Después que me separé de Viky me fue imposible encontrar una mujer que llegue a darme tanto placer como lo hacía ella... Una morocha con flequillo rollinga, buenas gomas, terribles gomas, mucha actitud, toda la actitud de puta. Pero bueno... En la vida no todo es sexo y tuvimos que terminar la relación después de unos 4 años. Y así pase el tiempo... Tuve otras relaciones, algunas muy lindas, pero ninguna llego a ocupar ese lugar. Con ella teníamos una conexión muy especial, podíamos tomar, "fumar", buen sexo, besos negros, sexo anal, teníamos todo permitido en la intimidad...
Me volví a juntar, cambié de trabajo, de barrio, pero en algún momento ella se venía a mí cabeza. Tanto pensarla, tanto desearla, que un día en un centro comercial me la crucé. La relación había terminado bastante mal. Yo quería separarme y ella no. Entonces la muy hdp me hizo la vida imposible por un tiempo... Pero pasado pisado. Me miró a los ojos y su alegría de verme le dibujo una hermosa sonrisa como pocas veces se la vi. Yo algo tenso por verla después de tanto tiempo, pero me deje llevar...
Leito- Viky!!! Tanto tiempo. Cómo estás?
Viky- Leo. Bien. Que alegría verte. Yo sabía que la vida nos iba a volver a cruzar...
Nos abrazamos. Hablamos unos minutos de la vida y resulta que vivíamos en la misma ciudad. Nos pasamos nuestros números y nos despedimos.
Llegué a mí casa. Compartí un rato con mí mujer, cenamos y a la cama... Juro por Dios que esa noche a mí mujer la disfruté como nunca. Cerré los ojos y me deje llevar... Pensando... Imaginando... Me prendí de sus pechos y empecé a mojar mis dedos en su conchita. Cuando sentí que estaba empapada la puse en cuatro, cerré los ojos y la cogí con tantas ganas que casi se me escapa el nombre de mí ex...
Al despertar ya estaba solo en casa. En mí celular tenía un mensaje de "Buenos días". Si. Era ella. Viky. Empezamos a hablar y me dice que en su casa tiene un consultorio en el cual hace masajes y que de 10 a 13 hs no tenía ningún turno, que estaba aburrida...
Leito- Que pena que no pueda ir. Sino encantado iría hacerte compañía o que me hagas masajes
Viky- cuál es el problema? Acá no te conoce nadie. Si querés podes venir...
No alcance a terminar de leer su mensaje que ya estaba saliendo para allá... Era mí día de franco, tenía todo el día libre hasta las 18hs que mí mujer llegará. Me pasó la dirección y allá fui.
Entre a su consultorio. Lo primero que pregunte fue por su marido, y dijo que trabajaba hasta las 22hs. Tranquilo leito... Tomamos unos mates y nos reímos de viejas anécdotas. Me invitó a la camilla para hacerme unos masajes y que vea lo que aprendió en este tiempo... Con poca timidez saque mí remera y me quedé en boxer. Me puse boca abajo y sus manos empezaron a trabajar... Por mí espalda, por mis hombros, por mí cuello, me era imposible contener los gemidos de placer. Hasta ese momento ninguna insinuación de sexo. Pero mí pene se empezó a endurecer y mí mente a maquinar... Ella nota mí erección.
Viky- qué barbaridad. No cambias más vos. Te tocan un poco y ya estás al palo
Solo me sonreí. Y la mire con deseo. Ella me beso con sus carnosos labios y su lengua calentita. Empecé a besarla como un adolescente desesperado. Mis dos manos se pegaron a sus pechos, desabroché su camisa. Me prendí como un bebé hambriento. Jugaba con mí lengua en sus pezones y trataba de chuparle las 2 tetas a la vez. La enloquecia eso. No sé aguanto más y bajo. Ahí. Dónde dejo grandes recuerdos. La chupaba con tanto amor. Despacito. Llenándola de baba, chupando la cabecita del pene. Me acariciaba los huevos, y su dedo empezó a jugar en mí ano. Mientras me hacía garganta profunda trataba de penetrarme con su dedo. Me estaba volviendo loco hasta que termine en su boca.
Viky- chancho que sos hdp. Te extrañaba...
Leito- Yo también te extrañé mucho y mí pija también.
Nos besamos, en su boca quedaron los restos de mi semen. La puse en la camilla y la abrí de piernas como si fuera a parir. Me sumergí de cabeza y enterré mí lengua lo más profundo posible. Lamia sus labios vaginales hasta mojar su ano. Tenía una conchita bien gordita, carnosa, empapada, fue la mujer que más sentí acabar en mí vida. Con mí lengua bajaba desde su clítoris hasta su ano. Ella solo gemia con los ojos cerrados tomándome bien fuerte de los pelos. Cuándo terminó de acabar...
Viky- Haceme la cola. Extraño tu pija en mí cola hdp. Dale!!!
La pare al lado de la camilla y la recosté su pecho sobre ella. Todo su culito parado a mí disposición. Me mordí los labios. Salibe su ano. Solo apoye la cabecita y sus gemidos eran impresionantes. Empecé a hundirla despacito y su cara se desfiguraba de placer...
Viky- Me encanta amor. Así.. cógeme. Así...
Yo tranquilo. Disfrutando el momento. Empujaba despacito mirando como entraba y salía. Con mí mano empecé a acariciar su conchita mientras le hacía la cola. Para suerte de ella yo no podía acabar. Ella se puso la 10 y me hizo un pete-turca. Con mis dos manos en su cabeza la sometía. Éramos un solo gritó de placer hasta dejar sus tetas chorreando de semen. Ella se lamió sus pechos y me dijo volvé pronto hdp... Continuará...
Relato real. COMENTEN. Dejen puntos. Gracias por leerme. SEGUIME hay más historias por contar...
Me volví a juntar, cambié de trabajo, de barrio, pero en algún momento ella se venía a mí cabeza. Tanto pensarla, tanto desearla, que un día en un centro comercial me la crucé. La relación había terminado bastante mal. Yo quería separarme y ella no. Entonces la muy hdp me hizo la vida imposible por un tiempo... Pero pasado pisado. Me miró a los ojos y su alegría de verme le dibujo una hermosa sonrisa como pocas veces se la vi. Yo algo tenso por verla después de tanto tiempo, pero me deje llevar...
Leito- Viky!!! Tanto tiempo. Cómo estás?
Viky- Leo. Bien. Que alegría verte. Yo sabía que la vida nos iba a volver a cruzar...
Nos abrazamos. Hablamos unos minutos de la vida y resulta que vivíamos en la misma ciudad. Nos pasamos nuestros números y nos despedimos.
Llegué a mí casa. Compartí un rato con mí mujer, cenamos y a la cama... Juro por Dios que esa noche a mí mujer la disfruté como nunca. Cerré los ojos y me deje llevar... Pensando... Imaginando... Me prendí de sus pechos y empecé a mojar mis dedos en su conchita. Cuando sentí que estaba empapada la puse en cuatro, cerré los ojos y la cogí con tantas ganas que casi se me escapa el nombre de mí ex...
Al despertar ya estaba solo en casa. En mí celular tenía un mensaje de "Buenos días". Si. Era ella. Viky. Empezamos a hablar y me dice que en su casa tiene un consultorio en el cual hace masajes y que de 10 a 13 hs no tenía ningún turno, que estaba aburrida...
Leito- Que pena que no pueda ir. Sino encantado iría hacerte compañía o que me hagas masajes
Viky- cuál es el problema? Acá no te conoce nadie. Si querés podes venir...
No alcance a terminar de leer su mensaje que ya estaba saliendo para allá... Era mí día de franco, tenía todo el día libre hasta las 18hs que mí mujer llegará. Me pasó la dirección y allá fui.
Entre a su consultorio. Lo primero que pregunte fue por su marido, y dijo que trabajaba hasta las 22hs. Tranquilo leito... Tomamos unos mates y nos reímos de viejas anécdotas. Me invitó a la camilla para hacerme unos masajes y que vea lo que aprendió en este tiempo... Con poca timidez saque mí remera y me quedé en boxer. Me puse boca abajo y sus manos empezaron a trabajar... Por mí espalda, por mis hombros, por mí cuello, me era imposible contener los gemidos de placer. Hasta ese momento ninguna insinuación de sexo. Pero mí pene se empezó a endurecer y mí mente a maquinar... Ella nota mí erección.
Viky- qué barbaridad. No cambias más vos. Te tocan un poco y ya estás al palo
Solo me sonreí. Y la mire con deseo. Ella me beso con sus carnosos labios y su lengua calentita. Empecé a besarla como un adolescente desesperado. Mis dos manos se pegaron a sus pechos, desabroché su camisa. Me prendí como un bebé hambriento. Jugaba con mí lengua en sus pezones y trataba de chuparle las 2 tetas a la vez. La enloquecia eso. No sé aguanto más y bajo. Ahí. Dónde dejo grandes recuerdos. La chupaba con tanto amor. Despacito. Llenándola de baba, chupando la cabecita del pene. Me acariciaba los huevos, y su dedo empezó a jugar en mí ano. Mientras me hacía garganta profunda trataba de penetrarme con su dedo. Me estaba volviendo loco hasta que termine en su boca.
Viky- chancho que sos hdp. Te extrañaba...
Leito- Yo también te extrañé mucho y mí pija también.
Nos besamos, en su boca quedaron los restos de mi semen. La puse en la camilla y la abrí de piernas como si fuera a parir. Me sumergí de cabeza y enterré mí lengua lo más profundo posible. Lamia sus labios vaginales hasta mojar su ano. Tenía una conchita bien gordita, carnosa, empapada, fue la mujer que más sentí acabar en mí vida. Con mí lengua bajaba desde su clítoris hasta su ano. Ella solo gemia con los ojos cerrados tomándome bien fuerte de los pelos. Cuándo terminó de acabar...
Viky- Haceme la cola. Extraño tu pija en mí cola hdp. Dale!!!
La pare al lado de la camilla y la recosté su pecho sobre ella. Todo su culito parado a mí disposición. Me mordí los labios. Salibe su ano. Solo apoye la cabecita y sus gemidos eran impresionantes. Empecé a hundirla despacito y su cara se desfiguraba de placer...
Viky- Me encanta amor. Así.. cógeme. Así...
Yo tranquilo. Disfrutando el momento. Empujaba despacito mirando como entraba y salía. Con mí mano empecé a acariciar su conchita mientras le hacía la cola. Para suerte de ella yo no podía acabar. Ella se puso la 10 y me hizo un pete-turca. Con mis dos manos en su cabeza la sometía. Éramos un solo gritó de placer hasta dejar sus tetas chorreando de semen. Ella se lamió sus pechos y me dijo volvé pronto hdp... Continuará...
Relato real. COMENTEN. Dejen puntos. Gracias por leerme. SEGUIME hay más historias por contar...
8 comentarios - Reencuentro con mí ex.