Mi primo se había mudado cerca de casa y compartíamos muchas horas juntos. Esas horas se fueron transformando también en quedarme a dormir en su casa (a veces el en la mía) y con eso, obviamente empezaron a aparecer "juegos" de adolescentes calentones.
A veces hablábamos de compañeras de colegio y eso nos llevaba a pajearnos juntos en varias oportunidades.
Su casa tenía una habitación al fondo del patio, bastante alejada de la casa principal, en donde solíamos ir para estar solos.
Todo olía a humedad y encierro, pero nos facilitaba la intimidad para poder clavarnos las pajas que quisiéramos sin que nos vieran.
Jorge era 2 años menor que yo, mucho más bajo de estatura, algo rellenito y con una pija normal para su edad y un culo carnoso y blanco.
Yo estaba terminando la secundaria, era alto para mis 17, delgado y tenía una pija bastante grande (19 cm) que era la "burla-envidia" de mis amigos del club.
Una de las noches en que me quedé a dormir en su casa, esperamos que sus padres apagaran la luz para dormir y luego de un rato de charlas calientes Jorge vino hacia mi cama, sentándose en el borde ... estaba desnudo.
Agarró su pija, la sacudió unos segundos y empezó a pajearse despacio. Hice lo mismo.
Estábamos en eso cuando le pedí que me hiciera acabar él, con su mano.
Sentí el contacto con sus dedos y arquié mi espalda para prepararme para acabar.
Le pedí que lo hiciera más rápido ... con la otra mano acariciaba mis huevos, y bajando y subiendo la piel frenéticamente, comencé a largar chorros de leche que fueron a dar en mi panza y en sus dedos.
Jorge rió y agarró mi mano para que lo pajeara y lo hiciese terminar.
También escupió mucha leche y después de un rato sentado charlando se fue a su cama a dormir.
A la mañana siguiente, después de desayunar nos quedamos hablando de lo que había pasado anoche, y sin pensarlo mucho fuimos hacia la pieza del fondo.
Nos sacamos los pantalones y comenzamos a pajearnos ... él a mí y yo a él...
Acabó enseguida, dijo que había quedado caliente de la noche anterior.
Acomodamos un silla toda rota que encontramos en un rincón y se sentó para seguir con la paja, por lo que quedé parado frente a él.
Me pajeaba despacio, acariciando mis huevos, cosa que me hacía gozar maravillosamente. Su cara estaba muy cerca de mi pija ... empujé su cabeza hacia ahí
-" ... qué hacés boludo ?? .." dijo algo sorprendido
" ... besala ... dale, así acabo más rápido ..." le contesté.
- " ... no !! estás loco !!! ..." respondió
-" ... dale ... por favor "... le rogué volviendo a empujarlo
Se inclinó y besó mis huevos... eran besos cortos ... y fue subiendo por el tronco, deteniéndose al llegar a mi cabeza.
Agarré mi pija y la dirigí directamente a sus labios, obligándolo a abrir su boca ... lamió un poco y se la metió hasta la mitad ... gemí y poniendo mi mano en su nuca, le marqué el ritmo... fueron 4 o 5 chupadas hasta atragantarse y en el momento de acabar se la saqué de la boca y mi leche fue a dar a su hombro derecho... varios chorros...
Jorge escupió en el piso - para sacarse el gusto creería- y acomodó la silla de nuevo en donde estaba. Nos subimos los pantalones y fuimos hacia la casa.
Durante el resto del día no hablamos nada sobre lo sucedido, transcurrió todo normalmente. Juagamos a la pelota un rato y luego de bañarnos nos sentamos a cenar.
Mi tía comentó que nos había estado buscando y le dijimos que estábamos en la pieza vieja tratando de arreglar una silla ... y reímos cómplices.
Luego de cenar nos fuimos a nuestro cuarto a esperar que sus padres se durmieran.
Ni bien apagaron la luz Jorge apareció en mi cama, desnudo, pero esta vez en lugar de sentarse me indicó que me corriera.
Empezamos a tocarnos y con las pijas bien duras empezamos la paja.
En un momento en que nos quisimos acomodar mejor, aproveché y me subí encima suyo ... Jorge rió y acomodándome en su pecho dirigí mi pija hacia su boca. La besó y comenzó a pasarle la lengua para luego de un rato metérsela por completo en la boca.
Yo estaba agarrado del respaldo de la cama, moviéndome lento, cogiéndole la boca ... se sentía el ruido de su saliva en cada chupada.
-" ... así está bien o querés que me apure ?.." preguntó
" ... seguí así ...por favor" ... respondí ... me estaba dando una mamada fenomenal.
Me moví un poco para que lamiera mis huevos.
" ... que querés hacer ? ..." volvió a preguntar.
-" ... cogerte ...eso quiero ... comerte el culo ..." ... aposté a ganador.
Jorge no dijo nada, siguió lamiendo y chupando.
Después de un rato dijo: " ... y si me duele ? ..."
" ... te la meto despacito... hasta que te deje de doler... dale, no doy más ..." le respondí.
Siguió chupando un poco más y se la sacó de la boca.
-" ... cómo hacemos, en dónde ...? me preguntó sentándose en la cama.
Bajé de mi cama excitado por lo que vendría y tomándolo de la cintura hice que dejara sus pies colgando y tocando el piso y que quedara boca abajo con su culito apuntando al techo.
Me paré atrás de él y agachándome un poco empecé a pasarle la pija por toda la zanja, realmente no daba más de las ganas de ponérsela.
Como en la oscuridad no podía ver bien su entrada, le pedí que con su mano guiara la cabeza hasta su culo.
Jorge la agarró y jugando un ratito a pasarla por toda su cola, puso mi punta en el hoyo.
Empujé un poquito ... volví a empujar y quiso entrar algo...
" ... me está doliendo ..." balbuceó mi primo.
Me agaché y comencé a pasarle la lengua por su culo mientras lo pajeaba y le daba algún que otro lenguetazo a sus huevos, cosa que lo ponía loco.
Metí mi lengua en su culo ... una ... dos veces ... Jorge gimió fuerte.
Nos quedamos callados rogando que sus padres no hubiesen escuchado nada.
Volví a meter la lengua y retirándome con su mano me pidió que lo cogiera.
Entró la cabeza casi sin problemas, de una ... fui entrando de a poco en él ... cada tanto me frenaba con su mano... hasta que mis huevos hicieron tope.
Me quedé encima suyo, quieto, abrazado a su estómago y su cintura... lo tenía absolutamente ensartado.
Giró su cabeza y me dijo que estaba por acabar.
Comencé a moverme despacio y él aumentó el ritmo, cogiéndose solo, para terminar acabando en la sábana...
Yo intensifiqué los movimientos ... mi pija entraba y salía como por un túnel ... él gemía...
Cuando estuve listo para acabar, lo abracé más fuerte y buscando su boca nos besamos...
Descargué mucha leche dentro suyo, muchísima... mis espasmos no terminaban nunca.
Sin sacársela nos acomodamos sobre la cama. Mis brazos pasaban sobre su pecho hasta afirmar mis dedos en sus hombros... mi primo tenía los ojos cerrados y sonreía... otra vez nuestras bocas su juntaron.
Jorge se fue incorporando muy despacio para quedar en 4 patas. Me levanté y tomándolo de la cintura empecé a cogerlo de nuevo ... hacíamos ruido pero a decir verdad, no nos importaba.
Habrá pasado media hora cuando acabé dentro suyo por segunda vez.
Caímos sobre la cama abrazados y así estuvimos hasta que mi pija salió sola de su culo ... ese culo tan hermoso que tenía guardada toda mi leche dentro.
Jorge se fue a su cama y nos dormimos placenteramente.
A la mañana, ni bien despertamos, luego de verificar que su padre se había ido a trabajar y su madre al supermercado, lo volví a coger otra vez ...
Durante mas de 10 años cogimos a gusto y placer ... después la vida nos separó.
Este relato es 100% real y sucedió a finales de los 80.
Con Jorge volvimos a coger hace un par de años, cuando nos encontramos en un cumpleaños familiar y escapamos de nuestras esposas con la excusa e ir a comprar comida.
A veces hablábamos de compañeras de colegio y eso nos llevaba a pajearnos juntos en varias oportunidades.
Su casa tenía una habitación al fondo del patio, bastante alejada de la casa principal, en donde solíamos ir para estar solos.
Todo olía a humedad y encierro, pero nos facilitaba la intimidad para poder clavarnos las pajas que quisiéramos sin que nos vieran.
Jorge era 2 años menor que yo, mucho más bajo de estatura, algo rellenito y con una pija normal para su edad y un culo carnoso y blanco.
Yo estaba terminando la secundaria, era alto para mis 17, delgado y tenía una pija bastante grande (19 cm) que era la "burla-envidia" de mis amigos del club.
Una de las noches en que me quedé a dormir en su casa, esperamos que sus padres apagaran la luz para dormir y luego de un rato de charlas calientes Jorge vino hacia mi cama, sentándose en el borde ... estaba desnudo.
Agarró su pija, la sacudió unos segundos y empezó a pajearse despacio. Hice lo mismo.
Estábamos en eso cuando le pedí que me hiciera acabar él, con su mano.
Sentí el contacto con sus dedos y arquié mi espalda para prepararme para acabar.
Le pedí que lo hiciera más rápido ... con la otra mano acariciaba mis huevos, y bajando y subiendo la piel frenéticamente, comencé a largar chorros de leche que fueron a dar en mi panza y en sus dedos.
Jorge rió y agarró mi mano para que lo pajeara y lo hiciese terminar.
También escupió mucha leche y después de un rato sentado charlando se fue a su cama a dormir.
A la mañana siguiente, después de desayunar nos quedamos hablando de lo que había pasado anoche, y sin pensarlo mucho fuimos hacia la pieza del fondo.
Nos sacamos los pantalones y comenzamos a pajearnos ... él a mí y yo a él...
Acabó enseguida, dijo que había quedado caliente de la noche anterior.
Acomodamos un silla toda rota que encontramos en un rincón y se sentó para seguir con la paja, por lo que quedé parado frente a él.
Me pajeaba despacio, acariciando mis huevos, cosa que me hacía gozar maravillosamente. Su cara estaba muy cerca de mi pija ... empujé su cabeza hacia ahí
-" ... qué hacés boludo ?? .." dijo algo sorprendido
" ... besala ... dale, así acabo más rápido ..." le contesté.
- " ... no !! estás loco !!! ..." respondió
-" ... dale ... por favor "... le rogué volviendo a empujarlo
Se inclinó y besó mis huevos... eran besos cortos ... y fue subiendo por el tronco, deteniéndose al llegar a mi cabeza.
Agarré mi pija y la dirigí directamente a sus labios, obligándolo a abrir su boca ... lamió un poco y se la metió hasta la mitad ... gemí y poniendo mi mano en su nuca, le marqué el ritmo... fueron 4 o 5 chupadas hasta atragantarse y en el momento de acabar se la saqué de la boca y mi leche fue a dar a su hombro derecho... varios chorros...
Jorge escupió en el piso - para sacarse el gusto creería- y acomodó la silla de nuevo en donde estaba. Nos subimos los pantalones y fuimos hacia la casa.
Durante el resto del día no hablamos nada sobre lo sucedido, transcurrió todo normalmente. Juagamos a la pelota un rato y luego de bañarnos nos sentamos a cenar.
Mi tía comentó que nos había estado buscando y le dijimos que estábamos en la pieza vieja tratando de arreglar una silla ... y reímos cómplices.
Luego de cenar nos fuimos a nuestro cuarto a esperar que sus padres se durmieran.
Ni bien apagaron la luz Jorge apareció en mi cama, desnudo, pero esta vez en lugar de sentarse me indicó que me corriera.
Empezamos a tocarnos y con las pijas bien duras empezamos la paja.
En un momento en que nos quisimos acomodar mejor, aproveché y me subí encima suyo ... Jorge rió y acomodándome en su pecho dirigí mi pija hacia su boca. La besó y comenzó a pasarle la lengua para luego de un rato metérsela por completo en la boca.
Yo estaba agarrado del respaldo de la cama, moviéndome lento, cogiéndole la boca ... se sentía el ruido de su saliva en cada chupada.
-" ... así está bien o querés que me apure ?.." preguntó
" ... seguí así ...por favor" ... respondí ... me estaba dando una mamada fenomenal.
Me moví un poco para que lamiera mis huevos.
" ... que querés hacer ? ..." volvió a preguntar.
-" ... cogerte ...eso quiero ... comerte el culo ..." ... aposté a ganador.
Jorge no dijo nada, siguió lamiendo y chupando.
Después de un rato dijo: " ... y si me duele ? ..."
" ... te la meto despacito... hasta que te deje de doler... dale, no doy más ..." le respondí.
Siguió chupando un poco más y se la sacó de la boca.
-" ... cómo hacemos, en dónde ...? me preguntó sentándose en la cama.
Bajé de mi cama excitado por lo que vendría y tomándolo de la cintura hice que dejara sus pies colgando y tocando el piso y que quedara boca abajo con su culito apuntando al techo.
Me paré atrás de él y agachándome un poco empecé a pasarle la pija por toda la zanja, realmente no daba más de las ganas de ponérsela.
Como en la oscuridad no podía ver bien su entrada, le pedí que con su mano guiara la cabeza hasta su culo.
Jorge la agarró y jugando un ratito a pasarla por toda su cola, puso mi punta en el hoyo.
Empujé un poquito ... volví a empujar y quiso entrar algo...
" ... me está doliendo ..." balbuceó mi primo.
Me agaché y comencé a pasarle la lengua por su culo mientras lo pajeaba y le daba algún que otro lenguetazo a sus huevos, cosa que lo ponía loco.
Metí mi lengua en su culo ... una ... dos veces ... Jorge gimió fuerte.
Nos quedamos callados rogando que sus padres no hubiesen escuchado nada.
Volví a meter la lengua y retirándome con su mano me pidió que lo cogiera.
Entró la cabeza casi sin problemas, de una ... fui entrando de a poco en él ... cada tanto me frenaba con su mano... hasta que mis huevos hicieron tope.
Me quedé encima suyo, quieto, abrazado a su estómago y su cintura... lo tenía absolutamente ensartado.
Giró su cabeza y me dijo que estaba por acabar.
Comencé a moverme despacio y él aumentó el ritmo, cogiéndose solo, para terminar acabando en la sábana...
Yo intensifiqué los movimientos ... mi pija entraba y salía como por un túnel ... él gemía...
Cuando estuve listo para acabar, lo abracé más fuerte y buscando su boca nos besamos...
Descargué mucha leche dentro suyo, muchísima... mis espasmos no terminaban nunca.
Sin sacársela nos acomodamos sobre la cama. Mis brazos pasaban sobre su pecho hasta afirmar mis dedos en sus hombros... mi primo tenía los ojos cerrados y sonreía... otra vez nuestras bocas su juntaron.
Jorge se fue incorporando muy despacio para quedar en 4 patas. Me levanté y tomándolo de la cintura empecé a cogerlo de nuevo ... hacíamos ruido pero a decir verdad, no nos importaba.
Habrá pasado media hora cuando acabé dentro suyo por segunda vez.
Caímos sobre la cama abrazados y así estuvimos hasta que mi pija salió sola de su culo ... ese culo tan hermoso que tenía guardada toda mi leche dentro.
Jorge se fue a su cama y nos dormimos placenteramente.
A la mañana, ni bien despertamos, luego de verificar que su padre se había ido a trabajar y su madre al supermercado, lo volví a coger otra vez ...
Durante mas de 10 años cogimos a gusto y placer ... después la vida nos separó.
Este relato es 100% real y sucedió a finales de los 80.
Con Jorge volvimos a coger hace un par de años, cuando nos encontramos en un cumpleaños familiar y escapamos de nuestras esposas con la excusa e ir a comprar comida.
4 comentarios - Secretos de familia