En el edificio

Recién estaba empezando a salir con María Marta, (Ficticio) ella una mujer hermosa de cara, ojos animé morocha con un culo que vuelve loco a cualquier pija con unas tetas pequeñas pero pezones bien marcados, fuimos a cenar a un restauran en la capital de Mendoza en un piso creo que el décimo, era un edificio viejo de los primeros construidos en la ciudad.
La noche transcurrió con normalidad cenamos y tomamos un vinito que nos fue soltando en inhibiciones, de apoco nos empezamos a mirar con lujuria con ganas de coger ahi mismo, mis manos ya no tenían vergüenza y empecé a masajerarle ese hermoso culo que hasta el día de hoy cuando la veo produce que se me pare la japi al instante.
Cuando nos estabamos yendo subimos al ascensor solos y ahi comenzó el franeléo, quería cogerla ahí,toqué cualquier piso y el ascensor se detuvo salimos y seguimos en vaya uno a saber que piso era..... nos besabamos apasionadamente y mis manos ya estaban en la concha que a esa altura estaba empapada, me pedía pos favor que me la coja.
Mientras tanto ella ya había agarrado mi pija gruesa me la chupó un rato sólo la cabeza como una inexperta, me hacía doler un poco me mordía pero me puso a mil.... la dí vueltale baje el pantalón tenia una tanga metida en el culo impresionante, se la bajé me puse un forro y no se la puse sin antes darle lengua a esa concha depilada.
La puse contra la pared y le empecé a dar bomba de espalda, le agarré de la cintura y la cogí como sino hubiera mañana. Tanto que el forro casi explota de tanta leche que me salió.
Nos vestimos y llamamos el ascensor, venía una pareja bajando del restó que sorprendida cuando subimos se rieron picaronamente.
Espero les haya gustado mi historia.

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