Mí encuentro con un poringuero (relato)

Es un relato real... Nos conocimos acá en poringa, todo comenzó con un comentario suyo en un tema que publique con una foto mía. Un comentario chanchito que generó buena química desde el primer momento. Pasamos a hablar por chat privado y luego al watsap. Ahí me comentó que era un hombre de 58 años, activo, y que era chófer de camiones de larga distancia que cada tanto venía a BS as. Todo perfecto hasta ahí, luego manteníamos charla tratando de coincidir en unos de sus viajes. Al principio nunca podíamos, dado que no coincidiamos los días o el horario, hasta que un bendito día me comenta que llegaría alrededor de las 20 horas al parque industrial de campana pero que no podría ingresar hasta el otro día dado que ahora el ingreso era hasta las 17 por la pandemia, y que Debía aguardar hasta el otro día en el camión. Yo ese día salía a las 5 del trabajo y al día siguiente tenía franco. Así que le confirmé que habría encuentro. Salí del trabajo pase por casa a bañarme y cambiarme. Prepare una mochila y guarde mí lencería para la ocasión. Espere su mensaje con la ubicación y a las 20 salí rumbo a campana, tarde 1 hora en llegar aprox. El lugar de encuentro era en una estación de servicio con parador para camiones. Al llegar primero me fui al baño me puse la tanga, un corpiño, debajo de mí ropa y un poquito de perfume, cuando estaba listo salgo, lo llamo y le indico cual era mí auto para que me haga seña. Se baja de un camión y acerca hasta el auto un hombre de contextura grande, maduro, masculino, 1,90 de altura, manos enormes, barba, (en ese momento pensé waaau que machazo, se me hizo agua la cola) salgo a su encuentro y me recibe con cálido abrazo, cómo si nos conociéramos de toda la vida, me preguntó si me costó llegar, hablamos unas palabras y me invita a subir al camión. Ya en el interior observo que se trataba de esos camiones que además de la cabina del conductor contaba con un habitáculo con cama (pensé... genial acá se puede garchar cómodos) la charla continuo, cosas de la vida, tomamos unos licores que el tenía, y la charla se fue calentando, me preguntó por relaciónes sexuales anteriores, mientras me acariciaba la pierna, seguíamos charlando mientras su mano trepaba por el jean buscando entrar, ya mí respiración se agitaba, estába muy caliente, y empiezo a buscar su entrepierna con mí mano. El que busca encuentra dicen por ahí.... Alcanzo a tocar un bulto hermoso grande como el, explotaba, y para sorpresa de el, su mano encontró mí tanga bajo el pantalón.... - Uuuf a ver bebé mostrarme esto me dijo. Haciendome levantar desabrochó el pantalón y quedó mí culo en tanga para frente a sus ojos. - mira que cola hermosa que tenes bebee.... Vamos para la cucheta. Salimos de la cabina, cerro unas cortinas que tenían las ventanas me acostó boca abajo y me empezó a chupar toda la cola su lengua recorría toda mí cola de arriba abajo y cuando estaba sobre el agujerito buscaba como penetrarme, GLORIOSO. Estaba casi por acabar cuando le pido cambiar de posición para hacerle un oral yo. Se tira en la cama desabrocho su pantalón y quedó con ese enorme bulto frente a mí, un slip que le quedaba hermoso a ese bulto, vieron que el slip no es para cualquiera, hay que tener con que llenarlo, sino queda ridículo, pero a Raúl le quedaba fabuloso el si tenía con que llenarlo, corro el slip y asoma su hermoso y gordo pene y dos grandes huevos y junto con el un hermoso aroma a macho que me cautivo los sentidos y tuve que metermelo en la boca urgente para degustarlo. Le estaba haciendo un pete de campeonato cuando me indica que pare, y que me de vuelta, que me quería hacer la cola, me incorporo y volteo sobre la cama dejando a su disposición mí culo entangado el cual el vuelve a lamer, me abre los cachetes con sus grandes manos y me escupe para que sea más fácil la penetración, se coloca el preservativo, me saca la tanga y me arrima la cabeza del pene y suavemente empieza a empujar, (vale aclarar que hasta ahora es la pija más grande que iba a entrar en mí culo) sigue haciendo empujando hasta que siento como me la entierra toda adentro y fuaaa.... Que sensación! Con razón los prefieren dotados!... Me sentía lleno mal, sentía una presión enorme dentro mío que me inundaba de placer, ya una vez en posición, me dice - ahora te voy a hacer sentir mujer, y comenzó con el bombeo feroz, que a los dos minutos me hizo acabar terriblemente acabe como nunca, mientras Raúl seguía abriéndome el culo como nunca nadie hasta ahora, yo que ya había eyaculado tenía mí pene flácido y el estiraba el brazo me lo agarraba y me decía - que pitito chiquito que tenés me encanta... Lo cual me hacía sentir más puta y sacar cola, sacar bien la cola para que está macho la goce, la destruya a puro placer, mientras me cojia en 4 agarró mí tanga y la olia, y me decía -que linda puta que sos que rico olor a putita tenés en la bombachita... Ya estaba a mil otra vez... al palo mal, me pone patitas al hombro y otra vez con los empujones a fondo... Brutal, destructor, hermoso. Sus palabras iban de la mano con sus acciones, todo un macho que sabía lo que hacia. Mientras tanto me enterraba a fondo y me hacía ver las estrellas... Y sabiendo lo que provocaba su gran pene en mí cuerpo, aflojaba las embestidas y lo hacía bien despacio, para que lo sienta resbalar dentro mio, no tarde en acabar nuevamente, con sus dedos junto mi semen y me lo puso en la boca, -que putita rica que sos, probate me dijo. Ya no daba más, en 20 minutos me había exprimido, el maduro de 58 me había exprimido, yo ya no tenía piernas, solo atine a volcarme boca abajo dejando la cola bien parada para que el se cobre todo el placer que me dió. Sentía el culo abierto, realmente lo sentía bien abierto, lo sentía caliente, no sentía dolor, pero si que estaba muy caliente, mientras Raúl habría una vaselina, ya planeaba el acto final, se posiciona sobre mí y me penetra nuevamente ya con facilidad, - ya es como una conchita, viste? Me dice al oído... me coje fuerte durante 15 minutos más, hasta que me dice no aguanto más, voy a acabar, con la poca pierna que me quedaba elevó la cola para que sea un polvazo, Raúl embiste hasta que estalla sobre mí en un orgasmo hermoso con todo su enorme pija dentro de mí culo. Un terrible polvo nos pegamos, esos polvos que no se olvidan. Sobre todo para mí que me acababan de dar la mejor cojida de mí vida. Nos quedamos tirados en la cucheta, un rato, estábamos agotados de terrible polvo, lo veníamos deseando hace rato, y veníamos reprimiendo las ganas con intercambio de fotos y charlas calientes, que valieron la pena porque en la cama dejamos fluir toda esa calentura. Me exploraba el ano con mis dedos para ver cómo estaba, y si, había una gran dilatación, por ahí había pasado un gran macho y dejo su huella, me hacía sentir tan su mujer que me pidió que me vuelva a poner la tanga, y nos quedamos abrazados un rato largo charlando relajados en la cucheta. Hubo otro polvo más esa noche, pero eso lo cuento en otro relato....