Don Taka...

Don Taka era un viejo cincuenton que vivía en un rancho al final de la barriada, la gente y las viejas santulonas del vecindario evitaban pasar por su vereda porque el viejo degenerado tenía por costumbre sentarse en las siestas de verano con las piernas abiertas dejando caer por un lado una verga larga y cabezona que hacía juego con un buen par de huevos bien machazos envueltos en una mata de pelos negros .
Yo, con trece años y toda mi curiosidad a flor de piel pasaba todas las veces que podía hasta que aquél viejo degenerado se diera cuenta de que deseaba experimentar esa carne que mostraba distraidamente

Una verga curtida, peluda, gruesa y pesada.
Una tarde de verano le pedí agua... se acercó al portón y a propósito le clavé la vista en la pija que se balanceaba dentro de su pantalón corto
Cuando reconoció mi intención me invitó a pasar, sentí que lo estaba cazando, así pendejito como era queria y deseaba disponerme a ese órgano sexual de ese "viejo degenerado" al que todos rechazaban...
Una vez dentro de su casa, mis manitos se colaron debajo de la tela de su pantaloncito buscandole el pito... esa barra de carne dura y gruesa que a comparación de mi pene infantil era enorme. Sentía que lo poseía mientras el tipo se retorcía con mis dedos recorriendole los huevos y la verga... él no me estaba corroompiendo ... nó...para nada...yo lo estaba gozando...yo, con trece años estaba corrompiendo a un tipo de cincuenta; tenía plena conciencia del placer que le proporcionaba la fricción de mis dedos y mis manos alrededor y a lo largo de esa barra de carne caliente... Yo quería hacerlo.

Yo deseaba que "el viejo degenerado" se gozara en mi como lo hacía mi viejo con sus hembras... En esos momentos yo era dueño de ese adulto, le estudiaba la verga y los huevos...mientras él , suavemente... se "dejaba hacer" , como llevado por la situación...
La primera vez le besé los huevos, mis labios y mi lengua no podían entender el placer de tener tanta suavidad y tanta hombría en la boca.
" Don Taka" se retorcía y suspiraba cada vez que la punta de mi lengua se paseaba de arriba abajo en medio de sus huevos peludos y enormes... en un rápto de locura, empujó la cabeza de su verga entre mis labios juguetones, una baba salada me lubricó lengua y paladar a la vez...
Éra mi esclavo ; cada vez que me negaba sus geniles para manosearlos lo amenazaba con decirle a mi papá que me había manoseado...Hasta que un dia... Don Taka bien caliente deslizó la lengua entre mis nalgas y cuando notó el agujero de mi culo, subió hasta dejar la punta de su verga abriendose paso en mis entrañas...
Pude sentir cada centimetro de fibra en esa barra de carne caliente , dura, contundente... que me obligaba a sentirme sometido... como me tenía con las piernas al hombro; una vez que terminó de enterrarme toda la verga, hundió la lengua en mi boca y me atragantó con su salíva....
Sentí que le pertenecía; me convirtió en "su putita" , en "un ente" que no podía vivir sin alimentarse de su verga... y éra cierto... me había hecho adícto a su verga, yo queria y deseaba ser objeto del viejo exhibicionista .
Yo me gozaba yendo cada siesta a la casa del viejo degenerado a rogarle que me cojiera...y el chaqueño viejo se hacía de rogar hasta que mis manitas hábiles le atrapaban el bulto.
Al rato ya era su putita rogandole que no me la sacara, así de puto... sintiendo tremendo placer con la pija del tipo entera adentro.... me retorcía debajo del peso de su cuerpo intentando atrapar hasta el último centimetro de esa pija curtida... tenía adicción al olor maduro de esos huevos...
Un buen dia,