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Daniela y su vecino 3

que rica conchita que te gastas putita…srrrpppsss….tan suavecitaaaaa… Srpsssschtss…tan rosaditaaa…srrrpsssss -- le decía sin poder parar de lamerle toda su vagina
Daniela y su vecino 3

Daniela por su parte empezó con unos pequeños besitos a la cabeza y a los testículos, pronto empezó a aumentar el ritmo y los besos se convirtieron en lamidas como si de una paleta se tratase, motivada por las pequeñas y placenteras mordidas en sus zonas más sensibles y es que para hacer un buen sexo oral a una mujer es todo un arte, para su buena suerte la vejete tenía bastante experiencia y sabía que lugares lamer, meter lengua o darles suaves mordiscos
la joven sentía tanto placer que abrió su boca y el miembro del viejo se abrió paso haciendo que le dé arcadas por lo repentino que fue, pero luego se recompuso y motivada por lo bien que la hacía sentir el viejo allí abajo empezó a mamarle la verga lo mejor que pudo.
puta

A estas alturas Daniela ya había comenzado a menear sus caderas producto de las ricas sensaciones que estaba sintiendo, el viejo sofá en el que estaban acostados rechinaba por cada mínimo movimiento que ellos hacían
--MMMmmm…OOHhhh…nfsssss!… nfsssss!!… nfssss!!! -- eran los gemidos, más la sonora respiración de Daniela por lo bien que era tratada allí abajo.
--Te gusta verdad pendejaaaaa!! -- le consultaba el viejo entre jadeos
--Siiiiiii…!!, le confirmaba la caliente universitaria
-¿quien te lo chupa mas rico ha? ¿Yo o tu noviecito?
--ahhhh ahhhh ufff usteeeed…usted es mas puerco y eso…eso me encanta ufff
La felación mutua, mientras el viejo pasaba su lengua hasta llegar a los alrededores de su virginal ano, la jovencita continuaba y le encantaba estar con la boca llena de esa gruesa verga, las abundantes cantidades de salivas y babas que caían mescladas con otros tipos de líquidos que provenían desde el interior de la enorme verga del hombre, llegaban hasta sus pechos donde ella misma se encargaba de desparramárselas con sus dos manos por todas sus tetas y vientre, Ahora ya succionaba y chupaba la enorme verga como desesperada, la ensalivaba y se la pasaba ella misma por toda su cara, todo lo que se había estado reprimiendo por semanas lo estaba soltando en esos momentos.
tetona

Habían pasado varios minutos, Daniela ya se había olvidado de su misión principal que era hacer eyacular al viejo, de momento solo se dejaba llevar y disfrutar las ricas sensaciones que estaba sintiendo, pero al cabo de un par de minutos más, sintió como su boquita era bombardeada por 3 poderosos chorros de semen que llenaban completamente su boquita, el viejo solo jadeaba sin gestionar ninguna palabra, como si fuera un animal. Tanto semen había llenado por completo la boquita de la universitaria, se negaba a tragárselos y con un movimiento y un gesto hizo que el viejo satisfecho se moviera y la dejara libre para dirigirse al baño a botar la semilla del anciano que estaba esparcida por toda su boca y cara.
culona

Ya en el baño, la calentura del momento había pasado, Daniela no solo se había dejado llevar y manosear por aquel acabado anciano, sino que también se la había chupado, su mente era un desastre, se sentía la peor mujer del mundo por dejarse llevar por su calentura hasta tal extremo, pero su vagina lubricada era la señal de que ella no había sido obligada sino que también era participe de este error producto de la calentura del momento, sabía que tenía que largarse de ese lugar antes de que no hubiera vuelta atrás , para su buena suerte sus leggins, zapatillas y su polo aún seguían en el baño, lo único que le faltaba era su ropa interior, desgraciadamente su brasier había sido roto por la calentura del viejo y su pequeña braga estaba totalmente mojada, no tenía tiempo para pensarlo así que se cambió rápido sin la ropa interior ,no le quedaba de otra
Por su parte el vejete se sentía en el cielo acababa de recibir la mejor mamada de su vida y esperaba continuar con la segunda parte que era hacerla suya completamente.
--oye mujer ¿lista para el segundo round?, ahora si sentirás la verga de un verdadero macho
Pero grande fue su sorpresa cuando vio a Daniela totalmente vestida
--oye oye ¿a dónde crees que vas? — le decía mientras se ponía enfrente de ella con su verga totalmente erecta nuevamente
-por favor déjeme pasar
--no te puedes ir culona, ¿no ves que la estamos pasando rico?
-déjeme pasar o gritare y todo el vecindario escuchara – amenazo la joven totalmente decidida
--¡hazlo! ¡grita! que escuchen todos, que sepan que la estoy pasando rico con la mujer más rica de toda la ciudad jajaja
-usted es un idiota nunca debí darle tanta confianza
Dicho esto, la nena se movió rápido hacia la puerta y se alejó para desgracia del viejo que no la podía seguir ya que no veía donde había tirado sus pantalones, solo pudo gritarle ofuscado
--¡sabes que esta no será la última vez que nos veamos, mujer que prueba mi verga siempre querrá repetir! ¡sé que volverás culona!
La infiel universitaria no quiso voltear a responderle, solo esperaba que sus vecinos no hubiesen escuchado, se dirigió a paso firme hacia su casa, sin percatarse del espectáculo que estaba regalando a todo hombre que se le cruzaba y es que ese polito ceñido sin brasier era una tentación para cualquier hombre ya que con cada paso se podía ver el movimiento libre de esas perfectas montañas de carne, asimismo podían ver claramente los marcados pezones de la nena, además que sin su prenda intima inferior su leggin se le metía y era inútil tratar de disimularlo
Justo en ese momento, por cosas del destino, el viejo heladero se encontraba rumbo a la plaza en la misma dirección que la jovencita como todos los días de su rutinaria y aburrida vida y cuando la sensual jovencita lo paso, era imposible no fijarse en ese imponente trasero con ese leggin apretado el cual era imposible olvidar, era la misma jovencita que hace unos días estaba en la plaza, el tamaño y el enorme trasero concordaban con lo que recordaba este horrible viejo, que sin que se diera cuenta la nena, se dedicó a seguirla desde una distancia prudente

Por su parte el viejo Rómulo si bien estaba frustrado por que se le escapo su presa que estaba ya casi entregada, sabía que pronto vería nuevamente a la nena, ya que pensaba en darle una pequeña visita pronto, sabía que tenía que pensar en la mejor manera de tener nuevamente a ese monumento de mujer en sus manos mientras veía en el suelo el brasier roto de la jovencita, lo recogió y le dio una tremenda olfateada recordando como se había merendado esos enormes globos de carne blancos, mientras lo hacía pensaba en la mejor manera de sorprenderla y hacerla suya
Luego del largo trayecto, Daniela regreso a su casa, en todo el camino nunca miro atrás, entro y cerro con fuerza la puerta, una vez adentro se apoyó en esta y se puso a recapacitar todo lo que había ocurrido , estaba molesta consigo misma, se arrepentía de haber sido tan permisiva con aquel horrible viejo, un simple juego “picaron” como ella tenía en mente se había convertido en una completa infidelidad, pensó entonces en Jorge su novio, el pobre en estos momentos seguramente se debía estar matando en él trabajo y ella no tuvo mejor idea que meterse en la casa de su vecino, darse unas buenas manoseadas y algo más.
Apenas pensó en Don Rómulo, se le vino a la mente esa tremenda herramienta que poseía, recordó como la hábil lengua de este se metió en todo su sexo y con solo una pasada llego a rincones donde su novio jamás había llegado, recordaba también lo bien que este había tratado sus senos con esa forma tan ruda y esa poca delicadeza para meterle toda la verga en su boca sin previo aviso, aún tenía en su mente como 3 potentes chorros de semen llenaron su boca, algo que ni siquiera su novio tenia permitido hacer ya que le parecía asqueroso, pero lo peor para ella es que aun tenia en su cabeza como estuvo a punto de decirle a Don Rómulo que le meta la verga y la hiciera suya en aquel viejo sofá, todos esos recuerdos la hacían renegar pero a la vez inconscientemente la volvían a poner caliente, no se había dado cuenta que ya se estaba volviendo a tocar, sin duda su cuerpo aún no se había calmado del todo dada la nueva y rica experiencia que había pasado, lo único que le quedo fue darse un largo baño para relajarse, pero aun así la calentura de su cuerpo tardo bastante en pasar.
Esa misma noche , Daniela esperaba a su novio, no había hecho la cena ni ninguna otra cosa desde que regreso a la casa, no le importaba nada , solo estaba en su sala esperándolo con una sexy camiseta transparente de color rojo con una pequeña tanga del mismo color, Dani esa noche estaba que echaba fuego, deseaba olvidarse de la experiencia que había tenido en la mañana, quería demostrarle al horrible viejo de su vecino que se equivocaba y que su novio también era un macho semental, eran casi las 9 p.m. cuando Jorge entro a la casa, agotado como todas las noches, sus ojos carentes de vida por el cansancio comenzaron a brillar al ver a su amor en esas diminutas prendas esperándolo, sintió el impulso de lanzarse sobre ella, pero su cansancio era evidente.
- hola bebé, mi amor — ­Dani enseguida recibió a Jorge con varios besos, sorprendiéndolo por lo animada y sexy que se veía hoy su bella novia.
-- hola cielo, te ves esplendida hoy
- ¿te gusta?, ¿algo más que me quieras decir? — La sexy jovencita se dio una vuelta lentamente con la esperanza de levantarle el animo a su cansadísimo amor, además quería que este le empiece a hablar sucio y que de la calentura se comporte un poco más rudo.
viejo

-- cielo tú sabes cómo me vuelve loco tu cuerpo y ese conjuntito me trae muchos recuerdos ya que fue una de las primeras lencerías que te compre, pero hoy ha sido un día bastante agotador y…
Daniela no dejo que termine de hablar, necesitaba que alguien le apague todo ese fuego y con un largo beso lo llevo a la sala y se hecho encima de él.
-- Dani, ya hablamos de esto, sabes que si vengo del trabajo no podre rendir muy bien, mejor lo dejamos para el día que me toque descansar.
- shhhh deja que mami haga todo el trabajo tu solo relájate bebé.
-- jeje hoy estas bastante juguetona, ¿acaso hoy es alguna fecha especial que me estoy olvidando?
Daniela sabía que su comportamiento no era el habitual, pero no le importaba nada, solo quería tener algo de sexo y olvidarse de este día para siempre.
- tranqui amorcito, hoy no es ninguna fecha especial, solo que hace varios días que no lo hacemos y realmente te necesito, te necesito dentro mío o ¿es que tu trabajo es más importante que yo?
A Jorge no le gustaban las comparaciones, pero tenía que admitir que había descuidado un poco a su mujer por culpa del trabajo, así que a pesar de su cansancio intento dar lo mejor de sí, Daniela por su parte, empezó a quitarse aquella camiseta de una forma lenta y sexy para que esas bellas toronjas estén a merced de su novio, cosa que el excitado joven no desaprovecho y se abalanzó sobre ella.
- ahhh eso mi amor, chúpalas, chúpalas mucho
--ufff me encantan tus pechos amor.
 -ahhh siii sigue así, ¿recuerdas hace años cuando me las tocaste en un cine?, fue la primera vez que alguien se atrevía ha hacerme eso y me gusto, me encanto como me las apretabas y luego te atreviste a bajar mi blusa para meterte una a la boca, me las chupabas muy rico, y de rato en rato hacías mucho ruido, aun cuando estaba toda esa gente, te confieso que me gustaba ese morbo de ser descubiertos.
La joven esperaba que haciéndole recordar aquellos calientes momentos, su novio se animara aún más, con bastante habilidad metió su mano dentro del pantalón de Jorge y se dispuso a masturbarlo, para su desgracia esa vez la sintió menos gruesa de lo que recordaba normalmente.
-- ufff claro que me acuerdo, aun no éramos novios cuando paso eso, ese día te comportabas tan linda e inocente, pero a la vez llevabas ese tremendo escote que era difícil verte a la cara.
- uy ¿enserio bebé? no me había dado cuenta de eso, ¿te gustaba mucho esa blusita?
-- claro que sí, me gustaría repetir aquel momento alguna otra vez — le dijo Jorge y de nuevo se volvió a apoderar de uno de los pechos.
- ¿sabes? tengo una blusa bastante parecida a la de esa vez, si gustas podemos salir uno de estos días al cine y hacer eso que tú quieres…oye y si ¿alguien nos llega a mirar?
-- pues que se ganen con el espectáculo, al final solo eso pueden hacer, mientras que yo si puedo hacer lo que quiera con ellos.
- uy bebe que travieso, ¿ósea que no te importaría si otro me mira los pechos? ¿Así sea un viejo verde?
-- no me importa cielo, incluso le haríamos un favor si un tipo así te logra ver, es más la próxima vez que salgamos quiero verte con esa blusita que me dices y ponte alguna una falda pequeña para que todos vean lo bella y coqueta que es mi mujer.
-oooh … si tú quieres eso, pues lo haremos nene.
A Daniela le gustaba como se estaba poniendo Jorge, la sola idea de salir con su novio usando algo provocativo y que todos la devoren con la mirada le estaba empezando a gustar e inconscientemente aumento las masturbadas a este.
--uffffffffffffffffff Dani más despacito con caaaaalma.
- tan solo imaginar que me estas comiendo los pechos en el cine me pone muy caliente nene.
La imaginación de Daniela empezaba a volar, por un momento se imaginó estar en un cine porno de mala muerte junto a su novio el cual se apoderaba de uno de sus pechos a vista de varios tipos de mal vivir que se morían por ser los siguientes, imaginar aquella escena la ponía más animada, así que pego más su seno izquierdo a la cara de Jorge para que se la chupara con más fuerza pero su forma de hacerlo tan suave de este, no prendía del todo a Daniela, ella quería que la tratasen más rudo así que se dedicó a masturbarlo con más ganas para animarlo a que se ponga más osado.
infiel

-vamos bebe, hazlo más fuerte, si eres bueno, hoy te dejo que acabes en mi boquita, ¿te parece? — le dijo coquetamente en su oído
Las palabras de Dani fueron demasiado para Jorge que al saber que podría por fin vaciarse en la boca de su amada hizo que perdiera el control de la situación y empezó a correrse para decepción de Daniela.
-- ufff perdón cielo, cuando escuché eso de correrme en tu boca no pude contenerme
-descuida amor, descansa, mañana lo intentaremos de nuevo – dijo la frustrada Daniela que no le quedo de otra que esperar a que se duerma Jorge e ir al baño para autosatisfacerse un par de veces.
Pasaron un par de días de aquella experiencia con su vecino, Eran ya las 7 am, el timbre sonaba insistentemente, por un momento Daniela que aún estaba acostada sin tener noción exacta de la hora pensó que se trataba de su novio que se había olvidado algo y no tenia las llaves a la mano.
Se levanto rápido de la cama y se dirigió a la puerta principal, como recién se había levantado, solo tenia puesto su sexy ropa de dormir la cual consistía en un pequeño short de algodón y un polo cortito bastante holgado ambos de color blanco.
- amor que te has olvidad…
A la sexy jovencita se le abrió los ojos al ver a Don Rómulo parado en la puerta, este vestía un terno, como si de una ocasión importante se tratase, aquel horrible sujeto tuvo la desfachatez de esperar a que Jorge saliera de la casa, para por fin acercarse y tocar el timbre insistentemente, la joven se quedó petrificada sin poder decir una palabra
-- vaya, pero que rica se ve hoy señorita Daniela ¿me extraño? — dijo el viejo con total frescura mientras recorría con la vista el escultural cuerpo de la joven perdiéndose en el escote que se formaba producto de lo holgado que era el polo de algodón.
- uuusted… ¿qué hace acá? — Tartamudeo un poco la preocupada joven
-- ¿pero qué clase pregunta es esa?, Obviamente he venido a visitar a mi nalgona favorita, aprovechando que el cornudito ese ya se fue a su trabajo.
- por favor no diga nada más, usted es un sinvergüenza y está muerto para mí, así que váyase
La nena sin esperar la respuesta del viejo, procedió a cerrar la puerta, pero Don Rómulo rápidamente puso el pie para que la joven no pudiera cerrarla
-- uy pero que feas formas de tratar son esas, pensé que después de aquel día nos habíamos vuelto un poco más íntimos.
- yo no sé a qué se refiere, saque su pie y déjeme en paz o llamare a la policía.
-- jaja sé que no lo harás, te morirías de vergüenza si haces eso, te conozco, he visto y he analizado tu comportamiento todos estos meses desde que te mudaste, así que... ¿por qué no me dejas pasar y charlamos un ratito?
La universitaria estaba sorprendida por las declaraciones, para su mala suerte el viejo tenia razón, le daba vergüenza hacer un escándalo a media calle, sabía que no podía hacerlo, mucho menos llamar a la policía y explicarles el incidente, además le daba miedo que algún vecino pase y los vea forcejeando la puerta dándoles a entender ideas equivocadas y yendo con el chisme por toda la urbanización, lentamente dejo de forcejear en la puerta y el viejo entro a la casa de una manera calmada.
-- así que este será nuestro nuevo nidito de amor o ¿prefieres que nos sigamos viendo en mi casa?, No es tan acogedora como la tuya, pero si le das una buena limpieza yo creo que puede quedar decente.
- por favor ya no siga, ya obtuvo mucho más de lo que quería ese día.
-- jaja ósea ahora si se te refresco la memoria, pero te equivocas mamasota, te fuiste corriendo antes de tiempo y me dejaste bastante caliente todos estos días, ni siquiera el prostíbulo al que fui me calmo mi hambre de sexo, todos estos días solo he pensado en ti y en tu rico culo.
-por favor ya olvídese de eso…le puedo dar dinero para que vaya a un mejor prostíbulo si gusta.
El viejo soltó una carcajada y sin que nadie lo invite se sentó en uno de los grandes sofás de la feliz pareja
-- ¿pero para que haría eso? Si te tengo a ti, ese tremendo culo que posees no tiene comparación…y dime preciosa ¿cómo la has pasado estos días? ¿extrañaste mi verga?, ese día la succionabas como toda una perrita, me dejaste seco por unos minutos, ahora tengo una gran carga guardada solo para ti preciosa, o ¿preferirías que ahora me corra dentro tuyo?
La nena no podría creer todas las cosas que le estaba diciendo el viejo, hasta hace unos pocos días, el viejo la trataba como a una nieta y ahora solo la miraba como un pedazo de carne, estaba indignada por el brusco cambio de su vecino, pero a la vez sabia que ese comportamiento estaba dentro de sus fantasías más sucias, la nena resignada intento tratar de calmar las cosas antes de que esto se le fuera de las manos nuevamente.
-Don Rómulo…por favor dejemos ese momento atrás, no sé qué me paso, admito que yo también tengo parte de la culpa así que no le hare problema, mejor olvidemos todo eso y volvamos a ser amigos. — dijo la sexy jovencita tratando de persuadirlo de una forma amable para que se fuera y la deje en paz,
-- es imposible olvidar ese culo y esas ricas tetas que te manejas, sobre todo cuando ya pude saborearlas a mi gusto, te ofrezco un mejor trato, ¿por qué no te dejas llevar y nos ponemos a coger todas las veces que el inútil de tu noviecito este afuera trabajando?, si no quieres que nadie sospeche que vengo seguido a tu casa, podríamos ir a un hostal un par de veces, obvio tú lo pagarías ya que mi economía no es tan buena estos días.
- Oiga no meta a Jorge en estas cosas.
-- Jorge, Jorge, Jorge…ese inútil no te merece mamasota, de que le sirve tener todo el dinero del mundo si no puede satisfacer a su hembra, ese día ya me lo confesaste, tu noviecito es un inútil en la cama.
- ¡yo no dije eso!
-- sí lo hiciste, dijiste que te gustaban las personas que se comportaran sucio contigo…y como no comportarse así contigo si tienes tremendo cuerpazo.
-ya le dije que Jorge lo hace bien, solo que por el trabajo siempre viene exhausto, ¡nunca dije que fuera un inútil!
--ya, ya tranquila yegüita, estamos algo tensos, por que mejor no te preparas un cafecito para calmar esos nervios y de paso te haces algo para tragar ya que aun no he desayunado por venir temprano a visitarte.
Daniela estaba molesta, encima del mal rato que estaba pasando y de las burlas a su novio en su propia casa, ahora este anciano sinvergüenza le pedía que le llevara algo de comer, Dani estaba a punto de mandarlo al diablo, pero sabia que tal vez podría calmar un poco la lujuria del viejo si ganaba algo de tiempo.
-quédese sentado, preparare algo de café y calentare algo de ayer, si gusta puede ver la televisión.
--ok culonsita, prepárate algo rico antes de empezar con la acción, sé que el inútil ese llega de noche, así que tenemos mucho tiempo para pasarla bien jeje
La nena ya no dijo nada, sabía que era inútil defender a su novio en estos momentos, así que simplemente se fue a la cocina, el viejo no perdía detalle de ese gran trasero que se movía en dirección a la cocina, se puso cómodo en el sofá y prendió un rato la tele como si estuviera en su propia casa.
cornudo

por su parte Daniela no sabía cómo deshacerse del viejo lujurioso, sabia que si lo hacia por la fuerza o empezaba a gritar se armaría todo un escandalo en el vecindario, lo único que tenía claro es que no debía hacerlo enojar, esperaba que el recalentado del día de ayer sea del agrado de Don Rómulo.
Había pasado solo unos minutos desde que la jovencita se metió en la cocina para prepararle algo de comer a Don Rómulo, estaba tan concentrada con el sartén calentando la comida cuando sintió que la abrazaban por detrás.
- o...oiga ¿qué hace?
-- lo siento ricura, no me aguanto, tienes un cuerpazo exquisito
- suélteme por favor estoy a medio calentar la comida, me voy a quemar
-- deja eso, puedo comerlo despues, ahora lo que no quiero es seguir perdiendo el tiempo contigo, quiero continuar donde lo dejamos y hacerte mía de una vez. — dijo el calenturiento anciano poniendo todo su bulto de forma descarada entre las grandes nalgas de la jovencita.
- Señor Rómulo por favor no haga esto.
-- tienes un rico culo mamacita, seguramente te deben decir muchas groserías en la calle y no los culpo, cualquier hombre moriría por poner su verga entre esas dos nalgotas.
Las embestidas estaban empezando a tomar más fuerza, Daniela desconcertada y aun con el sartén en una mano no sabia que hacer, pero el solo sentir esa verga en su trasero le hizo recordar todo lo que había pasado aquel día en la casa del viejo, no podía negar que su cuerpo aún seguía caliente desde ese día.
-- dime preciosa, ¿de verdad no has extrañado esta verga que tanto manoseaste ese día?, ¿no recuerdas como la chupabas con tanta devoción y como te llene la boquita de todo mi semen?
- yoooo…
Don Rómulo aprovecho la pasividad de la jovencita tomándola de la mano y llevándola a su hinchado bulto, Dani quiso resistirse, pero era inútil, los recuerdos de ese día estaban en su cabeza y su manito instintivamente quería recordar aquella sensación, así que se dejo de ofrecer resistencia.
--ufff recuérdala mamacita, recuerda lo rico que me pajeaste ese día, deja ese sartén a un lado y déjate llevar por la verga de un verdadero macho
Daniela dejo a un lado el sartén, luego de tener su otra mano presionada al bulto del vejete, no resistió darle un apretón un par de veces, recordando así que las dimensiones no habían sido solo un sueño, luego de corroborar su duda trato de quitar la mano y de zafarse de la garras de Don Rómulo, pero era inútil, el viejo la tenia bien agarrada por detrás y apenas su mano dejo de tocarle el bulto, el viejo otra vez procedió a embestir su trasero.
- doooon esto…esto está mal, déjeme por favor — decía la nena con una voz bastante bajita
Mientras la nena trataba de zafarse, el viejo empezó a pasar su arrugado rostro por el cuello de Daniela y empezar a olfatearlo, Don Rómulo sabía que esa sensación podría volver loca a Dani, así que trato de recorrer todo el cuello
--no sabes como he extrañado estos días tu rico cuerpo mamacita, extrañe tener entre mis manos esos globos que tienes por tetas — dicho esto el viejo subió sus manos hasta los pechos de Daniela manoseándolos a su antojo aun por encima de su polo, pero al no tener brasier, el viejo podía sentir a todo detalle la suavidad de esas toronjas
Dani perdía cada vez más sus fuerzas para intentar zafarse y empezaba a dejarse llevar, el viejo nuevamente la llevo hasta una pared, esto le había funcionado hace dos días, así que ahora sabía qué a Dani le encantaba sentirse acorralada y pronto cedería como aquella vez en su casa.
-- ufff pero que suavecitas las tienes, jamás me voy a cansar de agarrártelas, eres una perra en celo sin duda, siente como tu respiración cambia con solo agarrarte las tetas
- nooo don Romuloooo aahh
-- puedes negarte todo lo que quieras, pero tus pezones no mienten, ahora que no llevas brasier puedo sentir como se están poniendo duritos aun por encima de ese polito…dime ¿quieres que te diga manoseando las tetas?
-ahhhh dooon nooooo haga esoooo
--no seas terca y dime la verdad o te jalare fuerte los pezones — dicho esto el viejo ubico ambos pezones y les dio un pequeño pellizco.
-ayyy ahhhh no lo haga así, hágalo más suave ahhhh
-- entonces ¿si quieres que te manosee bien las tetas?
La nena movió afirmativamente su cabeza con algo de pena, aun le daba vergüenza todo lo que estaba haciendo, pero a pesar de ello no quería que las manoseadas bruscas a sus pechos parasen.
cuernos

1 comentarios - Daniela y su vecino 3

Nemocabezon
Excelente!!!👏👏👏sigue por favor