Mi prima, el taxista y yo

Hace como unos tres años comencé a enamorar a una de mis primas de 20 años llamada Lupe, ella es muy hermosa, delgada con unas piernas gruesas, un trasero paradito y unos senos preciosos, aunque pequeños, su cabello es muy largo y de color miel.


Con ella salía bastante ya que mi tío confiaba en que la cuidaría, yo la llevaba a bares y tabernas, ella se desataba ahí me di cuenta que era muy fácil, por eso decidí enamorarla y seducirla.


Una noche salimos a un local denominado la "Puerta del sol", allí nos encontramos con unos amigos a los cuales no veía desde hace bastante tiempo, así que comenzamos a festejar en grande, bebimos bastante.


En un determinado momento que vi a mi prima bailar con mi amigo, me asalto la idea y el deseo incontenible de hacer un trío, pero no quería que la tercera persona, un hombre fuera mi amigo, no quería que fuese alguien conocido, quería algo más discreto.


Nunca antes me la había cogido, solo manoseado y fajado, pero de ahí no pasaba, pero la idea de empezar en un trio me inundaba la cabeza.


La noche fue transcurriendo de una manera vertiginosa, la bebida iba en aumento y mi deseo también, llegó un momento en el cual mi prima estaba en muy embriagada, diría demasiado, los amigos que estaban con nosotros me indicaron que mejor la llevara a casa porque Lupe mi prima estaba muy mal, así que pague la cuenta, me despedí de mis amigos y nos fuimos del local.


Ya afuera del local tomamos un taxi, subimos al asiento de atrás y di la dirección al chofer de mi casa para que nos llevara.


A medio camino comencé a besar a mi prima y a acariciarla, ella se comenzó a excitar y comenzó a masajearme por encima del pantalón mi pene, que estaba totalmente erecto.


Ella estaba vestida con una calza bastante transparente, pero se lo comencé a quitar, ella dejo que lo hiciera, luego le quité el top y el sostén y finalmente su tanguita y sus zapatos, dejándola totalmente desnuda, cuando me di cuenta el chofer miraba a través de retrovisor, eso me excito bastante, así que comencé a introducirle mis dedos a su vagina, ella estaba totalmente mojadita, cuando se dio cuenta que estaba desnuda, pensé que se molestaría y que se vestiría, pero mi sorpresa fue grande cuando comenzó a revolcarse en el asiento y abrió las piernas, luego comenzó a acariciarse todo su cuerpo, para finalmente mostrarle su hermoso trasero al chofer.


T: ¡Te gusta?


CH: ¿Es a mí?


T: ¡Si, no te molesta esto!


CH: ¡Para nada!


Se quedó en esa posición por bastante rato, apuntando su culo hacia el chofer que venía manejando, ¡en ese momento me di cuenta que ella quería y deseaba tanto como yo un trio!!!!, así que en esa posición me acerqué a su culo y comencé a acariciárselo y a abrirle sus labios vaginales, al mismo tiempo que le preguntaba al chofer...


T: ¿Verdad que mi prima tiene un culo hermoso?


CH: ¡Si!! ¡Muy rico!


T: ¿Y que tal su concha?


CH: Esta divina, ¡muy sabrosa!


Casi en ese momento llegamos a mi casa, eran ya las tres de la madrugada, y en ese momento mi prima estaba totalmente desnuda y absolutamente excitada, invité al chofer a mi departamento, el estacionó el taxi y salimos de él, mi sorpresa fue enorme cuando mi prima no quiso vestirse e indicó que quería estar desnuda, yo estaba muy excitado y no me importó, nos dirigimos los tres en dirección a la casa, como ustedes comprenderán esta casa de departamentos tienen un portero, él nos recibió en la puerta muy sorprendido, mi prima estaba súper excitada, luego subimos al ascensor.


Ya dentro del departamento, nos dirigimos al dormitorio allí ella se echó sobre la cama yo le indique al chofer que se desnudará al mismo tiempo que yo lo hacía, luego nos fuimos encima de ella la acariciamos por todo su cuerpo, ¡luego le ordene a mi prima que le mamará la verga al taxista lo cual ella lo hizo de una manera enloquecida!


L: ¡Uhm!! ¡Que rica verga!!


T: ¿Te gusta como la chupa mi prima?


CH: ¡Uf!! ¡Es muy buena, uhm!!


El taxista no era tan dotado, pero se defendía, me quedé como unos 5 minutos observando la escena mientras le acariciaba con ternura su cabeza a mi prima, luego comencé a penetrarle su vagina, cambiamos varias veces de pose, la pose preferida de mi prime resulto ser de cuatro, así que le pidió al chofer que le penetrará así, vi como la verga del chofer entraba en la conchita de mi prima, mientras tanto ella ¡me daba una mamada sublime!!


T: ¡Lupe!! ¡Chupas riquísimo!!


CH: ¡Oh!! Que concha más rica, ¡uhm!!


L: ¡Uhm!! ¡Que rico, uhm!!


Pero yo quería que la penetrasen por el ano, me recosté sobre la cama y le dije que se subiera encima ella así lo hizo, comenzó a cabalgarme mientras mamaba la verga del chofer.


T: ¡Amigo ponte detrás de ella!, ¡ven nena acércate!


L: ¿Que pasa?


T: ¡Te la van a meter en tu culito!!


CH: ¡si!! ¡Que rico!


Ella se asustó e hizo el intento de retirarse, pero yo la sujeté, ella me pidió que eso no por favor y comenzó a querer levantarse, nuevamente le sujete fuerte y le dije al oído mi amor quietita no te va a doler, luego le ordené al chofer métesela, pero despacio, así comenzó a hacerlo, pero ella por el dolor luchaba por zafarse y se movía mucho, así que le ordene a chofer que si mi prima se movía que la pegara en las nalgas, y el comenzó a hacerlo, le pegaba bastante fuerte.


CH: ¡Que rico culo, uhm!!


L: ¡No!! ¡Ah, me duele!!


T: Por dios como te mueves, me pones durísimo, ¡tranquila solo goza!!


CH: ¡Que perra más rica!! ¡Que putita!!


Ella comenzó a lloriquear, eso me causo pena y comencé a consolarla y besarla su rostro con suavidad, de todos siempre era yo quien al cuidaba y sabia tranquilizarla, aunque esta vez con dos vergas en su interior.


De pronto el chofer indicó ya la tenía toda su verga dentro y comenzamos a movernos, Lupe paso de llorar a gozar, cabalgaba como una loca, se movía rico, y tanto el chofer, como ella y yo gemíamos y gritábamos, que rico momento.


Yo ya no pude controlarme y deposité mi semen dentro su vagina, sin temor a preñarla, pero el chofer seguía moviéndose, yo me salí debajo de mi prima y me fui al baño, allí escuché a Lupe que me gritaba.


L: Primo dile que ya, ¡me duele!!


Cuando regrese después de unos 5 minutos, el chofer seguía montado sobre mi prima sujetándola con fuerza de uno de sus senos mientras que con la otra le golpeaba fuertemente sus nalgas, ella lloriqueaba y pedía al chofer que por favor se levantara.


CH: ¡Ah!! Que rico, uhm, que culo, ¡tómala toma!


L: ¡Ah!! Me duele, uhm, ya basta, ¡ah!!


CH: Que rica puta, sé que estas gozando toma, ¡uhm!


L: ¡Termina ya, uhm, mi culo!!


Luego él se separó de ella pensé que había terminado, pero la hizo arrodillarse.


CH: ¡Hazme acabar perra!


Ya muy adolorida, arrodillada me miro, esperando que yo negara la orden, pero mirándola le dije ¡quiero que bebas su semen mi amor!


Ella comenzó a mamarle su verga mientras él se retorcía de pie, luego de un momento el terminó en su boca llenándole de semen, yo le dije que se la tragará todita, ella así lo hizo, luego le ordené que le limpiará con su lengua la verga del chofer, ella se quedó por unos minutos más lamiéndosela.


Luego el chofer se vistió y se despidió, tenía la cara de culpable, yo le indique que no se preocupará que volviera el próximo viernes a las 10 de la noche que la pasaríamos otra vez bien y si quería que invitase a un amigo más. (la verdad nunca más volvió).


Esa noche mi prima y yo dormimos abrazados, al día siguiente se puso a llorar, reclamándome que como yo la había entregado a otro hombre, me hizo sentir muy mal, pero luego conversamos con más calma y llegamos al acuerdo que seguiríamos juntos porque nos amábamos, y que solo disfrutaríamos un trio de vez en cuando. (la verdad también no lo volvimos a hacer).