La revista donde trabajo me había mandado a Ibiza a hacer unas fotos en un evento. Gracias a las redes sociales me enteré de que mi amiga Gema E, estaba allí también. No tarde en llamarla y al saber que estaba sola sin su cornudo marido, al estar también por trabajo, quedamos esa misma tarde.
Fui a su hotel y al abrir la puerta de la habitación allí estaba ella, tan guapa como siempre, con un bikini halter, azul, con una anilla uniendo la zona de los pechos y nudos en espalda y cuello. La braga era negra. Nos dimos un buen besazo y nos agarramos bien de los culos. Pase dentro y esta me llevo a la terraza donde tenía una piscina con unas impresionantes vistas al mar.
Nos metimos dentro y comenzamos a charlar mientras tomábamos algo y nos acariciábamos, sentados en las escaleras. Poco a poco nos fuimos calentando y los besos eran más a menudo. Comencé a besarla el cuello y bajé hasta besarla el interior de sus ricos pechos operados. Gema se sentó sobre mí y comenzó a mover su culazo poniéndome a mil. Seguí besándola el cuello y mis manos comenzaron a acariciar sus pechos. Una de ellas fue bajando hasta llegar a su coño. Se lo acaricie por encima de la braga, pero no tarde mucho en meter mi mano y empezar a masturbarla. Mi otra mano acariciaba fuerte sus redondas y operadas tetas.
Gema se volvió a poner a mi lado, de rodillas y comenzamos a besarnos. Mi mano volvió a meterse dentro de su braga, continuando la masturbación. Ella me bajo el bañador, sacando mi polla y masturbándome. Cuando la tuve durísima, me levanté para poder ponerme un condón y volví a sentarme dentro del agua. Gema se quitó la braga y se sentó sobre mí. Metí mi polla en su coño y comenzamos a follar. Nos besábamos bien calientes y acariciaba sus muslazos. Subí mis manos acariciando sus tetas. Agarre la anilla del bikini y tire de ella, pudiendo ver un poco de sus pezones. La desabroché el nudo de la espalda y metí mis manos por debajo del bikini. Follábamos más rápido mientras jugaban mis pulgares con sus duros pezones.
De vez en cuando apretaba bien sus tetas y se la clavaba más a fondo, soltando esta un buen gemido. Gema se quitó el bikini y la comí las tetas. De vez en cuando se las mordía y las apretaba contra mi cara. Gema cambio mi polla a su culo y se lo folle, mientras seguía disfrutando de sus tetas de silicona.
Bajamos de la escalera y nos fuimos al bordillo contrario, donde estaban las increíbles vistas al mar. Coloqué a Gema mirándolas y me puse a su espalda. Abrí sus piernas y volví a follarla el culo. Acariciaba sus tetas mientras fantaseábamos con follar en uno de esos barcos que veíamos al fondo. Fui cambiando de agujero follándola también el coño varias veces.
Gema se giró y la seguí follando culo y coño contra el bordillo. Nos besábamos y la comía las tetas mientras acariciaba su culo y piernas. Cuando iba a correrme volvimos a las escaleras. Me senté en una donde mi polla quedaba fuera del agua. Gemma se colocó a gatas al lado y comenzó a comerme la polla con su rica boquita, tras quitarme el condón. Mi mano acaricio su culazo, para acabar bajando y meter mi dedo gordo en su coño, para masturbarla. Gema se corrió antes que yo y cuando paso, comenzó a comérmela más rápido hasta que me corrí llenándola la boca. Esta se tragó mi semen y me dejo la polla bien limpia.
Nos quedamos dentro del agua dándonos un baño y nadando un poco, metiéndonos mano evidentemente. Gema salió del agua y fue dentro de la habitación. Salió con una botella de champagne. Sirvió 2 copas y volvimos a sentarnos en el bordillo a brindar y tomárnoslas.
Nos besábamos constantemente. Cuando terminamos la copa, Gema salió por la botella, momento que aproveché para darla un azote. Volvió a sentarse, lleno las copas y volvimos a brindar. Tras un par de sorbos, eche algo de mi champagne por sus tetas, que estaban fuera del agua, agache la cabeza y comencé a lamérselas. Gema salió del agua y se sentó en una tumbona. Se abrió de piernas y comenzó a verter liquido por su coño desde su copa. Eso unido a su mirada de zorra, hizo que me acercara inmediatamente. Tras darla un besazo, me arrodillé entre sus piernas y comencé a comerla el coño. Mi lengua se movía más rápido, según ella iba echándose más champagne. Mis manos acariciaban sus muslos.
Me levante y me acerque, poniéndola mi polla en la cara. Lo roció de champagne y comenzó a mamármela. Estire una de mis manos para acariciarla uno de sus pechos. Cuando la tuve bien dura, la levante y me tumbé en la tumbona. Gema lo hizo sobre mi y comenzamos un rico 69. Mis manos acariciaban su culazo y sus muslos. Gema se levanto y me puso un condón. Se sentó sobre mí, mirándome y se metió mi polla en el coño. Comenzó a bajar despacio sintiendo bien como entraba dentro de su mojado coño. Comenzó a hacer círculos despacito, sintiéndonos muy conectados, con mi polla bien dentro de ella. mis manos acariciaban sus piernas. Cuando empezó a dar saltitos mis manos fueron subiendo hasta llegar a agarrar sus tetas.
Gema se cambio mi polla de agujero y siguió dando saltitos con ella en su culo. Mis manos apretaban con mas fuerza sus ricas tetas, hasta que esta se inclino y, tras besarnos, comencé a comérselas.
La follé el culo hasta que me corrí dentro de él. Entonces, Gema, se volvió a tumbar sobre mí, con su coño en mi boca. Me quito el condón y volvimos a hacer un 69. Ella para limpiarme la polla y yo para hacerla que se corriera en mi boca.
Volvimos al agua donde terminamos de tomarnos la botella y seguimos besándonos, acariciándonos y charlando, hasta que me tuve que ir.
Fui a su hotel y al abrir la puerta de la habitación allí estaba ella, tan guapa como siempre, con un bikini halter, azul, con una anilla uniendo la zona de los pechos y nudos en espalda y cuello. La braga era negra. Nos dimos un buen besazo y nos agarramos bien de los culos. Pase dentro y esta me llevo a la terraza donde tenía una piscina con unas impresionantes vistas al mar.
Nos metimos dentro y comenzamos a charlar mientras tomábamos algo y nos acariciábamos, sentados en las escaleras. Poco a poco nos fuimos calentando y los besos eran más a menudo. Comencé a besarla el cuello y bajé hasta besarla el interior de sus ricos pechos operados. Gema se sentó sobre mí y comenzó a mover su culazo poniéndome a mil. Seguí besándola el cuello y mis manos comenzaron a acariciar sus pechos. Una de ellas fue bajando hasta llegar a su coño. Se lo acaricie por encima de la braga, pero no tarde mucho en meter mi mano y empezar a masturbarla. Mi otra mano acariciaba fuerte sus redondas y operadas tetas.
Gema se volvió a poner a mi lado, de rodillas y comenzamos a besarnos. Mi mano volvió a meterse dentro de su braga, continuando la masturbación. Ella me bajo el bañador, sacando mi polla y masturbándome. Cuando la tuve durísima, me levanté para poder ponerme un condón y volví a sentarme dentro del agua. Gema se quitó la braga y se sentó sobre mí. Metí mi polla en su coño y comenzamos a follar. Nos besábamos bien calientes y acariciaba sus muslazos. Subí mis manos acariciando sus tetas. Agarre la anilla del bikini y tire de ella, pudiendo ver un poco de sus pezones. La desabroché el nudo de la espalda y metí mis manos por debajo del bikini. Follábamos más rápido mientras jugaban mis pulgares con sus duros pezones.
De vez en cuando apretaba bien sus tetas y se la clavaba más a fondo, soltando esta un buen gemido. Gema se quitó el bikini y la comí las tetas. De vez en cuando se las mordía y las apretaba contra mi cara. Gema cambio mi polla a su culo y se lo folle, mientras seguía disfrutando de sus tetas de silicona.
Bajamos de la escalera y nos fuimos al bordillo contrario, donde estaban las increíbles vistas al mar. Coloqué a Gema mirándolas y me puse a su espalda. Abrí sus piernas y volví a follarla el culo. Acariciaba sus tetas mientras fantaseábamos con follar en uno de esos barcos que veíamos al fondo. Fui cambiando de agujero follándola también el coño varias veces.
Gema se giró y la seguí follando culo y coño contra el bordillo. Nos besábamos y la comía las tetas mientras acariciaba su culo y piernas. Cuando iba a correrme volvimos a las escaleras. Me senté en una donde mi polla quedaba fuera del agua. Gemma se colocó a gatas al lado y comenzó a comerme la polla con su rica boquita, tras quitarme el condón. Mi mano acaricio su culazo, para acabar bajando y meter mi dedo gordo en su coño, para masturbarla. Gema se corrió antes que yo y cuando paso, comenzó a comérmela más rápido hasta que me corrí llenándola la boca. Esta se tragó mi semen y me dejo la polla bien limpia.
Nos quedamos dentro del agua dándonos un baño y nadando un poco, metiéndonos mano evidentemente. Gema salió del agua y fue dentro de la habitación. Salió con una botella de champagne. Sirvió 2 copas y volvimos a sentarnos en el bordillo a brindar y tomárnoslas.
Nos besábamos constantemente. Cuando terminamos la copa, Gema salió por la botella, momento que aproveché para darla un azote. Volvió a sentarse, lleno las copas y volvimos a brindar. Tras un par de sorbos, eche algo de mi champagne por sus tetas, que estaban fuera del agua, agache la cabeza y comencé a lamérselas. Gema salió del agua y se sentó en una tumbona. Se abrió de piernas y comenzó a verter liquido por su coño desde su copa. Eso unido a su mirada de zorra, hizo que me acercara inmediatamente. Tras darla un besazo, me arrodillé entre sus piernas y comencé a comerla el coño. Mi lengua se movía más rápido, según ella iba echándose más champagne. Mis manos acariciaban sus muslos.
Me levante y me acerque, poniéndola mi polla en la cara. Lo roció de champagne y comenzó a mamármela. Estire una de mis manos para acariciarla uno de sus pechos. Cuando la tuve bien dura, la levante y me tumbé en la tumbona. Gema lo hizo sobre mi y comenzamos un rico 69. Mis manos acariciaban su culazo y sus muslos. Gema se levanto y me puso un condón. Se sentó sobre mí, mirándome y se metió mi polla en el coño. Comenzó a bajar despacio sintiendo bien como entraba dentro de su mojado coño. Comenzó a hacer círculos despacito, sintiéndonos muy conectados, con mi polla bien dentro de ella. mis manos acariciaban sus piernas. Cuando empezó a dar saltitos mis manos fueron subiendo hasta llegar a agarrar sus tetas.
Gema se cambio mi polla de agujero y siguió dando saltitos con ella en su culo. Mis manos apretaban con mas fuerza sus ricas tetas, hasta que esta se inclino y, tras besarnos, comencé a comérselas.
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Volvimos al agua donde terminamos de tomarnos la botella y seguimos besándonos, acariciándonos y charlando, hasta que me tuve que ir.
0 comentarios - Gema me entretiene un viaje de trabajo