Como todos los relatos estan basados en mis fantasías.
Las horas pasaron, con mi novio y sus estuve mirando TV, decidí irme a mi cuarto, tirada en la cama me quede dormida mirando una película. Ellos tomaron más de la cuenta, mi novio se puso ebrio, le vino sueño y se durmió. Yo ni me entere, en mi dormitorio, durmiendo tirada en la cama, semi desnuda. Sus amigos comprobaron que mi novio dormía profundamente, fueron a la pieza y entraron. Me ataron las manos y me empezaron a manosear, de pronto uno me la mete en mi concha y era tan grande que me desperté, no me dieron tiempo a gritar que otro me la metió en la boca, no podía ver de lo oscuro que estaba, así estuvieron un buen rato. Me giraron, me pusieron en cuatro, haciéndome probar sus pijas en mi boca, mientras uno me ensartaba desde atrás y al terminar otro pasaba y así sucesivamente. Me la estuvieron metiéndola por varías horas seguidas hasta el hartazgo y se fueron. Cuando despierto estaba mi novio al lado y me entrega una plata, era la que le habían dado sus amigos por cojerme. El finde siguiente paso lo mismo pero con mi novio como espectador, me cogian sin parar cada finde semana, ya sea sus amigos, conocidos, compañeros de trabajó. Era tal las cojidas que quedaba tremendamente floja, hacíandome doble vaginal y oral
Una noche se reuniría con unos viejos compañeros de la secundaria, charlando, bebiendo. Casi era medianoche cuando todos estaban muy ebrios, uno me agarró bruscamente, se abalanzo sobre mi sometiéndome sus manos me empezaron a manosear y a decirme que esa noche sería la putita del grupo como cada noche, mi novio le había comentado en una fiesta del reencuentro a sus ex compañeros lo que sucedía cada finde, me apretaban y mamaban bruscamente las tetas, sacan sus pijas y sin mediar palabra uno por uno me la mete de golpe, me embestian una y otra vez hasta que finalmente eyaculaban dentro de mi, termine adolorida y llena de sus semen.
Habíamos ido a cenar afuera y yo estaba en el baño de discapacitados y de pronto llega alguien detrás mío, era el dueño del lugar, tapandome la boca con una cinta adhesiva, me ato las manos dejandome inmóvil. Me la metió de una en la concha, me la metia y sacaba tan rápido que me hacía vibrar todo mi cuerpo, mientras me penetraba con su pollón fuertemente y besaba mi cuello y senos hasta luego de un buen rato soltó su semen dentro mi vagina y me la sacó, me inyectó un sedante, al instante caí inconsciente en el piso. Los mozos entraron, el lugar había cerrado, me pellizcaban los pezones y me retorcían las tetas.
-Que buena que está, alta enfiestada le vamos a dar entre todos
Me comían la concha como locos, pasando la lengua, succionando, sacaron sus pijas y empezaron a follarme la boca y la concha salvajemente hasta acabar, me la metían hasta la garganta, hasta el fondo de mi concha, bien ensartada, uno tenía una pija descomunal que sin piedad me la metió de golpe haciendo que me despertara sin poder gritar por tener la boca tapada, me cojia de la cintura y me la metia hasta el final en un mete y saca que más parecía una taladradora que una follada. Otros me golpeaban los pechos y la cola y le decían:
-Dale duro, dale duro a esa putita, destrozala
Me seguía dando con su tremenda polla. El tronco de la pija era tres veces el tamaño agujero por donde había entrado y no paraba de meter y sacar, la pija del dueño era grande pero esta aún más, me empalaba tirando de mi cintura hacia él con brusquedad.
- Que concha más estrecha que tienes. Te voy a llenar de semen puta
La tremenda velocidad de la follada duro un buen rato hasta acabar en una corrida profunda. Otro me agarra y me la mete tmb, yo estaba despierta pero muy débil, me incrustaba la pija hasta el fondo, me golpeaba las tetas a dos manos, yo soltaba quejidos apagados por el bozal que me habían puesto, como una fiera me cojia hasta que acabo. Otro también empezo reventarme la concha, me la introducia sin piedad, era una cojida brutal las embestidas que me daba, me estaban rompiendo, acabo y salió, el de la pija descomunal me la metió en la boca y empezó a follarme por ahi, después de llenarme la concha de leche ahora era el turno de mi boca aunque eso no impedía que me sugieran dando por mi concha dolorida y destruida, me sodomizanron toda la noche, incluso me compartieron con indigentes que pasaban buscando restos de comida y terminaban cogiéndome como postre. Incluso en un momento vi como entraban dos pijas los mozos empujaban para que entraran enteras.
- Le caben dos pijas, que bárbaro, que buena puta es tu novia
Mi novio había visto todo y nuevamente me había vendido está vez al dueño y empleados del lugar. Sus pijas no dejaban de entrar bien profundas y en todas las posiciones imaginables. Yo seguia inmóvil y sin fuerzas por la terrible cojida que recibía hace horas, no dejaba de recibir pollas con movimientos violentos, me ahogaban, llegue a comerme tres pijas por turnos tanto en mi concha como en mi boca, el dueño repitió varias veces junto con el de la pija descomunal, bombeaban con furia hasta llenarme de sus corridas
Las horas pasaron, con mi novio y sus estuve mirando TV, decidí irme a mi cuarto, tirada en la cama me quede dormida mirando una película. Ellos tomaron más de la cuenta, mi novio se puso ebrio, le vino sueño y se durmió. Yo ni me entere, en mi dormitorio, durmiendo tirada en la cama, semi desnuda. Sus amigos comprobaron que mi novio dormía profundamente, fueron a la pieza y entraron. Me ataron las manos y me empezaron a manosear, de pronto uno me la mete en mi concha y era tan grande que me desperté, no me dieron tiempo a gritar que otro me la metió en la boca, no podía ver de lo oscuro que estaba, así estuvieron un buen rato. Me giraron, me pusieron en cuatro, haciéndome probar sus pijas en mi boca, mientras uno me ensartaba desde atrás y al terminar otro pasaba y así sucesivamente. Me la estuvieron metiéndola por varías horas seguidas hasta el hartazgo y se fueron. Cuando despierto estaba mi novio al lado y me entrega una plata, era la que le habían dado sus amigos por cojerme. El finde siguiente paso lo mismo pero con mi novio como espectador, me cogian sin parar cada finde semana, ya sea sus amigos, conocidos, compañeros de trabajó. Era tal las cojidas que quedaba tremendamente floja, hacíandome doble vaginal y oral
Una noche se reuniría con unos viejos compañeros de la secundaria, charlando, bebiendo. Casi era medianoche cuando todos estaban muy ebrios, uno me agarró bruscamente, se abalanzo sobre mi sometiéndome sus manos me empezaron a manosear y a decirme que esa noche sería la putita del grupo como cada noche, mi novio le había comentado en una fiesta del reencuentro a sus ex compañeros lo que sucedía cada finde, me apretaban y mamaban bruscamente las tetas, sacan sus pijas y sin mediar palabra uno por uno me la mete de golpe, me embestian una y otra vez hasta que finalmente eyaculaban dentro de mi, termine adolorida y llena de sus semen.
Habíamos ido a cenar afuera y yo estaba en el baño de discapacitados y de pronto llega alguien detrás mío, era el dueño del lugar, tapandome la boca con una cinta adhesiva, me ato las manos dejandome inmóvil. Me la metió de una en la concha, me la metia y sacaba tan rápido que me hacía vibrar todo mi cuerpo, mientras me penetraba con su pollón fuertemente y besaba mi cuello y senos hasta luego de un buen rato soltó su semen dentro mi vagina y me la sacó, me inyectó un sedante, al instante caí inconsciente en el piso. Los mozos entraron, el lugar había cerrado, me pellizcaban los pezones y me retorcían las tetas.
-Que buena que está, alta enfiestada le vamos a dar entre todos
Me comían la concha como locos, pasando la lengua, succionando, sacaron sus pijas y empezaron a follarme la boca y la concha salvajemente hasta acabar, me la metían hasta la garganta, hasta el fondo de mi concha, bien ensartada, uno tenía una pija descomunal que sin piedad me la metió de golpe haciendo que me despertara sin poder gritar por tener la boca tapada, me cojia de la cintura y me la metia hasta el final en un mete y saca que más parecía una taladradora que una follada. Otros me golpeaban los pechos y la cola y le decían:
-Dale duro, dale duro a esa putita, destrozala
Me seguía dando con su tremenda polla. El tronco de la pija era tres veces el tamaño agujero por donde había entrado y no paraba de meter y sacar, la pija del dueño era grande pero esta aún más, me empalaba tirando de mi cintura hacia él con brusquedad.
- Que concha más estrecha que tienes. Te voy a llenar de semen puta
La tremenda velocidad de la follada duro un buen rato hasta acabar en una corrida profunda. Otro me agarra y me la mete tmb, yo estaba despierta pero muy débil, me incrustaba la pija hasta el fondo, me golpeaba las tetas a dos manos, yo soltaba quejidos apagados por el bozal que me habían puesto, como una fiera me cojia hasta que acabo. Otro también empezo reventarme la concha, me la introducia sin piedad, era una cojida brutal las embestidas que me daba, me estaban rompiendo, acabo y salió, el de la pija descomunal me la metió en la boca y empezó a follarme por ahi, después de llenarme la concha de leche ahora era el turno de mi boca aunque eso no impedía que me sugieran dando por mi concha dolorida y destruida, me sodomizanron toda la noche, incluso me compartieron con indigentes que pasaban buscando restos de comida y terminaban cogiéndome como postre. Incluso en un momento vi como entraban dos pijas los mozos empujaban para que entraran enteras.
- Le caben dos pijas, que bárbaro, que buena puta es tu novia
Mi novio había visto todo y nuevamente me había vendido está vez al dueño y empleados del lugar. Sus pijas no dejaban de entrar bien profundas y en todas las posiciones imaginables. Yo seguia inmóvil y sin fuerzas por la terrible cojida que recibía hace horas, no dejaba de recibir pollas con movimientos violentos, me ahogaban, llegue a comerme tres pijas por turnos tanto en mi concha como en mi boca, el dueño repitió varias veces junto con el de la pija descomunal, bombeaban con furia hasta llenarme de sus corridas
2 comentarios - Mi novio, mi vendedor parte 1