Su cabello y maquillaje se veían hechos profesionalmente, con suculentos labios rojos llenos, hermosas tetas y el trasero de burbuja que me había estado volviendo loca desde hace algún tiempo, todo mientras usaba un vestido negro con unos tacones negros y medias negras.
Ella rompió mi mirada diciendo: "Asumiré que lo apruebas por la expresión de tu rostro". Estábamos listos para ir. Abrí la puerta principal y le permití ir primero, vislumbrando su dulce furgón de cola mientras salía. Caminamos hacia el auto y le abrí la puerta. Salimos del camino de entrada y pronto estábamos en la autopista. “¿Realmente me veo bien? Quería verme bien para ti en nuestra cita ”, dijo. ¡Le dije que se veía genial! Se volvió un poco hacia la izquierda y sonrió mientras me preguntaba "¿Realmente me veo bien?"
"Sí"
"¿Me veo sexy?"
"Uh ... sí"
"¿Me veo sexy?"
"Uh ... tal vez." ¿Estaba tratando de meterme en problemas?
"Si no estuvieras con Andrea, ¿me querrías como tu novia?"
"Uh ... tal vez" ¿Qué se suponía que tenía que decir?
"¡Bien!" ella se rió tontamente "Esta noche son solo Tú y Natalia, novio y novia ... Esta noche, soy tuya". Dijo las últimas tres palabras en un tono muy bajo y sexy. Se volvió para mirar hacia adelante mientras sostenía mi mano y entrelazaba nuestros dedos. Después de unos minutos la escuché decir "Mi amor".
Le di una mirada de "¿Me estás hablando a mí?". De nuevo, ella dice "Mi amor". Oh, supongo que vamos con el juego de fingir novio-novia. "¿Sí?" "¿Mi trasero se ve bien con este vestido?" "Uh, uh ... uh, uh ... se ve muy bien". Lo que realmente quería decir era 'joder, sí'. Definitivamente quiero tocar ese trasero.
Pronto llegamos al restaurante y aparcamos en el servicio de aparcacoches. Abrieron nuestras dos puertas y ella fue ayudada por uno de los asistentes. La expresión de su rostro no tenía precio. Mientras caminábamos hacia la puerta principal, agarró mi brazo y lo envolvió alrededor de ella, con mi mano aterrizando alrededor de su cintura. ¡Me estaba encantando! Nos registramos en la recepción y nos informaron que nuestra mesa estaría lista en 15 a 20 minutos. Nos sentamos en la barra a tomarnos un par de tragos. Después de aproximadamente media hora, nos acompañaron a nuestra mesa. El joven que nos sentó nos solicito nuestros pedidos de bebidas. Pregunté por mi favorito, un antiguo y Natalia pidió una copa de vino blanco. Cuando se fue, le pregunté cómo se estaba sintiendo. Dijo que era una cita, y que estaba feliz de estar a mi lado.
Estábamos hablando, riendo y pasándolo muy bien en la cena, cuando de repente sentí que ella jugaba con los pies conmigo. Le pregunté qué estaba haciendo y su respuesta fue "jugar a los pies con mi novio". Le recordé que realmente no era su novio y su respuesta fue "Esta noche lo eres". Continuamos nuestra cena y conversación, ella también continuó jugando con mi pie. Cuando el camarero nos trajo nuestro recibo de pago, preguntó si visitaríamos el club de al lado, y Natalia respondió rápidamente "Sí". Nos llevaron a una puerta especial que conectaba el restaurante con el club de al lado. Llegamos a descubrir que eran propiedad del mismo dueño. Sin un gorila en la puerta especial, entramos muy fácilmente. Fuimos a la barra y pedimos otra ronda y encontramos una mesa alta para sentarnos; de nuevo, ella agarró mi brazo y lo puso alrededor de su espalda con mi mano en su cintura. Pronto estuvimos en la pista de baile y tuve la mayor erección de mi vida con Natalia bailando y moliendo su trasero en mi entrepierna. Con su atuendo y sus movimientos de baile, estoy seguro de que no era el único que tenía problemas para caminar. Natalia era una de las mejores bailarinas de la familia. Pronto fue seguido por una canción lenta y sentí sus tetas presionando con fuerza contra mi pecho y su pelvis presionando contra la mía. ¿Cómo no podía sentir una verga dura como una roca en mis pantalones? Inclinó la cabeza y puso sus labios sobre los míos. Oh, mierda, sabía que estaba en problemas.
Seguimos bailando durante toda la noche y pasándola genial. Ella me besaba aquí y allá, pero nunca un beso completo. Me encantó y comencé a relajarme. Estaba disfrutando de nuestra cita fingida y comencé a sentir que ella realmente era mi novia. En un momento durante un baile lento, una vez más comenzó a besarme y pronto nos besamos como un par de adolescentes. Me estaba divirtiendo, ella realmente es una gran besadora. Cuando volví a la realidad, me aparté. Llevó su boca a mi oído y dijo: “Esta noche soy tuya. Bésame". Me entregué a su pedido y seguí besándola. Estoy seguro de que el alcohol contribuyó a que bajara la guardia. Con los besos sensuales, ¿cómo iba a terminar esta noche?
Se hizo tarde y sugerí que nos fuéramos a casa. Ella estuvo de acuerdo y pronto salimos por la puerta, una vez más con mi mano hacia abajo y alrededor de su cintura. ¡Joder, se sentía bien! Mientras esperábamos a que el asistente de aparcacoches trajera nuestro coche, los besos continuaron, y ella siempre iniciaba el beso. ¿Qué estaba pasando? ¿Cómo iba a detener esto? Con una jovencita caliente encima de ti, ¿querrías detenerlo? Decidí disfrutar de lo que estaba pasando y preocuparme por eso mañana por la mañana. En el auto, camino a casa, se calmó un poco y me dijo gracias por la cita, diciéndome que se lo estaba pasando genial. Al llegar a casa, entramos en el camino de entrada y ella no se bajó del auto hasta que yo di la vuelta y le abrí la puerta. Me recordó que la cita no había terminado.
Al entrar a la casa, me preguntó si podía agarrar mi teléfono ya que quería que le hiciera algunas fotos con el elegante vestido. Caminamos hasta mi habitación y, ella entró al baño para retocarse el maquillaje. ¡Dios mío, es jodidamente hermosa! Comenzó a posar en diferentes lugares de la habitación, y luego en sala de estar. Se veía sexy y mi verga palpitaba, suplicando ser libre. Ella se sentaba en el sofá con las piernas cruzadas, luciendo muy elegante. Poses bonitas e inocentes, al principio. Luego se paró junto a la puerta que conducía al pasillo y se quedó de lado, con la cara vuelta hacia mí, con su perfil lateral resaltando su suculento trasero. Estas poses se volvían más sexys a cada minuto, mostrando más de sus hermosas piernas. Por este punto, Había terminado y necesitaba un poco de consuelo. Me disculpé para ponerme una camiseta y unos pantalones cortos.
Cuando regresé, definitivamente no esperaba lo que vi en el sofá. Natalia estaba acostada boca abajo con su camisola de satén y bragas, idéntica a cómo estaba vestida esta mañana. Me preguntó si estaba lista para continuar y le dije que no creía que fuera una buena idea que le tomara fotos vestida de esa manera. Me quedé sin palabras cuando ella respondió: “¿No es esto lo que estaba usando cuando me tomaste fotos esta mañana? ¿No te gusta mi trasero en estos hilos, mi amor? Dudé durante dos segundos y luego apunté mi teléfono hacia ella y comencé a hacer clic. Una vez más, ella comenzó a abrir las piernas, ¡y yo sabía que esta vez lo estaba haciendo por mí! Ella siguió mirándome mientras su mano izquierda se estiraba hacia atrás y lentamente comenzaba a acariciar su trasero. mientras me miraba desde el dormitorio y se lamía los labios lentamente y preguntaba "¿Es esto lo que querías?" Luego se dejó caer al suelo, con el culo en el aire y la cabeza en el suelo girada hacia un lado. Lo mismo que haría cualquier chica mientras se prepara para ser follada por detrás. "Mi amor, ¿mi trasero se ve bien?" Ella era fascinante y le debía la verdad. "Oh, sí, tu hermoso trasero se ve muy bien". Luego preguntó: "¿No te gusta que tu novia se vistiera así para ti?" Solo pude responder un simple "Ajá". Su respuesta fue "Bueno, para eso me tienes, para usar estos hilos sexys para ti". A estas alturas ya se había dado la vuelta y lentamente se arrastraba a cuatro patas hacia mí con la parte superior colgando, mostrándome la mayor parte de sus tetas y parte de sus areolas. Me sentí como una especie de presa cuando se acercó a mí. Me quedé estupefacto sin nada que decir más que disfrutar de su belleza. Se acercó a mí y lentamente se subió al sofá y se sentó a horcajadas sobre mí.
Comenzamos a besarnos cuando ella comenzó a moler su dulce y pequeño coño en mi verga. Lo único que separaba nuestros genitales eran sus bragas y mis pantalones cortos. En nombre de la comodidad, no me había molestado en ponerme ropa interior cuando me cambié. Hay un beso para decir hola o adiós y luego hay un beso completo de "Quiero follarte". Eso es lo que estaba pasando entre nosotros. Ella estaba metiendo su lengua tan lejos como podía mientras apretaba su coño con fuerza en mi verga. Estaba más que feliz con eso. Su cuerpo joven, duro y suave se sentía increíble en mis brazos mientras seguía sintiéndola arriba y abajo desde sus caderas acampanadas hasta su cintura y hasta sus hombros.
Comenzó a decirme que estaba enamorada de mí cuando me conoció cuando era niña. “Cuando empecé a darte un beso de buenas noches, siempre deseé que algún día me devolvieras el beso. Pero nunca lo hiciste ... hasta esa noche ". Una vez más comenzamos a besarnos, con su lengua en mi garganta. Luego me preguntó si recordaba la primera vez que me pidió que no fuera al patio trasero porque estaría bronceándose en topless. Dije que sí. "Mientras me recostaba en el patio trasero, especialmente cuando estaba solo, fantaseaba con que saldrías y te meterías mis tetas en la boca". Mientras decía esto, agarró la parte de abajo de su camisola, se la pasó por la cabeza y se sentó en mi regazo con sus hermosos y jóvenes senos desnudos a escasos centímetros de mi cara. Ahuecó uno de sus pechos con la mano y me lo dio de comer. Chúpalo, bebé. Por favor chupe mi pecho. "¡¿Cómo diablos pude decir que no?!? Esta diosa está sentada a horcajadas sobre mí en topless, solo en bragas, pidiendo que le chupe los pechos. Sí, hice exactamente lo que haría cualquier hombre heterosexual.
Mientras disfrutaba de sus pechos, chupándolos con fuerza como si esperara que saliera leche, ella comenzó a gemir en voz alta, diciéndome cuánto tiempo había estado soñando con esto, diciéndome “Por favor no pares, por favor no pares, tu boca se siente tan bien. " Ella me permitió chuparlos por un tiempo antes de comenzar a deslizarse hacia abajo hasta que estuvo de rodillas mirándome con sus hermosos ojos. No hubo necesidad de palabras, simplemente agarró mis pantalones cortos por la cintura y comenzó a tirarlos hacia abajo. Inconscientemente, , levanté el trasero para que ella pudiera bajarlos fácilmente.
Ella tuvo un pequeño problema con mi verga rígida, lo que le causó un pequeño obstáculo. Por supuesto que no dejó que eso la detuviera. Metió la mano, empujó mi verga hacia abajo y continuó bajando mis pantalones cortos. No se detuvo hasta que estuvieron completamente fuera de mis piernas.
Ella agarró mi verga y comenzó a acariciarme lentamente mientras me decía algo que me sorprendió: "Sabes, cuando me quedo en tu casa y esta Andrea, a veces me coloco junto a tu puerta, y los escucho a ti y a Andrea cogiendo, sueño que me estés cogiendo a mí, no a ella, que te chupe la verga, diciéndome poner tu gran verga gorda en mi boca ..... ,, dilo, dilo! ¡Dime que te chupe la verga! " Ella siguió acariciándome, esperando que respondiera. No estaba seguro de qué decir. Luego se repitió: "¡Dilo, maldita sea, dime que ponga tu maldita verga en mi boca y la chupe!" En este punto, mi verga estaba controlando mi boca. “Natalia, chúpame la verga. Chúpame la verga, puta. Abre la boca y chupa la verga de tu macho ”. Inmediatamente bajó sus labios hacia mi verga y comenzó a lamer la cabeza, todo el tiempo mirándome a los ojos. Ella sostuvo mi verga mientras abría los labios y bajaba la cabeza. Dios mío, era mi sueño húmedo. Comparada con Andrea, ella no era tan hábil. Sin embargo, su entusiasmo ciertamente me tenía cerca de correrme. Ella debió haberlo sentido, porque sacó mi verga de su boca y me contó otro pequeño secreto sucio.
"Sabes, esta mañana cuando estabas tomando fotos de mi trasero, realmente quería que extendieras la mano y me bajaras las bragas para que pudieras meter tu verga en mí y cogerme". Mientras decía esto, se puso de pie frente a mí y me tomó las manos. Se los llevó a las caderas, metió mis pulgares en la cintura de su hilo dental y comenzó a empujar hacia abajo. Me di cuenta muy rápido y los bajé el resto del camino, ayudándola a salir de ellos. Cuando su hilo me revelaron su pequeña raja, su coño estaba perfectamente depilado como ella sabe que me gusta. Sus labios húmedos desprendían un dulce aroma a juventud. "Quería que vieras mi suave y pequeño coño", siguió hablando mientras una vez más se sentó a horcajadas sobre mí, agarró mi verga y comenzó a frotarla de un lado a otro a lo largo de su raja. “Me afeité el coño para que supieras exactamente a quién coges” En el momento en que dijo la palabra 'coger, empezó a bajar y mi verga se metió muy rápidamente a la mitad de su vagina. Dios mío, su coño le quedaba como un guante dos tallas más pequeño. Su dulce y joven coño estaba tan apretado. "Quiero que recuerdes que este no es el coño de Andrea, este es mi pequeño coño que te aprieta duro esa verga". Nos concentramos en coger, con ella encima teniendo todo el control. Me quité la camisa y puse mis manos en su dulce y apretado culo, ayudándola a levantarla cada vez que bajaba mientras seguía disfrutando de sus pechos en mi boca. Seguí alternando, tomando un bocado con cada uno en mi boca. “Tu verga grande y dura se siente tan bien. Dios mío, se siente tan jodidamente bien la forma en que tu verga me estira. Ahora que he tenido la verga de un verdadero hombre, tu verga , nunca he podido coger con otros chicos. Sé que contigo tengo un orgasmo garantizado”
Ella comenzó a gemir cada vez más fuerte y a rebotar cada vez más fuerte. Ella seguía diciéndome que la cogiera más y más fuerte y que la convirtiera en una mujer de verdad; diciéndome cuánto amaba mi verga. Antes de anunciar que se estaba corriendo. La sentí temblar. Empujé mi verga con más fuerza en su dulce coño. “Oh mierda, eso se siente tan bien, amor ... estoy acabando, oh Dios mío, ¡¡ estoy acabando !! Tembló un poco más antes de que llegara a un final lento. Y comenzó a gritar:”Te amo, te amo, te amo…”Varias veces y cuando dejó de temblar, puso su boca junto a mi oreja y me dijo "Mi coño es todo tuyo ahora ... ¡¡solo tú puedes follarte este coño !!"
Le dije que volviera al otro sofá con el culo en el aire. Ella hizo lo que le dije. Mientras me colocaba detrás de ella, no podía dejar de admirar su cuerpo apretado. Un hermoso cuerpo suave y fresco que solo una jovencita puede tener con sus pechos colgando, su estómago tenso y su hermoso culo y su coñito lindo y afeitado. Me volvía loco recordar que me había dicho que se había afeitado el coño para que yo supiera exactamente con quién me estaba follando. Ella quería que yo supiera que este no era el coño de una mujer, este era su coño de Mi Mujer. No había forma de que olvidara con quién estaba cogiendo.
Mientras estaba detrás de ella, agarré mi verga, me alineé con su coño y procedí a entrar lentamente en ella. Quería que disfrutara cada centímetro a medida que nos convertíamos en uno. A pesar de que acabábamos de follar, su coño se sentía tan apretado al volver a entrar. Miré hacia abajo y vi mi verga entrando y saliendo de su coño, la misma vista que había disfrutado muchas veces antes mientras me follaba a Andrea. Estaba fascinado al saber que esta hermosa mujer era mía, su coño ahora era mío, sus tetas y sus deliciosos labios rojos chupadores de vergas también eran míos. Había planeado toda esta noche para entregarse a mí. Entregar su cuerpo para mi placer.
Mientras seguía follándola por detrás, ella me preguntó “¿Te gusta follar con tu pequeña, sobrina? Eh, maldito pervertido, ¿verdad? ¿Mi coño se siente más apretado que el de Andrea? ¿Mi coño te hace querer correrte? Sus palabras y su rechazo me acercaban cada vez más y no podía contenerme más. Empujé hacia adelante y mantuve mi verga profundamente en su coño mientras me corría como nunca en mi vida, ni siquiera cuando tuve sexo por primera vez con Andrea. “¡Dios mío, tio Fer! Estoy acabando de nuevo, eso se siente tan bien, ¡de hecho puedo sentirte disparando tu semen en mi coño! " Rápidamente se dio la vuelta y tomó mi verga en su boca, tratando de succionar la mayor cantidad de semen posible. Pronto le pedí que se detuviera, diciéndole que mi verga se volviera demasiado sensible.
Estábamos dando cucharadas en el sofá, sin decir nada, solo abrazándonos. ¿¡Cómo diablos tuve tanta suerte !? Luego habló: “Gracias por la cita de esta noche. Fue mejor de lo que jamás podría imaginar. Te amo Fer ”. Ambos nos quedamos dormidos en silencio.
Después de despertarme a la mañana siguiente, pensé en lo que habíamos hecho la noche anterior. Pensé que podría alejarla y decirle que esto nunca volvería a suceder o disfrutar del momento y enfrentar las consecuencias en un momento posterior. Esa noche había sentido como Natalia se entregaba completamente a mí. Pero yo también me había entregado a Natalia, como la había hecho anteriormente con Andrea. Me estaba enamorando de Natalia? Dios que complicado. Pensaba que sí. Estar un año viviendo con Natalia y Andrea a lo lejos, había provocado que se crearan lazos entre los dos. Y escucharla decir que me amaba durante el orgasmo, derrumbo varias barreras dentro de mí. Yo era suyo y ella era mía.
Fue su idea seducirme, pero ahora que era mía, tenía la intención de disfrutarla tanto y tan a menudo como fuera posible. Me puse de pie, la agarré de la mano y la acompañé a la ducha en el dormitorio principal. La estaba llevando a mi habitación matrimonial, a la misma ducha con la que me había follado a su hermana muchas veces antes. Mientras abría el agua y ajustaba las perillas a la temperatura adecuada, Natalia se acercó por detrás y me abrazó, diciéndome que me amaba. Le respondí que yo también la amaba. Ella dijo que no. Realmente me quieres.
Las cosas estaban a punto de volverse locas. ¿Era posible estar enamorado de dos mujeres al mismo tiempo? ¿Incluso si fueran hermanas? No había vuelta atrás ahora. Tenía la intención de tener mi pedazo de torta y comérmelo también.
Terminamos follando en la ducha con ella inclinada y pidiendo que me la follara por detrás mientras le decía lo putilla que era por dejar que su tío la follara mientras Andrea no estaba, todo mientras clavaba mi verga dura hasta el fondo de su apretado coño. “Maldita puta. ¿Qué clase de perra estás dejando que tu tío meta su verga en tu pequeño y estrecho coño? ¿Qué clase de puta le abre las piernas a su tío, eh?
“Yo papi, yo. ¡Soy tu puta de mierda! ¡Dios mío, tu verga se siente tan bien mi coño! "
La follé duro y rápido antes de que ambos nos encontráramos juntos. Salimos de la ducha y nos secamos antes de pasar el resto del día desnudos. Desayunamos antes de acurrucarnos en el sofá para ver la televisión. Mi mente estaba más en lo que estaba en mis brazos que en lo que estaba en la televisión. Estábamos dando cucharadas en el sofá, con ella acostada frente a mí. Acaricié lentamente todo su cuerpo suave y apretado, comenzando por sus pechos y terminando con mi dedo profundamente en su suave coño. Primero jugué perezosamente con sus tetas, ahuecándolas antes de empezar a acariciar sus pezones, con sus gemidos suaves. Mis manos descendieron a su barriga antes de empezar a acariciar sus caderas. Joder, ¡su cuerpo joven y terso se sentía tan bien!
Después de disfrutar de su cuerpo, le pedí que se volviera y se tumbara de espaldas. Comencé a acariciar sus hermosas piernas antes de que mis manos estuvieran en la parte interna de sus muslos, tocando ligeramente su suave coño en el movimiento ascendente. Mis dedos comenzaron a acariciar de arriba a abajo su raja cuando comenzamos a besarnos. Quería que mi pequeña Natalia disfrutara de nuestro tiempo. En el momento en que mis dedos entraron en su pequeño agujero apretado, me di cuenta de que estaba extremadamente emocionada, con mi dedo deslizándose fácilmente en su coño mojado. Rápidamente agregué otro dedo mientras la follaba con los dedos, con mi boca chupando sus rígidos pezones. Ella gimió mientras deslizaba mis dedos suavemente hacia adentro y hacia afuera y chupaba con fuerza sus pezones.
Pronto ella estaba gimiendo fuerte, diciéndome que la follara más fuerte con mis dedos, diciéndome que estaba a punto de correrse. Decidí hacer lo que había querido hacer durante mucho tiempo cada vez que la veía acostada en el sofá con sus pantalones cortos mostrando su cuerpo joven y sexy. Rápidamente me arrodillé y puse mi cabeza entre sus piernas. Cuando bajé la cabeza, los labios de su coño dulce y hermoso, estaban cerrados con fuerza con jugo de coño brillando por fuera. El olor era increíble. Diría que me recordó a caminar por un jardín de rosas, tan fresco y dulce. Cuando la lamí, el sabor solo hizo que mi verga se pusiera aún más dura, si eso era posible. No puedes dejar de lamer. Era dulce y delicioso. Continué lamiendo el almíbar, sin permitir que nada goteara de su coño.
Sabía que estaba haciendo algo bien cuando ella se agachó y empujó mi cabeza con fuerza contra su coño, rogándome que no me detuviera. "¡Ay Dios mío! Eso se siente tan jodidamente bien, por favor no pares, Fer. Por favor, no dejes de comerle el coño a tu pequeña. ¡Dios mío, no te detengas, no te detengas! "
Seguí lamiendo y tratando de follarla tanto como mi lengua me lo permitía. Su coño sabía tan bien y sus labios se sentían tan bien. Todo su montículo era suave y se sentía como un coño nuevo y fresco que me hacía querer no parar nunca. Pronto comenzó a gemir en voz alta y comenzó a frotar contra mi boca que sabía que estaba cerca de correrse. Ella soltó un fuerte "¡AAAHHHH!", seguido de un “Te amo mi amor”, mientras su dulce jarabe brotaba directamente en mi boca. Definitivamente esperaba obtener más de sus jugos. No hay nada como comerse un suave y joven coño.
"Por favor" suplicó. Te necesito dentro de mi” Subí por su cuerpo y coloqué la cabeza de mi verga en la entrada de su coño. Besé sus labios. Deslicé mi verga dentro de ella, viendo su rostro contorsionarse mientras se acostumbraba a tenerme dentro de ella, Empujé dentro de ella, aplastando mis labios con los de ella para contener sus gemidos. Me quedé dentro de su coño y no me moví. Respiró hondo algunas veces. Lentamente comencé a entrar y salir de ella. Hizo una mueca por un momento, pero luego cerró los ojos. Envolvió sus manos en la parte de atrás de mi cuello y me atrajo hacia ella, besando mis labios. Nos besamos apasionadamente cuando comencé a acelerar mi embestida.
"Oh, Dios mío. ¡Te sientes tan bien! Se siente tan bien dentro de mí." Aceleré el ritmo. "Oh Dios ... Puedo sentir algo. ¡Oh Dios, oh Dios, oh Dios!" La besé de nuevo cuando su orgasmo la atravesó. Su coño se tensó tanto que casi me empuja. Su cuerpo se agitó cuando su orgasmo sacudió su sistema. Cuando bajó de lo alto, comencé a bombear más rápido. Me rodeó con las piernas y me pasó las uñas por la espalda. Estaba en el cielo. La bombeé más fuerte y más rápido hasta que finalmente no pude contenerme y llené su coño de esperma. Me besó cuando se corrió de nuevo, y nuestros jugos se mezclaron. Ella me dijo al oído: :”Te amo Fer, te amo, deseo que me preñes, quiero darte un hijo” Y con mi verga dentro de ella, todavía goteando semen dentro de su vagina, le dije bajito: “Yo también te amo Natal”.
Y esa frase complicaría mi relación con Andrea y Natalia..
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Acorde con Andrea, para que se dedicara complemente al doctorado que yo la ayudaría económicamente (además de no pagar un alquiler). Todo esto para que pudiera terminar su doctorado de menos de tres años. Acordamos que yo la estaría visitando en la capital o que ella vendría hasta nuestra ciudad, para así poder mantener nuestra relación. Pero fueron más las veces que yo viaje a la capital, porque allí teníamos más libertad para estar juntos.
En vista de la ausencia de Andrea, , comencé a pasar más tiempo con Natalia y a medida que pasaban los días, comenzamos a dedicar más tiempo a conocernos. Como “familia” íbamos al cine y luego a tomar un helado o cervezas. Salíamos a cenar o íbamos a una disco o un bar. Y ya no solo era sexo, comenzamos a compartir como si fuésemos novios. Empecé a darme cuenta de que era una chica bastante agradable. Se quedaba unas cuantas noches a la semana en mi casa, y mientras yo estaba trabajando en mi estudio, ella salía en pijama para darme un beso de buenas noches, o se sentaba en mi regazo y me besaba en la mejilla y luego se iba a acostar.
Natalia tenía un amigo gay que trabajaba en el hospital. Ella le conto nuestra situación y le pidió que fuese su “novio”. Ella necesitaba una tapadera para quedarse conmigo sin causar complicaciones y reclamos en su casa por parte de sus familiares. Su “novio” la apoyo, así que cada vez que quería quedarse, que eran varios días a la semana, le decía a su familia que estaba en casa de su “novio” a quien algún día les presentaría.
Y así, poco a poco se fue haciendo un ritual que Natalia vivía conmigo en casa a escondidas de sus padres. Cada fin de semana salíamos de marcha, o al teatro o al cine. La diferencia entre Natalia y Andrea con las películas que me gustan es total. Andrea es una mujer “Tierra Tierra”, a ella solo le gustan películas como por ejemplo: El Padrino, La Lista de Schindler, La Vida es Bella, El Silencio de los Inocentes, Rescatando al Soldado Ryan, Parásitos o Forrest Gump, por poner algunos ejemplos. No le gustan películas como: 2001 Una odisea espacial, Star Wars, Blade Runner, Alien, Avatar. Nada de Marvel o DC Comics. Yo le he rogado cientos de veces que vea conmigo Batman: El Caballero de La Noche. Ni loca jajajaja. Así que ese tipo de películas, que le gustan a mis hijos debo verlas con Natalia, a ella si le gustan. Les cuento esto para que vean una diferencia entre Andrea y Natalia.
Volviendo a la historia, era casi que muy normal que Natalia se paseara por la casa en sus braguitas con una camiseta como top. De hecho, compartir con ella hizo que comenzara a enamorarme un poco de ella. Ella tiene los senos más pequeños que Andrea, pero igual me excitaba verla en hilos dentales, con una camiseta y sus pezones sobresaliendo.
Ciertamente se estaba convirtiendo en una excelente compañía, que poco a poco fue sustituyendo a Andrea. Y la picara de Natalia me pedía siempre que le prometiera con el meñique que no se lo diría a Andrea que ella estaba pasando casi todo el tiempo conmigo. Esa era una promesa que ciertamente estaba dispuesto a cumplir. Una chica caminando por mi casa en hilos dentales. ¿Cómo decir que no?
Con el paso del tiempo, también comenzó a usar pantalones cortos de algodón ajustados que mostraban su bonito trasero y sus hermosas piernas. Ella sabe que las piernas de una mujer son mi debilidad y mi fetiche. Muchas veces, cuando salíamos y ella caminaba frente a mí, aprovechaba para mirar su trasero y sus piernas. Recuerdo que una mañana que Andrea estaba en la ciudad, fuimos a un restaurante a desayunar, cuando Natalia se excusó para ir al baño. Andrea me atrapó mirando mientras Natalia se alejaba y me preguntaba "¿Por qué miras a Natalia así?". Me pillaron con las manos en la masa y me estancaron, sin saber cómo responder. Me salvó la camarera que nos traía la comida. Natalia regresó pronto y se cambió de tema. En la casa, a menudo la veía acostada en el sofá, con sus ajustados pantalones cortos de algodón que mostraban la parte inferior de su trasero colgando. ¡Joder, eso me volvió loco!
La mayoría de las chicas guapas son populares y Natalia no es una excepción. Supongo que tener una casa con piscina también ayuda. A medida que se acercaba el verano, preguntó si podía invitar a sus amigas del hospital. Lo discutimos y decidimos que podrían venir, pero sin hacer una fiesta salvaje y que me limpiaran la casa. La mayoría de las veces solo sería ella con otras cuatro chicas. Se quedarían tumbados para broncearse y no se molestarían en saltar a la piscina. Un fin de semana que Andrea no estaba, me asomé por la ventana y me di cuenta de que una de sus amigas llevaba un bikini con un micro tanga y con un culo precioso y las cuerdas de su top desabrochadas para evitar las marcas de bronceado. Inconscientemente comencé a frotar mi verga, deseando poder ver más. Hacia tiempo que no veía a Andrea con sus micro bikinis, así que ver aquella chica me excito muchísimo. Después de unos minutos, se me ocurrió una excusa y decidí mirar más de cerca. Me sorprendió cuando salí por la puerta y me di cuenta de que era Natalia la que tenía el bonito culo en un micro bikini boca abajo con las cuerdas de la parte superior desabrochadas. Normalmente los bikinis de Natalia eran más conservadores, así que era la primera vez que la miraba en algo tan pequeño, y que era habitual en Andrea.
Esa noche cenamos con sus amigas con algo de vino de mesa, muy buen vino y estuvimos platicando de todo un poco. Termino la cena y fuimos a la sala nos sentamos con un poco mas de vino y empezamos a charlar nuevamente y vimos la película Casino Royale, que Andrea detesta pero que le gusta a Natalia. Terminamos la botella de vino y sus amigas decidieron marchase porque se sentían muy cansadas.
Después que sus amigas se fueron, Natalia y yo nos besamos con pasión. Desde la tarde tenía ganas de ella. Le dije que me había excitado verla con un microbikini. Ella se rio y me dijo que tenía una sorpresa y fue hasta la habitación a cambiarse. Cuando regreso venia vestida totalmente diferente sensual y muy cachonda. Tenía puesta una ropa interior de color negro con medias negras. Se me acerco y me dijo que esas medias las había comprado pensando en mi y que ahora se sentía muy bien de usarlas para mí, el cachondeo no se dejo esperar, mis manos la acariciaban desde sus tobillos hasta sus pechos, sentía sus pechos firmes y sus muslos calientes sobre mí. La desnude solo dejándola con ese hermoso par de medias y unos ligueros para estas alturas yo ya estaba también desnudo. El simple hecho de tocar sus piernas me provocaba unos espasmos en mi pene, la coloque en su cama y comencé a besar sus manos suaves y perfumadas proseguí con sus muñecas y sus hombros, su piel se ponía de gallina cada vez que soplaba su nuca por mi parte el rozar de sus muslos con esas medias me desquiciaba totalmente. Empecé a bajar hacia sus pechos y note que sus pezones ya estaban bastante erectos, los roce con mi lengua, fue entonces cuando logre arrancarle un quejido de placer. De ahí en adelante no paro de expresarse en ningún momento, seguí con su ombligo notando el olor característico del sexo de una mujer, para lograr un poco de mas excitación seguí con sus muslos brincando su sexo cuando empecé a besar sus piernas. Mi pene casi reventaba sus media y el olor tan especial aumentaban mi placer.
Tarde cerca de media hora besando sus pies, tobillos, piernas, y luego, cuando la mire a los ojos y supe que quería un poco de placer de mi parte, separe sus piernas y ahí estaba frente a mi esa joya ya con fluidos. No me negué y empecé a besar sus labios mayores, separe un poco y encontré su clítoris deseoso de ser mamado, lo lamí de arriba hacia abajo y de izquierda a derecha mientras ella no paraba de gemir para terminar con esta parte clave mi lengua en su vagina provocándole un verdadero orgasmo. De su vulva brotaba néctar que no dude en probar y degustar hasta el final de su clímax. Ahora mi turno. Ella se arrodillo frente a mí y me empezó a chupar el glande dando vueltas dentro de su boca y jugueteando con mis huevos. Pasado unos minutos de placer, la recosté y le comente que ahora si teníamos que terminar. Separe de nuevo sus piernas y coloque una almohada debajo de su espalda baja, tenía una gran vista. Y pase mi glande por todas partes y después la penetre lentamente sin ningún problema, ensayamos algunas posiciones como el perrito, el misionero y también la puse a cabalgar un rato. Ella tuvo otros dos orgasmos pero yo seguía sin llegar al clímax, fue entonces que la coloque boca arriba y la volví a penetrar. Y esta vez Natalia comprendió que debía darme placer. Yo comencé a meterlo y sacarlo lentamente, esa es la manera de coger a Natalia. Y dejar que la vagina de ella haga el resto. Y cuando Natalia ha tenido varios orgasmos, su cangrejera aumenta, y comienza a apretar mi verga. Aprieta y suelta. Es una vagina que muerde tu verga. Ese apretar suavecito, es lo más rico que podrás experimentar con una mujer. Recuerdo siempre a un amigo decir: "Mujer con cangrejera no se deja". Y es verdad. Estar dentro de Natalia es lo más rico que he sentido en mi vida. Duramos un buen rato antes de venirme, los chorros de leche llenaron una vez más su vagina y mis quejidos la habitación.
En otra ocasión, hacia el final del verano, entró en la casa y me pidió un favor con su dulce y sexy voz de niña, pidiéndome que no saliera al patio trasero. Pregunté qué estaba pasando. Explicó que el verano estaba llegando a su fin y que sus amigas querían broncearse sin sostenes. Le prometí no ir al patio trasero durante la próxima hora. Esa promesa también fue seguida por un largo beso que se estaba convirtiendo en la norma. La idea de saber que su pequeño pecho estaba a la vista me hizo querer mirar por la ventana. Una vez más me encontré corriéndome en mi mano mientras asomaba por la ventana. Cinco chicas en topless en la piscina de tu casa.
Durante esos meses llegue a pensar que mi vida era perfecta, con Natalia mostrándome su delicioso culo y yo follándome a Andrea, soñando que era Natalia la que estaba debajo de mí, encima de mí y frente a mí. Eran los labios de Natalia los que estaban chupando mi verga y el coño de Natalia con el que estaba haciendo el amor con mi boca. Andrea ciertamente no tenía quejas ni sospechaba lo que estaba pasando. A la postre, Natalia seria el costo a pagar por dejarme solo en una ciudad durante casi tres años, y en manos de una hermosa mujer, como era su hermana Natalia.
Un día, Andrea me llamo que no vendría en todo un mes. Estaba muy complicada con su doctorado. Preguntó si yo estaría bien. Le aseguré que la apoyaba y que no tenía por qué preocuparse. Sin embargo, lo único en lo que podía pensar era en Natalia caminando por la casa medio desnuda con sus nuevas y sexys bragas que gritaban: Ven a cogerme. Para entonces, había llevado a Natalia al Centro Comercial Maremagnum con el pretexto de comprar zapatos. Mientras estaba allí, me explicó que también necesitaba comprar ropa interior nueva. Cuando entramos a una tienda de Victoria's Secret, no estaba seguro de qué pensar. Ella me pidió que escogiera su ropa interior. Debo confesar que fui feliz escogiendo las prendas y entregárselos a Natalia para probárselos. Mientras la cajera nos llamaba, su comentario fue "Estoy seguro de que a tu novio le encantarán estos" mientras me miraba. Natalia le respondió con picardía: “No es mi novio, es mi esposo”
Cuando terminamos, nos detuvimos en el patio de comidas para comer algo. No pude evitarlo y le pregunté: "¿Crees que a tu novio le van a encantar?". Ella respondió con una sonrisa en su rostro “Ella pensó que eras mi novio. Viste la cara que puso cuando le dije que eras mi esposo jajaja. Tendrás que decirme si te gustan ". Estaba estupefacto y no estaba seguro de cómo responder. En los días siguientes descubrí que me gustaba su nueva ropa interior. Esta niña estaba jugando con fuego y me iba a quemar.
Para el sábado, le pregunté a Natalia si estaba dispuesta a salir a cenar esa noche. Anteriormente había mencionado haber hecho planes con sus amigos el sábado. Le recordé que para el sábado tendríamos un aniversario. Teníamos un año viviendo juntos. Me preguntó qué tenía en mente y le dije que estaría bien si nos vistiéramos y fuéramos a un buen restaurante. Hay un restaurante que tiene una disco justo al lado que tanto le gusta a ella. No podíamos dejar que nuestro primer “aniversario” pasase bajo de la mesa.
El sábado por la mañana, entré en la sala de estar con mi nueva teléfono móvil. Había llegado el viernes y estaba emocionado de jugar con él. Natalia ya estaba acostada, jugando con su tableta en camisola y un nuevo par de bragas que le compré en el centro comercial. Muy poco material ¡Joder!
Empecé a apuntar la cámara del teléfono por la casa, familiarizándome con el enfoque y las funciones de la cámara. En un momento, apunté a Natalia con la cámara y le pedí que sonriera, ella volvió la cabeza y le sacó la lengua. Ambos nos echamos a reír. Seguí tomando fotos en la sala de estar, pero no pude evitarlo. Pensé que estaba siendo astuto tomando fotos rápidas de su dulce trasero cuando estaba tan concentrada en su tableta. Comencé a notar que esta pequeña niña en el sofá estaba comenzando a abrir un poco las piernas, exponiendo cada vez más su dulce coño. En poco tiempo, descaradamente estaba tomando fotos con ella sin decir nada.
Los dos nos sorprendimos cuando sonó mi teléfono. Mi corazón comenzó a latir a un millón de latidos por minuto y rápidamente cerró las piernas de Natalia que solo se reía pícaramente.
Andrea estaba llamando para ver cómo estaba. Después de asegurarle que todo estaba bien por nuestra parte, hablamos un poco sobre sus estudios y luego colgamos.
Después de eso, fui a mi cuarto para observar las fotos de Natalia. Las fotos del joven culo y el coño de Natalia me excitaban enormemente. Al hacer zoom en la imagen, podría jurar que sus bragas estaban mojadas en la entrepierna. No obstante, evité estar en la misma habitación con ella el resto del día. Simplemente no podía confiar en mí mismo y quería dejar el plato fuerte para la noche. Hice algunos recados, arreglé el cabezal de la ducha que goteaba, hice otras pequeñas reparaciones en la casa. Antes de darme cuenta, eran las 6 de la tarde y nuestro plan era salir a las 8 de la noche con reserva para las 9. Natalia anunció que se iría a su habitación para prepararse.
Unos minutos después de las 8 pm, entró en la sala de estar donde había estado esperando al menos media hora. Si mi vida fuera una caricatura, sería el lobo al que se le cae la mandíbula al suelo, se le sale la lengua y se golpea la cabeza con un mazo. ¡Se veía tan sexy! ¡Y yo hervía de lo caliente! Era como si acabara de bajar del escenario en un concurso de belleza durante el evento del vestido de noche. Ella preguntó "¿Cómo me veo?" Mientras se giraba lentamente. Su cabello y maquillaje se veían hechos profesionalmente, con suculentos labios rojos llenos, hermosas tetas y el trasero de burbuja que me había estado volviendo loca desde hace algún tiempo, todo mientras usaba un vestido negro con unos tacones negros y medias negras.
Ella rompió mi mirada diciendo: "Asumiré que lo apruebas por la expresión de tu rostro". Estábamos listos para ir. Abrí la puerta principal y le permití ir primero, vislumbrando su dulce furgón de cola mientras salía. Caminamos hacia el auto y le abrí la puerta. Salimos del camino de entrada y pronto estábamos en la autopista. “¿Realmente me veo bien? Quería verme bien para ti en nuestra cita ”, dijo. ¡Le dije que se veía genial! Se volvió un poco hacia la izquierda y sonrió mientras me preguntaba "¿Realmente me veo bien?"
"Sí"
"¿Me veo sexy?"
"Uh ... sí"
"¿Me veo sexy?"
"Uh ... tal vez." ¿Estaba tratando de meterme en problemas?
"Si no estuvieras con Andrea, ¿me querrías como tu novia?"
"Uh ... tal vez" ¿Qué se suponía que tenía que decir?
"¡Bien!" ella se rió tontamente "Esta noche son solo Tú y Natalia, novio y novia ... Esta noche, soy tuya". Dijo las últimas tres palabras en un tono muy bajo y sexy. Se volvió para mirar hacia adelante mientras sostenía mi mano y entrelazaba nuestros dedos. Después de unos minutos la escuché decir "Mi amor".
Le di una mirada de "¿Me estás hablando a mí?". De nuevo, ella dice "Mi amor". Oh, supongo que vamos con el juego de fingir novio-novia. "¿Sí?" "¿Mi trasero se ve bien con este vestido?" "Uh, uh ... uh, uh ... se ve muy bien". Lo que realmente quería decir era 'joder, sí'. Definitivamente quiero tocar ese trasero.
Pronto llegamos al restaurante y aparcamos en el servicio de aparcacoches. Abrieron nuestras dos puertas y ella fue ayudada por uno de los asistentes. La expresión de su rostro no tenía precio. Mientras caminábamos hacia la puerta principal, agarró mi brazo y lo envolvió alrededor de ella, con mi mano aterrizando alrededor de su cintura. ¡Me estaba encantando! Nos registramos en la recepción y nos informaron que nuestra mesa estaría lista en 15 a 20 minutos. Nos sentamos en la barra a tomarnos un par de tragos. Después de aproximadamente media hora, nos acompañaron a nuestra mesa. El joven que nos sentó nos solicito nuestros pedidos de bebidas. Pregunté por mi favorito, un antiguo y Natalia pidió una copa de vino blanco. Cuando se fue, le pregunté cómo se estaba sintiendo. Dijo que era una cita, y que estaba feliz de estar a mi lado.
Estábamos hablando, riendo y pasándolo muy bien en la cena, cuando de repente sentí que ella jugaba con los pies conmigo. Le pregunté qué estaba haciendo y su respuesta fue "jugar a los pies con mi novio". Le recordé que realmente no era su novio y su respuesta fue "Esta noche lo eres". Continuamos nuestra cena y conversación, ella también continuó jugando con mi pie. Cuando el camarero nos trajo nuestro recibo de pago, preguntó si visitaríamos el club de al lado, y Natalia respondió rápidamente "Sí". Nos llevaron a una puerta especial que conectaba el restaurante con el club de al lado. Llegamos a descubrir que eran propiedad del mismo dueño. Sin un gorila en la puerta especial, entramos muy fácilmente. Fuimos a la barra y pedimos otra ronda y encontramos una mesa alta para sentarnos; de nuevo, ella agarró mi brazo y lo puso alrededor de su espalda con mi mano en su cintura. Pronto estuvimos en la pista de baile y tuve la mayor erección de mi vida con Natalia bailando y moliendo su trasero en mi entrepierna. Con su atuendo y sus movimientos de baile, estoy seguro de que no era el único que tenía problemas para caminar. Natalia era una de las mejores bailarinas de la familia. Pronto fue seguido por una canción lenta y sentí sus tetas presionando con fuerza contra mi pecho y su pelvis presionando contra la mía. ¿Cómo no podía sentir una verga dura como una roca en mis pantalones? Inclinó la cabeza y puso sus labios sobre los míos. Oh, mierda, sabía que estaba en problemas.
Seguimos bailando durante toda la noche y pasándola genial. Ella me besaba aquí y allá, pero nunca un beso completo. Me encantó y comencé a relajarme. Estaba disfrutando de nuestra cita fingida y comencé a sentir que ella realmente era mi novia. En un momento durante un baile lento, una vez más comenzó a besarme y pronto nos besamos como un par de adolescentes. Me estaba divirtiendo, ella realmente es una gran besadora. Cuando volví a la realidad, me aparté. Llevó su boca a mi oído y dijo: “Esta noche soy tuya. Bésame". Me entregué a su pedido y seguí besándola. Estoy seguro de que el alcohol contribuyó a que bajara la guardia. Con los besos sensuales, ¿cómo iba a terminar esta noche?
Se hizo tarde y sugerí que nos fuéramos a casa. Ella estuvo de acuerdo y pronto salimos por la puerta, una vez más con mi mano hacia abajo y alrededor de su cintura. ¡Joder, se sentía bien! Mientras esperábamos a que el asistente de aparcacoches trajera nuestro coche, los besos continuaron, y ella siempre iniciaba el beso. ¿Qué estaba pasando? ¿Cómo iba a detener esto? Con una jovencita caliente encima de ti, ¿querrías detenerlo? Decidí disfrutar de lo que estaba pasando y preocuparme por eso mañana por la mañana. En el auto, camino a casa, se calmó un poco y me dijo gracias por la cita, diciéndome que se lo estaba pasando genial. Al llegar a casa, entramos en el camino de entrada y ella no se bajó del auto hasta que yo di la vuelta y le abrí la puerta. Me recordó que la cita no había terminado.
Al entrar a la casa, me preguntó si podía agarrar mi teléfono ya que quería que le hiciera algunas fotos con el elegante vestido. Caminamos hasta mi habitación y, ella entró al baño para retocarse el maquillaje. ¡Dios mío, es jodidamente hermosa! Comenzó a posar en diferentes lugares de la habitación, y luego en sala de estar. Se veía sexy y mi verga palpitaba, suplicando ser libre. Ella se sentaba en el sofá con las piernas cruzadas, luciendo muy elegante. Poses bonitas e inocentes, al principio. Luego se paró junto a la puerta que conducía al pasillo y se quedó de lado, con la cara vuelta hacia mí, con su perfil lateral resaltando su suculento trasero. Estas poses se volvían más sexys a cada minuto, mostrando más de sus hermosas piernas. Por este punto, Había terminado y necesitaba un poco de consuelo. Me disculpé para ponerme una camiseta y unos pantalones cortos.
Cuando regresé, definitivamente no esperaba lo que vi en el sofá. Natalia estaba acostada boca abajo con su camisola de satén y bragas, idéntica a cómo estaba vestida esta mañana. Me preguntó si estaba lista para continuar y le dije que no creía que fuera una buena idea que le tomara fotos vestida de esa manera. Me quedé sin palabras cuando ella respondió: “¿No es esto lo que estaba usando cuando me tomaste fotos esta mañana? ¿No te gusta mi trasero en estos hilos, mi amor? Dudé durante dos segundos y luego apunté mi teléfono hacia ella y comencé a hacer clic. Una vez más, ella comenzó a abrir las piernas, ¡y yo sabía que esta vez lo estaba haciendo por mí! Ella siguió mirándome mientras su mano izquierda se estiraba hacia atrás y lentamente comenzaba a acariciar su trasero. mientras me miraba desde el dormitorio y se lamía los labios lentamente y preguntaba "¿Es esto lo que querías?" Luego se dejó caer al suelo, con el culo en el aire y la cabeza en el suelo girada hacia un lado. Lo mismo que haría cualquier chica mientras se prepara para ser follada por detrás. "Mi amor, ¿mi trasero se ve bien?" Ella era fascinante y le debía la verdad. "Oh, sí, tu hermoso trasero se ve muy bien". Luego preguntó: "¿No te gusta que tu novia se vistiera así para ti?" Solo pude responder un simple "Ajá". Su respuesta fue "Bueno, para eso me tienes, para usar estos hilos sexys para ti". A estas alturas ya se había dado la vuelta y lentamente se arrastraba a cuatro patas hacia mí con la parte superior colgando, mostrándome la mayor parte de sus tetas y parte de sus areolas. Me sentí como una especie de presa cuando se acercó a mí. Me quedé estupefacto sin nada que decir más que disfrutar de su belleza. Se acercó a mí y lentamente se subió al sofá y se sentó a horcajadas sobre mí.
Comenzamos a besarnos cuando ella comenzó a moler su dulce y pequeño coño en mi verga. Lo único que separaba nuestros genitales eran sus bragas y mis pantalones cortos. En nombre de la comodidad, no me había molestado en ponerme ropa interior cuando me cambié. Hay un beso para decir hola o adiós y luego hay un beso completo de "Quiero follarte". Eso es lo que estaba pasando entre nosotros. Ella estaba metiendo su lengua tan lejos como podía mientras apretaba su coño con fuerza en mi verga. Estaba más que feliz con eso. Su cuerpo joven, duro y suave se sentía increíble en mis brazos mientras seguía sintiéndola arriba y abajo desde sus caderas acampanadas hasta su cintura y hasta sus hombros.
Comenzó a decirme que estaba enamorada de mí cuando me conoció cuando era niña. “Cuando empecé a darte un beso de buenas noches, siempre deseé que algún día me devolvieras el beso. Pero nunca lo hiciste ... hasta esa noche ". Una vez más comenzamos a besarnos, con su lengua en mi garganta. Luego me preguntó si recordaba la primera vez que me pidió que no fuera al patio trasero porque estaría bronceándose en topless. Dije que sí. "Mientras me recostaba en el patio trasero, especialmente cuando estaba solo, fantaseaba con que saldrías y te meterías mis tetas en la boca". Mientras decía esto, agarró la parte de abajo de su camisola, se la pasó por la cabeza y se sentó en mi regazo con sus hermosos y jóvenes senos desnudos a escasos centímetros de mi cara. Ahuecó uno de sus pechos con la mano y me lo dio de comer. Chúpalo, bebé. Por favor chupe mi pecho. "¡¿Cómo diablos pude decir que no?!? Esta diosa está sentada a horcajadas sobre mí en topless, solo en bragas, pidiendo que le chupe los pechos. Sí, hice exactamente lo que haría cualquier hombre heterosexual.
Mientras disfrutaba de sus pechos, chupándolos con fuerza como si esperara que saliera leche, ella comenzó a gemir en voz alta, diciéndome cuánto tiempo había estado soñando con esto, diciéndome “Por favor no pares, por favor no pares, tu boca se siente tan bien. " Ella me permitió chuparlos por un tiempo antes de comenzar a deslizarse hacia abajo hasta que estuvo de rodillas mirándome con sus hermosos ojos. No hubo necesidad de palabras, simplemente agarró mis pantalones cortos por la cintura y comenzó a tirarlos hacia abajo. Inconscientemente, , levanté el trasero para que ella pudiera bajarlos fácilmente.
Ella tuvo un pequeño problema con mi verga rígida, lo que le causó un pequeño obstáculo. Por supuesto que no dejó que eso la detuviera. Metió la mano, empujó mi verga hacia abajo y continuó bajando mis pantalones cortos. No se detuvo hasta que estuvieron completamente fuera de mis piernas.
Ella agarró mi verga y comenzó a acariciarme lentamente mientras me decía algo que me sorprendió: "Sabes, cuando me quedo en tu casa y esta Andrea, a veces me coloco junto a tu puerta, y los escucho a ti y a Andrea cogiendo, sueño que me estés cogiendo a mí, no a ella, que te chupe la verga, diciéndome poner tu gran verga gorda en mi boca ..... ,, dilo, dilo! ¡Dime que te chupe la verga! " Ella siguió acariciándome, esperando que respondiera. No estaba seguro de qué decir. Luego se repitió: "¡Dilo, maldita sea, dime que ponga tu maldita verga en mi boca y la chupe!" En este punto, mi verga estaba controlando mi boca. “Natalia, chúpame la verga. Chúpame la verga, puta. Abre la boca y chupa la verga de tu macho ”. Inmediatamente bajó sus labios hacia mi verga y comenzó a lamer la cabeza, todo el tiempo mirándome a los ojos. Ella sostuvo mi verga mientras abría los labios y bajaba la cabeza. Dios mío, era mi sueño húmedo. Comparada con Andrea, ella no era tan hábil. Sin embargo, su entusiasmo ciertamente me tenía cerca de correrme. Ella debió haberlo sentido, porque sacó mi verga de su boca y me contó otro pequeño secreto sucio.
"Sabes, esta mañana cuando estabas tomando fotos de mi trasero, realmente quería que extendieras la mano y me bajaras las bragas para que pudieras meter tu verga en mí y cogerme". Mientras decía esto, se puso de pie frente a mí y me tomó las manos. Se los llevó a las caderas, metió mis pulgares en la cintura de su hilo dental y comenzó a empujar hacia abajo. Me di cuenta muy rápido y los bajé el resto del camino, ayudándola a salir de ellos. Cuando su hilo me revelaron su pequeña raja, su coño estaba perfectamente depilado como ella sabe que me gusta. Sus labios húmedos desprendían un dulce aroma a juventud. "Quería que vieras mi suave y pequeño coño", siguió hablando mientras una vez más se sentó a horcajadas sobre mí, agarró mi verga y comenzó a frotarla de un lado a otro a lo largo de su raja. “Me afeité el coño para que supieras exactamente a quién coges” En el momento en que dijo la palabra 'coger, empezó a bajar y mi verga se metió muy rápidamente a la mitad de su vagina. Dios mío, su coño le quedaba como un guante dos tallas más pequeño. Su dulce y joven coño estaba tan apretado. "Quiero que recuerdes que este no es el coño de Andrea, este es mi pequeño coño que te aprieta duro esa verga". Nos concentramos en coger, con ella encima teniendo todo el control. Me quité la camisa y puse mis manos en su dulce y apretado culo, ayudándola a levantarla cada vez que bajaba mientras seguía disfrutando de sus pechos en mi boca. Seguí alternando, tomando un bocado con cada uno en mi boca. “Tu verga grande y dura se siente tan bien. Dios mío, se siente tan jodidamente bien la forma en que tu verga me estira. Ahora que he tenido la verga de un verdadero hombre, tu verga , nunca he podido coger con otros chicos. Sé que contigo tengo un orgasmo garantizado”
Ella comenzó a gemir cada vez más fuerte y a rebotar cada vez más fuerte. Ella seguía diciéndome que la cogiera más y más fuerte y que la convirtiera en una mujer de verdad; diciéndome cuánto amaba mi verga. Antes de anunciar que se estaba corriendo. La sentí temblar. Empujé mi verga con más fuerza en su dulce coño. “Oh mierda, eso se siente tan bien, amor ... estoy acabando, oh Dios mío, ¡¡ estoy acabando !! Tembló un poco más antes de que llegara a un final lento. Y comenzó a gritar:”Te amo, te amo, te amo…”Varias veces y cuando dejó de temblar, puso su boca junto a mi oreja y me dijo "Mi coño es todo tuyo ahora ... ¡¡solo tú puedes follarte este coño !!"
Le dije que volviera al otro sofá con el culo en el aire. Ella hizo lo que le dije. Mientras me colocaba detrás de ella, no podía dejar de admirar su cuerpo apretado. Un hermoso cuerpo suave y fresco que solo una jovencita puede tener con sus pechos colgando, su estómago tenso y su hermoso culo y su coñito lindo y afeitado. Me volvía loco recordar que me había dicho que se había afeitado el coño para que yo supiera exactamente con quién me estaba follando. Ella quería que yo supiera que este no era el coño de una mujer, este era su coño de Mi Mujer. No había forma de que olvidara con quién estaba cogiendo.
Mientras estaba detrás de ella, agarré mi verga, me alineé con su coño y procedí a entrar lentamente en ella. Quería que disfrutara cada centímetro a medida que nos convertíamos en uno. A pesar de que acabábamos de follar, su coño se sentía tan apretado al volver a entrar. Miré hacia abajo y vi mi verga entrando y saliendo de su coño, la misma vista que había disfrutado muchas veces antes mientras me follaba a Andrea. Estaba fascinado al saber que esta hermosa mujer era mía, su coño ahora era mío, sus tetas y sus deliciosos labios rojos chupadores de vergas también eran míos. Había planeado toda esta noche para entregarse a mí. Entregar su cuerpo para mi placer.
Mientras seguía follándola por detrás, ella me preguntó “¿Te gusta follar con tu pequeña, sobrina? Eh, maldito pervertido, ¿verdad? ¿Mi coño se siente más apretado que el de Andrea? ¿Mi coño te hace querer correrte? Sus palabras y su rechazo me acercaban cada vez más y no podía contenerme más. Empujé hacia adelante y mantuve mi verga profundamente en su coño mientras me corría como nunca en mi vida, ni siquiera cuando tuve sexo por primera vez con Andrea. “¡Dios mío, tio Fer! Estoy acabando de nuevo, eso se siente tan bien, ¡de hecho puedo sentirte disparando tu semen en mi coño! " Rápidamente se dio la vuelta y tomó mi verga en su boca, tratando de succionar la mayor cantidad de semen posible. Pronto le pedí que se detuviera, diciéndole que mi verga se volviera demasiado sensible.
Estábamos dando cucharadas en el sofá, sin decir nada, solo abrazándonos. ¿¡Cómo diablos tuve tanta suerte !? Luego habló: “Gracias por la cita de esta noche. Fue mejor de lo que jamás podría imaginar. Te amo Fer ”. Ambos nos quedamos dormidos en silencio.
Después de despertarme a la mañana siguiente, pensé en lo que habíamos hecho la noche anterior. Pensé que podría alejarla y decirle que esto nunca volvería a suceder o disfrutar del momento y enfrentar las consecuencias en un momento posterior. Esa noche había sentido como Natalia se entregaba completamente a mí. Pero yo también me había entregado a Natalia, como la había hecho anteriormente con Andrea. Me estaba enamorando de Natalia? Dios que complicado. Pensaba que sí. Estar un año viviendo con Natalia y Andrea a lo lejos, había provocado que se crearan lazos entre los dos. Y escucharla decir que me amaba durante el orgasmo, derrumbo varias barreras dentro de mí. Yo era suyo y ella era mía.
Fue su idea seducirme, pero ahora que era mía, tenía la intención de disfrutarla tanto y tan a menudo como fuera posible. Me puse de pie, la agarré de la mano y la acompañé a la ducha en el dormitorio principal. La estaba llevando a mi habitación matrimonial, a la misma ducha con la que me había follado a su hermana muchas veces antes. Mientras abría el agua y ajustaba las perillas a la temperatura adecuada, Natalia se acercó por detrás y me abrazó, diciéndome que me amaba. Le respondí que yo también la amaba. Ella dijo que no. Realmente me quieres.
Las cosas estaban a punto de volverse locas. ¿Era posible estar enamorado de dos mujeres al mismo tiempo? ¿Incluso si fueran hermanas? No había vuelta atrás ahora. Tenía la intención de tener mi pedazo de torta y comérmelo también.
Terminamos follando en la ducha con ella inclinada y pidiendo que me la follara por detrás mientras le decía lo putilla que era por dejar que su tío la follara mientras Andrea no estaba, todo mientras clavaba mi verga dura hasta el fondo de su apretado coño. “Maldita puta. ¿Qué clase de perra estás dejando que tu tío meta su verga en tu pequeño y estrecho coño? ¿Qué clase de puta le abre las piernas a su tío, eh?
“Yo papi, yo. ¡Soy tu puta de mierda! ¡Dios mío, tu verga se siente tan bien mi coño! "
La follé duro y rápido antes de que ambos nos encontráramos juntos. Salimos de la ducha y nos secamos antes de pasar el resto del día desnudos. Desayunamos antes de acurrucarnos en el sofá para ver la televisión. Mi mente estaba más en lo que estaba en mis brazos que en lo que estaba en la televisión. Estábamos dando cucharadas en el sofá, con ella acostada frente a mí. Acaricié lentamente todo su cuerpo suave y apretado, comenzando por sus pechos y terminando con mi dedo profundamente en su suave coño. Primero jugué perezosamente con sus tetas, ahuecándolas antes de empezar a acariciar sus pezones, con sus gemidos suaves. Mis manos descendieron a su barriga antes de empezar a acariciar sus caderas. Joder, ¡su cuerpo joven y terso se sentía tan bien!
Después de disfrutar de su cuerpo, le pedí que se volviera y se tumbara de espaldas. Comencé a acariciar sus hermosas piernas antes de que mis manos estuvieran en la parte interna de sus muslos, tocando ligeramente su suave coño en el movimiento ascendente. Mis dedos comenzaron a acariciar de arriba a abajo su raja cuando comenzamos a besarnos. Quería que mi pequeña Natalia disfrutara de nuestro tiempo. En el momento en que mis dedos entraron en su pequeño agujero apretado, me di cuenta de que estaba extremadamente emocionada, con mi dedo deslizándose fácilmente en su coño mojado. Rápidamente agregué otro dedo mientras la follaba con los dedos, con mi boca chupando sus rígidos pezones. Ella gimió mientras deslizaba mis dedos suavemente hacia adentro y hacia afuera y chupaba con fuerza sus pezones.
Pronto ella estaba gimiendo fuerte, diciéndome que la follara más fuerte con mis dedos, diciéndome que estaba a punto de correrse. Decidí hacer lo que había querido hacer durante mucho tiempo cada vez que la veía acostada en el sofá con sus pantalones cortos mostrando su cuerpo joven y sexy. Rápidamente me arrodillé y puse mi cabeza entre sus piernas. Cuando bajé la cabeza, los labios de su coño dulce y hermoso, estaban cerrados con fuerza con jugo de coño brillando por fuera. El olor era increíble. Diría que me recordó a caminar por un jardín de rosas, tan fresco y dulce. Cuando la lamí, el sabor solo hizo que mi verga se pusiera aún más dura, si eso era posible. No puedes dejar de lamer. Era dulce y delicioso. Continué lamiendo el almíbar, sin permitir que nada goteara de su coño.
Sabía que estaba haciendo algo bien cuando ella se agachó y empujó mi cabeza con fuerza contra su coño, rogándome que no me detuviera. "¡Ay Dios mío! Eso se siente tan jodidamente bien, por favor no pares, Fer. Por favor, no dejes de comerle el coño a tu pequeña. ¡Dios mío, no te detengas, no te detengas! "
Seguí lamiendo y tratando de follarla tanto como mi lengua me lo permitía. Su coño sabía tan bien y sus labios se sentían tan bien. Todo su montículo era suave y se sentía como un coño nuevo y fresco que me hacía querer no parar nunca. Pronto comenzó a gemir en voz alta y comenzó a frotar contra mi boca que sabía que estaba cerca de correrse. Ella soltó un fuerte "¡AAAHHHH!", seguido de un “Te amo mi amor”, mientras su dulce jarabe brotaba directamente en mi boca. Definitivamente esperaba obtener más de sus jugos. No hay nada como comerse un suave y joven coño.
"Por favor" suplicó. Te necesito dentro de mi” Subí por su cuerpo y coloqué la cabeza de mi verga en la entrada de su coño. Besé sus labios. Deslicé mi verga dentro de ella, viendo su rostro contorsionarse mientras se acostumbraba a tenerme dentro de ella, Empujé dentro de ella, aplastando mis labios con los de ella para contener sus gemidos. Me quedé dentro de su coño y no me moví. Respiró hondo algunas veces. Lentamente comencé a entrar y salir de ella. Hizo una mueca por un momento, pero luego cerró los ojos. Envolvió sus manos en la parte de atrás de mi cuello y me atrajo hacia ella, besando mis labios. Nos besamos apasionadamente cuando comencé a acelerar mi embestida.
"Oh, Dios mío. ¡Te sientes tan bien! Se siente tan bien dentro de mí." Aceleré el ritmo. "Oh Dios ... Puedo sentir algo. ¡Oh Dios, oh Dios, oh Dios!" La besé de nuevo cuando su orgasmo la atravesó. Su coño se tensó tanto que casi me empuja. Su cuerpo se agitó cuando su orgasmo sacudió su sistema. Cuando bajó de lo alto, comencé a bombear más rápido. Me rodeó con las piernas y me pasó las uñas por la espalda. Estaba en el cielo. La bombeé más fuerte y más rápido hasta que finalmente no pude contenerme y llené su coño de esperma. Me besó cuando se corrió de nuevo, y nuestros jugos se mezclaron. Ella me dijo al oído: :”Te amo Fer, te amo, deseo que me preñes, quiero darte un hijo” Y con mi verga dentro de ella, todavía goteando semen dentro de su vagina, le dije bajito: “Yo también te amo Natal”.
Y esa frase complicaría mi relación con Andrea y Natalia..
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