Este es el relato de la putita hincha de boca de @http://www.poringa.net/Menamena19 me contó como fue su primera experiencia anal con su ex novio hincha de River luego de la semifinal de la copa sudamericana 2014.
"Hola soy Javiera y me encantan los relatos entre hinchas de fútbol que hacés, mi ex novio me pidió... nunca habÃa sentido tanto morbo que me hiciera la cola mientras me decÃa toda clase de cosas sobre mi equipo.
Con mi novio nos conocemos desde pequeños, nuestros padres son amigos. Mi familia es de boca y la de él de river. Muchas veces nos juntábamos a ver los partidos, siempre con cargadas y cosas asÃ. Ya en la adolescencia nos hicimos novios y empezamos a tener sexo.
La primera vez que me hizo la cola fue en la sudamericana 2014. habÃamos apostado que el que perdÃa harÃa todo lo que el otro le pidiera... bueno lo que él me pidió era romperme el culo y me dijo:
'Te quiero romper la cola dos veces en una noche, dentro y fuera de la cancha jaja'
A mi me daba vergüenza al principio pero me calentó un montón la idea
Fuimos a su cuarto, yo con mi remera de Román. Me pidió que me limpiara la cola en el baño... yo lo hice re nerviosa porque sabia que cuando acabara me iba a hacer el orto.
Cuando salà me hizo poner en 4 arriba de la cama, me decÃa que me iba a hacer la cola. En todo momento me recordaba que me la iba a romper como River a Boca
Me pidió que lo peteara un rato, el obviamente tenÃa su camiseta de River puesta.
Yo se la chupe mientras él decÃa que las bosteritas solamente existimos para petearlos a los gallinas Se la chupé un rato y el me daba chirlos en la cola mientras me estiraba la remera para abajo , luego me puso en 4 y me pegaba en el orto con su pija. Me decÃa que me preparara para entregarle la cola a River
Por mi parte, estaba re asustada... nunca lo habÃa hecho por el orto.
Me agarró firme, me separó las nalgas con ambas manos y metió la lengua por entremedio. Me lamió toda la zanja, yendo y viniendo varias veces, llenándomela de saliva.
SentÃa como me escupÃa varias veces hacia el final de la espalda, dejando que la baba se escurra hacia abajo. Cuando me llegó al agujero del culo, me la metió adentro con los dedos, lubricándome con entusiasmo y esmero.
Me metió los dedos casi hasta los nudillos, para dilatarme y abrirme el ojete hasta lo máximo posible.
Estaba tan excitada,que casi me olvido que era de Boca pero en realidad recuerdo que estaba en esa situación por mi equipo y que estaba ahà por como nos habÃan roto el culo esa noche.
Aún asà me abstraigo de todo eso y me concentro en disfrutar de la forma en que mi ex novio me prepara para romperme el culo. Porque para eso estábamos vestidos asà esa noche, yo con la camiseta de Boca, él con la de River para que me diera por atrás, para que me rompiera, me destrozara, me partiera al medio mientras recordaba las cargadas que alguna vez le habÃa hecho mi mamá o mi papá cuando River descendió o cuando perdió algún que otro clásico. Esa noche no le iba a romper el culito a su novia, no, esa noche le iba a romper el culo a la hija del bostero que por más amigo de su padre que fuera siempre lo hacÃa encabronarse cuando llegaba con sus gastadas...
Por mi parte estaba dispuesta, me daba miedo pero me gustaba la idea, me encantaba la curiosidad de sentir como me iba a reventar bien el orto. Si querÃa ternura, cariño, le hubiese pedido hacerlo de la forma tradicional, pero si dejás que te la metan por la cola, es para que te la demuelan a pijazos.
Más allá de que era algo que hacÃa porque perdà la apuesta, ansiaba que ese hincha de River sometiera a mi culito a una goleada monumental. Que por una vez se dedique a llenarme de goles por el arco de atrás.
Cuando me puso la punta en el centro del agujero, apoyándola y ejerciendo presión, temblé toda, más aún cuándo empezó a empujar con ese vigor que no admite ninguna resistencia.
SentÃa como se me abre el esfinter, a medida que la tuberÃa del hincha de River va ganando terreno dentro de mi ojete. Pero no me la metió toda. Se detuvo a mitad de camino, me agarró fuerte de la cintura y... ¡PAM!... no me embistió, sino que me atrajo mediante un tirón y ahà sÃ, me la calza toda.
Pegué un grito, tanto de dolor como de placer, emociones que se mezclaban y mimetizaban la una con la otra.
Me dolÃa, sÃ, pero como me gusta...
él por su parte me decÃa que era la vergüenza de mi familia al entregarle la cola tan rápido a un gallina.
Eso me daba más morbo todavÃa. Me excitaba que me tratara asÃ
Me la deja ahÃ, palpitando en mi interior, dejándome disfrutar esa sensación maravillosa que me producÃa tener el culo lleno de pija. Puedo sentir sus pelos rozándome las nalgas de tan adentro que me la puso.
No me soltaba, teniéndome bien sujeta, retrocedÃa, sin sacármela del todo, y arremetió de nuevo... ¡PAM!... y otra vez... ¡PAM!... y otra... ¡PAM! ¡PAM! ¡PAM!...
Me sacudió toda con cada embestida, haciéndome vibrar de puro placer.
Me echo en el suelo y apoyando la cabeza sobre mis brazos entrecruzados, levanto todavÃa más la cola, entregándome plenamente como una mujer de palabra, una buena perdedora, a tan agradable sacrificio...
Mi novio (que con ese ensañamiento que tenÃa con mi culo bostero podrÃa haber sido cualquier fanático de River), estaba de rodillas, pero en ese momento se alzó sobre sus pies, y manteniéndome bien sujeta, me descose a pijazos, olvidándose por completo de que yo era su novia, me veÃa como un culo del equipo rival al cual lo estaba desarmando.
Me decÃa: ¿ Que sos?
LA PUTA DE RIVER, gritaba yo. Mientras más caliente estaba más suelta de boca también...
DecÃa todo lo que el querÃa oÃr
Que me encantaba su pija, que river era lo más grande, Que yo y mi equipo somos las putitas de los machos millonarios, etc
Cuándo me la sacó, tras un buen rato de estar dándome sin parar, el culo me hace ese tÃpico ruido de vacÃo... PPPRRRRRR... PPPRRRRRR... varias veces pero no tuve mucho tiempo para reaccionar cuando sentà la leche caliente en mi espalda ensuciándome toda la camiseta y el número con leche.
No, jamás lo hice
Al tiempo de eso nos separamos meses después de eso porque me gorrió pero nunca más volvà a sentir ese morbo y placer de que a mi, hincha fanática de Boca, me rompiera bien el culo un hincha fanático de River".
Terrible relato me mandó Javiera Mena, espero que les haya gustado y cualquier sugerencia lo charlan con ella. Saludos. @http://www.poringa.net/Menamena19
"Hola soy Javiera y me encantan los relatos entre hinchas de fútbol que hacés, mi ex novio me pidió... nunca habÃa sentido tanto morbo que me hiciera la cola mientras me decÃa toda clase de cosas sobre mi equipo.
Con mi novio nos conocemos desde pequeños, nuestros padres son amigos. Mi familia es de boca y la de él de river. Muchas veces nos juntábamos a ver los partidos, siempre con cargadas y cosas asÃ. Ya en la adolescencia nos hicimos novios y empezamos a tener sexo.
La primera vez que me hizo la cola fue en la sudamericana 2014. habÃamos apostado que el que perdÃa harÃa todo lo que el otro le pidiera... bueno lo que él me pidió era romperme el culo y me dijo:
'Te quiero romper la cola dos veces en una noche, dentro y fuera de la cancha jaja'
A mi me daba vergüenza al principio pero me calentó un montón la idea
Fuimos a su cuarto, yo con mi remera de Román. Me pidió que me limpiara la cola en el baño... yo lo hice re nerviosa porque sabia que cuando acabara me iba a hacer el orto.
Cuando salà me hizo poner en 4 arriba de la cama, me decÃa que me iba a hacer la cola. En todo momento me recordaba que me la iba a romper como River a Boca
Me pidió que lo peteara un rato, el obviamente tenÃa su camiseta de River puesta.
Yo se la chupe mientras él decÃa que las bosteritas solamente existimos para petearlos a los gallinas Se la chupé un rato y el me daba chirlos en la cola mientras me estiraba la remera para abajo , luego me puso en 4 y me pegaba en el orto con su pija. Me decÃa que me preparara para entregarle la cola a River
Por mi parte, estaba re asustada... nunca lo habÃa hecho por el orto.
Me agarró firme, me separó las nalgas con ambas manos y metió la lengua por entremedio. Me lamió toda la zanja, yendo y viniendo varias veces, llenándomela de saliva.
SentÃa como me escupÃa varias veces hacia el final de la espalda, dejando que la baba se escurra hacia abajo. Cuando me llegó al agujero del culo, me la metió adentro con los dedos, lubricándome con entusiasmo y esmero.
Me metió los dedos casi hasta los nudillos, para dilatarme y abrirme el ojete hasta lo máximo posible.
Estaba tan excitada,que casi me olvido que era de Boca pero en realidad recuerdo que estaba en esa situación por mi equipo y que estaba ahà por como nos habÃan roto el culo esa noche.
Aún asà me abstraigo de todo eso y me concentro en disfrutar de la forma en que mi ex novio me prepara para romperme el culo. Porque para eso estábamos vestidos asà esa noche, yo con la camiseta de Boca, él con la de River para que me diera por atrás, para que me rompiera, me destrozara, me partiera al medio mientras recordaba las cargadas que alguna vez le habÃa hecho mi mamá o mi papá cuando River descendió o cuando perdió algún que otro clásico. Esa noche no le iba a romper el culito a su novia, no, esa noche le iba a romper el culo a la hija del bostero que por más amigo de su padre que fuera siempre lo hacÃa encabronarse cuando llegaba con sus gastadas...
Por mi parte estaba dispuesta, me daba miedo pero me gustaba la idea, me encantaba la curiosidad de sentir como me iba a reventar bien el orto. Si querÃa ternura, cariño, le hubiese pedido hacerlo de la forma tradicional, pero si dejás que te la metan por la cola, es para que te la demuelan a pijazos.
Más allá de que era algo que hacÃa porque perdà la apuesta, ansiaba que ese hincha de River sometiera a mi culito a una goleada monumental. Que por una vez se dedique a llenarme de goles por el arco de atrás.
Cuando me puso la punta en el centro del agujero, apoyándola y ejerciendo presión, temblé toda, más aún cuándo empezó a empujar con ese vigor que no admite ninguna resistencia.
SentÃa como se me abre el esfinter, a medida que la tuberÃa del hincha de River va ganando terreno dentro de mi ojete. Pero no me la metió toda. Se detuvo a mitad de camino, me agarró fuerte de la cintura y... ¡PAM!... no me embistió, sino que me atrajo mediante un tirón y ahà sÃ, me la calza toda.
Pegué un grito, tanto de dolor como de placer, emociones que se mezclaban y mimetizaban la una con la otra.
Me dolÃa, sÃ, pero como me gusta...
él por su parte me decÃa que era la vergüenza de mi familia al entregarle la cola tan rápido a un gallina.
Eso me daba más morbo todavÃa. Me excitaba que me tratara asÃ
Me la deja ahÃ, palpitando en mi interior, dejándome disfrutar esa sensación maravillosa que me producÃa tener el culo lleno de pija. Puedo sentir sus pelos rozándome las nalgas de tan adentro que me la puso.
No me soltaba, teniéndome bien sujeta, retrocedÃa, sin sacármela del todo, y arremetió de nuevo... ¡PAM!... y otra vez... ¡PAM!... y otra... ¡PAM! ¡PAM! ¡PAM!...
Me sacudió toda con cada embestida, haciéndome vibrar de puro placer.
Me echo en el suelo y apoyando la cabeza sobre mis brazos entrecruzados, levanto todavÃa más la cola, entregándome plenamente como una mujer de palabra, una buena perdedora, a tan agradable sacrificio...
Mi novio (que con ese ensañamiento que tenÃa con mi culo bostero podrÃa haber sido cualquier fanático de River), estaba de rodillas, pero en ese momento se alzó sobre sus pies, y manteniéndome bien sujeta, me descose a pijazos, olvidándose por completo de que yo era su novia, me veÃa como un culo del equipo rival al cual lo estaba desarmando.
Me decÃa: ¿ Que sos?
LA PUTA DE RIVER, gritaba yo. Mientras más caliente estaba más suelta de boca también...
DecÃa todo lo que el querÃa oÃr
Que me encantaba su pija, que river era lo más grande, Que yo y mi equipo somos las putitas de los machos millonarios, etc
Cuándo me la sacó, tras un buen rato de estar dándome sin parar, el culo me hace ese tÃpico ruido de vacÃo... PPPRRRRRR... PPPRRRRRR... varias veces pero no tuve mucho tiempo para reaccionar cuando sentà la leche caliente en mi espalda ensuciándome toda la camiseta y el número con leche.
No, jamás lo hice
Al tiempo de eso nos separamos meses después de eso porque me gorrió pero nunca más volvà a sentir ese morbo y placer de que a mi, hincha fanática de Boca, me rompiera bien el culo un hincha fanático de River".
Terrible relato me mandó Javiera Mena, espero que les haya gustado y cualquier sugerencia lo charlan con ella. Saludos. @http://www.poringa.net/Menamena19
1 comentarios - Apuesta Sudamericana 2014
Soy bostero pero me encantan esta clase de relatos, gracias por compartir y espero que vengan más