Hola, cómo están?
Este año vinimos con la familia a pasar unos días en la localidad de San Bernardo, en la costa atlántica argentina.
Como en el día de ayer me acosté tarde, hoy por la mañana decidí quedarme en el departamento mientras el resto de la familia se iba a la playa. Mi misión era hacer compras de frutas y verduras y algunas cosas más en el supermercado. Y atender a la gente de la limpieza del departamento.
Me levanté y lo primero que hice, como todos los días, fue ducharme y afeitarme. Me vestí con short y remera y me preparé unos mates.
Estaba desayunando cuando golpean la puerta. Eran las "chicas de la limpieza". Dos mujeres. Una como de 35 / 40 años, cara normal pero con ojos pícaros, piernas fuertes y unas tetas de novela. La otra, una chica mucho más chica -calculo que no más de 25 años- con un culo de novelas!
Muy amables saludaron y entraron a limpiar baños, habitaciones, cocina, living...
Durante todo el trabajo yo fui ayudando levantando cosas, quitando cosas de lugar y; ya que estaba, mirando a estas dos hermosas mujeres hacer su tarea.
Ya cuando estaban por terminar, la más jovencita va hacia adentro a colocar toallas limpias en los baños y aprovecho a sacarle tema de charla a la mayor:
Yo: Imagino que este año, con tanto turista que se quedó en Argentina, deben tener un montón de trabajo!
Ella: La verdad que si, no paramos desde mediados de diciembre. Y por suerte somos dos.
Yo: Sólo dos para todos estos departamentos?
Ella: Si, pero imaginate que el año pasado estaba yo sóla! Este año, al menos, tengo ayuda. Está aprendiendo, pero al menos me ayuda un poco.
Yo: Uhhhh... encima le tenés que enseñar?
Ella: Si, y no sólo a limpiar. Sino también a complacer los deseos de ciertos turistas...
Cuando me dijo así la cabeza me empezó a correr a mil por hora y la verga se me paró automáticamente....
Yo: Ah si? Seré curioso... y qué te piden, además de limpiar????
Ella: Vos sabés... siempre te ven trabajando y tienen esas fantasías que ven en las películas... Y bueno, yo se las hago realidad. Bueno, en realidad, sólo un poco... Y por supuesto, con un cargo adicional...
Cuando me dijo así yo no sabía que agarrar primero. Si la billetera o la verga... así que finalmente le digo:
Yo: Bueno, creo que me pueden interesar tus servicios "extras"... contame un poco más, no sólo de los servicios sino los cargos adicionales.
Ella: Claro! Mirá. No mantenemos relaciones sexuales. Pero con mi "aprendiz" te podemos dar una sesión de sexo oral, con final feliz. Eso si. Ambas desnudas. Podés tocar, acariciar, besar. Pero sin ningún tipo de penetración. Y te cobramos $ 1500 la acabada (para los que no viven en argentina, hablamos de unos USD 20)...
Yo: Me encanta la idea..... Podemos ahora?
Ella: Por supuesto!
Y empezó a sacarse el uniforme de trabajo con mucha sensualidad mientras llamaba a su "aprendiz".
Lo que siguió después, para mí, fue maravilloso...
Se sacaron la ropa las dos y se quedaron sólo con las tanguitas. Como no iba a poder penetrarlas ni con los dedos ni con la verga, no le hice mayor caso.
Una vez estuvieron desnudas se mostraron delante de mí las dos, de frente y de costado, pidiendo mi aprobación. Por supuesto que estaban 10 puntos!!!! La aprobación llegó de inmediato y me puse de pié para que entre las dos quitaran mi short y mi remera.
Empezaron a besarme por todo el cuerpo, del cuello hacia abajo. No quisieron darme besos en la boca. Pero me dejaron besar sus cuellos también. Y sus tetas.
Me hicieron sentar en uno de los sillones del living mientras seguían recorriendo mi cuerpo con sus lenguas hasta que llegaron a mi verga que, como dije, estaba durísima.
Como había tenido sexo la noche anterior, no estaba urgido por eyacular, así que me dejé besar y chupar a gusto, disfrutando de cada lengüetazo y cada caricia que me daban.
Estuvieron ambas cerca de 20 minutos acariciando con manos y lenguas mi verga, mis huevos y mi culo.
Sus lenguas se entrecruzaban, así que supongo que ellas también disfrutaban de sus besos entre ellas.
Cuando estaba por acabar, la más jovencita me metió un dedo en el culo mientras sonreía y su jefa me seguía chupando la verga...
Empecé a acabar y a derramar mi leche en esa boca caliente y amable. La pequeña se sumó, ya que ella también estaba sedienta de semen.... Siguieron besando y acariciando hasta que mi verga se achicó a su mínima expresión y mis huevos quedaron flaquitos y livianitos...
Les agradecí el servicio completo de higiene y limpieza y nos despedimos, con la promesa que volvería a contratar "los servicios" especiales antes de volverme a casa.
Ahora sólo me queda inventar alguna excusa para quedarme en el departamento alguna otra mañana...
Espero que les haya gustado la histora que, por otro lado, es 100% real y ocurrió hoy, el día de Reyes de 2020.
Este año vinimos con la familia a pasar unos días en la localidad de San Bernardo, en la costa atlántica argentina.
Como en el día de ayer me acosté tarde, hoy por la mañana decidí quedarme en el departamento mientras el resto de la familia se iba a la playa. Mi misión era hacer compras de frutas y verduras y algunas cosas más en el supermercado. Y atender a la gente de la limpieza del departamento.
Me levanté y lo primero que hice, como todos los días, fue ducharme y afeitarme. Me vestí con short y remera y me preparé unos mates.
Estaba desayunando cuando golpean la puerta. Eran las "chicas de la limpieza". Dos mujeres. Una como de 35 / 40 años, cara normal pero con ojos pícaros, piernas fuertes y unas tetas de novela. La otra, una chica mucho más chica -calculo que no más de 25 años- con un culo de novelas!
Muy amables saludaron y entraron a limpiar baños, habitaciones, cocina, living...
Durante todo el trabajo yo fui ayudando levantando cosas, quitando cosas de lugar y; ya que estaba, mirando a estas dos hermosas mujeres hacer su tarea.
Ya cuando estaban por terminar, la más jovencita va hacia adentro a colocar toallas limpias en los baños y aprovecho a sacarle tema de charla a la mayor:
Yo: Imagino que este año, con tanto turista que se quedó en Argentina, deben tener un montón de trabajo!
Ella: La verdad que si, no paramos desde mediados de diciembre. Y por suerte somos dos.
Yo: Sólo dos para todos estos departamentos?
Ella: Si, pero imaginate que el año pasado estaba yo sóla! Este año, al menos, tengo ayuda. Está aprendiendo, pero al menos me ayuda un poco.
Yo: Uhhhh... encima le tenés que enseñar?
Ella: Si, y no sólo a limpiar. Sino también a complacer los deseos de ciertos turistas...
Cuando me dijo así la cabeza me empezó a correr a mil por hora y la verga se me paró automáticamente....
Yo: Ah si? Seré curioso... y qué te piden, además de limpiar????
Ella: Vos sabés... siempre te ven trabajando y tienen esas fantasías que ven en las películas... Y bueno, yo se las hago realidad. Bueno, en realidad, sólo un poco... Y por supuesto, con un cargo adicional...
Cuando me dijo así yo no sabía que agarrar primero. Si la billetera o la verga... así que finalmente le digo:
Yo: Bueno, creo que me pueden interesar tus servicios "extras"... contame un poco más, no sólo de los servicios sino los cargos adicionales.
Ella: Claro! Mirá. No mantenemos relaciones sexuales. Pero con mi "aprendiz" te podemos dar una sesión de sexo oral, con final feliz. Eso si. Ambas desnudas. Podés tocar, acariciar, besar. Pero sin ningún tipo de penetración. Y te cobramos $ 1500 la acabada (para los que no viven en argentina, hablamos de unos USD 20)...
Yo: Me encanta la idea..... Podemos ahora?
Ella: Por supuesto!
Y empezó a sacarse el uniforme de trabajo con mucha sensualidad mientras llamaba a su "aprendiz".
Lo que siguió después, para mí, fue maravilloso...
Se sacaron la ropa las dos y se quedaron sólo con las tanguitas. Como no iba a poder penetrarlas ni con los dedos ni con la verga, no le hice mayor caso.
Una vez estuvieron desnudas se mostraron delante de mí las dos, de frente y de costado, pidiendo mi aprobación. Por supuesto que estaban 10 puntos!!!! La aprobación llegó de inmediato y me puse de pié para que entre las dos quitaran mi short y mi remera.
Empezaron a besarme por todo el cuerpo, del cuello hacia abajo. No quisieron darme besos en la boca. Pero me dejaron besar sus cuellos también. Y sus tetas.
Me hicieron sentar en uno de los sillones del living mientras seguían recorriendo mi cuerpo con sus lenguas hasta que llegaron a mi verga que, como dije, estaba durísima.
Como había tenido sexo la noche anterior, no estaba urgido por eyacular, así que me dejé besar y chupar a gusto, disfrutando de cada lengüetazo y cada caricia que me daban.
Estuvieron ambas cerca de 20 minutos acariciando con manos y lenguas mi verga, mis huevos y mi culo.
Sus lenguas se entrecruzaban, así que supongo que ellas también disfrutaban de sus besos entre ellas.
Cuando estaba por acabar, la más jovencita me metió un dedo en el culo mientras sonreía y su jefa me seguía chupando la verga...
Empecé a acabar y a derramar mi leche en esa boca caliente y amable. La pequeña se sumó, ya que ella también estaba sedienta de semen.... Siguieron besando y acariciando hasta que mi verga se achicó a su mínima expresión y mis huevos quedaron flaquitos y livianitos...
Les agradecí el servicio completo de higiene y limpieza y nos despedimos, con la promesa que volvería a contratar "los servicios" especiales antes de volverme a casa.
Ahora sólo me queda inventar alguna excusa para quedarme en el departamento alguna otra mañana...
Espero que les haya gustado la histora que, por otro lado, es 100% real y ocurrió hoy, el día de Reyes de 2020.
16 comentarios - Las chicas de la limpieza (caso real, hoy, costa argentina)