Hola a tod@s en especial a esos sobrinos y tías que luchan cada día con esa tentación ese deseo, créanme no están solos.
Desde ya les aviso que esto no será corto pienso contarlo absolutamente todo, dividiendo por secciones, espero no olvidar nada pero no duden en preguntar quizás algo se me haya pasado, lo hago así porque solo quiero contare sta historia, 100% real así que no leerán que me mide 30 cm ni que mi tía es la top model pero cada palabra escrita será cierta, busco su ayuda aún no cumplo mi fantasía pero quizás pronto pueda cumplirla, a continuación les daré mis razones de esta suposición, les contare de mi fracaso en mi primera y única confesión hacia ella y como hace apenas una semana, la puerta que tanto he estado buscando quizás solo quizás se está abriendo (con screenshots incluidas).
Mi tía, mi mujer perfecta.
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Como dije anteriormente mi tía no es una modelo, no tiene operaciones sin embargo no hay mujer en este mundo a la que pueda ver con más deseo. Es la única hermana de mi mamá, es morena de 1.60 aprox., se tiñe el pelo siempre de rojo vino eso me enloquece, sus tetas no son muy grandes pero lo suficiente para a veces resaltar en sus vestidos, su culo es igual no muy grande pero firme para su edad, le gusta usar siempre tacones por lo que sus piernas y pantorrilla ssiempre están torneadas a pesar de que no haga mucho ejercicio, casi siempre lleva vestidos cortos, rojos, negros, animal print y uno azul que me vuelve loco. Siempre ha sido muy divertida, baila muy sexy, adoro platicar con ella es muy culta y me ha dejado claro que no vive en un mundo cuadrado, muy diferente al resto de mi familia muy muy conservadora, recién cumplió 50 años (yo tengo 27) pero repito, está muy bien conservada, tiene 2 hijas, aunque siempre me ha considerado como otro de sus hijos, es divorciada, pero se volvió a casar, al parecer no le agrada la idea de estar sola. Intentando mezclar mi imaginación con porno hedefinido algunas características en diversas pornstars que me recuerdan a ella, actrices que comparten la forma de su rostro como Ariella Ferrera, su mirada picara que he visto más de una vez como la de mi actriz favorita Jessica Jaymes (D.E.P),los atuendos de algunas escenas de Satin Bloom y Anissa Kate, y así podría enumerar algunas otras, con rasgos, muecas, sonrisas, expresiones corporales que me recuerdan a mi tía, mi mujer perfecta.
Primeros pasos hacia una obsesión desmedida, experimentando eldescontrol.
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Desde que tengo uso de razón mi tía me ha cautivado con su belleza y forma de ser, de muy pequeño la acompañaba y al ir en el taxi apreciaba sus piernas a veces la tocaba, pero ella nunca lo vio mal, claro, yo era un niño.
Conforme fui creciendo y al alcanzar la mayoría de edad comencé a adentrarme en el mundo del porno, mis primeras pajas fueron con mujeres maduras, inevitablemente el mundo de las Milf y cougar como se les llamaba más comúnmente era mi predilección. Por cuestiones familiares mi tía, una de mis primas aun pequeña y su esposo se quedaron en mi casa, fue ahí donde por primera vez me desconocí, después de decirme que nunca haría tal cosa en más de una ocasión me escabullí en su cuarto, agarré sus prendas, su playera de pijama, algunos abrigos con peluche que conservaban el olor a su perfume el cual aun recuerdo con éxtasis, me masturbé con muchas de sus prendas incluso acabando en las más suaves. Con sorpresa y aun con mucha vergüenza al día siguiente observaba como esa ropa era puesta en bolsas para tirarlas, hasta la fecha nunca me ha dicho si se molestó y más importante aún si sabía quién había sido.
Debía irme a la universidad esas vacaciones habían pasado en mi interior sentía alivio al no estar en el mismo estado que ella, no sabía hasta donde podía llegar si continuaba así por primera vez no tenía el control de mi mente y cuerpo.
La mayoría de edad, un arma de doble filo.
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La universidad me mantenía ocupado y alejado de mi familia, sin embargo, las vacaciones llegaban y era el momento en el que podía interactuar con mi tía a diario, la miraba en pijama, en pans, y después arreglada como la musa erótica que me sobrepasa. Ahora yo ya era un hombre, puedo asegurarles que mis hombros anchos le gustaban, era más que evidente que siempre que podía los acariciaba. Fue ahí donde mi cabeza empezó a volar, ¿de verdad ya no veía como un niño, como su sobrino, como su hijo?
4 años pasaron durante ese tiempo vivieron un año con nosotros y después se mudaron a otra casa, pero ella iba a diario a visitar a mi abuela, por esa razón ella iba sola casi siempre. En esos días libres la veía llegar con sus vestidos cortos por mi ventana, de inmediato mi pene se levantaba como un mástil, a veces se olvidaba la llave así que debía salir a abrirle, por mas que intentaba ocultar mi carpa de circo era imposible, no soy muy grande diría que promedio, pero era la magia que ella hace en mí. Empezaba a agarrar más confianza y apropósito me dejaba el pijama más suelta que tuviera, aprovechando que mis padres no estaban podía esperar a mi tía así, parado. Le abría la puerta la abrazaba, en un par de ocasiones mi miembro la picó ella solo saltaba hacia atrás y no daba seña alguna de importancia, la llevaba abrazada por el patio hasta entrar a la casa y platicábamos de cómo estaba el día, yo con mi clara erección pero ella sin mirar solo sonriendo como siempre.
Sobrepasando mis límites.
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Mi confianza fue en aumento y sin darme cuenta al saludarla (ella con un top sport blanco) le acariciaba el vientre literal metiendo mi mano debajo de su ropa, ella como era costumbre no lo mencionaba, así fueron un par de veces hasta una ocasión que me agarró la mano deteniéndome, me puse triste pensé que había llegado el límite, me porte seco toda la tarde, cual fue mi sorpresa que supongo al notar mi enfado y descontento después pasando unas horas se me acerco y me acaricio el hombro como solo ella sabe, sonreí de nuevo.
Miradas picaras al contar algo un poco subido de tono, mientras bebía su vino una ocasión me percaté que me veía de una forma ... diferente, de inmediato hizo una mueca como si se atragantara, con un dejo de pena, pero por primera vez los vi, vi esos ojos.
Si hay algún defecto que puedo decir que mi tía tenia era la de que nunca se le quito la maña de tomarle dinero a mi abuela, un secreto que incluso yo también solapaba por obvias razones. También fueron ocasiones en las que dejaba abierta mi puerta y cuando veía que llegaba me empezaba a masturbar esperando que me viera, al subir las escaleras hacia ruido por sus tacones, sonaban como un tic tac que me recordaba que aun podía no hacer esto, podía evitar un encuentro incomodo, he de confesar que nunca tuve el valor de seguir mi trampa, saludándola normalmente. Solo una ocasión esto no fue del todo así, entro al cuarto de mi abuela cuya puerta queda dando hacia mi escritorio y se puede ver, ella entró por dinero, me dije a mi mismo que quería que me viera, ¿Cómo reaccionaría?, comencé a tocarme y cuando me di cuenta de reojo la vi, observando, sin moverse, sin buscar más el dinero, solo viéndome. Fue el primer momento verdaderamente erótico que tuvimos, sin embargo, el gusto duró poco porque supongo se arrepintió y solo salió del cuarto, sin voltearme a ver bajó las escaleras. No hubo comentarios, con ella es siempre lo mismo, pero sin duda había notado un cambio, incluso ocasiones subió sin zapatos por lo que atraparme masturbando seria sencillo, nunca coincidió.
Pasaba el tiempo y yo no dejaba pasar las oportunidades para comentarle que se veía hermosa, que ese vestido era mi favorito, usando la palabra sexy incluso, a lo que ella solo se reía y me decía: - Ay mijo gracias, pero ya estoy ruca. A lo que yo le respondía que para nada. En una ocasión notó que la estaba mirando mientras cocinaba, hizo el gesto de abanico con las manos y dijo: - Uff que calor hace. De nuevo estos tintes de picardía me agarraban por sorpresa y no podía articular palabra inteligente que aprovechara el momento, pero sin duda había sobrepasado mis límites.
La oportunidad perdida y una abrupta despedida.
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Como ya era costumbre tenía mi pijama y me cargaba una erección tremenda, ella estaba en el piso de abajo hablando con mi abuela, solo estábamos nosotros,- es mi oportunidad – pensé. Ya no aguanto tengo que hacer algo con esta fantasía me repetía. Bajé con las piernas temblando y le hice una seña señalando mi pantalón ella abrió los ojos con sorpresa, sin pensarlo mucho señalé hacia arriba queriendo darle a entender que subiera. Rápidamente subí a mi cuarto nervioso, ¿Vendrá? ¿Me habrá entendido?, de pronto escuché esos tacones subiendo las escaleras yo estaba en mi escritorio nervioso, ella entro y se sentó en mi cama esperando. No es mentira. justo cuando pensé en decirle todo, se escuchó el portón, mis padres habían llegado, cambié de tema rápido, y ella de inmediato bajó, supongo que ella también se frustró porque cuando mi mamá la saludó y le preguntó que había de nuevo, ella le contestó – Nada de nada. Nunca tocamos ese tema de nuevo, pero presencialmente fue lo más fuerte sin duda mi oportunidad de oro se desvaneció ese día.
Al siguiente año se me rompió el corazón, mi tía debía mudarse a otro país su esposo había encontrado una oportunidad de empleo y en sus planes no estaba volver en mucho tiempo. Me sentí traicionado, nunca dijimos nada, nunca hablamos de frente sobre esos momentos, mi tía se iba y no podía hacer nada. Al dejarlos en el aeropuerto ella solo me dijo: - si pudiera te llevaba conmigo. quiero pensar que esas palabras escondían algo más que un comentario inocente de un familiar que se marcha, todo fue muy rápido ella se había ido.
Pandemia, colapso, mi confesión.
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Como todos sabrán nadie se preparó para lo que vendría el año pasado, fueron tiempos difíciles, ahora era mucho más difícil que ella pudiera venir a visitarnos y es la fecha que es prácticamente imposible. Los meses pasaron y afortunadamente mediante Whatsapp nunca perdí contacto con ella. Le mandaba memes y ella a mí, platicábamos ocasionalmente. No se si al no tenerla cerca mi deseo disminuyó, o al menos eso creía. Debido a la pandemia mi interacción social también se fue desintegrando, lo mismo causo supongo un deseo por continuar aquella historia que quedó inconclusa, comencé la seducción virtual.
Empecé con memes subiditos de tono, cadenas con retos hot y esos videos de tiktok sexy. Constantemente se los mandaba además de pedirle fotos, las cuales nunca llegaron siempre tenía una manera de evadir el tema y poner sobre la mesa la realidad de que ella ya era mayor y que solo los jóvenes podíamos hacer esos retos. Se reía con los memes, pero no hacia caso a los que guardaban ese tinte sexual, hasta que llegó el día.
Nervioso y sudando me dispuse a decirle lo que sentía, redacté el mensaje enfatizando que la quiero mucho, y que la veía más que una tía, que quería que fuera mi maestra sexual y que esto quedaría entre nosotros, palabras más palabras menos ese fue el mensaje. Tardo todo el día en contactarme, yo estaba muy asustado, ¿quizás su esposo le revisa el celular? ¿La meteré en problemas? ¿Me dirá que si?
Su respuesta llegó, por desgracia no fue lo que esperaba, con mucho tacto me dijo que no pensaba que yo la tenia en ese concepto y muy amable dijo que no por el típico cuento de que soy su sobrino hijo de su única hermana, y que no podría romper esa confianza, que ella nunca me había dado a entender otra cosa que no fuera el cariño de una tía a su sobrino y que no le interesaba ser maestra de nadie, que no estaba molesta, solo incomoda y que lo olvidáramos que pasáramos la pagina que ese secreto se lo llevaría a la tumba pero que debíamos de olvidarlo y yo debía encontrar a alguien más.
¿Todo era mi imaginación?.
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Sé lo que estarán pensando, todos esos gestos, caricias, miradas, momentos ¿nunca pasaron?, ¿de verdad mi imaginación había armado todo?, eso es una incógnita que hasta la fecha me persigue. Se lo que vi, lo que sentí, ¿por qué ahora me estaba diciendo que nunca me dio señales? Le contesté que no había visto como había redactado el mensaje y que solo quería consultarle unas cosas sobre ciertos temas, intente dejarlo lo más inocente posible, a lo que ella accedió con tal de que nuestra relación familiar no cambiara.
No cuento con evidencia de estos mensajes ya que los borré por pena y rabia solo confíen que esto pasó. Ahora mi tía sabe lo que siento, ese cuento de que no era mi intención estaba a su elección. Los siguientes meses fueron muy distantes, yo me aleje mucho y solo la comunicaba con mi mamá además de felicitarla por navidad y año nuevo, por supuesto de la manera más fría y respetuosa posible. Seguimos mandando mensajes, pero muy inocentes, muy correctos, muy aburridos.
El presente ¿Una nueva puerta se abre?.
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Muy recientemente hace 2 semanas y a más de medio año de mi fracasada confesión, mi tía empezó a mandarme mensajes y usando mi técnica escondiendo entre ellos algunos un tanto explícitos (adjunto evidencia), esto me ha causado un sentimiento de enojo, ella sabe que eso podría de nuevo activar mi deseo ¿porqué lo hace?,, comentarios, emoticones y gifs que han puesto un verdadero reto no tomar como señales. Le mandé mensaje de cumpleaños un poco provocativo, siempre exagera su edad no se si como mecanismo de defensa, pero su respuesta me intriga, pareciera que de nuevo la oportunidad es posible, ¿es solo mi imaginación jugando conmigo?
¿Conclusión?.
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Por la distancia y la pandemia dudo se haga un encuentro a corto plazo, sólo quisiera poder intercambiar fotos sexys, mandarle escenas porno con alguna actriz que se le parezca al menos en mi mente y que ella me diga que le gusta. Sentir que ella está dando señales me confunde y encontrar su punto de quiebre me quema un poco la cabeza. Siento que no es tan obvia, pero sabiendo nuestra discusión anterior no entiendo porque mandarme ese tipo de cosas. Por ahora solo aspiro tener sexting con ella es lo que mas deseo.
Comentarios.
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Agradezco primero su atención, espero puedan darme sus puntos de vista, agradezco también usar esta plataforma para poder intercambiar paginas videos, consejos y anécdotas. De verdad quiero intentarlo de nuevo, pero si me equivoco podría ahora si arruinar nuestra familia. Ayúdenme a que esta historia tenga un final feliz.
Desde ya les aviso que esto no será corto pienso contarlo absolutamente todo, dividiendo por secciones, espero no olvidar nada pero no duden en preguntar quizás algo se me haya pasado, lo hago así porque solo quiero contare sta historia, 100% real así que no leerán que me mide 30 cm ni que mi tía es la top model pero cada palabra escrita será cierta, busco su ayuda aún no cumplo mi fantasía pero quizás pronto pueda cumplirla, a continuación les daré mis razones de esta suposición, les contare de mi fracaso en mi primera y única confesión hacia ella y como hace apenas una semana, la puerta que tanto he estado buscando quizás solo quizás se está abriendo (con screenshots incluidas).
Mi tía, mi mujer perfecta.
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Como dije anteriormente mi tía no es una modelo, no tiene operaciones sin embargo no hay mujer en este mundo a la que pueda ver con más deseo. Es la única hermana de mi mamá, es morena de 1.60 aprox., se tiñe el pelo siempre de rojo vino eso me enloquece, sus tetas no son muy grandes pero lo suficiente para a veces resaltar en sus vestidos, su culo es igual no muy grande pero firme para su edad, le gusta usar siempre tacones por lo que sus piernas y pantorrilla ssiempre están torneadas a pesar de que no haga mucho ejercicio, casi siempre lleva vestidos cortos, rojos, negros, animal print y uno azul que me vuelve loco. Siempre ha sido muy divertida, baila muy sexy, adoro platicar con ella es muy culta y me ha dejado claro que no vive en un mundo cuadrado, muy diferente al resto de mi familia muy muy conservadora, recién cumplió 50 años (yo tengo 27) pero repito, está muy bien conservada, tiene 2 hijas, aunque siempre me ha considerado como otro de sus hijos, es divorciada, pero se volvió a casar, al parecer no le agrada la idea de estar sola. Intentando mezclar mi imaginación con porno hedefinido algunas características en diversas pornstars que me recuerdan a ella, actrices que comparten la forma de su rostro como Ariella Ferrera, su mirada picara que he visto más de una vez como la de mi actriz favorita Jessica Jaymes (D.E.P),los atuendos de algunas escenas de Satin Bloom y Anissa Kate, y así podría enumerar algunas otras, con rasgos, muecas, sonrisas, expresiones corporales que me recuerdan a mi tía, mi mujer perfecta.
Primeros pasos hacia una obsesión desmedida, experimentando eldescontrol.
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Desde que tengo uso de razón mi tía me ha cautivado con su belleza y forma de ser, de muy pequeño la acompañaba y al ir en el taxi apreciaba sus piernas a veces la tocaba, pero ella nunca lo vio mal, claro, yo era un niño.
Conforme fui creciendo y al alcanzar la mayoría de edad comencé a adentrarme en el mundo del porno, mis primeras pajas fueron con mujeres maduras, inevitablemente el mundo de las Milf y cougar como se les llamaba más comúnmente era mi predilección. Por cuestiones familiares mi tía, una de mis primas aun pequeña y su esposo se quedaron en mi casa, fue ahí donde por primera vez me desconocí, después de decirme que nunca haría tal cosa en más de una ocasión me escabullí en su cuarto, agarré sus prendas, su playera de pijama, algunos abrigos con peluche que conservaban el olor a su perfume el cual aun recuerdo con éxtasis, me masturbé con muchas de sus prendas incluso acabando en las más suaves. Con sorpresa y aun con mucha vergüenza al día siguiente observaba como esa ropa era puesta en bolsas para tirarlas, hasta la fecha nunca me ha dicho si se molestó y más importante aún si sabía quién había sido.
Debía irme a la universidad esas vacaciones habían pasado en mi interior sentía alivio al no estar en el mismo estado que ella, no sabía hasta donde podía llegar si continuaba así por primera vez no tenía el control de mi mente y cuerpo.
La mayoría de edad, un arma de doble filo.
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La universidad me mantenía ocupado y alejado de mi familia, sin embargo, las vacaciones llegaban y era el momento en el que podía interactuar con mi tía a diario, la miraba en pijama, en pans, y después arreglada como la musa erótica que me sobrepasa. Ahora yo ya era un hombre, puedo asegurarles que mis hombros anchos le gustaban, era más que evidente que siempre que podía los acariciaba. Fue ahí donde mi cabeza empezó a volar, ¿de verdad ya no veía como un niño, como su sobrino, como su hijo?
4 años pasaron durante ese tiempo vivieron un año con nosotros y después se mudaron a otra casa, pero ella iba a diario a visitar a mi abuela, por esa razón ella iba sola casi siempre. En esos días libres la veía llegar con sus vestidos cortos por mi ventana, de inmediato mi pene se levantaba como un mástil, a veces se olvidaba la llave así que debía salir a abrirle, por mas que intentaba ocultar mi carpa de circo era imposible, no soy muy grande diría que promedio, pero era la magia que ella hace en mí. Empezaba a agarrar más confianza y apropósito me dejaba el pijama más suelta que tuviera, aprovechando que mis padres no estaban podía esperar a mi tía así, parado. Le abría la puerta la abrazaba, en un par de ocasiones mi miembro la picó ella solo saltaba hacia atrás y no daba seña alguna de importancia, la llevaba abrazada por el patio hasta entrar a la casa y platicábamos de cómo estaba el día, yo con mi clara erección pero ella sin mirar solo sonriendo como siempre.
Sobrepasando mis límites.
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Mi confianza fue en aumento y sin darme cuenta al saludarla (ella con un top sport blanco) le acariciaba el vientre literal metiendo mi mano debajo de su ropa, ella como era costumbre no lo mencionaba, así fueron un par de veces hasta una ocasión que me agarró la mano deteniéndome, me puse triste pensé que había llegado el límite, me porte seco toda la tarde, cual fue mi sorpresa que supongo al notar mi enfado y descontento después pasando unas horas se me acerco y me acaricio el hombro como solo ella sabe, sonreí de nuevo.
Miradas picaras al contar algo un poco subido de tono, mientras bebía su vino una ocasión me percaté que me veía de una forma ... diferente, de inmediato hizo una mueca como si se atragantara, con un dejo de pena, pero por primera vez los vi, vi esos ojos.
Si hay algún defecto que puedo decir que mi tía tenia era la de que nunca se le quito la maña de tomarle dinero a mi abuela, un secreto que incluso yo también solapaba por obvias razones. También fueron ocasiones en las que dejaba abierta mi puerta y cuando veía que llegaba me empezaba a masturbar esperando que me viera, al subir las escaleras hacia ruido por sus tacones, sonaban como un tic tac que me recordaba que aun podía no hacer esto, podía evitar un encuentro incomodo, he de confesar que nunca tuve el valor de seguir mi trampa, saludándola normalmente. Solo una ocasión esto no fue del todo así, entro al cuarto de mi abuela cuya puerta queda dando hacia mi escritorio y se puede ver, ella entró por dinero, me dije a mi mismo que quería que me viera, ¿Cómo reaccionaría?, comencé a tocarme y cuando me di cuenta de reojo la vi, observando, sin moverse, sin buscar más el dinero, solo viéndome. Fue el primer momento verdaderamente erótico que tuvimos, sin embargo, el gusto duró poco porque supongo se arrepintió y solo salió del cuarto, sin voltearme a ver bajó las escaleras. No hubo comentarios, con ella es siempre lo mismo, pero sin duda había notado un cambio, incluso ocasiones subió sin zapatos por lo que atraparme masturbando seria sencillo, nunca coincidió.
Pasaba el tiempo y yo no dejaba pasar las oportunidades para comentarle que se veía hermosa, que ese vestido era mi favorito, usando la palabra sexy incluso, a lo que ella solo se reía y me decía: - Ay mijo gracias, pero ya estoy ruca. A lo que yo le respondía que para nada. En una ocasión notó que la estaba mirando mientras cocinaba, hizo el gesto de abanico con las manos y dijo: - Uff que calor hace. De nuevo estos tintes de picardía me agarraban por sorpresa y no podía articular palabra inteligente que aprovechara el momento, pero sin duda había sobrepasado mis límites.
La oportunidad perdida y una abrupta despedida.
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Como ya era costumbre tenía mi pijama y me cargaba una erección tremenda, ella estaba en el piso de abajo hablando con mi abuela, solo estábamos nosotros,- es mi oportunidad – pensé. Ya no aguanto tengo que hacer algo con esta fantasía me repetía. Bajé con las piernas temblando y le hice una seña señalando mi pantalón ella abrió los ojos con sorpresa, sin pensarlo mucho señalé hacia arriba queriendo darle a entender que subiera. Rápidamente subí a mi cuarto nervioso, ¿Vendrá? ¿Me habrá entendido?, de pronto escuché esos tacones subiendo las escaleras yo estaba en mi escritorio nervioso, ella entro y se sentó en mi cama esperando. No es mentira. justo cuando pensé en decirle todo, se escuchó el portón, mis padres habían llegado, cambié de tema rápido, y ella de inmediato bajó, supongo que ella también se frustró porque cuando mi mamá la saludó y le preguntó que había de nuevo, ella le contestó – Nada de nada. Nunca tocamos ese tema de nuevo, pero presencialmente fue lo más fuerte sin duda mi oportunidad de oro se desvaneció ese día.
Al siguiente año se me rompió el corazón, mi tía debía mudarse a otro país su esposo había encontrado una oportunidad de empleo y en sus planes no estaba volver en mucho tiempo. Me sentí traicionado, nunca dijimos nada, nunca hablamos de frente sobre esos momentos, mi tía se iba y no podía hacer nada. Al dejarlos en el aeropuerto ella solo me dijo: - si pudiera te llevaba conmigo. quiero pensar que esas palabras escondían algo más que un comentario inocente de un familiar que se marcha, todo fue muy rápido ella se había ido.
Pandemia, colapso, mi confesión.
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Como todos sabrán nadie se preparó para lo que vendría el año pasado, fueron tiempos difíciles, ahora era mucho más difícil que ella pudiera venir a visitarnos y es la fecha que es prácticamente imposible. Los meses pasaron y afortunadamente mediante Whatsapp nunca perdí contacto con ella. Le mandaba memes y ella a mí, platicábamos ocasionalmente. No se si al no tenerla cerca mi deseo disminuyó, o al menos eso creía. Debido a la pandemia mi interacción social también se fue desintegrando, lo mismo causo supongo un deseo por continuar aquella historia que quedó inconclusa, comencé la seducción virtual.
Empecé con memes subiditos de tono, cadenas con retos hot y esos videos de tiktok sexy. Constantemente se los mandaba además de pedirle fotos, las cuales nunca llegaron siempre tenía una manera de evadir el tema y poner sobre la mesa la realidad de que ella ya era mayor y que solo los jóvenes podíamos hacer esos retos. Se reía con los memes, pero no hacia caso a los que guardaban ese tinte sexual, hasta que llegó el día.
Nervioso y sudando me dispuse a decirle lo que sentía, redacté el mensaje enfatizando que la quiero mucho, y que la veía más que una tía, que quería que fuera mi maestra sexual y que esto quedaría entre nosotros, palabras más palabras menos ese fue el mensaje. Tardo todo el día en contactarme, yo estaba muy asustado, ¿quizás su esposo le revisa el celular? ¿La meteré en problemas? ¿Me dirá que si?
Su respuesta llegó, por desgracia no fue lo que esperaba, con mucho tacto me dijo que no pensaba que yo la tenia en ese concepto y muy amable dijo que no por el típico cuento de que soy su sobrino hijo de su única hermana, y que no podría romper esa confianza, que ella nunca me había dado a entender otra cosa que no fuera el cariño de una tía a su sobrino y que no le interesaba ser maestra de nadie, que no estaba molesta, solo incomoda y que lo olvidáramos que pasáramos la pagina que ese secreto se lo llevaría a la tumba pero que debíamos de olvidarlo y yo debía encontrar a alguien más.
¿Todo era mi imaginación?.
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Sé lo que estarán pensando, todos esos gestos, caricias, miradas, momentos ¿nunca pasaron?, ¿de verdad mi imaginación había armado todo?, eso es una incógnita que hasta la fecha me persigue. Se lo que vi, lo que sentí, ¿por qué ahora me estaba diciendo que nunca me dio señales? Le contesté que no había visto como había redactado el mensaje y que solo quería consultarle unas cosas sobre ciertos temas, intente dejarlo lo más inocente posible, a lo que ella accedió con tal de que nuestra relación familiar no cambiara.
No cuento con evidencia de estos mensajes ya que los borré por pena y rabia solo confíen que esto pasó. Ahora mi tía sabe lo que siento, ese cuento de que no era mi intención estaba a su elección. Los siguientes meses fueron muy distantes, yo me aleje mucho y solo la comunicaba con mi mamá además de felicitarla por navidad y año nuevo, por supuesto de la manera más fría y respetuosa posible. Seguimos mandando mensajes, pero muy inocentes, muy correctos, muy aburridos.
El presente ¿Una nueva puerta se abre?.
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Muy recientemente hace 2 semanas y a más de medio año de mi fracasada confesión, mi tía empezó a mandarme mensajes y usando mi técnica escondiendo entre ellos algunos un tanto explícitos (adjunto evidencia), esto me ha causado un sentimiento de enojo, ella sabe que eso podría de nuevo activar mi deseo ¿porqué lo hace?,, comentarios, emoticones y gifs que han puesto un verdadero reto no tomar como señales. Le mandé mensaje de cumpleaños un poco provocativo, siempre exagera su edad no se si como mecanismo de defensa, pero su respuesta me intriga, pareciera que de nuevo la oportunidad es posible, ¿es solo mi imaginación jugando conmigo?
¿Conclusión?.
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Por la distancia y la pandemia dudo se haga un encuentro a corto plazo, sólo quisiera poder intercambiar fotos sexys, mandarle escenas porno con alguna actriz que se le parezca al menos en mi mente y que ella me diga que le gusta. Sentir que ella está dando señales me confunde y encontrar su punto de quiebre me quema un poco la cabeza. Siento que no es tan obvia, pero sabiendo nuestra discusión anterior no entiendo porque mandarme ese tipo de cosas. Por ahora solo aspiro tener sexting con ella es lo que mas deseo.
Comentarios.
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Agradezco primero su atención, espero puedan darme sus puntos de vista, agradezco también usar esta plataforma para poder intercambiar paginas videos, consejos y anécdotas. De verdad quiero intentarlo de nuevo, pero si me equivoco podría ahora si arruinar nuestra familia. Ayúdenme a que esta historia tenga un final feliz.
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