Hace un par de años me envicié en el grindr, y siempre buscaba chicos para pasarla bien, cómo pueden ver en mis fotos soy un chico con muy buen culo además de ser simpático, cierto domingo estaba muy excitado y no había nadie con quien pasar el rato, solo curiosos, hasta que me habló un señor, me dijo que tenia 56 años y que vivía relativamente cerca a donde yo vivía, me mando algunas fotos, en la cuales pude ver su apariencia, algo feo, no muy arrugado, tampoco canoso, pero con una buena pieza entre sus piernas, gruesa y carnosa como me gustan, eso fue lo que me convenció de visitarlo, además de que me dijo que vivía solo, así que pedí un taxi aplicativo antes que sea más tarde, ya que el lugar por dónde vivía era nuevo para mi y considerado algo peligroso, cuando llegue a la zona tuve que bajar antes debido a que había una reja que no dejaba pasar a la calle, así que decidí caminar y llegue al punto, había una tienda donde había algunas chicas que me quedaron mirando, cómo les dije soy simpático y siempre me pasa, pero a lado de la tienda había una puerta con una escalera y en ella estaba parado un señor, en persona era más feo de lo que se veía en las fotos, pero ya estaba allí, así que le dije su nombre y subimos mientras las chicas nos miraban, llegamos a un segundo piso donde había un restaurant que estaba sin operar por la hora, y una puerta la cual daba a su departamento, me hizo pasar, era un departamento pequeño de un solo ambiente y baño, con una ventana grande que daba para el patio y otras casas, para no tener problemas le pedí que me prestara su baño para asearme nuevamente por si acaso, como siempre estaba muerto de nervios y su personalidad no ayudaba mucho era bastante callado, solo me comentó que era profesor de matemática, Lugo de terminar a asearme salí y el estaba en su computadora haciendo unos ejercicios de matemática para sus chicos, luego se acercó a mi y me quiso besar, le dije que no daba besos, ya que dentro de mi no me parecía nada atractivo, así que me comenzó a tocar, me besaba el cuello, luego su mano toco mis nalgas por encima del pantalón, me hizo pegarme a él y lo abracé y empecé a besar su cuello, luego me bajo el pantalón y la ropa interior, me había puesto un hilo que me hacía ver muy sexy, se sorprendió vi el tamaño de mis nalgas y empezó a acariciar mi culo, empecé a tocarle el trozo y luego me quito completamente toda la ropa, y el se desnudó completamente, nos tiramos a la cama con la ventana y cortinas abiertas, pero con la Liz apagado, solo se percibían nuestras siluetas, me subí encima de el en posición de 69 y le empecé a chupar el pene, era bastante grueso, sabía delicioso, mientras el me lamía el culo hasta el fondo, para ese momento yo estaba demasiado excitado pero note que el no lograba empalmarse, así que le pregunté si todo estaba bien, y me dijo que a él le gusta besar, que eso lo excitaba, así que me tomo a la fuerza y me beso, metió su lengua dentro de mi boca y me encantó, empecé a chupar su lengua mientras le tocaba el pene y el mi culo, fue tanta excitación la mía que me vine automáticamente, manchando su cama, así que paramos un momento, y después de unos 5 minutos me tomo nuevamente y empezó a besarme deliciosamente como un salvaje, yo tomé su verga y me la metí nuevamente a la boca, estaba tan dura que a las justas entraba, era enrome y deliciosa, emanaba los fluidos pre seminales que los lamía y me los tomaba hasta la última gota, luego me puso en cuatro, me puso un poco de lubricante en el culo y me metió despacio, hasta el fondo, me bombeaba como un salvaje, y yo me sentía una puta completamente, ya que de otras casas se podía ver cómo me estaban rompiendo mi culito, eso me excitaba más y a él también, luego de eso me dijo si quería hacer algo excitante, le dije que si, me dijo que vayamos a follar al restaurante, el cual estaba vacío sin embargo la puerta de la calle estaba abierta, le dije que ya, así que totalmente desnudos salimos y nos pusimos en un rincón donde había una ventana grande que daba hacía la calle, me apoyó contra la ventana, el se puso por detrás y me empezó a culear mientras la gente pasaba por la calle, y de otras casas se podía ver, algunas veces nos miraron pero se daban vuelta rápidamente, eso me encantaba, después de casi media hora de bombeo me puso en cuatro en el piso y me penetro como una perrita, estábamos Yam metidos en lo nuestro que no prestábamos atención al peligro que había, luego escucho unas voces que se acercaban, eran las dos de las tres chicas de la tienda que estaban subiendo, ya no podíamos escondernos ni regresar ya que la puerta del departamento estaba frente a la escalera, así que decidimos hacernos los locos y seguir follando, veo cómo las chicas suben, y ven como me estaban follando, eso me puso más caliente, ellas se asustaron, pero hicimos como que nada pasara y le dije que me culee más fuerte mientras ellas miraban anonadadas, se dieron media vuelta y se fueron rápido, en ese momento sentí como chorros calientes de semen inundaban mi ano, justo cuando también me corrí nuevamente, nos paramos y nos fuimos rápido al cuarto para limpiarnos, me cambien y regrese a mi casa sin haber botado ni una gota del semen que tenía dentro de mi culo, cuando llegue a casa bote un poco en mi mano para poder saborear la deliciosa leche de ese viejo feo que me hizo sentir una perra, después de esa vez frecuentaba al viejo siempre para que me haga sentir una perra y me de unas buenas folladas, y todos allí ya sabían a lo qué venían, sobre todo las chicas, que ya no me miraban igual.
2 comentarios - Mi encuentro con un maduro dotado.