R: Ya llegamos, aquí es probable que ya no te vea nadie, aunque, quizás alguna cámara por seguridad, realmente no lo sé, pero si hay alguna deberías darle una alegría a esa persona que la está viendo, por eso cuando bajes del auto vas a hacerlo desnuda, quítate el vestido acá adentro, de todas formas, no lo vas a necesitar más.
Barbara hizo lo que le dije, se quitó el vestido de la manera más sexy que pudo dentro del auto, pero antes de bajar me mostró el vestido.
B: ¿Ves eso brillante que tiene el vestido por adentro?, es lo excitada que me tienes.
R: Y eso que esto es solo el comienzo.
Por fin 3ra parte y final.
Cuando vi hacia su asiento ella ya iba saliendo del auto, completamente desnuda, podía ver el plug anal que le había pedido que se colocara, al terminar de salir le dije que cerrara la puerta y se quedara quieta junto al auto, para este momento Barbara estaba totalmente convencida de hacer lo que yo le decía. Sali del auto camine hacia ella y me roce sus labios con los míos, de forma automática y rápida se acercó a besarme mientras pasaba sus brazos por mi cuello para pegarme a ella, la bese intensamente, mis manos bajaron hacia sus nalgas, las presionaba hacia mi, recorría su espalda de arriba abajo, entrelazaba su cabello en mis dedos mientras lo jalaba hacia atrás para tener su cuello completamente a mi disposición mientras lo recorría con la lengua, ella aun en tacones levanto sus piernas para sujetarse de mi cintura, movía su cintura provocando el roce de su clítoris con mi pantalón, nuestros gemidos y respiración estaba cada vez más acelerada, ella como pudo comenzó a abrir mi camisa, pero hasta allí la deje, luego de eso le quite sus brazos y piernas de mí que para ese momento me tenían presionado hacia ella, tanto que visto desde afuera sería imposible determinar que parte del cuerpo es de cada quien.
R: Estoy muy excitado, pero recuerda que te dije que esto apenas estaba comenzando. No creo que quieras dejar de sentir todo lo que estás sintiendo hasta ahora.
Mire hacia abajo, estaba muy mojada y estar tan pegados hizo que sus fluidos mojaran mi pantalón.
R: Parece que la humedad no quedará solo en tu vestido.
Le pedí que entrara a la habitación y que se quedara en la puerta esperándome, abrí nuevamente el auto y busque su vestido, volví a buscar la parte mojada del vestido pensando “Esta noche tendré mucho mas de esto”, apenas entre a la habitación ella estaba allí tal como se lo había pedido, observando con cara de perra todo lo que estaba viendo, esposas, juguetes, lubricantes, la habitación tenía columpio brazo-pierna.
B: No creo que tengamos tiempo para usar esto durante toda la noche.
R: Usare todo esto, te usaré a ti, serás mi perra obediente toda la noche.
La giré hacia mí y volví a besarla de nuevo intensamente, mis dedos llegaron a su cuca mojada, podía sentir su humedad en sus piernas, estaba goteando.
B: Necesito sentirte adentro otra vez, quiero que me cojas, sere tu perra, tu puta toda la noche, pero no dejes de cogerme.
La lleve hacia el columpio, la ayude a sentarse.
R: Sujétate bien de las cuerdas, inclínate un poco hacia atrás y cierra los ojos.
Ella no lo dudo, cuando terminó de hacerlo me quite la camisa, me excita la sensación de sentir la piel de las piernas en mis hombros, me agache, y comence a pasar mi lengua por su clítoris, solo la punta de mi lengua, podía saborearla, sentir su olor de mujer en celo, pase mi lengua de arriba abajo y abajo arriba de su cuca, la sentía en mi boca cada vez más caliente, podía ver desde abajo sus pezones erectos, me encanta verlos asi, me motiva a seguir, me separe un poco y la vi, tenía los ojos cerrados y la boca ligeramente abierta, volví a chupársela, esta vez pegue mis labios también, los chupaba mientras pasaba mi lengua al mismo tiempo, lo hacía con sus labios, lo hacía con su clítoris, giraba mi lengua en forma circular, con la punta, con la lengua entera, estaba comiéndomela, saboreándola escuchándola gemir, haciéndome saber lo rico que se sentía haciéndome saber que no quería que me detuviese, como pudo se soltó de una de las cuerdas del columpio y me tomo por el cabello me pego más a ella y comenzó a mover sus caderas, sus gemidos y movimientos se intensificaron hasta que pude ver como levanto su cabeza hacia mí y su cuerpo se tensó completamente, mi recompensa estaba llegando, comencé a ver como salían sus fluidos rápidamente, ya su mano no me sujetaba, se concentraba en sus temblores de piernas y caderas mientras estaba teniendo un orgasmo.
B: ¡Que rico! Me excita tu lengua! Uffff que rico.
Volví a pasarle la lengua, no quería desperdiciar nada de mi recompensa.
R: Me encanta chupártela, no pensé que fueses a acabar, se estaba acercando la parte donde iba a lubricar tu culo para usar el consolador.
B: Esto apenas está comenzando.
Barbara se bajó del columpio como pudo, sus piernas estaban debilitadas por el orgasmo que acababa de tener, se fue hacia la cama.
B: Te dije que sería tu perra toda la noche, si tu intención es meterme un consolador en el culo entonces (poniéndose en 4) aquí esta tu culo, has con todo lo que ves lo que quieras.
Verla en esa posición me puso como una piedra, el pantalón que traía puesto ya me incomodaba, comencé a quitarme el pantalón.
B: Mmmm que rico, parece que nos vamos a saltar algunas partes.
R: No sabes todos los planes que tengo contigo y para ti esta noche, el que te coja ahorita no quiere decir que no lo haré más tarde una y otra vez.
B: Sabía que no podías aguantarte a verme en 4, cógeme Ruben.
Termine de quitar mi pantalón y mi boxer, tome el lubricante, saqué el plug anal y se lo empecé a poner en el culo, empecé a escuchar sus gemidos, coloque un poco de lubricante en el consolador, su culo estaba bastante dilatado gracias al plug, fui metiendo el consolador poco a poco escuchando sus gemidos.
B: Mmmm si, ya quería sentir algo más grande en mi culo!, que caliente me pones. ¡Sigue, dame más! ¡Dame más!
R: Eres una puta, sabes que un consolador no es suficiente para una puta como tú, con esto si te vas a sentir completamente llena.
Seguido a esto, metí mi pene por su cuca hasta el fondo, sus gritos de placer inundaban toda la habitación, se dejó caer, mantenía sus piernas arriba y la parte superior de su cuerpo pegada a la cama, ofreciéndose a mí, dejándome hacer lo que yo quisiera. Tomaba el consolador y lo metía y sacaba de su culo al mismo tiempo que lo hacía yo de su cuca con mi pene.
B: Que rico me coges, que rico me coges, por favor no me lo saques, no me saques nada, sígueme cogiendo.
Con la mano que me quedaba libre la sujete del cabello obligándola a levantarse, obligándola a vernos frente al espejo de la cama, ella en 4 con un consolador en el culo, yo detrás de ella sosteniendo su cabeza a traves de su cabello y mi pene dentro de ella cogiéndomela con fuerza, estuvimos así un rato hasta que saqué el consolador y lo puse a un lado para poder sostener sus caderas con ambas manos, a veces recorría su espalda, su cuello sus senos mientras se movían con cada embestida, le daba nalgadas, no pude parar cuando comencé a sentir sus gritos de placer y como aprisionaba mi pene dentro de ella, me apretaba mientras estaba llenando a un orgasmo, sus manos destendían la cama, apretaban la almohada, yo, me aferraba a su cuerpo tenso y deliciosamente tembloroso acabando dentro de ella cayendo cada vez más en la cama sudados y cansados.
Sabíamos que eso no terminaba allí por lo que después de unos minutos ya estábamos tocándonos y recorriendo nuestros cuerpos con nuestras manos y labios, Barbara sabía cómo ponerme duro, recorría mi cuerpo de arriba abajo con su lengua estando ella en 4 recorriendo la cama como gata en celo, me vio a la cara, me dio la espalda y se sento sobre mi cara, pude sentirla mojada, movía sus caderas de forma que mi lengua y mis labios recorrieran toda su cuca, le encanta que se la chupe.
B: ¿Te gusta que este mojadita? ¿Te gusta sentirme así? ¿te gusta saborearme?
Todo esto me lo decía entre gemidos y su respiración acelerada.
Escuchar sus gemidos y por supuesto sentir su olor y su sabor en mi boca hicieron que mi pene volviera a ponerse duro.
B: Ahora me toca a mí!!!
Diciendo esto Barbara se inclinó hacia adelante para quedar en posición 69 mientras pasaba mi pene por su cara, por su lengua, hasta que sus labios cubrieron la cabeza de mi pene por completo, ya estaba dentro de su boca, como lo chupa, como lo muerde despacio y la devoción que siente al hacer un oral me vuelve loco. Mientras ella me lo chupaba yo no perdía tiempo y recorriendo su cuca con mi lengua, de pronto ella se detuvo, se levanto diciendo.
B: Me gusta que me la chupes, pero quiero sentirte adentro, quiero que me cojas rico y duro.
Aproveché el momento donde ella se levantó para volver a acostarla en la cama.
R: Quiero cogerte por todos lados, pero esta noche recuerda que no es una noche cualquiera y por más que quieras que te coja yo decido cuando lo hare.
Como pude sujete sus manos (aunque ella no ponía mucha resistencia) y la sujete con las esposas a la cama, con las cuerdas que había comprado sujete sus piernas dejándola completamente abierta.
R: Ahora si, toda mía, casi inmovil, tienes que dejarte hacer todo lo que yo quiera.
B: ¿Y si hay algo que no quiero que hagas?
R: Puedes decirlo, pero no te haré caso, además por cada cosa q te niegues a hacer recibirás un azote.
B: Mmmm creo que me negaré a hacer muchas cosas.
Después de decir esto me senté sobre ella, ella automáticamente abrió la boca, pero me bajé un poco para poder llegar mis dedos a su clítoris.
R: Que perra eres, no te he hecho nada y ya estas mojando hasta la cama.
B: Me excita estar inmóvil.
Dicho esto pare de tocarla y me dedique a chupar y lamer su cuello, lo recorría completamente mientras mis manos la tocaban con fuerza de arriba abajo, podía sentir su movimiento de caderas mientras aceleraba la respiración, seguí bajando hasta su pecho y mis manos se apoderaron de sus senos, los apretaba, apretaba sus pezones, pasaba la lengua por todas partes, recorría mi cara con ellos, mordía sus pezones y mientras veía en su cara la combinación de dolor con placer que tanto nos excitaba, me detuve para besar sus labios y me dijo.
B: No quiero besos, quiero que sigas asi.
R: Y yo quería que dijeses que no.
B: Mmmm, no lo hagas!
Otro azote.
B: Ufffff por favor no lo hagas!
Otro azote.
B: Que ricoooo!!!!
Me agache frente a ella colocando mi pene en su boca, ella abrió su boca dejándome entrar para que su lengua hiciera el resto, mientras me lo chupaba baje mi mano hasta su cuca para comprobar como estaba.
R: Has mojado más la cama, y estas más caliente.
B: Me tienes hecha toda una perra.
Me levante y busque el vibrador, se lo metí en la cuca y lo puse a vibrar.
B: Asi me vas a hacer acabar más rápido!
La ignore, me puse a un lado de ella y volví a metérselo en la boca, cada cierto tiempo azotaba sus pechos, Barbara ya no podía más, sus ojos se ponían blancos, su cuerpo temblaba, se retorcía como podía en la cama al estar amarrada, solté sus manos, solte sus piernas y saque el vibrador.
R: ¿Acabaste?
B: ¡¡¡¡Varias veces y quiero más!!!!
Me coloque entre sus piernas, en posición de misionero y la penetre hasta el fondo, su humedad me permitía entrar y salir de ella con mucha facilidad, la tomaba por los hombros y la pegaba más a mí, movía mis caderas rápido y lento, suave y fuerte, me acosté sobre ella, sin parar mis movimientos, ella me abrazo, sus dedos se entrelazaron con mi cabello, la escuchaba gimiendo en mi oído, gemidos de placer y gozo, nuestros cuerpos comenzaron a tensarse, sus caderas se movían, mis movimientos eran más rápidos, sus manos recorrían mi espalda, dejaba la huella de sus rasguños en mi espalda, sus gemidos y los míos se escucharon al mismo tiempo mientras ella sentía mi leche llenándola por completo y su cuca exprimiendo cada gota que quedaba de mí.
R: Esta noche besaste a una mujer, tuviste sexo frente a extraños que tenían sexo frente a ti, dejaste que vieran bajo tu vestido para seducir extraños... ¿Qué te pareció esta noche?
B: Que hay que repetirla pronto, para la próxima quiero que nos grabemos y seguramente un intercambio de parejas.
Fin...
Barbara hizo lo que le dije, se quitó el vestido de la manera más sexy que pudo dentro del auto, pero antes de bajar me mostró el vestido.
B: ¿Ves eso brillante que tiene el vestido por adentro?, es lo excitada que me tienes.
R: Y eso que esto es solo el comienzo.
Por fin 3ra parte y final.
Cuando vi hacia su asiento ella ya iba saliendo del auto, completamente desnuda, podía ver el plug anal que le había pedido que se colocara, al terminar de salir le dije que cerrara la puerta y se quedara quieta junto al auto, para este momento Barbara estaba totalmente convencida de hacer lo que yo le decía. Sali del auto camine hacia ella y me roce sus labios con los míos, de forma automática y rápida se acercó a besarme mientras pasaba sus brazos por mi cuello para pegarme a ella, la bese intensamente, mis manos bajaron hacia sus nalgas, las presionaba hacia mi, recorría su espalda de arriba abajo, entrelazaba su cabello en mis dedos mientras lo jalaba hacia atrás para tener su cuello completamente a mi disposición mientras lo recorría con la lengua, ella aun en tacones levanto sus piernas para sujetarse de mi cintura, movía su cintura provocando el roce de su clítoris con mi pantalón, nuestros gemidos y respiración estaba cada vez más acelerada, ella como pudo comenzó a abrir mi camisa, pero hasta allí la deje, luego de eso le quite sus brazos y piernas de mí que para ese momento me tenían presionado hacia ella, tanto que visto desde afuera sería imposible determinar que parte del cuerpo es de cada quien.
R: Estoy muy excitado, pero recuerda que te dije que esto apenas estaba comenzando. No creo que quieras dejar de sentir todo lo que estás sintiendo hasta ahora.
Mire hacia abajo, estaba muy mojada y estar tan pegados hizo que sus fluidos mojaran mi pantalón.
R: Parece que la humedad no quedará solo en tu vestido.
Le pedí que entrara a la habitación y que se quedara en la puerta esperándome, abrí nuevamente el auto y busque su vestido, volví a buscar la parte mojada del vestido pensando “Esta noche tendré mucho mas de esto”, apenas entre a la habitación ella estaba allí tal como se lo había pedido, observando con cara de perra todo lo que estaba viendo, esposas, juguetes, lubricantes, la habitación tenía columpio brazo-pierna.
B: No creo que tengamos tiempo para usar esto durante toda la noche.
R: Usare todo esto, te usaré a ti, serás mi perra obediente toda la noche.
La giré hacia mí y volví a besarla de nuevo intensamente, mis dedos llegaron a su cuca mojada, podía sentir su humedad en sus piernas, estaba goteando.
B: Necesito sentirte adentro otra vez, quiero que me cojas, sere tu perra, tu puta toda la noche, pero no dejes de cogerme.
La lleve hacia el columpio, la ayude a sentarse.
R: Sujétate bien de las cuerdas, inclínate un poco hacia atrás y cierra los ojos.
Ella no lo dudo, cuando terminó de hacerlo me quite la camisa, me excita la sensación de sentir la piel de las piernas en mis hombros, me agache, y comence a pasar mi lengua por su clítoris, solo la punta de mi lengua, podía saborearla, sentir su olor de mujer en celo, pase mi lengua de arriba abajo y abajo arriba de su cuca, la sentía en mi boca cada vez más caliente, podía ver desde abajo sus pezones erectos, me encanta verlos asi, me motiva a seguir, me separe un poco y la vi, tenía los ojos cerrados y la boca ligeramente abierta, volví a chupársela, esta vez pegue mis labios también, los chupaba mientras pasaba mi lengua al mismo tiempo, lo hacía con sus labios, lo hacía con su clítoris, giraba mi lengua en forma circular, con la punta, con la lengua entera, estaba comiéndomela, saboreándola escuchándola gemir, haciéndome saber lo rico que se sentía haciéndome saber que no quería que me detuviese, como pudo se soltó de una de las cuerdas del columpio y me tomo por el cabello me pego más a ella y comenzó a mover sus caderas, sus gemidos y movimientos se intensificaron hasta que pude ver como levanto su cabeza hacia mí y su cuerpo se tensó completamente, mi recompensa estaba llegando, comencé a ver como salían sus fluidos rápidamente, ya su mano no me sujetaba, se concentraba en sus temblores de piernas y caderas mientras estaba teniendo un orgasmo.
B: ¡Que rico! Me excita tu lengua! Uffff que rico.
Volví a pasarle la lengua, no quería desperdiciar nada de mi recompensa.
R: Me encanta chupártela, no pensé que fueses a acabar, se estaba acercando la parte donde iba a lubricar tu culo para usar el consolador.
B: Esto apenas está comenzando.
Barbara se bajó del columpio como pudo, sus piernas estaban debilitadas por el orgasmo que acababa de tener, se fue hacia la cama.
B: Te dije que sería tu perra toda la noche, si tu intención es meterme un consolador en el culo entonces (poniéndose en 4) aquí esta tu culo, has con todo lo que ves lo que quieras.
Verla en esa posición me puso como una piedra, el pantalón que traía puesto ya me incomodaba, comencé a quitarme el pantalón.
B: Mmmm que rico, parece que nos vamos a saltar algunas partes.
R: No sabes todos los planes que tengo contigo y para ti esta noche, el que te coja ahorita no quiere decir que no lo haré más tarde una y otra vez.
B: Sabía que no podías aguantarte a verme en 4, cógeme Ruben.
Termine de quitar mi pantalón y mi boxer, tome el lubricante, saqué el plug anal y se lo empecé a poner en el culo, empecé a escuchar sus gemidos, coloque un poco de lubricante en el consolador, su culo estaba bastante dilatado gracias al plug, fui metiendo el consolador poco a poco escuchando sus gemidos.
B: Mmmm si, ya quería sentir algo más grande en mi culo!, que caliente me pones. ¡Sigue, dame más! ¡Dame más!
R: Eres una puta, sabes que un consolador no es suficiente para una puta como tú, con esto si te vas a sentir completamente llena.
Seguido a esto, metí mi pene por su cuca hasta el fondo, sus gritos de placer inundaban toda la habitación, se dejó caer, mantenía sus piernas arriba y la parte superior de su cuerpo pegada a la cama, ofreciéndose a mí, dejándome hacer lo que yo quisiera. Tomaba el consolador y lo metía y sacaba de su culo al mismo tiempo que lo hacía yo de su cuca con mi pene.
B: Que rico me coges, que rico me coges, por favor no me lo saques, no me saques nada, sígueme cogiendo.
Con la mano que me quedaba libre la sujete del cabello obligándola a levantarse, obligándola a vernos frente al espejo de la cama, ella en 4 con un consolador en el culo, yo detrás de ella sosteniendo su cabeza a traves de su cabello y mi pene dentro de ella cogiéndomela con fuerza, estuvimos así un rato hasta que saqué el consolador y lo puse a un lado para poder sostener sus caderas con ambas manos, a veces recorría su espalda, su cuello sus senos mientras se movían con cada embestida, le daba nalgadas, no pude parar cuando comencé a sentir sus gritos de placer y como aprisionaba mi pene dentro de ella, me apretaba mientras estaba llenando a un orgasmo, sus manos destendían la cama, apretaban la almohada, yo, me aferraba a su cuerpo tenso y deliciosamente tembloroso acabando dentro de ella cayendo cada vez más en la cama sudados y cansados.
Sabíamos que eso no terminaba allí por lo que después de unos minutos ya estábamos tocándonos y recorriendo nuestros cuerpos con nuestras manos y labios, Barbara sabía cómo ponerme duro, recorría mi cuerpo de arriba abajo con su lengua estando ella en 4 recorriendo la cama como gata en celo, me vio a la cara, me dio la espalda y se sento sobre mi cara, pude sentirla mojada, movía sus caderas de forma que mi lengua y mis labios recorrieran toda su cuca, le encanta que se la chupe.
B: ¿Te gusta que este mojadita? ¿Te gusta sentirme así? ¿te gusta saborearme?
Todo esto me lo decía entre gemidos y su respiración acelerada.
Escuchar sus gemidos y por supuesto sentir su olor y su sabor en mi boca hicieron que mi pene volviera a ponerse duro.
B: Ahora me toca a mí!!!
Diciendo esto Barbara se inclinó hacia adelante para quedar en posición 69 mientras pasaba mi pene por su cara, por su lengua, hasta que sus labios cubrieron la cabeza de mi pene por completo, ya estaba dentro de su boca, como lo chupa, como lo muerde despacio y la devoción que siente al hacer un oral me vuelve loco. Mientras ella me lo chupaba yo no perdía tiempo y recorriendo su cuca con mi lengua, de pronto ella se detuvo, se levanto diciendo.
B: Me gusta que me la chupes, pero quiero sentirte adentro, quiero que me cojas rico y duro.
Aproveché el momento donde ella se levantó para volver a acostarla en la cama.
R: Quiero cogerte por todos lados, pero esta noche recuerda que no es una noche cualquiera y por más que quieras que te coja yo decido cuando lo hare.
Como pude sujete sus manos (aunque ella no ponía mucha resistencia) y la sujete con las esposas a la cama, con las cuerdas que había comprado sujete sus piernas dejándola completamente abierta.
R: Ahora si, toda mía, casi inmovil, tienes que dejarte hacer todo lo que yo quiera.
B: ¿Y si hay algo que no quiero que hagas?
R: Puedes decirlo, pero no te haré caso, además por cada cosa q te niegues a hacer recibirás un azote.
B: Mmmm creo que me negaré a hacer muchas cosas.
Después de decir esto me senté sobre ella, ella automáticamente abrió la boca, pero me bajé un poco para poder llegar mis dedos a su clítoris.
R: Que perra eres, no te he hecho nada y ya estas mojando hasta la cama.
B: Me excita estar inmóvil.
Dicho esto pare de tocarla y me dedique a chupar y lamer su cuello, lo recorría completamente mientras mis manos la tocaban con fuerza de arriba abajo, podía sentir su movimiento de caderas mientras aceleraba la respiración, seguí bajando hasta su pecho y mis manos se apoderaron de sus senos, los apretaba, apretaba sus pezones, pasaba la lengua por todas partes, recorría mi cara con ellos, mordía sus pezones y mientras veía en su cara la combinación de dolor con placer que tanto nos excitaba, me detuve para besar sus labios y me dijo.
B: No quiero besos, quiero que sigas asi.
R: Y yo quería que dijeses que no.
B: Mmmm, no lo hagas!
Otro azote.
B: Ufffff por favor no lo hagas!
Otro azote.
B: Que ricoooo!!!!
Me agache frente a ella colocando mi pene en su boca, ella abrió su boca dejándome entrar para que su lengua hiciera el resto, mientras me lo chupaba baje mi mano hasta su cuca para comprobar como estaba.
R: Has mojado más la cama, y estas más caliente.
B: Me tienes hecha toda una perra.
Me levante y busque el vibrador, se lo metí en la cuca y lo puse a vibrar.
B: Asi me vas a hacer acabar más rápido!
La ignore, me puse a un lado de ella y volví a metérselo en la boca, cada cierto tiempo azotaba sus pechos, Barbara ya no podía más, sus ojos se ponían blancos, su cuerpo temblaba, se retorcía como podía en la cama al estar amarrada, solté sus manos, solte sus piernas y saque el vibrador.
R: ¿Acabaste?
B: ¡¡¡¡Varias veces y quiero más!!!!
Me coloque entre sus piernas, en posición de misionero y la penetre hasta el fondo, su humedad me permitía entrar y salir de ella con mucha facilidad, la tomaba por los hombros y la pegaba más a mí, movía mis caderas rápido y lento, suave y fuerte, me acosté sobre ella, sin parar mis movimientos, ella me abrazo, sus dedos se entrelazaron con mi cabello, la escuchaba gimiendo en mi oído, gemidos de placer y gozo, nuestros cuerpos comenzaron a tensarse, sus caderas se movían, mis movimientos eran más rápidos, sus manos recorrían mi espalda, dejaba la huella de sus rasguños en mi espalda, sus gemidos y los míos se escucharon al mismo tiempo mientras ella sentía mi leche llenándola por completo y su cuca exprimiendo cada gota que quedaba de mí.
R: Esta noche besaste a una mujer, tuviste sexo frente a extraños que tenían sexo frente a ti, dejaste que vieran bajo tu vestido para seducir extraños... ¿Qué te pareció esta noche?
B: Que hay que repetirla pronto, para la próxima quiero que nos grabemos y seguramente un intercambio de parejas.
Fin...
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