La mamá de mi novia 7
Lucía me despertó, me miro sonriente
-Que linda noche pase...
-Vení a la cama y me contás...
-Bueno pero despacito... que me arde un poco todo...
Le fui dando suaves besos, de a poco me fui montando, jugando en la puerta de su conchita hasta que la penetré bien despacio.
-Parece que la pasaste bien eh...?
-Como hacía mucho no la pasaba... perro...
-Si querés que te coja despacito no me hagas calentar...
-Vos la pasaste bien...?
-Bárbaro...
-Que bueno...
-Y que te hizo ese Martín...?
-Todo lo que quiso... soy como su puta cuando estoy con él...
-No lo pude evitar, con lo que me iba contando la calentura me hizo acabar enseguida.
-Pero cornudito... acabas enseguida... para que querés cogerme si no aguantas nada... yo ya estoy bien cogida... Te calienta demasiado ser cornudo... que vamos a hacer...
-No, es toda la situación...
-Basta... no te quiero escuchar repetir lo mismo nunca más... cuando quieras hablar, hablamos enserio... porque me dejaste irme con Martín, porque no le dijiste a mi mamá que yo no me iba a ningún lado eh...? No habías visto los videos acaso?, me cogió... me paso bronceador... me hizo el culo... que pensaste, que ibamos a ir a caminar a la costanera...
Miró mi pija que estaba al repalo de nuevo.
-Mira como estás... -dijo mientras se acomodaba y me montaba.- tiene razón mamá... sos un perro cornudo eh...?
yo no dije nada, solo trataba de cogerla bien duro.
-Cuando vas a decirmelo... quiero escucharte aceptar lo que sos... decilo vamos... que sos...?
La agarré bien fuerte del culo clavandola contra mi.
-Cuidado con la cola que me duele un poco... Martín se ensaña con mi culito...
Y otra vez volví a acabar, ella también estaba acabando se acercó a mi oído y me dijo.
-Aceptalo... sos un perro cornudo...
Nos mordimos la boca un largo rato.
-Martín me enseño como tragarla hasta la garganta es un maestro... y lo bien que me hace el culo no sabes... le dije que el miércoles vos no estabas... quiero que me coja en nuestra cama... te pusiste al palo de nuevo... voy a hablar con mamá... a ver si podes ir a su casa... -se fue a mi pija y la comió como me había dicho, la metía hasta la garganta, creí que me volvía loco de excitación y celos.
Y lucía habló con la mamá, no tenía problemas pero ella iba a salir, yo me podía quedar en su casa, no había problemas. No me gustaba la situación que fueran a coger a casa, pero realmente mi voluntad estaba totalmente perdida, me sentía vencido, desesperado.
El miércoles mi suegra me esperaba, cerca de las nueve me pidió que fuera, cuando llegué ella ya estaba arreglada para salir, lo iba a ver a Aldo. Me dijo que si quería ir al baño que fuera, ella iba a volver en tres horas y no pensaba dejarme en su casa solo, me iba a atar a los barrotes de la cama, pero tenía unas esposas de verdad, me ordenó desnudarme, después que fui al baño y me amarró a los barrotes de la cama, ella canturreaba mientras terminaba de pintarse y arreglarse, a los 10 minutos sonó el timbre, era el tal Aldo, mi suegra se fue sin siquiera saludarme.
De a ratos dormitaba pero las manos realmente me dolían, cerca de las 12.30 escuche la puerta, mi suegra venía canturreando, cuando entró al cuarto estaba solo con una ropa interior muy sensual, estaba deliciosa, me pregunto si quería ir al baño, y me soltó para que fuera, cuando volví solo me ató con las cuerdas, mis muñecas estaban todas marcadas y doloridas por las esposas. Igual me ató bastante fuerte, se acostó a mi lado y me acariciaba el pecho y la panza, rodeando alrededor de mi pija, también, los huevos, pero sin tocar mi pija en ningún momento, acercó su boca a mi oído y me decía.
-Avanzaste un montón... perro... -y ese perro seguía lleno de desprecio y me calentaba un montón.- me parece que es el momento que aceptes ponerte un aparatito de castidad... -dijo esto mientras me había empezado a acariciar mi miembro suavemente- es bueno que tu novia y tu suegra vean la buena disposición que tenes... como aceptas... que ellas tienen la llave que te permite mostrar tu miembro... solo ellas... me calienta mucho la idea sabes... y por la dureza de tu pija parece que también...
-Pero debe ser muy incomodo... además no me gustaría que Lucía me vea así...
-Porque...? si te molesta es porque sos un perro calentón.. que se cree que puede mirar a las mujeres como si fuera un macho alfa... y sos un pobre perro cornudo... -se acomodó entre mis piernas y empezó a chuparme el culo, jugaba con su lengua que era una delicia y también jugaba con sus dedos.
-Tu suegra sabe como tratar a un perro como vos... mañana mismo voy a conseguir uno... -y siguió con su chupada y otra vez al llegar apoyó mi pija contra mi vientre, otra vez chorros de semen salieron de mi pija.
-A Luci le va a encantar... además de confirmar lo que yo le estoy demostrando... que sos su cachorrito... no te podes hacer el gran machito con ella... mira como sigue dura esa pija... tu suegra la va a aprovechar sabes... Aldo me coge delicioso... pero está grande... se echa uno y ya está... hay que aprovechar a un pendejo... aunque sea un perro cornudo...
Se la fue metiendo en su concha y estuvo un montón moviendose, me indicó que no llegara, si sentía que estaba cerca que le avisara, en un momento me dio sus pechos a chupar y me volví loco de calentura.
-Me encantan tus pechos...
-Que bueno perro... sos el perrito de tu suegra... lame bien perro...!!!!
Ella tuvo un orgasmo muy profundo y cayo sobre mi pecho, se quedó respirando agitada y después se salió de mi, se fue a duchar, volvío al rato envuelta en un toallón, me soltó las manos y me dijo que me fuera a dormir al cuarto que era de Lucía, no pensaría dormir con ella, cuando salí del cuarto la escuche cerrar con llave.
Pensaba en Lucía, como estaría, si estaría con Martín, eran cerca de las 2 de la mañana, le iba a mandar un mensaje pero no me anime
A la mañana siguiente me despertó mi suegra, me dijo que me esperaba en el baño, me puso de frente al espejo y se acomodó detrás mio, apoyo su pubis contra mi y sus pechos en mi espalda, con su mano derecha empezo a pajearme muy lentamente.
-Hoy voy a conseguir el aparatito ese... y el sábado van a venir a comer... te lo voy a poner y le vamos a dar la sorpresa a Luci.. estoy segura que le va a encantar perro... cada una de nosotras va a tener una cadenita con la llave de nuestro perro... -y ese perro lleno de odio en su voy, me volvió a hacer acabar como un condenado, ella tomó un poco de mi semen de la pileta y lo puso en mi boca, he hizo que le chupara los dedos un largo rato, juntando siempre semen de la pileta. Después me giro y me besó, no solía besarme demasiado y eso me calentó un montón.
-Bañate y a trabajar... perro...!!!!
Mi suegra me citó un rato antes el sábado, me esperaba solo en ropa interior, unos zapatos de taco alto blancos, el sujetador era calado y se notaban esos hermosos pezones que tiene, lo mismo el poco pelo que tiene recortadito sobre su almejita, se transparentaba en su ropa interior.
-Primero que nada te voy a hacer una buena paja... semejante pajero... sino vas a estar al palo y no te lo voy a poder poner... después de acabar trata de calmarte... de pensar en otra cosa...
-Si señora...
-Anda para el baño...
Se arrodilló detrás de mi, y otra vez empezó a darme una chupada de culo impresionante, mientras jugaba con sus deditos por todo mi ogete.
-Pajeate vos... despacito... no hay apuro... avisame cuando estes cerca...
Cuando le avise que estaba por llegar, me metió un consolador en el culo, no me di cuenta que lo había traído, y otra vez acabe como un cerdo.
-Si perro... vaciate bien... como el perro cornudo que sos... saca toda esa sucia leche que tenes... -Y sus palabras me excitaban de una manera descomunal, perdí mi erección, me lave un poco y mi suegra se entretuvo poniendo el aparatito, no era muy aparatoso, pero supuse que sería molesto cuando tuviera una erección. Después me dio una tanga, la mire serio, pero su mirada me congeló, por primera vez en mi vida me puse una tanga y no podía dejar de sentir la tira metida en el culo, me preguntaba como las mujeres lo aguantaban, pero a la vez eso empezó a excitarme y sentí una molestia importante.
-Que molesto es esto...
-Porque sos un calenton... tanquilizate perro...
Me vestí con mi ropa de calle, no se notaba el aparato, pero seguía teniendo plena conciencia de la tanga en mi culo, cuando entró Lucía venía sonriente, venía de hacer compras.
Cuando nos sentamos a la mesa mi suegra le preguntó.
-Que tal el miércoles...?
-Barbaro... la pasamos bárbaro...
-Ese chico es tan creativo... y tan caliente... hace un montón que no lo hago con él... me parece que ya va siendo hora de volver a verlo...
-Y vos... que hiciste...?
-Educando a tu perro... va más rápido de lo que pensé... porque no le pedís que te muestre...?
-Que me tiene que mostrar...?
-Decile a él...
-Mostrame amor...
-No quiero que lo trates así delante mio... esa babosada de amor... es un perro...
-Mostrame perro...
Me puse de pie y lleno de verguenza me baje el pantalón muy despacio...
-No te puedo creer ma... y como lo convenciste de algo así...
hasta tiene ropa de nenita...
-Desde el primer día... cuando lo trajiste a casa... te dije que en poco tiempo lo iba a tener comiendo de mi mano... te vas a llevar un buen partido... tu papá siempre fue bien educado... lástima que este último tiempo había perdido el interes por todo... girate y mostrale la cola también... mira que linda le queda la tanga... espero que no eches a perder mis esfuerzos... igual yo lo voy a seguir educando... no está terminado todavía...
-Es molesto... -dije
-No escuchaste como un ruido...
-Que mala sos má...
Mi suegra me sacó el candado y el aparato, me dijo que fuera para el living, al rato vinieron ellas con una copa de vino cada una en la mano, se sentaron en el sillón, mi suegra dijo
-Pajeate para nosotras perro... así te baja la calentura y no te molesta... despacio... así... que linda pija tiene hija...
-Viste que no te mentía...
-Pero también me lo pintaste como un super macho...
-Le gusta el sexo...
-Mirá como tira la leche por el piso... perro sucio... subite la tanga y limpia mi piso... perro... -dijo con ese tono lleno de odio.- La próxima vez que te quejes que te molesta... te vas a pajear y lo vas a limpiar con la lengua...
Volvimos a la mesa, almorzamos mientras ellas hablaban de montones de cosas, ropa, trabajos, a mi suegra le encantaba hablarle de tipos, de candidatos que tenía para presentarle, yo me volvía a calentar pero trataba de pensar en otras cosas.
Después se pusieron la cadenita con la llave en el cuello una para cada una.
-Vos sabés que espero mucho de vos hija... ya tenés un compañero... bastante complaciente... espero que lo empujes por la pendiente... que te aprenda a servir y complacer... que si te encontras con un amante... como el miércoles... este ahí... para disfrutar con vos y cuidarte... como hacía tu padre...
-Y contame... como estuvo el día que fuiste a navegar... con Martín y el papá...
-No quiero hablar ahora mamá...
-Porque...
-No se me siento incomoda...
-Ese es el problema tuyo... vos no tenes porque sentirte incómoda... no es tu problema... si no le gusta al perro... que se vaya... no ahora claro... ahora te tiene que escuchar... pero quiero decir que nadie lo obliga a quedarse con vos...
-Pero yo lo amo mamá...
-Claro y por eso se la pasaba engañandote con cualquier putita que se cruzaba por ahí... sin querer trabajar... fumando marihuana... tomando con los amigos... yo no te digo que no lo ames... te digo que le des el lugar que se merece un perro como él... estoy seguro que esta encantado con lo que oye... sacale el aparato y vas a ver la erección que tiene...
Lucía y su madre terminaron discutiendo, nos fuimos de la casa, Lucía me sacó el aparato ni bien llegamos a casa, estuvo después un largo rato encerrada en el cuarto. Cuando salió me dijo que esto no podía seguir así, que no era lo que quería.
Fuimos a cenar a la noche y ella me dijo que no quería más esto, que era una locura, que su madre era una enferma y que ella no se iba a volver una enferma como ella.
Pasaron varias semanas sin noticias de mi suegra, nuestra relación había tomado sus carriles normales. Habíamos perdido un poco de la fogosidad que solíamos tener, como si nos faltaran estimulos, pero pasamos unas buenas semanas.
Una tarde recibí un msj de mi suegra, me esperaba a la tarde en su casa, le dije que estaba ocupado, sonó mi celular, obviamente que atendí y era ella.
-Vení a casa con la llave... desnudate y esperame en tu lugar... maldito perro cornudo... -y cortó la comunicación, no me dió tiempo a contestarle pero sentí crecer una corriente fuerte de excitación, salí de raje con la moto para su casa, toqué timbre y como ella no estaba, entré con la llave, me desnudé y me paré en el medio de su living, media hora después entró mi suegra, venía canturreando otra vez, tiró sus cosas sin mirarme y se fue al cuarto, apareció vestida con un conjunto blanco transparente con liguero, se notaba deliciosa.
-Empezá a pajearte perro... -así lo hice, volaba de excitación, me sentía un enfermo y rendido felizmente ante mi suegra.- estuve esperando un tiempo a ver si uds avanzaban por sus medios... pero parece que no...
-Estamos bien como estamos... -dije con un tono que traté que fuera fuerte pero no salió demasiado creíble, la vi a mi suegra sonriente triunfadora, fue a la cocina y volvió con una copa de algo, se sentó en su sillón, me miraba divertida.
-Que hacés desnudo en el medio de mi living... si estás bien... perro cornudo... -y otra vez ese tono tajante, fuerte, lleno de odio. No constesté y me pareció que eso le gustaba.- No tenemos ganas de que mi hija se entere que te hice el culo con un cinturón de strap... no...?
-No señora...
-Y entonces... que pensas hacer...
-No se señora...
-Yo si... por un tiempo no le vas a tocar ni un pelo a mi hija... quiero que le vaya subiendo la calentura... vos te pajeas si queres... Yo le voy a avisar a Martín... pero después que le suba un poco la calentura... pero esta vez yo no tengo nada que ver... ni se te ocurra decirle que me viste o que estuviste aca... nada de lo que pase ella tiene que creer que fue idea mia...
Me pajee como un mono y acabé a chorros.
-Mandale un msj ahora... decile que vas a llegar más tarde... tenes que ver a unos amigos... y si ella quiere sexo... nada estás muy cansado... hay que poner a trabajar la cabecita de mi hija...
Mirate... estas al palo otra vez cornudo de mierda... andá al cuarto...
-Si señora...
Ni bien entró al cuarto sentí el nivel de excitación que ella tenía, me ató muy fuerte las manos, estaba agitadísima, me puso un forro y me montó, cuando lo hizo se le escapó un profundo gemido.
-Que linda pija tenes perro inutil...
-Le gusta señora...
-Cuando sos un buen perro si... hoy cuando vuelvas y Lucía te pregunte donde estuviste... dale respuestas vagas... como si estuvieras escondiendo algo...
-Ah... que hija de puta es señora...
-Estás escondiendo algo... sino contale la verdad... que viniste a cojerte a tu suegra... eh... y yo le cuento la otra parte... del cinto queres perro...?
-No señora!!!
-Sos un buen mentiroso... quiero que la dejes dudando de donde estuviste... y tu falta de ganas de coger...
-Que perra maldita...!!!
-Gracias... perro cornudo... avisame cuando estes por llegar... ya sabés adonde va tu sucia leche perro...
-Estoy cerca señora...
Se salió de mi, me sacó el forro y esta vez la tiró toda mi leche en su mano y me la paso por toda la cara.
-Saca la lengua perro sucio... limpia tu mugre...
Después me hizo que me bañara, y me echo de su casa, llegué a casa, Lucía había preparado la cena.
-Como te fue amor...?
-Bien, mucho laburo hoy... estoy recansado...
-y adonde fuiste...?
-Por ahí... tomando algo con los chicos...
-Mira... -dijo y noté que me miraba no creyendome del todo. Ni bien termine de cenar le di un beso y le dije que me acostaba a dormir, que estaba muerto. Pasaron cuatro o cinco días en que evité tener relaciones, era viernes. A la tarde recibí un msj de mi suegra, me esperaba en su casa, que estuviera en mi lugar.
Como siempre la esperaba desnudo en el medio del living, volaba de calentura, no me había pajeado ni tenido sexo.
Ella venía cantando desde el ascensor.
Entró, fue a la cocina y vino con una lata de cerveza, se sentó comoda en el sillón.
-Felicidades perro...
Noté una amplia sonrisa dibujada en su cara.
-Porque señora...
-Ayer me llamó Lucí... estaba preocupada...
-Que hija de puta es... !!!
-Soy como soy lindo... le dije que seguramente estarías saliendo con alguna putita como antes... que calentón eras... sino la buscabas... -Levantó la lata como si brindara- Hoy le dije a Martín que la llame... que la invite a salir... Luci me llamó preguntándome que tenía que hacer... si salía o no...? pajeate vamos... perro...
Mi pija escupió un montón de chorros, mi suegra miraba encantada, se había levantado el vestido y se acariciaba su almejita. Me ordenó limpiar y después ir al cuarto. Me ató bien fuerte a los barrotes de la cama, mis muñecas me dolían, justo en ese momento sonó mi celular. ella lo agarró, me puso un forro y me montó
-Es de Lucía... querés que te lo lea...?
-Que perra hija de puta sos...
-Sin tutearme... eh perro...
-Perdon señora...
-Te lo leo...?
-Si por favor...
-Hola, llego tarde... salgo con Martín... mamá tenía razón... sos un maldito perro...
Mi suegra por primera vez de esa manera me comió la boca, los dos estabamos recalientes, dejé de besarla para avisarle que estaba por llegar, ella volvió a comerme la boca y mi pija explotó a chorros dentro de mi suegra, me volvía loco la sensación aunque tuviera un forro puesto, mi pija seguía bien dura, mi suegra se salió, sacó el forro, me hizo abrír la boca y tiró en contenido en mi boca, despues me beso y nos pasamos mi corrida hasta que me ordeno tragarla...
Me mandó a bañar, que fuera para casa y comprara rosas para Lucía, después me dijo que le jurara y le insistiera que yo no había estado con nadie, pero que la amaba y lo que ella hacía estaba bien... decile también que forzaste la situación... que sentías que la relación se enfriaba... mi pija creció de nuevo, mi suegra lo noto y sonrió.
-Vaya... perro cornudo... -dijo con ese tono de desprecio que me vuelve loco.
Lucía me despertó, me miro sonriente
-Que linda noche pase...
-Vení a la cama y me contás...
-Bueno pero despacito... que me arde un poco todo...
Le fui dando suaves besos, de a poco me fui montando, jugando en la puerta de su conchita hasta que la penetré bien despacio.
-Parece que la pasaste bien eh...?
-Como hacía mucho no la pasaba... perro...
-Si querés que te coja despacito no me hagas calentar...
-Vos la pasaste bien...?
-Bárbaro...
-Que bueno...
-Y que te hizo ese Martín...?
-Todo lo que quiso... soy como su puta cuando estoy con él...
-No lo pude evitar, con lo que me iba contando la calentura me hizo acabar enseguida.
-Pero cornudito... acabas enseguida... para que querés cogerme si no aguantas nada... yo ya estoy bien cogida... Te calienta demasiado ser cornudo... que vamos a hacer...
-No, es toda la situación...
-Basta... no te quiero escuchar repetir lo mismo nunca más... cuando quieras hablar, hablamos enserio... porque me dejaste irme con Martín, porque no le dijiste a mi mamá que yo no me iba a ningún lado eh...? No habías visto los videos acaso?, me cogió... me paso bronceador... me hizo el culo... que pensaste, que ibamos a ir a caminar a la costanera...
Miró mi pija que estaba al repalo de nuevo.
-Mira como estás... -dijo mientras se acomodaba y me montaba.- tiene razón mamá... sos un perro cornudo eh...?
yo no dije nada, solo trataba de cogerla bien duro.
-Cuando vas a decirmelo... quiero escucharte aceptar lo que sos... decilo vamos... que sos...?
La agarré bien fuerte del culo clavandola contra mi.
-Cuidado con la cola que me duele un poco... Martín se ensaña con mi culito...
Y otra vez volví a acabar, ella también estaba acabando se acercó a mi oído y me dijo.
-Aceptalo... sos un perro cornudo...
Nos mordimos la boca un largo rato.
-Martín me enseño como tragarla hasta la garganta es un maestro... y lo bien que me hace el culo no sabes... le dije que el miércoles vos no estabas... quiero que me coja en nuestra cama... te pusiste al palo de nuevo... voy a hablar con mamá... a ver si podes ir a su casa... -se fue a mi pija y la comió como me había dicho, la metía hasta la garganta, creí que me volvía loco de excitación y celos.
Y lucía habló con la mamá, no tenía problemas pero ella iba a salir, yo me podía quedar en su casa, no había problemas. No me gustaba la situación que fueran a coger a casa, pero realmente mi voluntad estaba totalmente perdida, me sentía vencido, desesperado.
El miércoles mi suegra me esperaba, cerca de las nueve me pidió que fuera, cuando llegué ella ya estaba arreglada para salir, lo iba a ver a Aldo. Me dijo que si quería ir al baño que fuera, ella iba a volver en tres horas y no pensaba dejarme en su casa solo, me iba a atar a los barrotes de la cama, pero tenía unas esposas de verdad, me ordenó desnudarme, después que fui al baño y me amarró a los barrotes de la cama, ella canturreaba mientras terminaba de pintarse y arreglarse, a los 10 minutos sonó el timbre, era el tal Aldo, mi suegra se fue sin siquiera saludarme.
De a ratos dormitaba pero las manos realmente me dolían, cerca de las 12.30 escuche la puerta, mi suegra venía canturreando, cuando entró al cuarto estaba solo con una ropa interior muy sensual, estaba deliciosa, me pregunto si quería ir al baño, y me soltó para que fuera, cuando volví solo me ató con las cuerdas, mis muñecas estaban todas marcadas y doloridas por las esposas. Igual me ató bastante fuerte, se acostó a mi lado y me acariciaba el pecho y la panza, rodeando alrededor de mi pija, también, los huevos, pero sin tocar mi pija en ningún momento, acercó su boca a mi oído y me decía.
-Avanzaste un montón... perro... -y ese perro seguía lleno de desprecio y me calentaba un montón.- me parece que es el momento que aceptes ponerte un aparatito de castidad... -dijo esto mientras me había empezado a acariciar mi miembro suavemente- es bueno que tu novia y tu suegra vean la buena disposición que tenes... como aceptas... que ellas tienen la llave que te permite mostrar tu miembro... solo ellas... me calienta mucho la idea sabes... y por la dureza de tu pija parece que también...
-Pero debe ser muy incomodo... además no me gustaría que Lucía me vea así...
-Porque...? si te molesta es porque sos un perro calentón.. que se cree que puede mirar a las mujeres como si fuera un macho alfa... y sos un pobre perro cornudo... -se acomodó entre mis piernas y empezó a chuparme el culo, jugaba con su lengua que era una delicia y también jugaba con sus dedos.
-Tu suegra sabe como tratar a un perro como vos... mañana mismo voy a conseguir uno... -y siguió con su chupada y otra vez al llegar apoyó mi pija contra mi vientre, otra vez chorros de semen salieron de mi pija.
-A Luci le va a encantar... además de confirmar lo que yo le estoy demostrando... que sos su cachorrito... no te podes hacer el gran machito con ella... mira como sigue dura esa pija... tu suegra la va a aprovechar sabes... Aldo me coge delicioso... pero está grande... se echa uno y ya está... hay que aprovechar a un pendejo... aunque sea un perro cornudo...
Se la fue metiendo en su concha y estuvo un montón moviendose, me indicó que no llegara, si sentía que estaba cerca que le avisara, en un momento me dio sus pechos a chupar y me volví loco de calentura.
-Me encantan tus pechos...
-Que bueno perro... sos el perrito de tu suegra... lame bien perro...!!!!
Ella tuvo un orgasmo muy profundo y cayo sobre mi pecho, se quedó respirando agitada y después se salió de mi, se fue a duchar, volvío al rato envuelta en un toallón, me soltó las manos y me dijo que me fuera a dormir al cuarto que era de Lucía, no pensaría dormir con ella, cuando salí del cuarto la escuche cerrar con llave.
Pensaba en Lucía, como estaría, si estaría con Martín, eran cerca de las 2 de la mañana, le iba a mandar un mensaje pero no me anime
A la mañana siguiente me despertó mi suegra, me dijo que me esperaba en el baño, me puso de frente al espejo y se acomodó detrás mio, apoyo su pubis contra mi y sus pechos en mi espalda, con su mano derecha empezo a pajearme muy lentamente.
-Hoy voy a conseguir el aparatito ese... y el sábado van a venir a comer... te lo voy a poner y le vamos a dar la sorpresa a Luci.. estoy segura que le va a encantar perro... cada una de nosotras va a tener una cadenita con la llave de nuestro perro... -y ese perro lleno de odio en su voy, me volvió a hacer acabar como un condenado, ella tomó un poco de mi semen de la pileta y lo puso en mi boca, he hizo que le chupara los dedos un largo rato, juntando siempre semen de la pileta. Después me giro y me besó, no solía besarme demasiado y eso me calentó un montón.
-Bañate y a trabajar... perro...!!!!
Mi suegra me citó un rato antes el sábado, me esperaba solo en ropa interior, unos zapatos de taco alto blancos, el sujetador era calado y se notaban esos hermosos pezones que tiene, lo mismo el poco pelo que tiene recortadito sobre su almejita, se transparentaba en su ropa interior.
-Primero que nada te voy a hacer una buena paja... semejante pajero... sino vas a estar al palo y no te lo voy a poder poner... después de acabar trata de calmarte... de pensar en otra cosa...
-Si señora...
-Anda para el baño...
Se arrodilló detrás de mi, y otra vez empezó a darme una chupada de culo impresionante, mientras jugaba con sus deditos por todo mi ogete.
-Pajeate vos... despacito... no hay apuro... avisame cuando estes cerca...
Cuando le avise que estaba por llegar, me metió un consolador en el culo, no me di cuenta que lo había traído, y otra vez acabe como un cerdo.
-Si perro... vaciate bien... como el perro cornudo que sos... saca toda esa sucia leche que tenes... -Y sus palabras me excitaban de una manera descomunal, perdí mi erección, me lave un poco y mi suegra se entretuvo poniendo el aparatito, no era muy aparatoso, pero supuse que sería molesto cuando tuviera una erección. Después me dio una tanga, la mire serio, pero su mirada me congeló, por primera vez en mi vida me puse una tanga y no podía dejar de sentir la tira metida en el culo, me preguntaba como las mujeres lo aguantaban, pero a la vez eso empezó a excitarme y sentí una molestia importante.
-Que molesto es esto...
-Porque sos un calenton... tanquilizate perro...
Me vestí con mi ropa de calle, no se notaba el aparato, pero seguía teniendo plena conciencia de la tanga en mi culo, cuando entró Lucía venía sonriente, venía de hacer compras.
Cuando nos sentamos a la mesa mi suegra le preguntó.
-Que tal el miércoles...?
-Barbaro... la pasamos bárbaro...
-Ese chico es tan creativo... y tan caliente... hace un montón que no lo hago con él... me parece que ya va siendo hora de volver a verlo...
-Y vos... que hiciste...?
-Educando a tu perro... va más rápido de lo que pensé... porque no le pedís que te muestre...?
-Que me tiene que mostrar...?
-Decile a él...
-Mostrame amor...
-No quiero que lo trates así delante mio... esa babosada de amor... es un perro...
-Mostrame perro...
Me puse de pie y lleno de verguenza me baje el pantalón muy despacio...
-No te puedo creer ma... y como lo convenciste de algo así...
hasta tiene ropa de nenita...
-Desde el primer día... cuando lo trajiste a casa... te dije que en poco tiempo lo iba a tener comiendo de mi mano... te vas a llevar un buen partido... tu papá siempre fue bien educado... lástima que este último tiempo había perdido el interes por todo... girate y mostrale la cola también... mira que linda le queda la tanga... espero que no eches a perder mis esfuerzos... igual yo lo voy a seguir educando... no está terminado todavía...
-Es molesto... -dije
-No escuchaste como un ruido...
-Que mala sos má...
Mi suegra me sacó el candado y el aparato, me dijo que fuera para el living, al rato vinieron ellas con una copa de vino cada una en la mano, se sentaron en el sillón, mi suegra dijo
-Pajeate para nosotras perro... así te baja la calentura y no te molesta... despacio... así... que linda pija tiene hija...
-Viste que no te mentía...
-Pero también me lo pintaste como un super macho...
-Le gusta el sexo...
-Mirá como tira la leche por el piso... perro sucio... subite la tanga y limpia mi piso... perro... -dijo con ese tono lleno de odio.- La próxima vez que te quejes que te molesta... te vas a pajear y lo vas a limpiar con la lengua...
Volvimos a la mesa, almorzamos mientras ellas hablaban de montones de cosas, ropa, trabajos, a mi suegra le encantaba hablarle de tipos, de candidatos que tenía para presentarle, yo me volvía a calentar pero trataba de pensar en otras cosas.
Después se pusieron la cadenita con la llave en el cuello una para cada una.
-Vos sabés que espero mucho de vos hija... ya tenés un compañero... bastante complaciente... espero que lo empujes por la pendiente... que te aprenda a servir y complacer... que si te encontras con un amante... como el miércoles... este ahí... para disfrutar con vos y cuidarte... como hacía tu padre...
-Y contame... como estuvo el día que fuiste a navegar... con Martín y el papá...
-No quiero hablar ahora mamá...
-Porque...
-No se me siento incomoda...
-Ese es el problema tuyo... vos no tenes porque sentirte incómoda... no es tu problema... si no le gusta al perro... que se vaya... no ahora claro... ahora te tiene que escuchar... pero quiero decir que nadie lo obliga a quedarse con vos...
-Pero yo lo amo mamá...
-Claro y por eso se la pasaba engañandote con cualquier putita que se cruzaba por ahí... sin querer trabajar... fumando marihuana... tomando con los amigos... yo no te digo que no lo ames... te digo que le des el lugar que se merece un perro como él... estoy seguro que esta encantado con lo que oye... sacale el aparato y vas a ver la erección que tiene...
Lucía y su madre terminaron discutiendo, nos fuimos de la casa, Lucía me sacó el aparato ni bien llegamos a casa, estuvo después un largo rato encerrada en el cuarto. Cuando salió me dijo que esto no podía seguir así, que no era lo que quería.
Fuimos a cenar a la noche y ella me dijo que no quería más esto, que era una locura, que su madre era una enferma y que ella no se iba a volver una enferma como ella.
Pasaron varias semanas sin noticias de mi suegra, nuestra relación había tomado sus carriles normales. Habíamos perdido un poco de la fogosidad que solíamos tener, como si nos faltaran estimulos, pero pasamos unas buenas semanas.
Una tarde recibí un msj de mi suegra, me esperaba a la tarde en su casa, le dije que estaba ocupado, sonó mi celular, obviamente que atendí y era ella.
-Vení a casa con la llave... desnudate y esperame en tu lugar... maldito perro cornudo... -y cortó la comunicación, no me dió tiempo a contestarle pero sentí crecer una corriente fuerte de excitación, salí de raje con la moto para su casa, toqué timbre y como ella no estaba, entré con la llave, me desnudé y me paré en el medio de su living, media hora después entró mi suegra, venía canturreando otra vez, tiró sus cosas sin mirarme y se fue al cuarto, apareció vestida con un conjunto blanco transparente con liguero, se notaba deliciosa.
-Empezá a pajearte perro... -así lo hice, volaba de excitación, me sentía un enfermo y rendido felizmente ante mi suegra.- estuve esperando un tiempo a ver si uds avanzaban por sus medios... pero parece que no...
-Estamos bien como estamos... -dije con un tono que traté que fuera fuerte pero no salió demasiado creíble, la vi a mi suegra sonriente triunfadora, fue a la cocina y volvió con una copa de algo, se sentó en su sillón, me miraba divertida.
-Que hacés desnudo en el medio de mi living... si estás bien... perro cornudo... -y otra vez ese tono tajante, fuerte, lleno de odio. No constesté y me pareció que eso le gustaba.- No tenemos ganas de que mi hija se entere que te hice el culo con un cinturón de strap... no...?
-No señora...
-Y entonces... que pensas hacer...
-No se señora...
-Yo si... por un tiempo no le vas a tocar ni un pelo a mi hija... quiero que le vaya subiendo la calentura... vos te pajeas si queres... Yo le voy a avisar a Martín... pero después que le suba un poco la calentura... pero esta vez yo no tengo nada que ver... ni se te ocurra decirle que me viste o que estuviste aca... nada de lo que pase ella tiene que creer que fue idea mia...
Me pajee como un mono y acabé a chorros.
-Mandale un msj ahora... decile que vas a llegar más tarde... tenes que ver a unos amigos... y si ella quiere sexo... nada estás muy cansado... hay que poner a trabajar la cabecita de mi hija...
Mirate... estas al palo otra vez cornudo de mierda... andá al cuarto...
-Si señora...
Ni bien entró al cuarto sentí el nivel de excitación que ella tenía, me ató muy fuerte las manos, estaba agitadísima, me puso un forro y me montó, cuando lo hizo se le escapó un profundo gemido.
-Que linda pija tenes perro inutil...
-Le gusta señora...
-Cuando sos un buen perro si... hoy cuando vuelvas y Lucía te pregunte donde estuviste... dale respuestas vagas... como si estuvieras escondiendo algo...
-Ah... que hija de puta es señora...
-Estás escondiendo algo... sino contale la verdad... que viniste a cojerte a tu suegra... eh... y yo le cuento la otra parte... del cinto queres perro...?
-No señora!!!
-Sos un buen mentiroso... quiero que la dejes dudando de donde estuviste... y tu falta de ganas de coger...
-Que perra maldita...!!!
-Gracias... perro cornudo... avisame cuando estes por llegar... ya sabés adonde va tu sucia leche perro...
-Estoy cerca señora...
Se salió de mi, me sacó el forro y esta vez la tiró toda mi leche en su mano y me la paso por toda la cara.
-Saca la lengua perro sucio... limpia tu mugre...
Después me hizo que me bañara, y me echo de su casa, llegué a casa, Lucía había preparado la cena.
-Como te fue amor...?
-Bien, mucho laburo hoy... estoy recansado...
-y adonde fuiste...?
-Por ahí... tomando algo con los chicos...
-Mira... -dijo y noté que me miraba no creyendome del todo. Ni bien termine de cenar le di un beso y le dije que me acostaba a dormir, que estaba muerto. Pasaron cuatro o cinco días en que evité tener relaciones, era viernes. A la tarde recibí un msj de mi suegra, me esperaba en su casa, que estuviera en mi lugar.
Como siempre la esperaba desnudo en el medio del living, volaba de calentura, no me había pajeado ni tenido sexo.
Ella venía cantando desde el ascensor.
Entró, fue a la cocina y vino con una lata de cerveza, se sentó comoda en el sillón.
-Felicidades perro...
Noté una amplia sonrisa dibujada en su cara.
-Porque señora...
-Ayer me llamó Lucí... estaba preocupada...
-Que hija de puta es... !!!
-Soy como soy lindo... le dije que seguramente estarías saliendo con alguna putita como antes... que calentón eras... sino la buscabas... -Levantó la lata como si brindara- Hoy le dije a Martín que la llame... que la invite a salir... Luci me llamó preguntándome que tenía que hacer... si salía o no...? pajeate vamos... perro...
Mi pija escupió un montón de chorros, mi suegra miraba encantada, se había levantado el vestido y se acariciaba su almejita. Me ordenó limpiar y después ir al cuarto. Me ató bien fuerte a los barrotes de la cama, mis muñecas me dolían, justo en ese momento sonó mi celular. ella lo agarró, me puso un forro y me montó
-Es de Lucía... querés que te lo lea...?
-Que perra hija de puta sos...
-Sin tutearme... eh perro...
-Perdon señora...
-Te lo leo...?
-Si por favor...
-Hola, llego tarde... salgo con Martín... mamá tenía razón... sos un maldito perro...
Mi suegra por primera vez de esa manera me comió la boca, los dos estabamos recalientes, dejé de besarla para avisarle que estaba por llegar, ella volvió a comerme la boca y mi pija explotó a chorros dentro de mi suegra, me volvía loco la sensación aunque tuviera un forro puesto, mi pija seguía bien dura, mi suegra se salió, sacó el forro, me hizo abrír la boca y tiró en contenido en mi boca, despues me beso y nos pasamos mi corrida hasta que me ordeno tragarla...
Me mandó a bañar, que fuera para casa y comprara rosas para Lucía, después me dijo que le jurara y le insistiera que yo no había estado con nadie, pero que la amaba y lo que ella hacía estaba bien... decile también que forzaste la situación... que sentías que la relación se enfriaba... mi pija creció de nuevo, mi suegra lo noto y sonrió.
-Vaya... perro cornudo... -dijo con ese tono de desprecio que me vuelve loco.
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