Después de aquella noche en la que mi hijo recibió el mejor regalo que pude darle y estrenara mi culito, las cosas entre se tornaron habituales, seguíamos con los ardientes juegos de roll, los encuentros nocturnos y mucho más sexo anal. Por lo que mi culito se había adaptado a la perfección a su magnífico ejemplar.
Por su parte los chicos, Fabian y Alex, nos habían visitado poco, ya que era época de exámenes de fin de semestre y había que ocuparse del estudio. Pero una vez que los chicos estuvieron de vacaciones, las cosas se tornaron más intensas.
Adrián y los chicos gozaban de un mes y medio de vacaciones, por lo que, de no verlos en semanas, pase a verlos a diario. En uno de esos tantos días que los muchachos me acompañaban en la clínica, la fantasía de volver a estar con ellos al mismo tiempo llego a mi mente, el recuerdo de aquella noche en que perdí la voluntad y me entregué a mis deseos carnales lleno por completo mis recuerdos.
Deseaba ser poseída una vez y mil más por aquellos muchachos, quería experimentar más y más cosas, seguir con los juegos de roll, estaba dispuesta hacer lo que ellos me pidieran.
A esas alturas del juego, ya no me importaba casi nada, por lo que estaba decidida pedir que me hicieran suya de nuevo. Una tarde noche después de haber terminado con el día laboral, me reuní con los tres en la sala de estar de la casa, sin miramiento alguno exclame.
- Hasta cuando piensan cogerme de nuevo? Me tienen muy abandonada! – dije fuera de toda cordura –
Los tres muchachos se miraron un poco asombrados y bastante excitados, después de unos segundos de análisis personal por parte de todos respondieron.
- Pues a mí me parece que está lista para algo más que estar con los tres a la vez! No creen? – dijo Alex mirando a mi hijo y Fabian –
- Sí, creo que si! Ya va siendo hora de ir un poco más haya! – exclamo Fabian –
- Que proponen? Porque si mama quiere, hay que darle! – sentencio mi hijo –
Volvieron a tener un momento de pensamiento propio, el primero en proponer algo fue Fabian.
- Que les parece si este fin nos vamos a la cabaña, pero vemos la posibilidad de llevar a alguien más, digo alguna de nuestras mujeres podría ir, así la cosa se pondría mejor, no creen?
Tanto mi hijo, Alex y yo estuvimos de acuerdo, más la otra integrante de la cofradía que asistiría a la orgia del próximo fin de semana era aún una sorpresa, por lo que al menos a mí me parecía lago morboso y excitante.
El viernes por la noche, después de haber cenado con mi hijo este me adelanto que la integrante sorpresa podría ser Teresa la hermana de Fabian o Claudia madre de Alex. Al principio me sentí algo nerviosa al saber que otra de las madres estaría con nosotros, ya saben cosa de respeto y el que dirán, tan afamado en mi país. Mas luego, de analizar un poco las cosas, de cualquier forma ellas hacían las mismas cosas que yo hacía con sus hijos y el mío, así que eso quedo detrás.
Serían las 17:00 horas del sábado, cuando un mensaje de Fabian llego a mi celular, el cual decía.
- Doc, los esperamos en la cabaña, nos adelantamos para alistar algunas cosas, con cuidado, parece que va a caer un tormenta! Bye….
Le mostré el mensaje a mi hijo, quien sonrió y me miro con lujuria.
- Bien, pues hay que apurarnos, para llegar temprano y antes de que el camino se vuela una fosa de lodo! – dijo animado y excitado –
A las 17:45 salimos de la casa con destino a la cabaña, en el camino ninguno de los dos dijo nada, solo nos mirábamos con excitación y morbo, ya que ninguno de los dos sabíamos quién sería la invitada a la fiesta sexual. 18:15 marcaba el reloj cuando al fin llegamos hasta el aparcadero de la cabaña, en el cual se encontraba la mini van de Claudia la madre de Alex, por lo que supuse que sería ella quien complementaria la noche.
Mi sorpresa fue total cuando al entrar por la puerta vi que quien estaba sentada en la barra con los chicos era Teresa, la hermana de Fabian, una chica impresionante en todos los sentidos.
Teresa, tiene 18 años, estudia la preparatoria y es por lo que me había contado mi hijo de ella una pervertida en potencia, físicamente es muy atractiva, 1.78 de altura, piel morena clara, cabello largo lacio teñido de color rojo, ojos color café, nariz recta, cara larga, boca grande con labios repletos de carne, senos grandes, cintura pequeña, cadera ancha, pompas abultadas con forma de sandias partidas por la mitad y piernas estéticas y largas.
En cuanto entramos todos se levantaron de las sillas en donde se encontraban, caminando para saludarnos, Teresa, saludo a mi hijo con un gran beso en los labios, mientras que a mí me miro un segundo, se encogió de hombros con semblante tierno y dijo.
- Que gusto doctora! La estábamos esperando! – exclamo besándome suavemente los labios –
- Oh! Gracias! Pues ya estamos aquí! – respondí –
- Que loco! Bienvenidos! Quieren algo de beber? – exclamo Fabian mirando algunos vasos sobre la barra –
Todos nos dirigimos hacia la barra, para beber algunos tragos y charlar un poco. Fue entonces que mi percepción de Teresa se concretó.
- Y bien doc, como la lleva con estos pervertidos? La verdad es que estoy enterada de lo que vamos y hacemos con ellos! No se espante y siéntase libre de ser usted! – dijo Tere mientras bebía un sobro de su vaso –
- Uh! Pues creo que bien! Y gracias por la confianza, Tere! – respondí amena –
- No, al contrario! Gracias a usted, por no inhibirse con mi presencia, creí que pasaría lo mismo que cuando hicimos esto con Claus! – exclamo de nuevo la chica –
- Na, mi mama es buena onda! Además, en ese momento Claudia, estaba muy insegura de lo que hacía contigo wey! – dijo mi hijo refiriéndose a Alex –
- Si! Lo sé! Pero ahora, que tal? – exclamo riendo y haciendo reír a todos –
- Que paso? Se molestó, tu mama? – le pregunte a Alex –
- Más que molestarse se espantó y salió huyendo de aquí… pero después de una charla y algo de confianza logro superar su miedo y pasamos una noche de huevos! No? – repitió Alex volviendo a arrancar la sonrisa de los demás –
- Pues creo que hoy será igual o mejor! – exclamo Fabian mientras abrazaba a su hermana por la espalada dándole un buen arrimón y tocándole las tetas –
Creo que esa fue la voz de ataqué, para los chicos; ya que Alex se acercó a Tere besándola con fuerza en los labios, mientras que Adrián no perdió el tiempo acercándose a mi comenzando a manosearme con ganas. Mientras mi hijo me metía mano a placer, yo miraba a los chicos y a Tere hacer lo suyo, Fabian le sobaba las tetas gordas por encima de la ropa, besándole el cuello y la nuca, mientras que Alex se concentraba en sus labios gruesos y su vagina, metiendo la mano entre sus piernas. Las respiraciones de todos se agitaban con cada segundo que pasaba.
- Esperen! Tenemos que asearnos…. – susurro Tere como pudo –
Los chicos la dejaron con un poco de recelo y enfado. Adrián también me soltó de golpe, dejando que ambas fuéramos hasta la habitación principal, misma en la que hacía unos meses me habían dado hasta por las orejas. Estando allí dentro Tere dijo.
- Doc! Te han penetrado doble?... digo, porque es lo que va a pasar! Así que prepárate! – comento mientras abría una maleta sacando varios enemas y preservativos por montones –
- No! Aun… pero no me asusta, Tere! Y siendo honesta, me encanta el anal! – respondí un poco apenada –
- Uhhh! Picarona! Me caes bien doc! Vamos a bañarnos y a ponernos esto! – dijo agitando los enemas –
Entramos al cuarto de baño, Tere no perdió el tiempo, desnudándose al instante. Dejándome admirar su buen cuerpo. Siendo la primera en lavar bien su tracto anal. Yo sola la miraba con ojos de admiración y con cara de boba.
- Vamos doc! Qué esperas? Encuérate! – exclamo –
Muy despacio comencé a despojarme de mis prendas, ante la mirada de aquella joven, quien me miraba sin perder detalle. Al notar que me demoraba demasiado Tere decidió que era hora de pre calentar las cosas.
- Quieres que te ayude, doc? – pregunto –
Sentí como el calor provocado por su pregunta subía de mis pies hasta las mejillas, jamás había estado con otra chica, me refiero en connotación sexual, así que sería mi primera vez con una.
- Aja! – respondí agitada –
- Te calienta esto? Huh? Nunca habías estado con otra mujer, verdad? – dijo Tere mientras desabrochaba mi brasier –
- No! Nunca! – dije entre cerrando los ojos al sentir sus manos en mi cuerpo –
La sensación era placentera, sus manos eran muy suaves y sabían perfectamente lo que había que hacer, lentamente de quito el brasier palpando mis senos y pezones.
- Que lindos! Chiquitos pero duros! – exclamo en referencia a mis tetitas –
Sus manos pasaron por mi abdomen, llegando hasta el botón de mis jeans, el cual abrieron sin problema. Metiendo sus manos por los costados de mi pantalón hizo que este bajara hasta mis muslos, mirando mi ropa interior.
- Uh! Que sexy! Me gusta! – susurro al ver mi tanga negra de encaje –
Mi respiración ya era incontrolable, ligeros gemidos salían de mi garganta con cada toque de Tere. Poniéndose de rodillas me quito el pantalón, pasando sus manos por mis piernas y vientre. Despacio y suave tomo mi tanga bajándola hasta los tobillos, esta vez fui yo quien moviendo los pies me deshice del pequeño pedazo de encaje que cubría mi sexo, el cual estaba empapado para ese momento. Tere, se acercó a mi monte venus, olisqueando un poco mi sexo, mientras que sus manos tomaban mis nalgas apretándolas con fuerza.
- Como te gusta que te lo hagan doc? Suave como nena o rudo y fuerte como puta? – dijo mientras pasaba su lengua por el interior de mi muslo derecho –
- Uhh! Ambas! Ahhh! – respondí y gemí –
- A mí, igual! Al principio, que me traten como la niña buena! Y después que me hagan sentir una puta pervertida! – susurro lamiendo por primera vez mi vagina chorreante –
- Dios! Doc! Estas empapada! Date vuelta! – exclamo girándome de las nalgas –
Sus manos se encargaron de abrir mis nalgas, admirando por un segundo mis agujeros, Tere dejo varios besos en mi vagina y uno o dos en mi ano. Acto seguido dijo.
- Esto se va a sentir un poco frio doc!
Colocándome el enema en el culo. Haciendo que el líquido helado entrara por completo en mi tracto anal.
- Uh! Uh! – gemí al sentir el lavado de recto –
Tere se puso de nuevo en pie, dejando que aquel liquido frio hiciera su trabajo, en ella y en mí. Pocos minutos después ambas limpiamos nuestros rectos, quedando listas para el placer anal. Después de haber quedado limpias de nuestros agujeros anales, amabas tomamos una ducha, misma que sirvió para seguir explorando nuestros cuerpos. Mientras el agua tibia de la regadera empapaba nuestros cuerpos, no solo Tere tocaba mis tetitas, para ese momento me había olvidado de todos los complejos o reglas que había adquirido a lo largo de mi vida, solo quería tener y experimentar nuevas experiencias. Así que me deje llevar, comenzando a tocar los enormes senos de Tere.
- Chúpalos, doc! Anda! Hazlo! – susurro cerrando los ojos –
Mi boca se acercó a uno de sus pezones, chupándolo por completo, arrancándole un gemido grande a teresa. Mientras una de mis manos ayudaba a soportar el peso de aquel enorme seno, la otra bajaba para explorar un vientre totalmente depilado y suave, palpando de a poco los labios vaginales de Tere.
- Norma… uhh! Si! Así doc! Tócame rico! Uhh! – decía gimiendo Teresa –
Las manos de ella se apoderaron de mis pezones, apretándolos un poco cada que yo insertaba un dedo o dos dentro de su vagina. Dejando que de vez en cuando nuestras bocas se unieran en besos llenos de morbo y lujuria. Poco a poco nuestras manos dejaron que la exploración fuera hacia nuestros orificios anales, introduciendo nuestros dedos en ambos anos.
- Estas apretada Norma! Uh! Tú también nena! – dijimos ambas al tener nuestros rectos invadidos –
Sin darnos cuenta de que para ese momento los chicos habían entrado al cuarto de baño y se masturbaban con la escena lésbica que les dábamos en ese momento. Fue Tere, quien advirtió la presencia de los tres mosqueteros, susurrando en mi oído.
- Tenemos compañía! Démosles un buen espectáculo! – dijo al mismo tiempo en que comenzó a bajar por mi cuerpo, besando cada pedazo que sus labios tocaban –
Hasta que llego a mi sexo, con gran habilidad levante un poco la pierna para que ella lograra instruirse en medio de mis piernas, una vez que ella logro llegar a mi vagina, comenzó a lamerla de punta a punta, arrancándome gemidos grandes y sujetándola con fuerza de los cabellos empapados por el agua de la ducha.
- Dios! Dios, nena! Así! Uhhh! Que rico! Uhh! Mmmh! Así nena! Mas! – decía gimiendo y viendo de re ojo a los chicos acelerando los jalones en sus miembros –
Mientras la lengua de Tere, se ponía en contacto con mi sexo, su dedo medio llego hasta mi ano. Metiéndolo hasta el fondo, con lo que me hizo saltar un poco y soltar un grito de placer.
- Ahhhhhhhh! Nenaaaaa!! – grite –
Teresa, siguió penetrándome el culo y lamiendo mi pucha con habilidad descomunal hasta hacerme terminar en un gran orgasmo. Mismo que fue acompañado por el pene de Alex, el cual dejo salir un gran chorro de semen al suelo. Aun masturbándose los tres chicos hicieron el intento de entrar en la ducha cosa que resulto algo imposible, por lo que todos fuimos de nuevo hacia la tina, fue entonces que Tere coloco una toalla sobre el piso, recostándose de espaldas en ella, abrió muchísimo las piernas, me miro y dijo.
- Su turno doc! Venga, deme una buena mamada!
Ayudada de la mano de mi hijo me coloque frente a las piernas de Tere de rodillas, Alex me lanzo una toalla doblada para que no me lastimara las rodillas con el piso. Metí mi cara en medio de esas hermosas piernas y comencé a lamer el sexo de Teresa, quien se contoneaba con cada pasada de mi lengua por sus labios vaginales.
- Uhhh! Carajo, doc! Así! No se detenga! Ahhh! Uhmmm! Que ricura! Mmmhh! – decía vuelta loca de placer –
No paso mucho tiempo antes de que alguno de los muchachos se colocara entre mis nalgas y comenzara a darme un cunnilingus bastante bueno. Mientras que los gemidos de Tere eran ahogados por el pito de mi hijo. Mientras succionaba los labios vaginales de Tere, miraba como su boca se tragaba casi por completo el miembro de mi hijo, aquello era realmente excitante. Al mismo tiempo en que intente averiguar quién era el que estaba en medio de mis piernas, al mirar hacia ese lugar pude ver que se trataba de Fabian, haciendo gala de sus dotes orales. Alex por su parte seguía masturbándose poniendo ese buen miembro a punto y listo después de haberse venido unos minutos antes. Con una seña Tere le indico a Alex que se colocara a un lado de mi hijo, para turnarse y chuparles el pito a ambos.
- Puta madre! Que bien nos la vamos a pasar! Wey me vas a dejar ponérsela en el culito a tu mama? – exclamo Alex mirando a mi hijo –
- Si ella quiere, adelante! Por mi está bien! – respondió mi hijo –
Ambos me miraron mientras me comía la concha de Tere, no fueron necesarias las palabras solo con mirarlos ellos supieron la respuesta, la cual era concluyente y afirmativa, quería sentirme doblemente penetrada, anal y vaginalmente. Ya que la primera vez que tuve sexo con Alex y Fabian los tuve dentro de mí pero solo vaginalmente. Los gemidos de ambas eran ahogados por los miembros de Alex y Adrián y los míos por la vagina de Tere, después de un rato más de sexo oral y cuando el pene de Alex llego a su punto máximo, Fabian salió de entre mis piernas, beso mis nalgas y dijo.
- Te la voy a meter doc! Ya no puedo más, quiero volver a estar dentro de ti! – exclamo excitado y deseoso –
Me preparé para la embestida de Fabian, pensando que sería brutal y alocada, pero resulto que el chico hizo algo muy diferente, dejo que su buen pene disfrutara de cada centímetro de mi vagina, metiéndolo lento mientras sus manos me acariciaban las nalgas.
- Uhhh! Doc! Que caliente estas! Ahhh! Más tarde va por el culo! Ahh! – exclamo Fabian –
- Uuhmmmm! Hhhmmm! Así, papi! Cógeme rico! – dije sintiéndome penetrada –
Al escuchar aquello, Teresa levanto la cara teniendo entre los labios el pito de Alex, lo extrajo y exclamo.
- Quiero ver cómo te entra doc!
En verdad la chica era toda una pervertida, se levantó de golpe dejando a mi hijo y Alex agitando sus penes. Palmeando a su hermano en las nalgas, le pidió que se acomodara, por lo que Fabian saco su pene de mi vagina, para moverme un poco, dejándome de rodilla en posición de perrito sobre la toalla que hacía unos momentos ocupaba Tere, su hermana. Hizo un buen espacio entre el borde de la tina y nuestros cuerpos, separo bastante las piernas y dejo que su hermana se metiera debajo de nuestros sexos, quedando boca arriba con los huevos de su hermano y mi vagina sobre su cara.
- Métesela despacio! Dale! – exclamo dando la orden de avanzada –
Fabian apunto su miembro hacia mi orificio vaginal, poniéndome su glande dentro de un solo empujón, para después dejarme sentir lo grueso y largo de su pene de a poco.
- Dios mío! Que rico se ve! Te está entrando toda Norma! Uhh! Dios! Tu concha es linda! I pudieras ver como traga verga…! Dios! Quiero verga! Que esperan? – exclamo Teresa ardiendo en placer –
Pude escuchar el gemido de Adrián al penetrar a Tere, al igual que un grito de placer de la garganta de ella.
- Uhh! Cabrona como aprietas! – exclamo mi hijo –
- Ahhhhhh! Despacio papa! Esta grande! Uhhhy! – dijo Tere al sentir el monstruo de mi hijo invadiéndola –
Los movimientos de ambos eran suaves, haciendo que nuestras vaginas se abrieran con cada embestida que nos daban. Alex no tardó mucho en ponerse frente a mi boca agitando su pene, invitándome a chuparlo. Me traje su buen miembro de un solo bocado, sintiendo como su glande rozaba mi campanilla arrancándome una arcada de asfixia.
- Uuaawwwkkk! - se escuchó –
- Así Norma! Mama esa verga! Cómetela toda! – dijo Tere mientras gemia –
Con mucha suavidad y pericia Tere lamia mi vagina y los testículos de su hermano, mientras el me penetraba ya con más ritmo.
- Dios mío! Tere…. Uhh! Eres una perrita golosa! Uhh! Así nena! Dame papi! Dame verga! Ah! Ah! Aggg! Aggh! Uhhg! Uhgg! – decía mientras me sentía en el paraíso –
Alex me tomo de los cabellos, haciendo que su miembro se incrustara en mi garganta sacándome grandes arcadas del fondo de la misma.
- Uuaawwwkk! Uggh! Uhgg! Uaaaawwkk! – era lo que salía de mi boca, además de enormes cantidades de saliva –
- Cógeme amor! Cógeme! Ah! Ah! Ah! Ay! Uh! Mas! Así! Dame verga! Uh! – decía Tere al ser ya maltratada por el pito de Adrián –
El sonido de vientres masculinos chocando en contra de nalgas o pubis femeninos era evidente y acompañaba a los gritos arcadas y gemidos. Para ese momento Alex se encargaba de mi boca y mis tetas, apretándolas con fuerza para que mi dolor apretara más su pene entre mis labios. Incluso llegue a morderlo un poco. Aunque no dijo nada, al parecer le gustaba.
No se cuánto tiempo pasamos así, hasta que Fabian saco su pene, por lo que pensé que está a punto de venirse, pero solo lo saco para pedir que todos no moviéramos a la cama, en lo que cada uno de nosotros estuvo de acuerdo. Al llegar a la enorme cama de la habitación principal, el primer pensamiento que me invadió, fue el de aquella noche en que me entregue a mis deseos carnales siendo tomada por todos en esa misma cama. De inmediato nos colocaron a ambas de espaldas y boca arriba, una al lado de la otra. Fue entonces que mi hijo entro en mi vagina y Alex en la de Teresa.
- Uuuhhh! Papi…. Oohhh! Dios! Estas enrome! – exclame al sentir como mi vagina se abría aún más para contener el pene de mi hijo –
- Uh nene! Así! Dame fuerte! Ahh! – decía Teresa al ser penetrada por Alex –
Después de que mi sexo se amoldo al pene de mi hijo este comenzó a darme fuerte al igual que Alex lo hacía con Teresa, quien para ese momento tenía los ojos en blanco y gozaba de su primer orgasmo, Fabian solo contemplaba la escena como quien no decide con cual muñeca jugar. Mi segundo orgasmo llego minutos después que el de Tere, haciendo que mi hijo sacara su pene de mi pucha y un gran chorro de líquido saltara de mi interior.
- Uuuuuuuhhhhhh!!!! Diosssssss!!!! Aaahhhhhhh! Papi! Uhhh! – grite al tener mi squirt –
- Uh! Mama! Que increíble! Uhh! – dijo mi hijo metiendo su mano entera en mi vagina intentado que mi vagina siguiera explotando en chorros de líquido claro –
Y así fue, los movimientos de la mano de Adrián lograron extraer bastante líquido de mi ya empapada vagina. Mientras que Tere se palmeaba la concha intentando que esta explorara igual que la mía, en pocos segundos ella tuvo un squirt muy sonoro, hasta pareció que algo se había roto en su interior.
- Pop! Carajoooooo!!!! Uhhhhhh! Mierda!!!! Siiiiii! Aooohhhh!!! – grito Tere soltando y expulsando la verga de Alex con un gran chorro de líquido –
- Su puta madre! Que rico! Cosa! Que rico! Uhhhg! Qué demonios esta esta de huevos! – exclamo Alex restregando su glande en los labios empapados de la vagina de Tere –
Mientras admiraba aquello, pude sentir como los brazos de Adrián me tomaban y elevaban en el aire, una vez que me dejaron de pie sobre el colchón me pidió que me sentara encima de él, con las piernas abierta y viendo hacia donde Fabian se masturbaba. Sabía lo que venía, estaban buscando penetrarme doble, con suavidad me senté encima del pene de mi hijo, el mismo que usando como guía la mano de mi hijo acertó y se introdujo de a poco en mi ano.
- Uhhh! Papi! Uhhhhhhgg! Dios! Que rico! – gemia mientras mi esfínter se abría –
- Mama! Ahhh! Que apretada estas! Carajo! Mmmh! – exclamo Adrián al sentir como su pene se doblada al soportar mi peso entero –
- Dios! Dios! Que rico se ve, eso! Uuhhgg! Yo quiero! Ahh! Uhhh! Mira como se lo traga! Uh! Norma sí que tienes entrenado ese culo! – dijo Tere al ver como el pene de mi hijo se introducía en mi esfínter –
Una vez que el monstruo de mi hijo quedo incrustado en mi culo en su totalidad, se quedó allí hasta que mi ano se amoldara a el, momento que fue aprovechado por Fabian para colocarse frente a mi vagina y penetrarme suavemente.
- Uhhh! Así nene! Cógeme! Cógete esa pucha! Ah! Umju! Que rico! Dos pitos dentro! Ahhh! Adrián! Papi! Mueve un poco tus caderas! Déjame sentir más placer! – dije llena por completo de ambos agujeros –
Ambos chicos se movían despacio, para poco a poco aumentar el ritmo, aunque debido a la posición quien disfrutaba mas era mi hijo ya que mi ano apretaba su pene con cada embestida de Fabian.
- Ma! Ma! Uh! Uh! Uh! No mames! Me estas ahorcando la verga! Uh! Uh! Síguele! Ah! Ah! – decía mientras Fabian hacia que mi culo se contrajera sobre el pene de mi hijo –
- No mames! Wey! Uh! Esto esta genial! Le gusta doc? Le gusta así? – preguntaba Fabian –
- Aja! Aja! Síguele! Ah! Ah! Ah! Oh! – respondí como pude –
Por su parte Tere, seguía siendo masacrada por Alex, quien de golpe y porrazo saco su pene de su vagina clavándoselo en el ano.
- Ahhhhhh! Puto! Ahhhhh! Uhhhhh! Cabron! Aaahhh! – grito al sentir su ano abrirse de golpe –
- Madre mía! Estas ardiendo puta! – dijo Alex al sentir el calor del esfínter de Tere –
- Sácalo! Y ponte ya el condón! Siento que estas a punto de explotar! – dijo Tere ordenándole a Alex que hiciera lo que ella requería en ese momento –
Alex se contuvo y sacando su pene del ano de Tere se colocó un preservativo, lubricándolo aún más, momentos que Tere aprovecho para colocarse de perrito y levantar bien las nalgas, otorgándole una posición inmejorable a Alex para darle analmente. Las tetas de Tere se embarraron contra el edredón, dándome una panorámica espectacular de lo que vendría. Alex, apunto su miembro a su objetivo, hundiéndolo de forma considerable con la primer embestida.
- Uhhhhh! Cabron!!! Ahhhh! Así!!!! Dame verga puto! Dame! – exclamo echa una bestia Teresa –
- Así putita! Así? Ahh! – gemia Alex al empujar de nuevo para clavarle su miembro por completo a Tere –
Para ese momento ya todos éramos una mezcla de lujuria y desenfreno. Fabian me daba fuerte en la concha mientras que Adrián se movía dentro de mi ano, Alex por su parte le daba tremendas embestidas al culo de Tere, haciéndola gritar y hasta por momentos perderse en el placer del sexo anal. Pocos minutos después mi hijo pidió cambiar, ya que estaba sintiendo que se podía venir en cualquier minuto, por lo que ahora el estaría en mi concha y Fabian en el ano. Adrián se colocó un preservativo por precaución no de terminar dentro de mí, más bien de alguna infección en mi vagina por los residuos de excremento que pudieran haber quedado en su pene después de estar dentro de mi tracto anal. Mientras que Fabian se mostraba ansioso por entrar en mi ano, después de que mi hijo estuvo listo, gire para quedar de frente a el, colocándome su pene en la concha, el me tomo entre sus brazos apretándome con fuerza contra su pecho, en segundos Fabian coloco su glande sobre mi ano hundiéndolo de a poco, para ese momento mi culito ya estaba abierto y dilatado por lo que el pene de Fabian quien también es bastante grande se clavó dentro de mí con facilidad.
- No mames! Que rico esta tu culo doc! – exclamo Fabian al penetrarme –
- Muévanse! Denme verga! Ah! Dios mío! Esto me gusta cada vez más! – dije haciéndoles saber lo que pensaba en ese momento –
No tardo nada, para que ambos me dieran lo que pedía, mientras teresa se incorporaba un poco, para pegar su cara a la de mi hijo y la mía. Dándonos algunos besos franceses, es decir jugar con nuestras lenguas. Alex por su parte seguía cogiéndole el ano con ganas, la cara de todos estaba cubierta de sudor, los ojos de ambas, parecían los de un mapache, por la máscara de pestañas que se había corrido por el sudor y algunas lágrimas de dolor y placer.
- Plap! Plap! Plap! Uh! Uh! Uh! Si! Así! Mas! Mas! Denme leche! Ah! Ah! Plap! Plap! Plap! Cógeme nene! Uh! Si que rico me das! Ah! Ah! Uh! Mhh! – gemíamos las dos mientras éramos brutalmente embestidas por os chicos –
- Quiero darle por el culo, doc! Ahh! – exclamo Alex suplicando –
- Aja! Dame papi! Denme todos! Ah! Deja que Fabian termine! Ah! Y me das tú! – exclame entre jadeos y gemidos –
No pasaron muchos minutos antes de que mi hijo comenzara a apretar la quijada y cerrar lo ojos con fuerza, sabía lo que eso significaba, estaba a punto de venirse.
- Ya, papa? Quieres terminar, dentro de mama? Uhh! Uh! Uh! – pregunte –
- Uummm! Creo que si! Aaahhh! – dijo mientras su pene palpitaba y soltaba su carga dentro del preservativo –
Espere hasta que mi hijo dejara de eyacular, para pedirle a Fabian que le diera su turno a Alex, quien ya se había salido del esfínter de Tere, se quitó el preservativo y tenía a la chica ocupada de forma oral de nuevo, no, sin tener dos dedos clavados en el culo de la misma. Fabian salió de mi ano con suavidad. Deteniéndose un poco y tomando una gran bocanada de aire; momento que aproveche para dejar salir el pene de Adrián de mi vagina, mismo que se veía aletargado y algo flácido. Tomándolo con la mano derecha comencé a masturbarlo intentando que recobrara dureza, fue entonces que las manos de Alex me movieron un poco hacia la izquierda, colocándome de perrito; con algo de rudeza el chico abrió mis nalgas escupiendo sobre mi ano, saliva que espacio con su glande por todo mi culo, para después insertar su miembro sin la menor resistencia en mi ano. Tere, se quedó en la misma posición en que Alex la había dejado, para dar paso a su hermano, quien la penetro por la vagina y después de dos o tres bombeos, decidió hacérselo analmente.
- Uuhhh! Así nene! Así! Uhhh! Ahhh! Corazón! Que rico pito! Uhhh! Eso es! Cógeme bien! Lléname el ano de leche! – decíamos ambas al estar siendo penetradas analmente por los chicos –
- Doc! Que sabroso! Culito! Uh! Umh! Me encanta! Ah! – decía Alex al sentir mi calor –
En cuanto ambas estuvimos estacadas por nuestros anos, los chicos comenzaron a darnos con fuerza, mientras nosotras compartíamos el pene de Adrián, dándole una buena sesión de sexo oral, al parecer aquello se convirtió en una competencia por ver quien tragaba más miembro de mi hijo, logrando experimentar placer anal y placer por asfixia. Adrián por su parte se mostraba relajado y disfrutaba de lo que nuestras bocas le hacían en ese momento. El sexo en ese momento era sucio y duro.
- Grita puta! Grita! Plap! Plap! Plap! Plap! Plap! Ahhhh! Ahhhh! Eso cabrona! Plap! Plap! Plap! Plap! Te gusta la verga de tu hermano, no es así? Huh? Plap! Plap! Plap! Plap! Aja! Aja! Ay! Si! Me encanta tu verga amor! Plap! Plap! Plap! Plap! Y a ti, puta mayor? Te gusta que te den por el culo? He? si! Si! Me encanta por el ano! Nene! Ah! Ah! Ah! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uuuaaawkkk! Métemela más! Uhh! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uuuaaawkkk! Plap! Plap! Plap! Plap! Plap! Plap! Plap! Huh! Huh! Huh! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uuuaaawkkk! – se escuchaba en ese momento –
Adrián nos tenía sujetas por los cabellos, mientras nos hacía comerle el pene y lamerlo hasta los huevos, mientras que Fabian y Alex nos daban profundo y duro en nuestros culos. En aquella posición los chicos fueron pasando de una a otra dándonos sus penes en la boca y dos vergas en el ano. Adrián pasó al ano de Tere y Alex a nuestras bocas, para después, volver a tener a mi hijo en mi ano y Alex dentro de Tere, mientras que el miembro de Fabian era succionado por ambas. Palabras soeces que en mi vida espere expresar, salían de mi boca son control, pidiendo cada vez más y más pene en todos mis agujeros, así mismo Tere expresaba sus deseos por mas miembro.
- Dame, dame! Uhh! Si! Cógeme duro cabron! Cógeme! Reviéntame el culo! Ah! Ah! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uuuaaawkkk! Cómeme! Cómeme! Papi! Uh! Uh! Métemela toda! Quiero sentir esas vergas dentro! Ah! Uhh! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uuuaaawkkk! Plap! Plap! Plap! Plap! Plap! Plap! Plap! Huh! Huh! Huh! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uhhg! Uuuaaawkkk! – decíamos ambas fuera de toda cordura y control –
Para esos momentos ambas ya habíamos experimentado varios orgasmos anales, no tan notorios como los vaginales pero sí bastante placenteros, por su parte los chicos parecían más vivos que nunca y no mostraban señales de eyacular muy pronto. Fue cuando Adrián tomo posición boca arriba sobre la cama, pidiéndole a Tere que se montara en él, ahora sería su turno de experimentar una doble penetración por parte de los chicos, quien entro en su ano fue mi hijo, mientras que en su vagina entro Alex, pensé que Fabian me daría a mí, pero mi sorpresa fue ver como él le daba a su hermana por la boca, mientras le palmeaba con fuerza las tetas, haciéndola gritar de placer y dolor. Ese momento lo aproveche para tomar un respiro y masturbarme mirando lo que hacían con Teresa. Fueron unos 10 o más minutos los que los chicos hicieron de Tere su puta, para después voltear los ojos a la otra puta… la más grande. Así que me prepare para hacer lo mismo que Tere, pero ellos tenían planeado algo mejor, Fabian se tendió en la cama, pidiéndome que me montara en su pene, el cual entro en mi vagina, después mi hijo se colocó detrás de mi metiéndomela por la vagina, abriéndome aún más mi maltrecha concha, y eso no fue todo, ya que Alex se montó sobre mi trasero, apuntando a mi ano, acertando en la primera embestida. No podía creer que estuviera siendo triplemente penetrada, el placer de tener tres penes dentro de mí era y es indescriptible, por lo que solo me dedique a gozar del acto en sí.
- Uh! Que rico! Uh! Así, cójansela! Ah! Dios mío! Que sientes Norma? Que sientes? Dime? Dios? Ah! Uhh! Quiero una así! Uh! Hum! – decía Tere embriagada de deseo –
Yo no podía decir palabra alguna, solo pujidos leves salían de mi garganta, no aguante más que unos segundos para estallas en un gran orgasmo, mientras lo penes de los chicos no se detenían, como un gusano en comal caliente; solo podía retorcerme entre los cuerpos que en ese momento me aprisionaban. Para mi asombro al lograr levantar un poco la cara, pude ver que Tere estaba sentada sobre la cara de su hermano, mismos que lamia su chocho y por momentos su ano. No pudiendo más me quede inmóvil, por lo que los chicos salieron de inmediato de mí, me perdí por un momento en los remanentes de mi orgasmo, para cuando pude volver a la realidad escuche un grito que me hizo abrir los ojos.
Solo para ver como Teresa era puesta en la misma situación que yo, pero con la diferencia que a ella la tenían con dos penes en el ano, el de Fabian y Alex y mi hijo por la vagina. Después de unos minutos más, comenzaron a exclamar casi al unísono.
- Carajo me vengo! Me vengo! Uhh, ya quiero explotar! – decían todos –
Y para el acto final, nos acomodaron juntas boca arriba, mientras ellos se masturbaban con fuerza, encima de nuestras caras, alguna mano golpeaba las tetas de Tere mientras que alguna otra pellizcaba mis pezones. De pronto, la tibieza de el semen se alguno se hizo sentir en mi cara.
- Uuuhhhgggg!!! – se escuchó –
Después otro y otro más. Pese a que mi hijo y Alex habían descargado previamente, parecía que no tenían fin en cuanto a su producción de esperma, ya que nos dejaron cubiertas de semen a ambas, incluso algo del mismo llego hasta los senos de Tere y los míos. Segundos después comencé a sentir como la lengua de Tere lamia el semen de mi cara y senos, para después hacer lo mismo con el que ella tenía en su rostro y tetas.
Todos caímos exhaustos sobre la cama. Desnudos, empapados en sudor y agotados, dormimos un poco, hasta que el frio de la noche logro despertarme, para ese momento el reloj marcaba las 00:00 horas. La sensación de haber hecho algo increíble seguía en mi mente y cuerpo, aunque también me sentía pegajosa por el sudor y fluidos corporales, por lo que decidí tomar una ducha, mientras llenaba el jacuzzi, la voz de mi hijo se escuchó en mi espalda.
- Ma! Gracias! – dijo tiernamente –
- Gracias a ti! A ustedes más bien! – exclame –
Me abrazo por la cintura pegando su miembro flácido a mi cuerpo, ambos entramos al jacuzzi bañando nuestros cuerpos, para cuando nos dimos cuenta todos habían despertado y querían meterse al agua tibia de la tina. Esa noche la pasamos de maravilla, en la tibieza de el jacuzzi, volvimos a darnos placer oral, incluso Tere les hizo una rusa a cada uno de los chicos. No tuvimos más ganas de penetraciones todos estábamos bastante adoloridos y rosados para intentar algo así…
Al final dormimos de nuevo a eso de las 4:30 a.m., al día siguiente desayunamos completamente desnudos, ya era habitual vernos de esa forma. Después del medio día emprendimos el regreso a nuestros hogares… pero las cosas que estarían por venir serian aún más subidas de tono y nivel….
Continuara….
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