Soy Beatriz, junto con mi amiga Edith íbamos a viajar a República Dominicana, a conocer, pero por enfermedad de ella, al tener pagado el viaje no se podía solicitar el reintegro, tuve que viajar sola, con habitación doble, así lo hice, el primer día fue espléndido, a día siguiente estando en la playa, decidí tomar una sesión de masajes, ya que era brindado por personal femenino, lo estaba realizando cuando una de las mujeres que masajea, me ofreció si quería tener sexo con una persona del otro sexo, por cierta cantidad de dinero lo podía hacer, me sorprendió lo que me decía, le contesté que lo iba a pensar, pero como se decidía elegir con quien tenerlo, respondiendo me, lo hacemos pasar y ud. decide, si quiere los hago pasar, ud. los ve y decide, lo pensé no muy decidida, pues no se me había cruzado nunca esa idea, pero ingresaron cuatro hombres, de color negro tres eran jóvenes entre 25 a 40 años y otro de mucha más edad, mostraron su cuerpo, el torso desnudo y un pantalón blanco, donde se notaban sus atributos, yo no dije nada, Janeth que era el nombre de la masajista, me dijo, yo me quedaría con Cesareo, el mayor que tiene 62 años y su miembro es bastante grande, MMM yo tengo 56 así que jaja ja, bien a ver lo quiero ver así decido entonces, fue lo buscó se paró no tenía un cuerpo atlético, pero estaba pasable, cuando se bajó el pantalón, quedé sorprendida era un pene impresionante
Le puse mi mano, y dije esto me va a destrozar, es de un caballo lo que tengo en mi mano, no mi señora si me acepta la voy a hacer disfrutar, pensé un rato y le dije bueno, como es la situación, ud. me dice la habitación y la hora que quiera que vaya, y arreglamos el tiempo y el dinero, bien le dije, a las 21,30 en la habitación 3169, te espero, me fui a la playa, pasé la tarde pensando en la noche, me arrepentí varias veces, cené temprano, fui a mi habitación, me preparé, llegó la hora, puntualmente estaba, pasó a la habitación, un hombre negro de pelo cano, tenía un rico olor a perfume mentolado, eso me gustó, se paró delante mío, le pedí que me mostrara su miembro, así lo hizo quedé extasiada por lo grande
Me arrodillo, me desvestir, el también lo hizo, me abrazó su cuerpo era muy grande, el mío también voluptuosa, comenzamos a besarnos acariciarnos, me dijo que me apoyara con mis dos brazos sobre una mesa, que abriera las piernas, que me iba a penetrar por la vagina, así lo hice y......
Con una muy buena lubricación y suavidad me introdujo su inmensa verga, gritando muevete mi puta blanccavas a saber lo que es cojer con este negro semental, así lo hice terminé tantas veces, luego nos tiramos en el piso donde me hizo sentir el grueso de su pene, que era una delicia
Estuvimos, bastante tiempo, hasta que decidí hacerle sexo oral, el se puso encima mío, con su pene en medio de mis senos lo hice
Ya casi extenuada de chupar ese gran pedazo de carne, Cesareo se sentó en la cama con su pene bien parado, puso mi trasero en su cara, me levantó ubicó su pija en la puerta de mi vagina y la introdujo hasta el final, allí comencé a cabalgar y a tener muchísimos orgasmos
Así estuvimos hasta las 7 de la mañana, le pagué sus dólares, me dijo que fue la mejor noche de su vida, pues le había aguantado su gran verga, sin quejarme, me pregunto si quería que todas las noches tuviésemos sexo, que no me cobraría, le dije que si, fueron después 7 días seguidos de placer entre los dos hasta que me vine
Le puse mi mano, y dije esto me va a destrozar, es de un caballo lo que tengo en mi mano, no mi señora si me acepta la voy a hacer disfrutar, pensé un rato y le dije bueno, como es la situación, ud. me dice la habitación y la hora que quiera que vaya, y arreglamos el tiempo y el dinero, bien le dije, a las 21,30 en la habitación 3169, te espero, me fui a la playa, pasé la tarde pensando en la noche, me arrepentí varias veces, cené temprano, fui a mi habitación, me preparé, llegó la hora, puntualmente estaba, pasó a la habitación, un hombre negro de pelo cano, tenía un rico olor a perfume mentolado, eso me gustó, se paró delante mío, le pedí que me mostrara su miembro, así lo hizo quedé extasiada por lo grande
Me arrodillo, me desvestir, el también lo hizo, me abrazó su cuerpo era muy grande, el mío también voluptuosa, comenzamos a besarnos acariciarnos, me dijo que me apoyara con mis dos brazos sobre una mesa, que abriera las piernas, que me iba a penetrar por la vagina, así lo hice y......
Con una muy buena lubricación y suavidad me introdujo su inmensa verga, gritando muevete mi puta blanccavas a saber lo que es cojer con este negro semental, así lo hice terminé tantas veces, luego nos tiramos en el piso donde me hizo sentir el grueso de su pene, que era una delicia
Estuvimos, bastante tiempo, hasta que decidí hacerle sexo oral, el se puso encima mío, con su pene en medio de mis senos lo hice
Ya casi extenuada de chupar ese gran pedazo de carne, Cesareo se sentó en la cama con su pene bien parado, puso mi trasero en su cara, me levantó ubicó su pija en la puerta de mi vagina y la introdujo hasta el final, allí comencé a cabalgar y a tener muchísimos orgasmos
Así estuvimos hasta las 7 de la mañana, le pagué sus dólares, me dijo que fue la mejor noche de su vida, pues le había aguantado su gran verga, sin quejarme, me pregunto si quería que todas las noches tuviésemos sexo, que no me cobraría, le dije que si, fueron después 7 días seguidos de placer entre los dos hasta que me vine
2 comentarios - Me divertí en el caribe