me siento muy bien cogida

Desayunamos muy cariñosos y nos despedimos besándonos tiernamente hasta la noche que regresa del trabajo. Me encontraba rendida por las emociones del día de ayer cuando suena el timbre, al salir a mirar eran los chicos que seguían con la pintura de la casa. Ingresaron a sus actividades. Me acosté a dormir totalmente desnuda como siempre lo realizo, no sé cuánto tiempo descanse y continúe a darme un duchazo completo. Estando bañándome ingresa Luis quitándose la ropa inmediatamente, toma mi rostro besando mis labios hasta la saciedad mientras estimula mis senos, mi cuerpo, mi clítoris y reacciono positivamente tomando su verga dura y firme con caricias y estímulos especiales de excitación mutua. Besa mis senos con locura diciéndome que tengo unos senos muy lindos y suavecitos. Toma mi mano llevándome hasta el lavabo para luego pedirme que me ponga de espaldas comenzando a besar mi cadera, mis nalgas que las abre poco a poco hasta sentir que su lengua ingresa a mi culito y luego a mi vagina encontrándose mojada y deseosa de tener tan hermosa verga dentro de mi concha  estimulando mi clítoris mientras besa mi cuello, mi espalda hasta que siento como su pene comienza su ingreso violento hasta tenerle totalmente adentro mio iniciando movimientos de un mete y saca rápido, hasta que siento que un dedo entra paulatinamente a mi culito hasta tenerle totalmente mientras empuja su verga y la retira comenzando a ingresar en mi cola  poco a poco con una satisfacción plena de excitación que enloquece mis sentidos dejando a mi cuerpo un violento orgasmo al sentir sus movimientos constantes hasta que me agarra de la cintura con un gemido agudo dejando salir su leche en mi cola   dejando estallar mis sentidos por un fuerte orgasmo de hembra. Nos quedamos unidos sintiendo como su verga flácida salía de mi abierto culito, mis labios estaban secos hasta que siento que Alfredo se acerca desnudo con su descomunal verga comenzando a besar mis labios y sus manos acarician mi cara y cabello, los recibo con pasión y gusto por el calor que tenían para mi cuerpo, Luis se retira vistiéndose apresuradamente para ir a trabajar mientras deja en mi cintura un beso que tiembla cuerpo, no puedo dejar de mirar la hermosa verga de Alfredo por su bonita forma gruesa, larga y su cabeza muy brillante me arrodillo poniendo en mi boca con movimientos suaves hasta chupar y chupar constantemente con mi lengua en toda su extensión, sintiendo como los músculos de mi vagina húmeda y de mi culito comienzan a actuar involuntariamente, algo especial para mí, hasta que siento que comienza a gemir eliminando todo su semen en mi boca y trago con gusto todo lo que puedo, retira su verga aun dura y húmeda, me acuesta sobre una toalla en el piso abriendo mis piernas mientras besa mi concha y mis muslos con toda la pasión de hombre, se arrodilla tomando mis piernas hacia sus hombros dejando nuestros sexos juntos hasta que lo ingresa con fuerza tomando mis caderas con un vaivén de un mete y saca formidable, mi cuerpo y mis sentidos vibran por los orgasmos que tengo hasta que siento como su cuerpo se estira violentamente dejando salir su leche dentro de mi vagina. Mis gemidos y alaridos de satisfacción eran continuos diciéndole que era un verdadero macho ante una hembra excitada. Nos levantamos besándonos y abrazándonos sintiendo el sudor de nuestros cuerpos. Entramos a la ducha retirándose a su trabajo y yo a mi dormitorio a dormir por el cansancio que tenía., al despertarme  fui 
 a la ducha a limpiarme todo mi cuerpo y esperar muy bien arreglada a mi esposo para cenar en casa. 

Sentados cenando en el comedor conversamos de todas nuestros pensamientos y de las cosas de casa. Mi esposo me indica que se siente muy caliente   Nos dimos besos y mas besos tomados de la mano fuimos al dormitorio donde nos fuimos desnudando hasta que nuestros labios recorrían todo nuestros cuerpos. Mi vagina me ardía por la presencia de mi excitación que me tenía tan caliente y húmeda totalmente, me acuesto separando mis piernas dejando ver mi vulva a mi maridito lindo quien con admiración que dice que mira como mis labios vaginales se encuentran hinchados, rojos y grandes indicándole que es por la excitación y por la emoción de tener su bella verga en mi concha  comienza a besar mi clítoris lentamente hasta que mis quejidos van en aumento sintiendo como su dedo comienza a ingresar poco a poco en mi culito para luego de un frasco colocar un gel directamente en mi ano que no resiste tan emocionantes momentos al sentir uno, dos y tres dedos adentro con movimientos circulares de mi cadera hasta que pone mis piernas en sus hombros introduciendo su pene poco a poco dentro de mi   tomo su verga despacio retirando y la dirijo al orificio de mi cola  para que siga con sus empujes, indicándome mi maridito que le gusto sentir como mis orgasmos excitaban sus sentidos al máximo, inicia su mete y saca continuo mientras mis sentidos estallan por la satisfacción que sentía a cada momento cuando me sale un grito orgásmico que no resisto mientras siento que ingresa a mi intestino leche caliente. No resisto el terrible orgasmo comenzando a gemir como loca mientras mi esposo sostenía mis piernas fuertemente impidiendo que su verga salga. Nos quedamos quietos un buen rato jadeante hasta que siento que sale su verga de mi culito. Me siento cansada nos besamos y abrazados hasta quedarnos profundamente dormidos.