Dandole duro a mi madre, mi amante.

Hola chic@s, aquí la segunda parte del relato con mi madre que tanto apoyaron, se que tarde mucho en subir esta parte pero me ocupo, ya saben, dándole duro a esta MILF.
Aqui les dejo la primera parte https://m.poringa.net/posts/relatos/3654691/Mi-madre-mi-amante.html

Una cosa que quiero aclarar es que muchos me pidieron que en esta parte pusiera fotos, yo no tengo fotos de esos momentos, pues fue hace casi 2 años, intentaré conseguirles fotos del cuerpo de mi madre, en especial de su culazo que tiene.

Ahora si, empezamos:

Después del oral que ella me dio esa noche no dejaba de pensar en su hermoso cuerpo, en su boca, aún recuerdo que al día siguiente cuando fuimos a desayunar le dije lo tanto que quería cojer con ella, le dije algo tipo “quiero hacerlo contigo ya, no importa que” a lo que ella me contesta “enserio? Y si te digo que lo hagamos aquí y ahora?” Tenía el pene demasiado erecto, no dejaba de mirar su boca, la cual ella se mordía con tanta sensualidad, me estaba volviendo loco, a esa mujer ya no la veía como mi madre, si no como mi amante, mi mujer.

Ella siempre que podía me arrimaba su culo en mi verga, duraba mucho rato erecto y ansioso por metérsela por medio de esas nalgas, fuimos a comprar ropa y ella aprovechó para comprarse lencería, según ella había seleccionado las prendas que me gustarían, no dejaba de pensar en el día en que me la cojiera.

Mas noche, pasamos juntos por la “zona rosa” de ahí de la Ciudad de México, (pienso yo que ese era el plan de mi madre) y pasamos un rato por ahí, en lo que ella me dice, “oye, no quieres que te haga una chupadita aquí en la banca?” Me quede idiota, no lo pensé dos veces le dije que si, y así empezamos, ella me estaba haciendo un oral en público, si nos llego a ver una que otra persona que pasaban, pero simplemente se iban de largo, ahí fue cuando me di cuenta del que tan traviesa es mi madre, que no le importa que la vean en público chupando una verga, y ni que dirían si se enteran que soy su hijo jajajaja.

Despues de un rato se me ocurre la grandiosa idea de darle por fin esa noche, y como no dijo nada por una chupadita en público le pregunté “oye, si estas haciendo esto en público, no quieres ir a esa esquina para ahí alocarnos más?” Ella tampoco lo pensó mucho, me lamió la verga y se levanto, me tenía agarrado de la verga, no la soltaba, ahí iba yo, por las calles de la “zona rosa” con la verga de fuera y mi madre ya bien caliente, no podía creérmelo, hasta en parte me daba un poco de vergüenza, pero valdría la pena.

Al llegar a la esquina le baje a mi madre el pantalón que ella llevaba, ella se quitó su blusa y me dio su brasier, y siguió mamandome la verga un rato, después ya de unos minutos empezamos la acción.

La tenía manos contra la pared y su culo estaba en dirección mía, casi rozándome la verga, empeze primero de puntita un rato, mientras hacía eso le masajeaba el viente, cadera y las tetas, ella después de un rato me dijo que la agarrará de la cadera, eso hice pero se me ocurrio meterle la verga entera, así, sin pensarlo, así que se la metí toda en su vagina, aún recuerdo su gemido en ese momento, hizo mucho ruido, no le importaba que nos escucharan cogiendo en una esquina. Y así seguí, ella se movía genial, ninguna chica con la que he tenido sexo se movía como lo hace mi madre, por eso la adoro. Recuerdo como ella me gritaba “dame duro, duro, duro, castiga a mami por ser tan caliente y traviesa, si dame más”. Cada vez más le daba más duro, nada ni nadie me podía parar, era el mejor día de mi vida, me daba risa, porque siempre que pasaba gente cerca nuestra ella gritaba “si, así, que rico, que rica verga” y así nos veía la gente, aquí si que uno que otro se paro a vernos y otros se fueron algo nerviosos jajajaja.

Llego un momento en que cambiamos de poscicion, la voltee viéndome a mi y la cargué, la puse contra la pared a y se la metí, estaba cogiendome a mi madre mientras yo la cargaba contra la pared, me sentía un puto semental, aquí mi madre empezaba a gemir prácticamente gritando, no podía decir ni una palabra “ah, ah, ah, qué - - - rico, si, si, si” yo ya estaba casi por venirme, y algo me dice que ella también, ella no dejaba de gritar, gente nos estaba viendo, en especial veían el cómo mi madre gozaba como una puta, en este momento se la metía más fuerte que después de un rato ella gritó viniendose, la baje y noté que le temblaban mucho las piernas y ella también un poco, me dijo que quería que me viniera en su carita, así que descargue todo mi semen a su cara, y de paso me vine también en su boca.

Terminando esto nos vestimos y nos fuimos al hotel muy contentos, regresamos caminando al hotel, ella en algunos momentos me agarraba la verga, y yo le agarraba los pecho de vez en cuando (no mucho, porque ahí si me vería feo la gente jajaja) regresamos al cuarto, nos bañamos juntos y dormimos en la misma cama, desnudos los dos.

Recuerdo que al día siguiente yo me había levantado primero, me empezaba a arreglar para ir a desayunar, y en lo que me arreglo mi madre contesta una llamada de mi padre, la cual ella puso en altavoz. Mi padre casi acabando la llamada le pregunto a mi madre “se están divirtiendo ?” A lo que mi madre en un tono travieso y lujurioso contesto “si, me estoy divirtiendo mucho con tu hijo” mientras ella decía eso me miraba a mi, mordiéndose los labios y pasándose la lengua, mi padre le contesto “muy bien, espero que mi hijo también se la esté pasando bien” y ella contesto “se la está pasando muy bien aquí con mami” y ella acabando esa frase hizo con su mano como si me la estuviera mamando, mi padre colgó y nos arreglamos para ir a desayunar.

Y eso es todo el relato del como mi madre ahora es la mujer de mis deseos, mi amante, mi deseo, aunque después de ese rato he seguido teniendo sexo con ella, y claro, con alguna que otra de sus amigas MILFs.

Si quieren más relatos, ya sea de sexo con mi madre o con otras MILFs no se les olvide apoyar este post y el anterior.
Hasta el siguiente post.