Como ustedes saben, me gustan las mujeres de todacclase. Gordas, delgaditas, rubias, pelirrojas, grandes, chicas, cojo lo quevenga. Y muchas veces no es sólo una, son varias las que me gusta llenar conmis fluidos. Eso pasó después de Navidad, el jueves 26 de este 2019, con mi exAlina y su madre Alicia.
Alina era esa chica con la que salí un tiempo y mepeleé, me cagó y luego encontré con su amiguita Debbie a los picos y según contaronallegados, ambas en el telo. Pero como tras Navidad y conocer lo de MaríaTeresa quise locura, la llamé haciéndome bien el boludo, como siempre yo, y larubia me respondió bien, hasta amable. Le dije de ir a verla y aceptó. Tenía ganascon lo primero que se me ocurrió, y aparte, lo tengo que reconocer, estoy calientecon Alicia, que es gorda inflada y gusta como yo de los sandwichitos, lo que meexcita. Le dije de llevar fiambre, Alina me decía que no, que ella comprabaalgo, pero insistí y aceptó de nuevo. Estaba decidido a hacer bien lo que se meantojara con las dos, así que muy bien vestido y empapado de perfume llevé fiambre,pan lactal y mayonesa para cenar con ambas mujeres.
Llegué a esa linda casa de Munro donde me recibióAlina, elegante igual que la madre, las dos de pollera amplia, zuecos ymaquilladas. Me excité de entrada con los perfumes cuando me besaron, sobre todola gorda. Y ni hablar cuando Alicia preparó todo y me hizo sandwiches con huevoy bastante mayonesa a mi pedido. Comimos bárbaro, ellas se tentaron con la fiambrada,sobre todo repito la madre, que me contaba que le da duro a los de miga. Luego degustamospostre hecho por la chica y café bien negro, y charlamos un rato. Pero todo noiba a quedar así, obvio.
La llevé a Alina a una pieza aparte, que ya conocíade mi relación, y le dije boludo de charlar un par de cosas. Qué charlar,apenas Ali se metió en la pieza la agarré caliente, excitado con el fiambre conhuevo y mayonesa, excitado con ella y su perfume y pintura, excitado con ella.La arrinconé, besuqueé, manoseé, toqueteé, hice de todo, Ali quiso resistirsepero la aplasté contra una pared, le pasé las manos por su perfecta cola, sus tetas,sus piernas y la hice desnudarse. Y aunque ya no somos nada, parece que gustóla loquita, si se dio con mi otra ex esto no era nada, y nomás se quitó lapollera. Ni le di tiempo a seguir sacándose la ropa, le arranqué la blusa, elcorpiño, le bajé la bombacha, me le acosté sobre su cama y con un pene tremendola penetré primero por su vagina, ancha, linda, lubricadita, dándole con unafuria y un salchichón bien duro y largo, frotando enloquecido con su aroma amaqillaje hasta que me salió semen a chorros que inundó su vagina. Y antes deque Alina pudiera hacer algo, la levanté de una, la puse contra su placard y ledi con el pene chorreado y todavía duro por su cola, reventándola bien hastaeyacular mi abundante semen. Alina chocha gimió de lo lindo, gritó , pidiómás y acabó su flujo, que luego le chupéde su orificio principal.
A todo esto, Alicia estaba acomodando lo de lacena, guardó el fiambre que quedó, cuando al terminar escuchó nuestros ruidos y los alaridos de su hija. Se asustó y quisoentrar a la pieza, pero yo había cerrado con un pestillo. Ahí escuchó gemir ala mina y se excitó, toqueteándose entre sus piernas, se ve que hace rato notenía un tipo encima suyo. Sí, en vez de preocuparse, la señora (¿) se excitólindo. Y cuando oyó que terminamos, después de que Alina salió y fue al baño,vino hacia mí que estaba en la pieza.
Yo dije "uh, acá cagamos, me pega, me mata ome denuncia". Nada. Mejor dicho, todo: Alicia me hizo un mimo, me besósuave y me dijo cosas, alabándome por mi potencia con Alina. Y como conté queestaba caliente con la gordota, me la cogí nomás. La agarré de atrás, le pasélas manos por la cola y piernas infladitas, Alicia quiso sacarme pero yo seguí,quería entrarle bien, y tras aplastarla contra el placard, me creció de nuevo,le bajé la pollera y le vi la bombacha, enloquecí, se la bajé y tras aplastarlacual sandwich de fiambre, se la metí dura y largota por atrás dándole durohasta acabar semen a torrentes. Y al terminar, Alicia se tentó y quiso más, yome tenté y ahí le exigí en bolas, la tipa nomás voló su corpiño y bombacha, sepuso en cuatro y me la regarché tirándomele encima con brutalidad arriba de lacama. El aroma a cremita de las manos de la gorda, su perfume igual que Alinamás la cena, me volvió a prender fuego, froté con tutti y eyaculé de nuevo espesosemen en su vagina, luego le pasé el pene duro y chorreado por sus tetas, caray panza. Alicia aún acostada gozó y me dejó chuparle la vagina, le pasé lalengua y la mujer gimió loca como en la cogida.
A todo esto, Alina no aguantó y al oír lo mío conla madre, se encerró en el baño y se masturbó duro acabando y gritando loca.Madre e hija, hija y madre, ambas locas y parece fáciles como nunca pensé. Unanoche ideal, bien navideña, con arbolito y todo. Mi arbolito bien potente conlas dos por el mismo precio.
0 comentarios - Cené con madre e hija y me las bajé duro